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Capítulo 6.-Si tu me vois.

Ya todo quedaba listo para el baile y celebración de esa noche, por lo mismo es que, en una pequeña vuelta que se dio durante la tarde, el muchacho se percató que, en realidad, no iba a ser precisamente un evento humilde, sino todo lo contrario, cosa que le sorprendió mucho.

Era de suponerse que Ninguang quería agradecerle a Shenhe por sus servicios prestados a la ciudad, que pocos no eran. Ya en las preparaciones, Aether se miraba al espejo, su cabello quedaba bien peinado, así como su traje sin una sola arruga. Paimon, por su parte, también ya se encontraba preparada con ropa para la ocasión, pues sin duda alguna valía la pena.

Chongyun, por simple cuestiones de oficio, iría con su misma ropa, solo que claro, más presentable de lo que se podía esperar, y Shenhe...ella no salía de la habitación, lo que le parecía extraño a los muchachos.

Paimon entró ya que ella sí tenía esa autorización, se escuchó un pequeño dialogo que ambas tuvieron.

-¿Se-segura que me veo bien?

-¡Por supuesto, apostaría que a Preservadora le encantaría verte así!

-Mi maestra...me pregunto si vendrá.

-Hum, habrá mucha gente, así que lo dudo, en realidad.

Al salir, la pequeña solo haría presentación, encendiendo un aura de misterio, pues ambos amigos se cuestionaban seriamente por qué tantos retrasos. No es que fueran mal con el tiempo, solo se cuestionaban la quizá exagerada tardanza.

Apenas la bella mujer de cryo salió por la puerta, no es necesario decir que Aether quedó boquiabierto, con los ojos abiertos como platos, sonrojado, mientras que Chongyun solo hizo un gesto de "ohh" demostrando su sorpresa. (Anécdota curiosa, yo estaba enamorado de mi maestra de inglés de la prepa, fue amor a primera vista, y ella siempre solía venir vestida casi igual todos los días, y cuando fue con ropa diferente, hasta un amigo se empezó a reír de mí porque literalmente quedé boquiabierto al verla de tan hermosa que se veía...ay, el amor uwu)

El mismo era negro, con algunos detalles en dorado, con un escote no precisamente discreto, y sin embargo, el mismo tenía cuello. Se ha dicho antes que era estilo Ninguang, por lo que llegaba un punto donde se partía en dos, y mostraba un poco de la piel de su cintura, al igual que en su traje de combate.

Se veía más hermosa que la noche misma, con su cabello suelto, la mujer estaba sonrojada, algo que contrastaba mucho con su personalidad, por lo regular, fría e inexpresiva.

-¿M-me veo bien?

Aether se cayó de espaldas, sus zapatos salieron volando sobre él, aterrizando a sus lados. La sorpresa lo dejó completamente ko.

-¡Por supuesto que sí, tía Shenhe, te ves muy linda, incluso me recuerdas un poco a mi madre así peinada, pues es su mismo estilo! -Alabó su sobrino, notoriamente emocionado.

El viajero recobraba la conciencia, Shenhe se arrodilló frente a él para ofrecerle su mano, la que él tomó.

-T-te ves preciosa...sin duda Paimon tiene muy buen ojo para los vestidos de noche.

-Gracias, amable caballero. -Sonrió ella. -Te ves igual muy bien así vestido...¿pe-pero de verdad no me veo mal? -Ella posó rápidamente, por lo mismo es que Aether nuevamente se derrumbó sobre sí mismo. (Imagínense a Aether desmayándose como Sully en la escena donde ve cómo trituran la basura :v)

La celebración comenzaba a las 9, ya las luces de la ciudad iluminaban todo de una forma tan bella, y claro, en el evento que se preparaba era donde más se irradiaba luz.

Apenas llegaron, fueron recibidos con una de aplausos mientras a Shenhe le colocaban en la cabeza una corona de lirios de cristal y le arrojaban varios tipos de flores. Ganyu estaba controlándose a sí misma para no atrapar una flor Chingxin y comérsela en el acto, por suerte tuvo la fuerza. A su lado se encontraba Keqing con su vestido de noche, al igual que Ninguang.

-La estábamos esperando, señorita. -Mencionó ella, sonriendo. -Como cabecilla de Liyue, en nombre de todo mi pueblo, que es ya tuyo, te doy las gracias por tus servicios prestados con desinterés, solidad y altruismo, valores admirables en cualquier persona, especialmente en las que están dispuestas incluso a sacrificar su vida por la de los demás.

Un notorio aplauso se escuchó entre todos los presentes, quien aplaudía con más ahínco era Ganyu, pues al final de cuentas eran condiscípulas, por eso mismo es que le daba tanta alegría y orgullo, ya que ambas habían practicado juntas algunas veces.

Ella fue conducida hasta la mesa principal, se sentaría en medio, a un lado de Aether y de Chongyun, y una vez se sentó, Ninguang le cedió la palabra.

-No sé qué decir ante sus halagos, supongo que solo puedo darles las gracias. Ciertamente, se me dificulta mucho hablar de mis sentimientos, pero siento algo aquí. -Ella se llevó la mano al pecho. -Y eso me hace sentir viva, aunque ni siquiera sé describirlo. Mientras me sea posible, y si una amenaza mayor no me supera, siempre seré protectora de este pueblo.

-Shenhe, tenemos un apodo para ti.

-¿Apodo?

-Sí. Yo soy el Eje celestial, Keqing, uno de mis mejores miembros, es el Eje terrenal...y tú...tú serás la Pacificadora del desastre, pues tu presencia doma a los males que puedan azotar a la ciudad. Espero sea de tu agrado, Ganyu lo eligió.

-¡La-Lady Ninguang! -Exclamó ella, sonrojada. -¡S-se supone que eso era secreto!

La mencionada rió, comenzando a aplaudir, el título, al menos a Shenhe, le había gustado, pues sonaba imponente y, mejor todavía, digno de sus hazañas, Yun Jin, que se encontraba presente, sin duda alguna dio su visto bueno.

Tras la comida, que fue opulenta en todo el sentido de la palabra, siguió una presentación de Opera de Yun Jin, como no sería raro, lo que animó a todos. Seguidamente, y ahora sí para que nadie se pudiera quejar, llegaría lo más ansiado.

La orquesta estaba preparada, el inicio del baile sería tranquilo, tradicional, de lo mejor, y aunque Shenhe no sabía bailar, eso no sería impedimento para divertirse, o al menos desde la perspectiva de Aether.

-Bien, espero disfruten de la selección de música, yo, Keqing y Yun Yin la seleccionamos pensando en que fuera la mejor tanto para bailar como para degustar con el oído. Y quienes abrirán el baile son...la pareja de honor: Shenhe y Aether.

Ambos se sorprendieron, pues no sabían que sería baile en pareja, y menos para comenzar a abrir la pista de baile, lo que claramente los hizo mirarse con cuestionamiento, ya habían aplaudido las masas, incluso Chongyun silbaba para dar ánimos.

-Pe-pero yo no sé bailar. -Mencionó ella, preocupada.

-Tampoco es que yo sea un gran experto...pero podemos intentar algo... -Mencionó Aether, ofreciéndole su mano. -¿Qué dices? Juntos, siempre podemos superar cualquier obstáculo, por pequeño o grande que sea.

-Confío en ti...

Y así, cuando ambos se levantaron de sus asientos, fueron aplaudidos otra vez por el público.

-Solo déjate llevar, trata de seguir mis movimientos, ¿de acuerdo?

-De acuerdo...

Y así, al notar la enorme diferencia de altura y que prácticamente el rostro del muchacho quedaba en el cuello de la dama, a muchos les causó un poco de gracia, pero bailaban bien, o al menos dentro de lo que cabía, ya que Shenhe se notaba poco suelta para bailar, cosa normal si es que se toma en cuenta que ella no tenía ni peregrina idea de cómo hacerlo.

La música era tranquila y lenta, los sonidos del clarinete y de los saxofones eran lo que más resonaban, la muchacha cerró los ojos, dejándose llevar por el sonido de la música y por el tacto cálido de las manos de su amigo, cosa que en realidad siempre sentía por siempre tener las manos frías.

Pero para esa situación, y algo que Aether ignoraba por completo, aunque era una realidad, es que sus dedos, así como su corazón, estaban cálidos, la felicidad que sentía en ese momento no podía tener comparación. Casi para acabar, ambos se sonrieron, él le dio una pequeña vuelta y así fue como finalizó el baile. Todos aplaudieron al unísono.

-Lo malo que casi no hay hombres con los que valga la pena bailar. -Se quejó Keqing.

-Boberías, bailarás con Ganyu. -Ella tomó a ambas chicas de la nuca y las llevó hasta la pista de baile, la que se abría para el resto de los presentes.

-¿Eh? ¿Pe-pero qué? -Dijo Ganyu, sonrojada, y cuando menos se lo esperó, Keqing ya tenía las manos en su cintura, por lo mismo es que incluso el rostro le brillaba por lo rojo que se encontraba.

Recordar el que Keqing estaba "enamorada" de ella y que estuvieran en una situación así, en realidad era algo delicado para ella, y al notar que su contraria no ponía ninguna resistencia, más o menos se lo confirmaba.

-Buu. Bueno, es peor que quedarse sin bailar. -Sonrió.

En realidad, a ambas sí que se les daba bastante bien el pequeño baile que tenían, era tranquilo, Keqing figuraba como el hombre, cosa que en realidad parecía no importarle. El movimiento de sus manos era notoriamente impresionante.

La danza era al estilo Fontaine, las dos muchachas daban vueltas, Keqing cargaba a Ganyu cuando la danza lo requería, se veían a los ojos, sus brazos parecían cisnes por los movimientos que hacían sus antebrazos se tocaban, todo era una bella combinación de movimientos y de música.

Las dos quedaron sorprendidas de lo bien que salía, Ninguang las miraba desde la lejanía, sonriendo, pues vaya si es que no se veían adorables, como una pareja de enamorados en su primer baile en pareja.

Sus uñas incluso en un pequeño descuido podían rozar el rostro de su contraria, lo que sorprendía especialmente a Ganyu, y es que para ella, todos los demás se habían detenido, solo un reflector las alumbraban, como si fueran las únicas en la pista.

Su corazón latía rápidamente, pero no solo por lo que demandaba el baile, sino que cada que Keqing la cargaba en sus brazos, ella descendía lentamente hasta tocar el suelo, teniendo su rostro muy junto al de su contraria, donde incluso su nariz rozaba accidentalmente su mejilla sonrojada.

Los movimientos se repetían, llevándose las manos al pecho, dando vueltas en círculos, y cuando se separaban, pegaban sus brazos a sus costados, mirándose, Ganyu con un notorio rubor en sus mejillas, pero luego unían sus antebrazos, golpeándolos con una ligera delicadeza para tomarse nuevamente de las manos, reanudando así su baile maravilloso.

Cuando menos se dieron cuenta, ya había pasado una hora y media, ni siquiera el dolor de sus pies les había dicho nada, y eso solo fue porque Ninguang fue y las separó cordialmente ya que era hora de continuar con el show.

-Niñas, no se separaron en todo el baile, estoy impresionada. Las estuve observando, sin duda fue maravilloso, pero debemos avanzar.

-¡¿Todo el baile?!

-¡¿De verdad?! -Keqing se puso a pensar un segundo. -Ay, mis pies...duelen como un demonio. -Se quejó, había salido de su bucle, la realidad la golpeaba con fuerza.

-Así es. Qué bueno que ya se lleven bien, pero es hora de seguir.

Ambas se miraron, sonrojándose para separar la mirada a otro lado, retomando sus lugares.

-Bu-buen baile, señorita Keqing...¿quién te enseñó a bailar?

-Fuiste tú. -Le dijo, con certeza.

Serían ya las once de la noche, pasadas de la misma, por lo que a sabiendas de que mañana se laboraba, lo mejor era descansar ya, por lo mismo es que muchos de los invitados comenzaron a retirarse, no sin antes darle sus halagos a la señorita de hielo que había salvado el día ya varias veces.

Llegada la hora de ponerse en marcha de regreso al departamento, Shenhe prefirió dar un rodeo, pasear para despejarse un poco de las ideas que tenía, así que decidió tomar su propio camino.

Chongyun, pensando que era lo mejor, le pidió a Aether que la acompañara que no sucediera lo de la última vez, y así fue, él corrió un poco hasta que finalmente se topó detrás de ella.

-¿A qué viniste, Aether? -Cuestionó.

-La noche está muy linda, ¿no lo crees?

-Así es. -Ella lo volteó a ver, tomándolo de ambas manos, sorprendiéndolo. -Tu cuerpo siempre me da mucho calor, me gusta.

Ante lo dicho, él se sonrojó, riendo con nervios. Lo que sus ojos veían era un espectáculo, ni siquiera hermoso, sino algo mucho más allá de eso, pero que con las palabras no se puede describir, por desgracia. Ella sonreía, con su cabello suelto, la corona de lirios de cristal, la luz de la luna la iluminaba a ella y al mar, sus ojos inexpresivos tenían un pequeño atisbo de vida por primera vez desde hacía años. La felicidad de la muchacha no se podía comparar con nada.

Un pequeño soplo de aire llegaba, a sus rostros, moviendo los cabellos de la dama de cryo, la que hizo una expresión tierna debido a que eso le molestaba, y cuando finalmente lo volvió a mirar, algo nació en el corazón del chico.

Esas miradas que solo se pueden percibir una vez en la vida, tan poco comunes en las mujeres que son tan valiosas como los diamantes, o incluso más, pues es la mirada que enamora a los hombres. Así era, Aether, observando de forma detallada a su contraria, que de por sí ya la conocía como una bella mujer, se percató de que su belleza era sobrenatural, que sus ojos, blancos e inexpresivos, eran lo suficientemente profundos para perderse en ellos, su corazón se prendió en llamas.

-¿Aether, todo bien? -Preguntó Shenhe, pues él no dejaba de mirarla con sorpresa. No respondió, literalmente lo dejó sin palabras.

-Y-yo... -El latido de su corazón incluso le causaba que le costara trabajo respirar. -E-estoy perfectamente.

-No me lo parece... -Ambos siguieron caminando tomados de una mano, el muchacho se sentía muy nervioso, ¿por qué se había enamorado de Shenhe? Ciertamente quién no lo haría pero no se esperaba que su corazón le hiciera una jugada así.

Ella seguía atenta de su compañero, lo notaba muy extraño, y claro que ante los temas del amor, poco se puede hacer para alguien a quien le cuesta trabajo sentir así sea cariño, e incluso el odio es imposible.

-Hace frío. -Sin preguntar, Shenhe tomó la bufanda de Aether e hizo que ambos quedaran envueltos en la misma, lo que fue un remate para el viajero, que apenas y se podía creer que tuviera esa suerte, ya fuera buena o mala.

Y es que era hermoso, caminaban por el muelle, tomados de la mano, en una misma bufanda, alumbrados por la luz de la luna y, por si poco fuera, también por el reflejo de la misma que les llegaba desde el mar. Dos gaviotas aterrizaban en una misma piedra, daba la impresión de que los estaban mirando, echándose a volar a los pocos segundos.

Esa noche sería larga para el chico...

Ganyu y Keqing entraban al departamento, Baiwen también había asistido, y por la jornada del día estaba de lo más cansada, así que ella se fue a dormir directamente, mientras que las que seguían despiertas, se cambiaban, Keqing se desmaquillaba.

-No te lo tomes a mal pero...me quedé con ganas de bailar. -Rió Keqing. -Hacía mucho que no asistía a un baile, y el pensar que dos horas se me hayan pasado como 10 minutos me hace sentir...no lo sé...

-¿Enojada?

-No, para nada. Ganyu, me enseñaste a bailar, lo recuerdo bien, apenas estaba entrando como secretaria, tendría 15 años, no lo sé, y era el cumpleaños de Lady Ninguang, claramente debía de bailar, pero no sabía y ahí estabas tú, me sonreíste y me dijiste "no te preocupes, yo te ayudaré".

-N-no lo recuerdo...

-No te culpo. Con tanto trabajo, no te pones a repasar el día, solo quieres que acabe la jornada para descansar y no hacer nada más en todo el día. Pero hoy no fue el caso...quería seguir bailando.

-Supongo que eso se puede solucionar. -La muchacha fue hasta el tocadiscos, encendiéndolo para que la música comenzara a sonar. Keqing apagó la luz del cuarto, la de la luna se colaba por la ventana, así que la iluminación estaba perfecta así.

Ambas hicieron el respectivo saludo, comenzando a bailar apenas se tomaron de las manos, sonriendo. Ganyu estaba sonrojada, se sentía nerviosa, había aceptado porque lo que más le gustó de esa noche fue bailar, y bailó tanto hasta el punto de quedar enamorada de esa chica tan conflictiva con la que se llevaba mal y que incluso la hizo llorar.

Era el mismo vals de hacía un rato, solo que no se movían tanto por los temas del espacio, cuando Keqing cargó a Ganyu y la fue descendiendo poco a poco, hasta el punto de que ambas se miraron a los ojos y teniendo las narices casi juntas, que la chica de cabellos azules la abrazó, tomando una de sus manos.

Cerró sus ojos para entregarse a un beso al que no se podía contener, lo deseaba desde que cayó enamorada de ella, y finalmente sus labios comenzaban a tocarse. Keqing, inicialmente, se quedó sin saber qué hacer, pero al serle transmitidos los sentimientos de Ganyu, no pudo negarse, también regresó el gesto de forma recíproca.

Resultaba conmovedor, para Ganyu ese sería su primer beso, durando varios segundos, eclipsándose hasta que ambas se sintieron satisfechas, mirándose a los ojos con vergüenza. La muchacha de cabellos morados fue y salió de la habitación, Ganyu se llevó la mano al pecho...

-Así que...esto es un beso con amor...

Mientras se recogía todo en donde fue la celebración, Ninguang seguía sentada en el mismo lugar de siempre, tomando una copa de champan de golpe, pues odiaba los bailes aunque no lo pareciera, eso debido a que su vida amorosa daba vueltas en los mismos.

La conoció en un baile, se enamoró de ella en un baile, se confesaron su amor en otro baile que fue en el Alcor y ya tenían planeado cuál sería el baile que tendrían después de casarse. Todo eso opacado por una serie de cuestiones que ya ni valía la pena recordar.

Sin embargo, unos tacones se escucharon, ella no le dio importancia y bebió otra copa igual de rápido. Alguien se posaba frente a ella.

-Joder, me he perdido de la fiesta...al menos seguís aquí. -Ninguang levantó la mirada, era Beidou, por supuesto, pero no podía creer lo que tenía frente a sí.

-¿Beidou...?

-Oh, ¿soy lo más raro que habéis visto en todo el día? Decidme, ¿Qué tal se me ve? Horrible, ¿verdad? -Sonrió ella con su carisma de siempre. Lo que sucedió en su camarote, es que Beidou usó ese cuchillo para cortarse el cabello hasta la barbilla, notándose tan diferente, pero su sonrisa enérgica se mantenía intacta.

-T-te ves...diferente.

-Lo sé, me corté el cabello por si no os habíais dado cuenta. Hum, y yo que pensaba que mis grumetes eran despistados.

-N-no, sé que lo hiciste...¿por qué? ¿A qué se debe el cambio?

-Por estúpida...tuve una crisis nerviosa, iba a cortarme el...olvidadlo, en realidad quería experimentar. Pero decidme, solo me dais largas, ¿qué tal me veo?

-Bella...muy bella. Nunca dejé de pensar que eres la mujer más hermosa que haya conocido, esta nueva chica, Shenhe, puede hacerte algo de competencia, pero siempre tendrás el primer lugar.

-Me halagáis. -Rió ella. -Basta, que me sonrojo. -Ella se fue acercando poco a poco. -Permitidme una pieza con vos.

-La música ya se acabó hace un buen rato.

-¿Debo recordaros las veces que bailamos sin música? Pero a vos debe darte igual...nunca habláis del pasado, ¿verdad?

-Al diablo. Estoy feliz, un pequeño baile será suficiente, pero no quiero que me molestes más.

-Solo un baile es lo que pido, poco más.

Ambas se tomaron de las manos, comenzando a bailar como ya era su costumbre, justo como lo hacían en aquellos años de amor loco y desesperado, y como ahora ya poco tenían por perder, así lo hicieron.

Les traían tantos recuerdos, muchos de los cuales Ninguang ya había suprimido, pero que no podía ignorar en ese momento que resucitaba. Lo único diferente era la edad que tenían y que ahora el cabello de Beidou no le molestaba al tomarla de la espalda, estando ambas juntas, y teniendo las mejillas unidas.

Ese momento era bello, pero terriblemente melancólico, por lo mismo es que la mujer de cabellos platinados no pudo evitar llorar, lo que también causó las lágrimas en la pirata. Seguramente sus tres años de boda los hubieran celebrado con un baile a mitad de la noche en lo alto de la Cámara, pero eso solo se quedó en un "hubiera". (Oh, shit, inserten el soundtrack de Halo 3 ODST :'v)

-Os lo repetiré siempre...si tú me ves, nuevamente me enamoras, aunque no lo intentes tan siquiera.

-No hablemos de eso, solo consigue lastimarme, recordar lo tormentosa que fue mi vida.

-No seáis egoísta, Ninguang, ¿creéis que yo no sufrí? Dos años sin poder veros, decirle que os amo con locura, sin abrazaros, tocaros, besaros...casi me volví loca, y cuando regresé estabais tan fría como la nieve a la que fui.

-Me rompiste el corazón, estaba esperanzada de que no fueras a ese viaje y me dijeras "te amo"...pero no fue así.

-Supongo que ya no importa el pasado. -El baile se detuvo, ambas se miraron, llorando. -No lloréis o solo me pondré igual.

-No quiero que me vuelvas a ver...acepte este baile como el último que tuviéramos, pero hay que dejar el pasado atrás y cada una ir por su camino.

-Sabéis que no lo aceptaré. Siempre os buscaré para decirte las mismas palabras...y aún no he reclamado mi premio, y lo quiero hacer ahora.

-Beidou, no... -Ella lloró más.

-¿Me amáis? ¿Me amáis como yo os amo a vos?

Ninguang cerró sus ojos, recargándose en el hombro de Beidou para derramar más lágrimas de tristeza y de dolor, sabía qué responder, y también sabía que no podía mentir aunque era lo que más quisiera para acabar con ese asunto de una vez y para siempre.

-Sí...yo te amo. ¿Tú me amas, Beidou?

-Más que a nadie jamás en este mundo.

Era la primera vez en todo ese tiempo que aquellas palabras eran sinceras. Ella le robó un beso, el que su contraria recibió con vehemencia, tomándola de la cabeza, abrazándola con fuerza, ambas lloraban, pues quizá sería el último beso que se dieran, y era algo que llevaban ansiando desde hacía 3 años, dos meses y quince días, que fue cuando todo acabó en su relación.

Al separarse, unieron sus frentes, Beidou solo la tomó de las mejillas y le dio otro beso rápido, marchándose por donde había llegado, seguía llorando y así se fue, ahora no entrando al bar, sino quedándose en el muelle, pensando.

Por parte de Ninguang, solo miró como su amada se iba, llevándose las manos al pecho. Seguía sin querer perdonar eso, pues se sentía como si la hubiera dejado plantada en el altar, y eso, sin duda, no se perdona tan fácilmente. La seguía amando, de ello no quedaba duda, solo que no quería salir lastimada otra vez, pensando que Beidou siempre elegiría los mares.

<<En el amor de verdad, todo se sacrifica, yo dejaría mi riqueza atrás por ella, aunque ella no dejaría los mares por mí, y eso me duele hasta el alma>> Pensó, secándose las lágrimas con notorio dolor.

En el departamento, Aether y Shenhe regresaban, Chongyun estaba dormido en el sillón con una manta y una paleta a medio comer en un plato que se encontraba sobre la mesa, fueron al cuarto de Paimon y, curiosamente, ella estaba igual, solo que en su caso era una rebanada de pizza, también a medio comer, lo que les dio risa a ambos.

Llegando al cuarto, él ni siquiera la volteaba a ver, seguía con el corazón latiéndole con fuerza, sin saber qué pensar o hacer tras lo ocurrido, y solo cuando la miraba, se enamoraba más de ella, lo que no deseaba que sucediera.

Fue y se acostó en la hamaca, sin embargo, Shenhe lo tomó del hombro, ella ya estaba cambiada.

-¿Duermes conmigo? Perdóname, sé que es muy infantil pero no puedo estar tranquila sino me acompañas.

-No lo sé...¿es necesario?

-Yo pienso que sí.

A regañadientes, él fue y se colocó en la cama, la muchacha sonrió, solo que, claro, Aether se notaba distante, pues le daba la espalda, cosa que a ella poco o nada le importó, debido a que lo abrazó, sintiendo en sus manos el latido del corazón del muchacho, que por supuesto latía tan rápido como el de un caballo en carrera.

Quiso preguntarle a qué se debía, pero el sueño le ganó, mañana sería otro día y habría oportunidad.

Lo más irónico del caso es que Aether no pudo pegar ojo en toda la noche, era tanto su amor por Shenhe que incluso le arrebata el sueño, y el mero hecho de dormir abrazado de la mujer a la que amaba era una bendición y una maldición a la vez, pues era bello, sí, pero también aquello podría representar la mayor de las ruinas.

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Bueno, creo que este capítulo compensa el coraje o las dudas que les hice pasar el lunes jsjsjs

Repasando, ahora Ganyu ya está enamorada de la gatita electro uwu realmente su relación será bomnita, se los aseguro, tendrá sus momentos, y no sé, ¿no quedó soso el cómo Aether se enamoró de Shenhe? A mí no me lo parece, pero igual tengo esa duda.

Este meme no tendrá mucha relación con lo que pasó con Beidou, pero me dio mucha risa verlo ya que me recordó mucho al hecho de que le corté el cabello JAJAJA, espero no me quieran matar por eso :'v pues sí que tendrá mención, no mayor relevancia pero no será algo que pasó y ya nadie se acordará, porque si no para qué lo hice xd

Nos vemos el lunes, no recuerdo bien si el capítulo es largo o no, pero por ahora solo les puedo decir que la cosa entre la cabrita y la gatita se pondrá muy intensa 7u7 ahora ya no habrá muchas razones para enojarse con Keqing :v

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