Nota: Les recomiendo leer
y escuchar la canción para
una mejor experiencia.

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Duelo

"En el momento en que tu
corazón se detuvo, el mío
cambió para siempre"

Los días pasaban, uno detrás de otro, pero Hyunjin no se daba cuenta de esos detalles insignificantes.
¿Su vida tenía algún significado sin Felix?...
Horas, minutos, segundos, fueron como décadas, siglos, milenios.
Su cama había sido el único sostén mientras lloraba, el silencio en su hogar roto era ensordecedor, cuando antes podía escuchar las voces de su omega y su hijo, ahora solo podía escucharse él mismo sollozando y ahogado en la penumbra. No podía dormir, tampoco podía comer, no tenía ganas de levantarse de la cama, no recordaba ni siquiera como había llegado a su casa, su padre tuvo que sacarlo del hospital casi a escondidas, porque su estado era deplorable, no supo nada más de la familia de Felix, lo único que podía desearles era mucha fuerza, porque él no las tenía, y aunque gracias a su padre se enteró que el responsable del accidente fue a prisión, poco le importó porque aquello no iba a regresarle a su Felix, y tampoco iba a despertar a su hijo que seguía entubado a un respirador artificial.

Hyunjin quién aún seguía tumbado en la cama que una vez compartió con Felix, se aferró más a las prendas de su omega, las olía y las humedecia con sus lágrimas, tampoco sabía cómo tenía tantas aún, porque ni siquiera había tomado agua, su garganta estaba seca y adolorida, su ojos hinchados y calientes, su cuerpo sucio porque no quería moverse, no tenía las fuerzas para hacerlo.

Dentro de la oscuridad en la que se encontraba la casa y su alma, escuchó como lo llamaban por su nombre.

---¿Lix?---gimoteó mirando a la oscuridad.

Silencio.

Luego de no escuchar nada otra vez, volvió dejar caer su cabeza en la almohada, pero los llamados comenzaron nuevamente y no se detuvieron, seguido de un golpe fuerte en la puerta.

---Hyunjin, hijo.

Era la voz de su padre. ¿Cómo había logrado entrar a su casa? ¿Tumbado la puerta? Se hizo bolita en la cama, quería estar sólo. ¿Era muy difícil de entender? Las luces se encendieron, los murmullos le incomodaban, finalmente la puerta de la habitación quedó abierta de par en par.

---¡Por la Luna!---escuchó la exclamación de su madre---Huele horrible.

La luz se encendió de golpe y Hyunjin se tapó con las sábanas, no quería ver a nadie, no quería hablar con nadie, lo único que quería era volver a ver a su omega, quería poder sentir su piel suave, quería volver a escuchar su voz y su risa, quería volver a ver su sonrisa y sus ojos grandes brillando de alegría. ¿Cómo es que ahora sus ojos se habían cerrado para siempre? ¿Cómo podría vivir sin él?

---Hyunjin...---se lamentó su padre, aunque habló con sutileza---No te has movido de aquí en tres días hijo, me estoy preocupado, tu madre está preocupada.

---Váyanse---les dijo con la voz rota---No quiero hacer nada, solo quiero morirme.

---No digas eso, cariño---susurró su madre y sintió el peso de su cuerpo sentándose en el borde de la cama a la altura de sus piernas---Vinimos a buscarte porque no vamos a dejar que nuestro único hijo se hunda en la tristeza.

---Hyunjin, debes asistir al funeral de Felix---le recordó su padre y el corazón se le volvió a romper en mil pedazos---Iremos contigo.

---No puedo---sollozó---Es demasiado doloroso, no puedo hacerlo.

---Cariño mío, debes asistir, su familia espera verte ahí, no es necesario que te quedes, basta con presentarte---razonó su madre---Luego iremos a casa, y te haré tu sopa favorita, estaremos contigo en todo momento, puedes tomarte el tiempo que quieres pero no te decaigas, tu hijo aún sigue luchando por su vida y va a necesitar un padre.

Hyunjin negó con la cabeza a pesar de que no podían verlo por culpa de la sábana, pero también pensó en Hyunnie, su pequeño cachorro, lo amaba con todo su corazón pero no tenía ganas de seguir. ¿Ser un padre? No sabría hacerlo sin Felix, no podía sin su omega. ¿Quién lo iba a guiar? ¿Quién lo iba a aconsejar? No era capaz, sería el peor padre, y no quería eso para su hijo.

---Te llevaremos a casa aunque no quieras, y también a la funeraria---demandó su padre y le quitó la sábanas que le cubría por completo el rostro lloroso y sucio---No puedes quedarte aquí, eras el prometido de ese muchacho, era su pareja, tienes que asistir a su funeral.

---¡No puedo!---gritó Hyunjin de manera desgarradora---¡¿No entienden que no puedo continuar sin él?!---jadeó---¡Mi vida está arruinada, nunca volverá a ser como antes, porque lo extraño demasiado!---Hyunjin se colocó en posición fetal, luego agregó en voz baja:---Lo necesito aquí conmigo, no quiero tener que ver su ataúd, es mucho para mí.

---Hijo...---trató de hablar su padre pero Hyunjin lo interrumpió rompiendo en un llanto ahogado y desconsolado.

Sintió la mano de su padre en su cabello oscuro que se encontraba bastante grasiento, pasó sus dedos con cariño por sus hebras mientras Hyunjin se rompía aún más por dentro, su madre por otro lado le acarició las pierna como un tipo de consuelo silencioso, y él no podía dejar de llorar.

---En serio lo amabas mucho ¿Verdad?---dijo su padre con temblores en la voz, Hyunjin asintió---¿Crees que Felix habría querido verte así?---indagó---Sé que es doloroso, pero hay un niño allá afuera que ya perdió a un padre, y no puede perder a otro---agregó afectado---Hyunjin tienes ser fuerte por Yonghyun, tu hijo te necesita.

¿De dónde iba a sacar las fuerzas?
Sentía que no podía, pero su hijo lo necesitaba y su padre tenía razón en eso. ¿Entonces debía pararse de la cama? ¿Tenía que seguir con su vida? ¿No podía simplemente irse con su omega? Las cosas serían mucho más sencillas si Hyunjin se dejara ir.

Recordó con amargura las promesas que se habían hecho, apenas habían pasado días de eso, y se sintió como si realmente estuvieran pactando una eternidad juntos, así fue como Hyunjin lo vivió. Las palabras dulces de Felix hicieron eco en su consciencia:

«Tampoco me iré de tu lado pero
creo eso ya lo sabes, también te lo prometo»

«Te quiero unido a mí
para siempre, Jinnie»

«Estoy aquí, y tampoco
pienso irme a ningún lado»

Felix lo amaba, y él lo sabía con certeza. ¿Entonces por qué lo dejó sólo? ¿Por qué después de tantas promesas que se hicieron decidió abandonarlo? Aún les faltaban muchas cosas por vivir, estaban construyendo una familia que iba a tener otro integrante, se iban a casar, y todo aquello se desvaneció, el futuro se iría con Felix a la tumba y el pasado sería el único consuelo para Hyunjin, un alfa completamente roto por dentro.

---Vamos a casa cariño, Kkami se pondrá feliz de ver a su dueño otra vez, ha estado muy triste estos días---dijo su padre, mientras su madre le empezaba a armar una maleta con ropa limpia---Ve a ducharte, nosotros vamos a guardar algunas de tus pertenecías.

Hyunjin se sentó en la cama sin muchos ánimos de pararse, viendo como su madre guardaba todo de forma apresurada.

---¿Quieres llevar esto también?---preguntó su padre refiriéndose a las prendas de Felix encima de la cama.

---Sí.

Hyunjin se puso de pie y se arrastró como pudo hasta a la sala del apartamento, el arbolito de navidad que habían decorado juntos seguía en el mismo lugar, pero apagado, sin brillo, sin color, así como el resto de la casa, así como Hyunjin.

Cuando se metió en el baño, se lavó los dientes y se dió una ducha, no había llorado mientras lo hacía, por alguna razón sentía que se lo estaba guardando para cuando realmente lo necesitara. Salió del baño con la toalla cubriendo su cintura y descalzo, así mismo caminó hasta la tétrica habitación e hizo que sus padres le dieran privacidad. Se vistió con ropa negra, ancha y cómoda, también uso una gorra para taparse el rostro hinchado, parecía un psicópata, con las enormes ojeras al rededor de sus ojos y una barba incipiente cubriendole su mandíbula, al mirar la cama, notó que la maleta seguía allí, estaba abierta así que caminó hasta la pequeña mesa de noche y tomó el portaretratos que Hyunnie le regaló por navidad, lo acomodó entre la ropa y cerró la maleta.

~°🧸•~

Caminando por el pasillo iluminado de la funeraria, a pesar de que Hyunjin estaba escoltado por sus padres, parecía estar en camino a su sentencia y no al funeral de su prometido, aunque tenía la cabeza gacha, pudo notar a su alrededor que de ambos lados del pasillos habían coronas de flores en filas, eran pocos, y tenían mensajes de condolencias, incluso su familia había llevado unos, fue horrible tener que verlo, a Felix no le gustaba esas flores, al contrario, era muy amante de las gardenias, los tulipanes y las peonias, Hyunjin se enteró de eso muy tarde.

Al final del pasillo lo esperaba la devastada familia Lee.
Hyunjin no pudo manter contacto visual con los padres de Felix por mucho tiempo, y mucho menos con Minho y Jisung, también se negó a ver la enorme foto de su omega colocada encima del ataúd, rodeada de arreglos florales fúnebres. Cuando finalmente llegó, se dió cuenta que sus padres le habían dado su espacio porque se habían quedado varios pasos atrás, los señores Lee se encontraban parados uno al lado del otro justo en el lado derecho del pequeño espacio, Minho y Jisung por otro lado estaban ocupando el lado izquierdo, los cuatro pares de ojos fijos en él transmitían, desolación y dolor, pero también lastima, Hyunjin sintió que lo miraban con mucha lastima, y eso le generó un inmenso nudo en la garganta.

Sin decir una sola palabra, Hyunjin se inclinó frente a ellos, y se arrodilló para mostrar sus condolencias, aunque era él quien debía estar parado allí, no lo merecía, sabía que no lo merecía, ni siquiera logró casarse con Felix, pensándolo bien, ni siquiera lograron muchas cosas estando juntos, y tampoco por separado, su omega tenía planes de retomar sus estudios, y eso tampoco sucedió. Hyunjin se puso de pie y luego volvió a arrodillarse. No tenía fuerza física para hacer eso, y mucho menos mental, el traje de vestir que llevaba lo sofocaba, y la corbata negra sobre su camisa blanca de botones, se empezó a cerrar al rededor de su cuello, asfixiandolo, se llevó las dedos al cuello de la camisa, y aún estando de rodillas, jadeó buscando aire, y nuevamente dejó salir un fuerte llanto, olvidándose de la vergüenza, no le importaba verse así delante de ellos, solo quería que todo ese dolor que sentía en su pecho se terminara.

---Oh, Hyunjin...---escuchó que alguien decía y luego rompía en llanto también, no se atrevió a alzar la vista para comprobar quién había sido, pero tal vez fue la voz de Yongsun.

Al poco tiempo de derrumbarse delante de todos, sintió las pequeñas manos de alguien sobre sus hombros completamente tensos, por el olor supo de inmediato que era Jisung, y sin querer, se abrazó al pequeño cuerpo del omega, evitando aplastar su barriga, inmediatamente sintió otra presencia cerca de ellos, y no le hizo falta saber que Minho se había unido al abrazo.

---Esto es demasiado---susurró Yongsun---Me destroza el alma, Beau, no puedo seguir mirando.

---Nosotros nos quedaremos aquí, ustedes vayan adentro---les ordenó Beau, pero lejos de sonar firme se escuchó ahogado---Denle agua, y comida a Hyunjin.

En un momento Hyunjin fue llevado del brazo por Minho y Jisung a la sala principal donde todas las demás personas se reunían, muy pocas mesas estaban ocupadas, pero captó rápidamente cuando Kim Seungmin y su empleado Yang Jeongin se ponían de pie rápidamente y se inclinaban ante él.

---Lo siento muchísimo---dijo Seungmin en voz baja.

---Mis condolencias, doctor Hwang---dijo Jeongin con la cara larga.

---¿Puedo sentarme con ustedes?---fue lo que preguntó el alfa.

---Por supuesto---asintió Seungmin y los tres tomaron asiento, Hyunjin observó como Minho y Jisung le buscaban algo de comida.

Comió en silencio, mientras Yang y Seungmin tenían una conversación banal entre ellos, su mirada se desvío del plato y recayó sobre la pareja Lee Han, ambos no habían dejado de vigilarlo y susurrarse cosas a su vez, Hyunjin los ignoró nuevamente. Poco tiempo después Kim Seungmin se despidió al igual que su empleado Yang Jeongin, y el alfa se encontró sólo, aislado, y con un montón de platos repletos de comida que apenas tocó.

Jisung y Minho tomaron asiento frente a él, y trataron de hacer a un lado todos los platos para mayor comodidad, pero sinceramente Hyunjin no tenía ganas de hablar con ellos, solamente deseaba irse a su casa y acostarse en su cama hasta perder el conocimiento y finalmente morir de tristeza.

---Tenemos algo que te pertenece---le dijo Minho sin vacilación y le dejó sobre la mesa de madera un bolsita pequeña de gamusa.

Hyunjin dudó antes de ver lo que había dentro, era el anillo de compromiso que le había dado a Felix el día de navidad, estaba completamente intacto y seguía igual de brillante, el alfa cerró los ojos y suspiró, apartando las lágrimas que había logrado domar, se guardó la bolsita en la parte interna de su saco y volvió a mirar a la pareja frente a él.

---Gracias.

Minho y Jisung se miraron.

---Hyunjin...---dijo el omega con vacilación---No te ves nada sano. ¿Has comido algo estos días?

Hyunjin negó con la cabeza.

---Oh, entiendo, nosotros tampoco hemos podido comer bien---agregó con pesar---Todo esto, más la incertidumbre que sentimientos con respecto al estado de salud de Hyunnie, es demasiado.

---Hyunnie, se pondrá bien---murmuró Hyunjin sin ánimos---Lo sé, mi hijo no puede dejarme sólo, y yo no puedo dejarlo sólo a él.

---¿Te harás cargo del niño?---inquirió Jisung sin esconder su sorpresa---Pensé que nosotros-

---Cambiaremos el apellido---lo interrumpió Hyunjin abruptamente---Yo asumo la responsabilidad.

---No---dijo Minho y Jisung lo miró con sus ojos almendrados bien abiertos, Hyunjin arrugó el ceño sin comprender la negativa---Lo más apropiado es que esté con nosotros.

---Espera un momento, Minho---Hyunjin negó con la cabeza y usó sus manos para acallarlo---¿Qué estás diciendo? Él es mi hijo, voy a hacerme responsable como debe ser.

Minho endureció un poco su mirada antes de responderle, pero Hyunjin también percibió como Jisung le tomaba la mano a su marido para que no se alterara.

---No voy a permitir eso, al menos no por ahora---le explicó el alfa---¿Te has visto en un espejo, Hwang? Tu semblante es bastante preocupante y sinceramente necesitas mucho tiempo para sanar, estabas vinculado a mi hermano, no es como si fuera algo sencillo de sobrellevar, si es necesario busca ayuda profesional---le aconsejó---No digo que no puedas hacerte cargo, pero me temo que primero debes tratar de seguir adelante, Hyunnie sigue sin despertar, pero cuando lo haga va a preguntar por Felix, y lo va a necesitar mucho, Jisung y yo podemos hacernos cargo del niño mientras tanto, no importa cuanto tiempo pase, además Hyunnie necesitará el cuidado, amor y atención que solo un omega puede promocionar. ¿Estás de acuerdo con eso?

Hyunjin asintió, su cuñado tenía muchísima razón y como médico lo sabía, emocionalmente su hijo iba a necesitar cuidados que él no podría darle, y después de una tragedia así de grande, ambos debían ser adultos racionales, pensar en Hyunnie sería lo primero y lo demás era secundario.

---Haremos los trámites del cambio de apellido y patria potestad cuando sea el momento, no importa si pasan años, siempre que Hyunnie quiera puede irse a vivir contigo, porque tienes razón, eres su padre y también te necesitará---indicó Minho.

---Gracias, no los merezco---murmuró Hyunjin apenado y bajó la mirada.

---Somos familia, Hyunjin---dijo Jisung a su vez---Eso es lo único que no va a cambiar jamás.

~°🧸•~

Tras cinco días de duelo continuo Hyunjin sentía que las cosas no mejorarían. La soledad abrupta que lo envolvía se reflejaba en su cuerpo. Las prendas de Felix---que no eran pocas---estaban perdiendo su olor peculiar, siempre le había encantado el aroma de su omega, y esas prendas de ropa era todo lo que tenía, cuando ya perdieran su esencia, Hyunjin se perdería muerto en vida. Pasó esos días en casa de sus padres, la señora Kwan quien era la que se encargaba del servicio, le volvió a habilitar su antigua habitación, había pasado tanto tiempo fuera de esas cuatro paredes que ahora que estaba acostado en la cama mirando el techo plano y blanco, parecía que él era lo único que no pertenecía a ese lugar.
¿Y le importaba pertenecer? ¿Le importaba encajar? A esas alturas sabía con exactitud que no volvería a pertenecer a nadie nunca, no como le perteneció a Felix, no como se pertenecieron en cuerpo y alma desde la primera vez que se vieron en la isla de Jeju.

Todos los días se arrepentía de haber sido un adulto/joven estúpido. Últimamente solo podía pensar en que si hubiera hecho las cosas diferentes con Felix cinco años atrás, habrían tenido más tiempo juntos, más tiempo para ellos, era en lo único que pensaba, en más tiempo.

Kkami entró a la habitación aprovechando que la puerta permanecía entreabierta, inmediatamente que Hyunjin lo miró el animal comenzó a llorar, el alfa podía notar la tristeza en su mascota, y por supuesto que lo entendía perfectamente, Hyunjin siguió al perro con la mirada y le hizo un mohín, Kkami ladró fuerte y se subió a la cama para acomodarse entre el espacio de sus costillas y brazo, gimoteando.

---Lo sé, yo también los extraño---le dijo.

El alfa esperaba con ansias que Yonghyun despertara, seguía respirando artificialmente y eso lo complicaba aún más. Hyunjin todos los días iba a visitarlo, Minho y Jisung---más que todo el omega porque Minho debía trabajar---también pasaban mucho tiempo en el hospital, al igual que los señores Lee y su padre también le daba muchas vueltas diariamente, pero su pequeño tal vez quería seguir alejado de la realidad, porque su hijo también podía sentir la ausencia de Felix, debido al vínculo que formaron desde que estaba en su vientre, y en situaciones así muchas veces se relentizaba el proceso de sanación, tampoco podía juzgar a su cachorro, porque a él también le gustaría desconectarse de esa realidad dolorosa que estaba viviendo. ¿Algún día se iba a terminar? ¿Podrían superarlo? ¿Podrían seguir con sus vidas? A pesar de que Hyunjin dormía poco, cuando lograba conciliar el sueño era porque había llorado mares enteros toda la noche, en la penumbra de esa habitación que alguna vez fue suya, que ahora se sentía bastante fría y diferente. Al menos Kkami le hacía compañía.

El celular comenzó a vibrar encima del escritorio ubicado frente a la cama, Hyunjin soltó un quejumbroso suspiro y salió de la cama dejando Kkami acostado en el mismo lugar, cuando se acercó al escritorio observó que la llamada entrante era de su padre. Apretó un poco los labios antes de contestarle, no lo culpaba, estaba preocupado por su salud mental y física, así que era normal que lo llamara segundo, y lo mismo pasaba con su madre.

---Hola papá---saludó con pereza.

En la línea telefónica a lo lejos, Hyunjin podía escuchar el sonido característico del monitor cardíaco, como también algunos murmullos, quizás era la voz de Jisung.

---Hyunjin, hola---saludó su padre de manera agitada---Que bueno que contestaste hijo, tengo buenas noticias, Yonghyun despertó y está preguntando por ti.

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ʚHana