Para siempre

La trayectoria de regreso a casa fue una odisea, Felix pensó que Hyunjin no llegaría hasta su departamento, pero milagrosamente logró controlarse, el alfa insistió en que no quería ir a ningún hotel, así que lo mas conveniente fue regresar a casa, con suerte apenas se habían alejado unas calles, y con menos alfas al rededor de él y menos omegas al rededor de Hyunjin ambos pudieron apresurar más el paso. Habrían llegado antes si el alfa no se hubiera descontrolado a mitad de camino, estampandolo bruscamente contra una pared fría, le sujetó ambas manos por encima de la cabeza, el callejón estaba apenas iluminado en ciertas partes, y Felix sabía que faltaba solo una cuadra para llegar a su casa, pero Hyunjin se pegó a su cuerpo, presionando la erección inminente que tenía entre sus piernas y reclamó sus labios de forma desesperada, besandolo apasionadamente. Felix quería dejarse llevar pero no era el momento ni el lugar para hacerlo, aunque sentía que se derretia su cordura con cada succión, pero no podían perder más tiempo, las feromonas de su alfa aún estaban tolerables lo que le permitía pensar con claridad, aunque quisiera simplemente complacerlo.

‐--Hyunjin...---suspiró Felix y como pudo dejó el beso---No falta nada para llegar, escuchame---el alfa lo miró, aún seguía ahí, estaba consciente todavía---¿Quieres que todo el mundo me vea desnudo y huela mis feromonas?

---No---gruñó.

Después de aquella palabra, que no fueron de mucha ayuda, Hyunjin lo abrazó por la cintura con demasiada fuerza, y repartió besos por todo su cuello.

---Eres mío.

Que la voz de Hyunjin se mezclara con la de su alfa alarmó a Felix, y lo arrastró para terminar el recorrido aunque Hyunjin ocasionalmente se negaba a avanzar. Después de conseguir llegar la calle donde estaba su casa, Felix subió las escaleras para poder llegar a su departamento, fueron segundos de descuido, y antes de meter el código que abría la puerta, Hyunjin ya estaba resoplando molesto y quitándose la peluca morada, luego se quitó las botas y empezó a sacarse el traje.

---Tengo mucho calor---jadeó desesperado.

Cuando la puerta se abrió, Felix se sacó las botas de sus pies, pero Hyunjin lo tomó por detrás impidiendo que pudieran al menos avanzar hasta el sofá, la puerta se cerró sola una vez que el alfa estuvo dentro, también Felix estaba empezado a sentir calor, así que se quitó la estúpida peluca fucsia y la tiró lo más lejos que pudo, luego se giró para poder comprobar el estado de Hyunjin, aunque fue en vano, porque volvió a tomarlo de manera posesiva y lo besó con frenesí.

Felix no sabía si al menos podían llegar a la habitación, con tanto calor y necesidad del otro, terminarían haciéndolo ahí mismo, al menos quería tener comodidad, porque sabía que estar con su alfa mientras tenía su celo sería doloroso.

Felix se apartó un poco, asustado por los gruñidos molesto que salían de la garganta de Hyunjin, quería poder al menos controlar la situación pero no sabía cómo hacerlo, nunca había pasado por algo así, intentó llevar a Hyunjin a la habitación pero habló antes de que Felix abriera la puerta.

---Será mejor que te quites la ropa, o te la voy a terminar arrancando---Felix se quedó perplejo, procesando lo que Hyunjin había demandado, fueron apenas unos segundos, pero el alfa se desesperó al no verlo reaccionar---¡Ya!

Felix se empezó a ver muy afectado por la voz y las feromonas de Hyunjin, estaba nervioso, y sus manos temblorosas apenas lograban ejecutar alguna acción, apenas logrando sacarse los aguantes y la mitad del disfraz, aunque Hyunjin ya estaba completamente desnudo, solo con la tela de su bóxer haciendo estorbo. El gruñido que soltó el alfa lo hizo estremecer, y Felix comprendió que habían sido sus propias feromonas, tal vez el miedo que tenía era demasiado notorio, porque Hyunjin cerró la distancia que había entre ambos y los tomó del rostro.

‐--No tengas miedo, jamás te haría daño, estoy tratando de controlarme lo más que puedo.

Felix se mordió el labio, asintió varias veces para que Hyunjin viera que el comprendía, pero lo quería tanto, lo único que deseaba en ese momento era complacerlo, que pudiera ser de ayuda para su alfa, Hyunjin lo necesitaba.

---Lo sé, pero no quiero que te controles, estoy aquí, puedes hacer lo quieras conmigo.

Hyunjin inhaló, cerrando los ojos, Felix sabía que estaba reteniendo sus propios espasmos, pero no sería por mucho tiempo, sentía que perdería la cordura en cualquier momento.

---No quiero hacerte daño.

Felix abrió la puerta de su habitación, Hyunjin lo sujetó con fuerza de la cintura y cerró de un solo portazo.

---Yo confío en ti, alfa.

Aquellas cinco palabras detonaron en Hyunjin más que un simple estallido de feromonas, y sin mucha delicadeza tumbó a Felix contra la cama, el omega intentó quitarse el resto del disfraz pero las manos hábiles de Hyunjin se lo arrancaron de las piernas, Felix quiso tomarlo, acariciarlo un poco, besarlo, sentir su calor como suyo, pero el alfa lo agarró de las caderas para que se diera la vuelta, sin reschistar el omega se giró sobre su propio cuerpo y aunque el bóxer aún seguía en su lugar, Hyunjin se las arregló para romperlo a la mitad, desgarrando la tela, a Felix no le dió tiempo de procesar nada, ahogó un grito en el momento que el alfa se hundió en su interior, sin cuidado, sin preparo, moliendose una y otra vez, dejando salir sus feromonas, aquello lo mareó, su cuerpo respondió de forma instintiva, y dejó caer la frente en el colchón, soportando el dolor, su lubricante ayudaba bastante, pero los dedos de Hyunjin hundidos en su carne lo lastimaba, incluso podía sentir que sus uñas querían arrancarle la piel.

---Alfa, más despacio---rogó con dificultad.

Hyunjin se detuvo de golpe.

---¿Qué pasa?---susurró Felix, y luego se mordió el labio cuando Hyunjin lo volvió a penetrar profundo, sus ojos se cerraron de golpe, sintiendo algunas lágrimas calientes resbalar por sus mejillas.

---Yo...---murmuró Hyunjin---Perdóname Lix.

Felix asintió, pero Hyunjin no dejó de moverse, quizás tenía una lucha interna con su alfa, había lucidez en su voz pero sus caderas no dejaron de embestirlo.

---No puedo---jadeó---Quiero poseerte, necesito hacerlo, pero te hago daño.

---Basta Hyunjin, por favor---le suplicó Felix---No me voy a romper, no te contengas.

---Pero... quiero vincularme contigo---confesó con la voz atragantada---Justo ahora.

Felix no lo esperaba, tembló de improvisto por esas palabras. ¿Debia permitirlo? No estaba preparado para eso, tenía miedo pero a la vez lo quería, siempre deseó en secreto pertenecer a un alfa, tener el apoyo y la protección de uno, despedirse de la soledad, presumir una marca en su cuello. ¿Pero amaba a Hyunjin? ¿Quería pasar el resto de su vida con él? Al diablo todo, por supuesto que lo amaba, por supuesto que queria pasar sus dias de vida con él ¿Por qué debía dudar? ¿Era por los nervios?

---¿Confías en mí?

---Sí---dijo bajito, el omega se aferró a las sábanas de su cama, e inhaló profundo.

Hyunjin salió de él por un momento, volvió a girar su cuerpo y lo miró a los ojos cuando estuvieron cara a cara, notando el camino de lágrima que había dejado en sus mejillas, el alfa repartió besos desde sus párpados hasta sus pómulo y mentón, se detuvo en su cuello y respiró profundo.

---No quiero hacer esto sino estás seguro.

Felix abrazó las caderas de Hyunjin con sus piernas, presionando su propio miembro erecto contra la pelvis marcada de Hyunjin, sus manos, que seguían temblorosas, buscaron el rostro sudoroso del alfa, y lo sostuvo con ternura.

---Estoy seguro, te quiero unido a mí para siempre, Jinnie.

Felix sintió una explosión de feromonas después de esa respuesta, su propio cuerpo entregándose a ellas, su temperatura corporal se disparó, al punto de que su propia erección dolía por la falta de atención que estaba recibiendo, la humedad de su entrada se extendió hasta sus muslos, y el vacío doloroso que había dejado Hyunjin al salirse de él ahora se sentía incómodo. ¿Por qué le estaba pasando eso?

Los labios de Hyunjin siguieron besando sobre su cuello, justo en ese punto dulce que tanto cuidaba, pero en ese momento no quería nada más que entregarse a su alfa, así que se dejó llevar aceptando las lamidas y chupetones que le dejaba. El alfa buscó sus manos, y lo tomó de las muñecas, aclandolas a cada lado de su cabeza con fuerza, pero entrelazado sus dedos, Felix apretó el agarre y su pecho se infló, cerrando los ojos, el placer que sentía solo en esa parte de su cuello era electrizante, y también un poco extraño. Hyunjin soltó una de sus manos, y volvió a direccionar el miembro en su entrada palpitante, luego movió su mano hasta su vientre acariciado la zona con suavidad, subiendo por sus torso hasta llegar a su pecho, le dió un poco atención a uno de sus pezones y Felix movió las caderas, buscando auto penetrarse con necesidad.

Hyunjin retomó el agarre que antes habían tenido, y la misma fuerza que ejerció en las muñecas de Felix fue la que usó para enterrarse en su interior nuevamente.

---También te quiero unido a mí para siempre.

El omega soltó un grito desgarrador, y apretó los ojos, tratando de soportar el dolor que la mordida de su alfa le estaba provocado, Hyunjin seguía con los colmillos hincados en su piel, y empezó a mover las caderas con embestidas fuertes. No iba a mentir lo tomó desprevenido y se le nubló un poco la mente, quería creer que era por el dolor, pero la realidad era que sus corazón y su respiración parecieron detenerse por segundo, mientras absorbia todos los sentimientos de Hyunjin como suyos, sentía propio su orgullo por marcarlo, por poseerlo, por ser aceptado como su alfa, y tan pronto como el nudo que se expandió en su interior lo hizo gemir, Hyunjin desclavó los dientes de su cuello, dejándole una sensación de escozor bastante molesta, pero el alfa rápidamente lamió con su lengua tibia las heridas abiertas, limpiadole los restos de sangre que empezaban a salir, Felix no sabía por qué, pero eso lo excitó demasiado, y sus piernas temblaron dejando salir su corrida en el abdomen de su alfa.

La saliva de Hyunjin sobre el vínculo actuó como anestesia para sus males, y se permitió abrir los ojos, era conscientes de que quizás estaban extremadamente ruborizado, pero también comprendió que Hyunjin no estaba viendo eso, su mirada y la suya vieron más allá de sus propias expresiones, se vieron el alma y las vidas que anteriormente habían compartido juntos, no hicieron faltas las palabras para comprender de una vez por todas que se pertenecian el uno al otro, y Hyunjin puso sello a esa promesa silenciosa besandole los labios.
Hyunjin deshizo el beso y juntó su frente con la de Felix, casi podía oír como si ronroneara. ¿Estaría sintiendo lo mismo? Habían tantos pensamientos acaparando su mente, emociones que hacían hormiguear su cuerpo, sentimientos que no podía explicar.

---¿Qué acaba de pasar?

Felix soltó aire por la boca.

---No lo sé.

Hyunjin lo examinó con los ojos bien abiertos, buscando alguna herida más allá de la que tenía en su cuello, al no encontrar nada se tranquilizó solo un poco, besandole las mejillas calientes y descendiendo por el lado maltrecho de su cuello.

---¿Puedo besarla?---preguntó antes de ejecutar la acción, Felix nervioso y ansioso no tardo en asentir.

Los labios del alfa se posaron sobre la marca, e inmediatamente se estremeció, luego sentir su lengua de nuevo sobre las heridas lo hizo gemir, Felix se sorprendió por el placer que había sentido, y le clavó los dedos a Hyunjin en los brazos. El alfa gruñó complacido por los espasmos que salían del cuerpo del omega. ¿Qué estaba pasando? ¿Por qué se estaba poniendo duro con simples besos sobre la marca? La humedad volvió a escurrir de su interior y parecía que si Hyunjin seguía dándole atención a la marca podría llegar al orgasmo nuevamente. ¡Y que vergüenza! Aunque ya había sucedido se podía ligar a que antes había tenido a Hyunjin moliendose dentro de él, Felix no sabía cómo explicarlo.

Otra explosión de feromonas por parte del alfa le dijo a Felix que la cosas aún no habían terminado, y una sensación extraña lo llamaba a complacerlo, a su alfa.

---Hyunjin...---suspiró.

---Está bien---lo tranquilizó---No pienses en nada---susurró por último cerca de su oreja, paseando las manos por su vientre.

Felix intentó hacerlo, y no fue muy difícil, la voz de Hyunjin, sus deliciosas feromonas, el calor de su cuerpo, todo eso lo excitó demasiado. Su propio cuerpo estaba ardiendo, su temperatura había subido y jadeaba por las caricias y besos que Hyunjin le daba, su piel estaba tan sensible que por donde sea que los dedos de su alfa pasaban dejaban caricias que se sintieron como quemaduras, como si el omega estuviera en celo. ¿Era eso posible? Felix regresó las caricias, paseándo sus manos manos por el pecho de Hyunjin, por su abdomen e incluso sus nalgas firmes, y tenerlas así tan descubiertas para él lo llevaron impulsivamente a darle una nalgadita al alfa.

---¿Qué estas haciendo, Felix?

El omega aguantó una risa malvada y se encogió de hombros, importandole muy poco que hubiera sido el alfa de Hyunjin quién había hablado, se limitó a apretar ambas nalgas con sus manos, y rápidamente su novio alzó la cabeza apartándose de su cuello, sus ojos se tornaron más oscuros de lo normal, llevados por la turbulencia del celo que aún no desaparecía.

---¿Crees que es buen momento para excitarme de esa manera?---gruñó, alzándose sobre el cuerpito de Felix y le abrió bien las piernas para colocarse dentro del espacio entre ambas.

---Siempre es bueno momento para excitarte, alfa---dijo, y luego sonrió.

---Y no te vas a arrepentir---concluyó Hyunjin con la expresión oscurecida.

El alfa levantó las piernas de Felix mientras lo miraba con la intensidad propio de un animal cazando a su presa, el omega suspiró cuando le acarició el miembro con sus manos, y Felix cerró los ojos clavandole las uñas en las nalgas. Otro estallido de feromonas por parte del alfa los hizo gemir, aquello hizo que abriera los ojos, y observó como el alfa tenía los ojos cerrados y el ceño fruncido, estaba conteniendose.

---No Jinnie---susurró Felix sobre sus labios---No quiero que te contengas así, no voy a romperme.

---Ya te dije que te puedo hacer daño.

Felix sonrió con enternecido, incluso cuando se encontraba en ese estado Hyunjin seguía siendo atento y se preocupaba.

---No pasará nada malo---aseguró Felix, agarrando el miembro erecto de Hyunjin y llevadolo hasta su intimidad, la punta presionó sobre su humedad y ambos se estremecieron---Quiero a mi alfa aquí.

Felix depósito besos sobre las mejillas, nariz y labios levemente fruncidos, y cuando finalmente abrió los ojos ya no era su Hyunjin, era su alfa en celo. Al observarlo por primera vez no pudo evitar morderse el labio inferior, la parte animal de Hyunjin llamaba a la suya, y su propio lado racional también desapareció.

El omega aprovechó que aún tenía la punta del miembro en su entrada y lo empujó hacia adentro ayudándose con la mano, aquello lo había excitado demasiado, y Hyunjin apartó su mano de un solo tirón y la dejó prisionera a un lado de su cabeza, comenzando con un vaivén de caderas que estuvo muy lejos de ser suave, entrando y saliendo sin mucho cuidado, Felix gimió, disfrutando del desenfreno de su alfa, así lo quería sentir, le gustaba, era tan maravilloso que giró la cabeza hacia un lado, apretando los ojos cerrados y jadeando de placer con la boca abierta, algo de lo que habia hecho provocó gruñidos en Hyunjin, porque sintió su cercanía en el hueco de su hombro, y sólo en ese momento se dió cuanta que la marca del vínculo había quedado descubierta, y Hyunjin lamió sobre ella, otra vez, las caderas de Felix se movieron al compás de las embestidas de su alfa, y se encontró gritando de puro placer cuando alcanzó otro increíble orgasmo, y la explosión arrolladora lo tensó por dentro y lo hizo llorar, sin embargo su alfa no disminuyó el ritmo de sus estocadas, Felix lo escuchó murmurar:

---Eres mío, solo mío, completamente mío.

Y la consciencia de Felix se volvió a nublar por el nuevo estallido de feromonas que dejó salir Hyunjin. Otra vez se sentía desesperado y necesitado, agobiado por la fiebre de su propio celo. De repente el alfa salió de él y lo giró para que quedara boca abajo y con las caderas bien arriba, sin perder tiempo volvió a penetrarlo, arrancando otro gemido de su garganta seca, movió tanto las caderas de todas las formas posibles que en un punto tocó algo dentro del omega que lo dejó exaltado, fue placentero pero Felix se apartó un poco, y eso no le gustó para nada a su alfa. Con una determinación y fuerza inquebrantable, Hyunjin apoyó un mano entre omóplatos de Felix y lo mantuvo inmóvil, profundizando aún más sus embestidas. A partir de ese momento solo fueron una pareja de animales, los dos en pleno celo, Felix suplicanba por más caricias, que lo penetrara más fuerte, más duro, y Hyunjin ni corto ni perezoso le proporcionaba todo lo que pedía y necesitaba.

Por supuesto el celo de su alfa fue mucho más potente, había perdido la consciencia y no regresó sino hasta que pasaron varias horas, Felix no lo recordaba muy bien, pero muchas veces Hyunjin bajaba el ritmo y otras veces lo subía. El omega estaba acabado, sin fuerza alguna, y agradeció que su celo también había aparecido en el momento justo para protegerlo, tal vez por eso no fue tan duro y doloroso para él, pasaron toda la noche y parte de la madrugada así, solo teniendo pequeños descansos donde Felix aprovechaba para dejar caricias, abrazos y besos a su alfa, muchas veces no se dejaba pero otras simplemente se dejaba hacer, olfateandole el cabello rubio y mostrando mayor cuidado y atención sobre el vínculo, aquella zona era la única que trataba con delicadeza y llenaba de besos cariñosos, eso solo hacía que Felix se derritiera por dentro, al saber lo mucho que Hyunjin adoraba haberse vinculado con él.

Finalmente cuando el alfa se hubo saciado, ya estaba por amanecer, en ese momento Felix había perdido la cuenta de cuantas veces se había corrido dentro y fuera de él, estaba hecho polvo. Hyunjin se había desplomado encima de su cuerpito de pollo magullado, y Felix repartió caricias en su espalda hasta que sintió su respiración más pesada y más profunda, confirmando que se había quedado dormido cuando los ronquidos hicieron presencia. Olisqueandolo comprobó que su celo había desaparecido casi del todo, y suspiró aliviado.

«No todos modos no creo que mi culo pueda aguantar más»

Felix empujó a Hyunjin para sacarlo de encima, y su peso muerto cayó a un lado de la desastrosa cama, y el omega no perdió mucho tiempo en hacerse un espacios junto a Hyunjin, por obvias razones descartó cubrirse con las sábanas, quizás hasta se lo imaginó pero incluso había sangre en ellas. Antes de que pudiera ponerse cómodo Hyunjin se movió e inconscientemente apoyó la cabeza en su pecho y una pierna sobre las suyas, abrazandolo como un oso de peluche, también había rodeado su cintura con el brazo. Felix sonrió y le dejó un beso en la frente, antes de caer rendido en un profundo sueño.

~°🧸•~

Felix se despertó cuando escuchó el sonido de la puerta, pero por alguna razón su mente siguió apagada, aquello no evitó que sintiera el calorcito propio de una manta, y se giró para acomodarse de otra manera y poder seguir durmiendo, fue una mala idea porque la tela de la almohada rozó su marca, y Felix hizo una mueca de dolor entre dormido y despierto, aún así hundió más la cara en entre la almohada, olía a Hyunjin, tantos las sábanas, como él, e incluso la habitación entera, todo olía a su alfa. Sin querer Felix recordó todo lo que habían vivido la noche anterior, y el vínculo inquebrantable que habían formado. Por más extraño que fuera no se arrepentía de absolutamente nada, por fin se sentía acompañado y protegido.

Minutos después de intentar conciliar el sueño se dió por vencido y abrió los ojos, afortunadamente la habitación seguía un poco a oscuras pero sabía que realmente era muy tarde, lo más probable era que estuviera anocheciendo otra vez y eso lo alarmó cuando pensó en su hijo. No sentía la presencia de Hyunjin así que supo que el sonido de la puerta había sido causado por él, eso lo asustó. ¿Se había arrepentido de vincularse? No, podía sentirlo, la presencia de Hyunjin no era física pero emocionalmente estaban involucrados, no sentía rechazo, por extraño que pareciera, estaba basten relajado. Intentó sentarse pero un fuerte dolor de cintura lo tumbó en la cama otra vez.

«Me duele hasta la sombra»

Hizo una mueca de dolor y gimió, le dolía demasiado, ni la cesárea había sido tan dolorosa, nadie lo preparó para el posparto y tampoco nadie lo preparó para la poscogida de su alfa en celo. Trató de sentarse en un segundo intento pero solo consiguió arrastrarse sobre la cama. ¿Pero qué habían hecho? Felix no recordaba mucho, más allá de saber que tocó el orgasmo una y otra vez, tanto que lo hizo llorar. Cuando miró la mesita de noche se apoyó en ella, en su primer intento al ponerse de pie las piernas no le respondieron, así que volvió a tirarse en la cama, en su segundo intento logró ponerse de pie, y se alarmó, algo caliente salió como un chorro de su parte íntima, y le mojó las piernas y parte de la sábana, se giró para comprobar que se trataba de los fluidos de su alfa, las sábanas de la cama estaban hechas un desastre de manchas esparcidas por todos lados, causadas por ambos, pero lo que más alteró a Felix fueron las manchas rojo oscuras, sangre.

Se tocó su entrada maltratada buscando la sangre pero cuando miró sus dedos no había nada, más notó que le ardía demasiado, estaba húmedo y muy hinchado.

«Casi no vivo para contarlo»

La urgencia de bañarse lo impulsó como un misil fuera de la habitación, pero sus piernas lo dejaron en ridículo y cayó al suelo, gritando por el dolor que sintió tanto en su cuerpo como en sus rodillas que habían recibido todo el impacto. No le quedó más que gatear hasta la puerta del baño, una vez pudo abrir la puerta y meterse en el pequeño cuarto, cerró como pudo y se ayudó con el lavamanos para ponerse de pie, e intentar meterse en la ducha, cuando se miró en el espejo se dió cuenta que no se veía como se sentía. ¡Estaba radiante como un sol! Eso lo hizo rosoplar, porque se sentía como un saco de boxeo golpeando sin descanso. Sin contar los innumerables chupetones que tenía por todo el cuerpo, marcas de mordidas, aún tenía los dedos de Hyunjin marcados en sus brazos, muñecas y cintura, sentía su cara pastosa y su pelo rubio era un desastre. Entonces su visión recayó sobre ela marca, y se acomodó para poder verla mejor en el espejo, básicamente vió toda la hilera de dientes de Hyunjin clavadas en su piel en forma circular, aunque podía asegurar que lo que más le dolía eras los huecos que las acompañaban, justo donde habían estado sus colmillos, la zona estaba notoriamente hinchado y habían rastros de sangre, su piel ya se estaba tornando morada, verde y azul al rededor de aquellas marcas rectangulares, y era sorprendente que eso fuera lo que menos le dolía.

Se metió en la ducha cuando sintió otro abrupto bajón de fluidos que no eran precisamente de él, dejó que el agua caliente cayera sobre su cuerpo y se llevara toda la suciedad de la noche anterior, se lavó bien el cabello con champú matizante y respiró profundo antes de lavarse bien ahí atrás, era asqueroso que aunque estaba dejabo del agua los fluidos no dejaban de salir y le dolía aún más. Al salir de la ducha se enrolló la cintura con una la toalla seca que estaba junto a otra húmeda, lo que significaba que Hyunjin se había dado una ducha también, se lavó bien los dientes y luego salió del baño caminando como bambi, las piernas le dolían, y le temblaban, y dolor de espalda y cadera era atroz. Solo quería dormir 12 horas seguidas otra vez, pero al llegar a la puerta abierta del cuarto maldijo en voz alta, la cama seguía hecha un desastre y justo en ese momento el sofá le pareció más llamativo. Escuchó como ingresaron el código que abría la puerta y se giró para observar como Hyunjin se quitaba los zapatos antes de entrar, tenía ropa que era suya, no le quedaba tan mal porque a él también le quedaban grandes, así le gustaba, por lo que a Hyunjin el pescador y la camisa oversize le iba un poco ajustadas, su cabello largo y oscuro seguía húmedo, y rápidamente lo alcanzó cuando lo vió ahí de pie, apoyado en la pared como un anciano con artritis.

---¿Qué haces levantado?---dijo sobresaltado y lo abrazó dejando un beso en su cabeza---¿Tenías fuerzas para bañarte?

---Fue un milagro, literalmente gateé hasta el baño---sonrió como un tonto después de que Hyunjin le diera un beso corto.

---Había salido a comprar algunas cosas, debemos comer así que también pedí un domicilio---Hyunjin lo ayudó a acostarse en el sofá, y Felix se pegó a su cuerpo, oliendolo, sintiéndose seguro, protegido y amado.

Las lágrimas salieron solas, no sabía si por el dolor en su culo o en su cuerpo, pero empezó a llorar tan repentinamente que Hyunjin se asustó, y Felix literalmente sintió su miedo.

---¿Por qué lloras?---susurró sobre mi cabello húmedo---¿Está todo bien? ¿Te sientes bien? ¿Te duele mucho?

Felix negó con la cabeza y se hundió más en el abrazo, avergonzado por ponerse a llorar de ese modo, sin razón alguna, simplemente estaba muy sensible.

---¿Te arrepientes?---preguntó muy asustado, Felix podía sentirlo.

---No---dijo con seguridad---¿Y tú?

Hyunjin negó.

---Siempre estuve muy seguro de que te quería para toda la vida---dijo y luego lo acomodó para besar sus lágrimas y la marca rojiza sobre su cuello---Gracias por darme otra oportunidad, Lix.

Después de esa confección fue inevitable llorar más, tenía una sensación de paz y liberación, como si todos sus problemas hubieran desaparecido por completo, Felix volvió a lanzarse en sus brazos, sin querer dejarlo ir jamás, hundió la nariz en cuello de Hyunjin, cerca del hueco de su hombro, hacer eso fue muy tranquilizante para él.

---Te traje algunas medicinas para el dolor---explicó, refiriéndose a la bolsa de papel que había dejado encima de la mesita---Te voy a curar un poco.

Hyunjin sacó de la bolsa gasas, parches para el dolor, tubos con cremas, antiséptico, apósitos para cicatrizar, algunas cajas con pastillas que Felix fue revisando una por una a pesar de que el alfa sabía perfectamente lo que hacía, por último Hyunjin tomó su mano libre y puso algo encima de ella.

---También traje esto---dijo y Felix miró la pequeña cajita rosada sobre su palma, eran pastillas postday, realmente quedó impresionado.

---Después de haber eyaculado unas 30 veces dentro de mí---se rió nervioso---¿Crees que una de éstas va a funcionar?

---Aunque no creas me di cuenta que también pasaste por tu celo ayer---confesó serio, sin reírse de su broma---Y fuiste muy sincero conmigo al decirme que no quieres más bebés aún, y yo respeto eso.

---Gracias---mumuró Felix---¿Puedes buscarme un poco de agua?

Felix se tomó la pastillas y rogó a todos los dioses existentes porque funcionara, aunque no tenía mucha fe, podría ocurrir un milagro. Hyunjin se arrodilló frente a él para hacer lo que había dicho y empezó a curarlo, dándole primero atención a su marca, usó las gasas y el antiséptico para limpiar con cuidado, sus manos ni siquiera se sentían, sus toques eran delicados y después que colocó una de las cremas, le dió un beso en los labios, luego siguió con los parches para el dolor, Felix le indicó dónde le dolía y Hyunjin los puso todos, dejando de último su espalda, el omega se acostó boca abajo, dejando el torso sobre los muslo de su alfa mientras suspiraba con los masajes que le dió usando cremas analgésicas, también sintió cuando pegó varios parches, Felix intentó volver a sentarse pero Hyunjin lo obligó a permanecer en la misma posición.

---No he terminado---lo regañó, y Felix sintió como quitaba parte de la toalla y abría sus nalgas con las manos, revisando ahí mismo dónde se había molido horas atrás.

---¡¿Qué estás haciendo?!---gritó avergonzado, pero Hyunjin no permitió que se saliera de sus brazos---¡Hyunjin!

---Quieto---dijo sin burla en la voz y demasiado calmado---Necesito revisarte.

---Estoy bien---chilló Felix, sintiendo como los dedos de Hyunjin aún seguían en esa zona, algo frío tocó el irritado agujero pero no podía ver nada---¡Ay, me duele! ¡Hyunjin!

Felix pateó unas cuantas veces pero se quedó inmóvil cuando recibió una nalgada bien fuerte por parte del alfa, gritó frustrado y también por el dolor.

---Quédate quieto, solo estoy limpiandote y poniendo crema---habló despacio, y Felix se enfurruñó molesto.

---Puedo hacerlo yo, que vergüenza---se quejó.

---¿Vergüenza por qué?---se rió Hyunjin---En urgencias he visto que han dejado culos en peor estado, no me incómoda ver el tuyo.

---No estás ayudando---resopló con las mejillas calientes---¿Falta mucho?

---Ya terminé---dijo contento y Felix suspiró aliviado, por último Hyunjin se inclinó para darle un beso sobre la nalga y el omega se tapó la cara sin soportarlo más.

Una vez estuvo curado y se tomó todas sus pastillas, se quedó acostado en el sofá con los ojos cerrados, mientras esperaba que Hyunjin acomodara el desastre que habían dejado en la habitación, también aprovechó para llamar por teléfono a Jisung, y saber de su hijo, tal vez podían llevarlo esa misma noche, pero estaba tan cansado que solo quería dormir un poco más. Casi se quedó sordo cuando su cuñado gritó desesperado al enterarse que había sido marcado, pero Felix no tenía ganas de echarle el chisme en ese momento, así que como respuesta Jisung lo insultó antes de colgar la llamada. El omega bostezó y dormitó un poco, hasta sintió que Hyunjin lo cargaba para llevarlo a la cama y luego se acostaba junto a él y lo abrazaba. Quizás lo estaba soñando pero nunca había sentido tanta paz en su alma.

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Regresé linduras
No sé que mierda hice pero espero de verdad que se hayan quedado muy conformes con el capítulo, me costó demasiado escribirlo.
Esperen actualización pronto y no olviden dejar su voto y comentarios.
¡Gracias por el apoyo, son los mejores!
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ʚHana