II.- Compañeros
Hitohito se encontraba caminando con camino a su casa despues de haber sido golpeado incontables veces por esos tipos; su rostro lleno de moretones y magulladuras daba a entender lo brutales que fueron aquellas personas que ni siquiera tenía la desdicha de conocer, sin duda estaba furioso. Realmente, él pudo perfectamente haber respondido ante la más mínima provocación, pero no quería llamar la atención tan pronto dentro de su escuela, aquello le molestaba profundamente, estaba sin dudas frustrado por haber fingido estar rebajado a un nivel tan bajo como el de esos sujetos, pero un aparente Don nadie que se habría desecho de un grupo de delincuentes no hubiera pasado para nada desapercibido, encargarse de ellos tampoco era su prioridad, eso lo dejaría para despues. Una vez los tenga entre la espada y la pared, le encantaría ver como ellos ruegan por que tenga piedad, eso no tendría precio.
Por ahora, debía investigarlos y vigilarlos, por lo que no podia hacer mucho con el asunto.
Todo estaría mejor si estaba con su hermana, Hitomi era lo unico que le daba un incentivo para vivir, él debía proteger a su hermana para asegurarse que ella tenga una mejor vida que la que su hermano pudo haber tenido. Tal vez no lo demostrara, pero siempre le había tenido un gran aprecio, despues de todo ella tuvo que crecer sin sus padres o cualquier persona que la apoyara.
Al llegar a su hogar y tocar el timbre, su hermana menor abrió la puerta, pero al momento de mirarlo a la cara, inmediatamente abrió los ojos como platos al ver el estado de su hermano. Él entró con un saludo ordinario y se recosto en el sillon con desdén.
Hitomi: ¡¿Hi-Hitohito?!
Hitohito: ¿Qué sucede, hermana? .-Preguntó con voz neutra, provocándole escalofríos a la joven, quién gesticuló por un momento, tratando de hallar las palabras adecuadas para hablar.-
Hitomi: ¿A-Acaso te golpearon o algo? Te había dicho que no te metieras en p-problemas
Hitohito: Era algo que debía pasar .-Hizo una pequeña pausa mientras se acomodaba el pelo.- ¿Quieres algo de comer?
Hitomi: Eh... Hermano, deberias ir al hospital o algo...
"¿Por qué tanta insistencia?"
Hitohito: Estoy bien .-Dijo levantándose del sillón con un tono de hartazgo en su voz.- ¿vas a comer?
Hitomi: Hito...
Hitohito: bien, estare en mi cuarto, si me necesitas, llamame .-Su hermana tensó su postura por su respuesta, el miedo reflejado en su cara era notorio, aunque él prefirió ignorar todo esto e irse a su habitación.-
Hitomi: ...Si... Disculpa
****
Unas horas mas tarde, durante la madrugada, Hitohito se levantó de su cama con el menor ruido posible y se vistió de nuevo, al parecer, debía salir a algún lugar.
Rápidamente, tomó las llaves de su casa y una mochila con varias herramientas y salió de la casa a paso acelerado. Unos minutos despues, llegaría a la academia Itan, ahora cerrada y con casi nula actividad actividad, no habia nadie más que unos contados guardias que no podrían detenerlo de hacer su segundo movimiento del año.
"Es algo curioso que un instituto tan prestigioso como éste termine así de descuidado por la noche"
Al llegar a la puerta de la institución, sacó una pequeña ganzúa de la mochila que portaba para así romper el candado que aseguraba la reja. Por ahora, ni un solo guardia se había percatado de su presencia, continuó su camino hacia el interior, cruzando pasillos y salones por igual, deteniéndose ocasionalmente para evadir la visión de los ineficaces guardias de seguridad, sobra decir lo que tuvo que hacer para ingresar a la oficina del director, estando dentro, procedió a revisar todos y cada uno de los cajones de archivos que habían, finalmente dando con lo que buscaba; El grupo 1-1 y 1-2
Tadano: Huh, ¿Así que ustedes son los 2 lamebotas del ninja eh? .-Arquea una ceja mientras lee un expediente del montón.-
Mono Shinobino "el ninja". Hijo unico, sus padres viven apartados de él, ¿Por qué será...? 17 años, soltero, historial delictivo un tanto... curioso y problematico, aunque eso no es una sorpresa.
Wakai Takeyoshi, tiene un hermano mayor, vive con sus padres, 16 años, es el capitán del equipo de football de Itan, no es muy bueno en clases, soltero.
Makoto Katai "el Gorila" , Una hermana menor, vive con ella, 17 años, extremadamente fuerte por lo que sé, academicamente promedio, demasiado conflictivo. Bien, entonces son un grupo de tres transtornados sociales... Era de esperar, ¿Qué más habrá por aquí?
Shouko Komi "la Diosa", Estudiante prodigio, excelente forma fisica, 17 años, hace trabajo comunitario, un hermano menor, vive con ambos padres y su hermano, belleza incomparable para esta escuela, en resumen, una estudiante excepcional en todo el sentido de la palabra, ¿Será tan perfecta cómo parece? Estoy intrigado, sin duda
Chuusaku Kometani, estudiante promedio, 16 años, callado, Sin padres ni hermanos, no hay mucho rescatable... Me pregunto cómo pudo haber ingresado a este colegio
Shisuto Naurse "El narcicista", Bajas notas, 17 años, sin hermanos, vive con sus padres, problematico hasta cierto punto
Onemine Nene "el estorbo", vive con su madre y 4 hermanos, 17 años, buenas notas, hace trabajo comunitario, Excelente estudiante ¿Hasta qué punto podré tolerarla?
Ren Yamai, Callada, buenas notas, 16 años, sin hermanos, vive con sus padres
Agari Himiko, Callada, timida, 17 años, problemas de alimentacion, notas promedio, hija unica, vive con su madre
Kishi Himeko "la caballero", mentalmente inestable, Notas perfectas, alta, 18 años, Sin familiares La he visto un par de veces, supongo que para los estándares de este sitio podría ser una buena aliada
Inaka Nokoko, Timida, 16 años, vive en el campo, realiza trabajo comunitario, notas promedio, vive con sus padres y 8 hermanos. El vivo estereotipo de campesino pobre, por lo visto
Omoharu Nakanaka, Mentalmente transtornada, timida, callada, vive con su padre, 17 años, notas bajas
Sonoda Taisei, 18 años, fisicamente fuerte, calmado, notas promedio, sin familiares ¡Genial! ¡Un idiota al que podré confiarle el trabajo duro!
Shigeo Chiarai, 17 años, notas bajas, problematico, debil, vive con sus padres
Najimi Osana "Viejo amigo", timida, notas promedio, 17 años, vive alejada de sus padres, diversos traumas y trastornos diagnosticados. Me sigues pareciendo conocida...
Y Hitohito Tadano... tengo 17 años
Con eso era suficiente, aunque todavía faltaban por descubrir algunos casos documentados de los estudiantes, el tiempo le quedaría corto y a este paso, acabaría siendo descubierto por cualquiera que pasara cerca. Por lo que solo tomó unos cuantos archivos del escritorio del director y se dispuso a ordenar todo para no dejar ningún rastro.
Una estela de luz logró alertar al chico antes de ser atrapado, por lo que se escondió detrás del escritorio justo antes de poder ser avistado por uno de los guardias del lugar, quien solo pasó inadvertido por el pasillo.
Pasaron unos minutos y el azabache ya se encontraba fuera de la institución, alejandose rapidamente con algunas carpetas en la mano sin preocuparse por ser visto, dentro de la abismal oscuridad de las calles, nadie notaría a un adolescente de apariencia promedio.
Al llegar a su hogar, con cautela llegaría a su habitación y se recostaría en su cama, esperando a que el sueño se apoderara de él, fué solo cuestión de minutos.
****
A la mañana siguiente, el "promedio" se encontraba jugando con su lapiz a mitad de la clase sin prestar la mínima atención a lo que decía el maestro, era un vejestorio que parecía no tener alma, al final de cuentas nadie le daba importancia a sus palabras.
Hitohito estaba tan aburrido que prefirió ir al baño para matar el resto de la clase allí. los pasillos oscuros de la academia Itan estaban casi sumidos en un completo silencio, con el eco de sus pasos resonando de una manera escalofriante entre ellos, a mitad de camino, se topó con algo mejor en lo que gastar su tiempo; y es que fue grata su sorpresa al toparse con su viejo amigo, Osana Najimi. ¿Cómo había podido olvidarse de él? ¡Eran inseparables en aquellos entonces! Lo mejor de todo, se encontraba a mitad de los convenientemente desolados pasillos, al percatarse de su presencia, ella intentó evitarlo lo mejor que pudo, pero no fué capaz de evadir al "Chico promedio". Con Hitomi siempre encontraba la manera de suavizar su voz, de hacerse ver como una simple persona seria que prefería la soledad. Pero con Najimi ya no necesitaba esas molestas ataduras, ella debía ver las consecuencias de sus acciones, merecía ver lo que ella había contribuido a crear.
Tadano: ¡Nash! ¡Amigo sabía que algún día nos volveriamos a ver!
Najimi: .-Baja la mirada, acelerando el paso.- B-Buenos días
Tadano: ¿Qué pasa? .-Tomó a su examigo del brazo con fuerza, provocándo que soltara un leve jadeo.- ¿No te alegra verme? .-Su próxima víctima parecía perturbada, lo cual no pasó desapercibido para él, dibujándole una sonrisa cínica en el rostro.-
Najimi: Hitohito... Por favor solo déjame en paz .-Sin voltear a mirarlo forcejea para librarse del agarre.- Solo quiero olvidarte a tí y a todo lo que sucedió
Tadano: Típico de Najimi... .-Con una mirada seria la arroja hacia una pared.- Siempre elijes el camino dificil
Najimi: Urrgh n-no quiero problemas... ¿Bien? .-Aturdida se intenta levantar con movimientos torpes.-
Tadano: ¿Acaso no quieres charlar con tu mejor amigo? .-Se acercó hacia su antiguo compañero, quién seguía intentando levantarse.- ¿Eh?
Najimi: T-Tu y yo no somos ami-gos....-Dijo con voz quebradiza, anticipándose a un posible golpe de Hitohito.-
Tadano: Huh, que raro... Yo recuerdo que en secundaria era tu único amigo ¿Recuerdas?
Najimi: Solo... ¡S-SOLO DEJAME SOLA BASTAR...! .-Antes de poder siquiera terminar recibió un duro golpe del pelinegro directamente en la cara.-
Tadano: Oh, vaya Nash, eres igual de fragil que en secundaria, ¿Recuerdas esas cientas de veces que yo tuve que dar la cara por tí?
La pelirrosa apretaba su nariz mientras brotaba un característico líquido rojizo de ella, su visión terminó por nublarse casi completamente mientras un molesto zumbido inundaba sus oídos, nadie podía escuchar la pelea que estaba ocurriendo, el eco en los pasillos proveniente de los golpes de su agresor se mezclaba perfectamente entre las decenas de voces dentro de las aulas. Gritar por ayuda sería un suicidio de cualquier modo.
Najimi: Basta... Basta por favor .-Murmura adolorida al borde del llanto.- ¿Por que me haces esto...? .-Esas palabras no resultaron más que música para los oídos de Hitohito, quién no pudo evitar reírse de su indeseable situación.-
Tadano: ¿Por que te hago esto? ¿No recuerdas nuestra "promesa"? ¿Aquella promesa que rompiste sin escrúpulos? ¡¿ESA FUÉ TU MANERA DE AGRADECERME TODAS LAS OCASIONAS EN LAS QUE TUVE QUE SALVAR TU INSERVIBLE E INMUNDO CULO?!
Najimi: Eso fue.... Ha-Hace 2 años... S-Solo olvídalo, por favor
Tadano: Hasta la fecha lo sigo pagando, ¿Lo sabes, no? Al final de cuentas, ¡Tú fuiste quién me arrastró a ese maldito mundillo de mierda y luego me abandono dentro de él!
Najimi: Se que fui una imbecil... pero ya es hora de...
Antes de terminar la frase, el puño del chico impactó justo en su abdomen, envíando a Osana al suelo por segunda vez. El sabor metálico de la sangre llenando su boca y un horrible sentimiento de impotencia inundaron la cabeza de la chica, quien ya estaba a punto de perder el conocimiento, pero, el pelinegro impidió que cediera, continuó golpeandola en todas partes, cabeza, brazos y estómago sin piedad alguna, llevaba años deseando sacar todo este odio que tenía guardado exclusivamente para su examigo, y este era el momento de deshaogarse. Pero, después de terminar su asalto físico, era hora del platillo principal.
Frente a ella, el chico sacó un par de fotos las cuales pudo distinguir dificilmente gracias a sus ojos extremadamente hinchados. Apenas pudo enfocar correctamente su visión, la pelirrosa abrió los ojos como platos al ver su contenido, lágrimas brotaban de sus ojos y una mueca de disgusto apareció en su cara.
Tadano: ¿Ves algo que te incomode, Nash?
Najimi: Pudrete... Pudrete ¡PUDRETE MALDITO DESGRACIADO!
Tadano: Mhm .-Hitohito soltó una risa burlona antes de continuar.- Este es el trato. De ahora en adelante harás lo que yo te ordene sin hacer preguntas. Serás mi perra faldera hasta que me harte de jugar contigo... Y a cambio no haré publicas estas fotos tuyas tan... Vergonzosas
Najimi: Eres un...Un...
Tadano: .-Extiende su mano, ignorando fríamente los sollozos de la chica.- ¿Tenemos un trato?
La pelirrosa lo miró con una mezcla de odio e impotencia en sus ojos, ante esto, el azabache la tomó por el cuello, no fué mucho trabajo levantarla hasta su altura para después estrellarla de nuevo contra una pared mientras ella luchaba por respirar.
Najimi: Ahh Suelta-me ¡N-No puedo...!
Tadano: Parece que no te ha quedado claro ¡¿Tenemos un trato o tendré que deshacerme de tí aquí y ahora?!
Najimi: Si... .-Continúa intentando zafarse del agarre del chico que no hacía más que fortalecerse más cada segundo.-
Tadano: .-La pelirrosa comenzó a golpear su brazo desesperadamente, en respuesta estrelló de nuevo su cabeza contra una pared.- No te oí, ¿Tenemos un trato?
Najimi: ¡SI! ¡SI CARAJO!
Finalmente Hitohito la soltó, dejandola caer al piso sin cuidado, ella se mantuvo en el suelo respirando pesadamente mientras sostenía su cuello que había terminado con un tono morado por la fuerza del agarre del chico. Ella deseaba regresar a su casa y encerrarse en el baño a llorar como hacía usualmente. jamás hubiera imaginado que aquel chico que solía considerar su mejor amigo, terminaría por dar con ella en algun momento.
Tadano: Entonces, espero no tener que hacer esto seguido, Nash .-Observa con asco a la pelirrosa, quién seguía en el suelo inmovil.- Y ponte de pie, no quiero acabar tan rápido con tu reputación aquí
Najimi: Si .-Logra levantarse con dificultad, aún sosteniendo su cuello.- ¿Y-Ya me puedo ir?
Tadano: Largo .-Comienza a caminar hacia el baño, dándole la espalda por última vez.-
Najimi: .-Aprieta sus puños con fuerza mientras lo mira alejarse.- Eres... Un monstruo, Hitohito
Fin del cap
JODER MAS DE UN MES PARA 1.4k PALABRAS QUE GANGA
perdon por... todo lo que esta mal en este cap, ultimamente he estado un tanto desganado, pero pronto me reactivaré
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