Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Parte Thirty One

Cuando corto la llamada, YiFan sonrió pensando en que lo que estaba apunto de hacer era arriesgado y polémico... Pero al demonio con eso, ChanYeol iba a perdonarlo después de todo.

— Kris por el amor de dios, reconsidera esto. Ni siquiera se lo quieres decir a ChanYeol, esto no pinta bien por ningún lado .— SuHo lo miraba fijo, con una mezcla de seriedad y preocupación palpables.

— ¿A casó quieres que me vaya sin hacer nada?.—Le preguntó, obteniendo como respuesta una clara cara de obviedad.

— ¿No es eso lo que hace la gente normal?.— Cuestionó JunMyeon enmarcando una de sus cejas.

YiFan viró los ojos.

— La gente normal SuHo. Yo me iré con estilo .— Afirmó con una media sonrisa y giro su rostro para ver el paisaje del cielo diurno y las nubes.

Dios. ChanYeol lo mataría. Si, lo mataría, lo enteraría y haría alguna especie de ritual vudú, solo para traerlo de nuevo a la vida y volver a matarlo. Pero el estaba tan ansioso por lo que haría, que ni siquiera podía dejar de sonreír al pensarlo.

SuHo a su lado solo quería lanzarse del avión y no vivir para contarlo. Lo que YiFan quería hacer era una locura. Ni siquiera sabe como es que termino ayudándolo en eso y para cuando el avión aterrizó de manera segura (mal para el) JunMyeon ya se había quemado los pensamientos y comido todas sus cortas uñas.

YiFan sin embargo, estaba muy relajado. Se levanto del asiento, tomó su mochila y avanzó hacia las escaleras con una seguridad que a SuHo le ponía los pelos de punta.

— Kris ¿estas seguro de esto?.— Volvió a preguntar por veintena vez, tomando su bolso y bajando detrás de el.

— Nunca he estado más seguro en mi vida.— Respondió YiFan sonriendo de manera brillante. Para luego levantar su barbijo hasta su nariz, colocarse unas gafas oscuras y bajar la víscera de su gorra. Debía cubrir su rostro lo mas posible. Nadie debía enterarse de su llegada.

JoonMyun suspiró rendido y oculto su rostro bajo una gran bufanda y gafas oscuras. Ya no había vuelta atrás. Solo haría su trabajo como amigo y ayudaría a YiFan a lanzarse a los lobos.

Ambos caminaron discretamente hasta tomar un radio taxi.

— Kris ¿por qué no se lo has dicho a ChanYeol?.— Preguntó SuHo colocándose el cinturón de seguridad.

YiFan se colocó el propio y giro su rostro hacia el lado de la ventanilla pensativo.

— Tratará de detenerme .— Respondió con una leve sonrisa.— Y hacerlo el mismo.

— ¿En serio?.— Cuestionó JoonMyun mirándolo sorprendido. — ¿Ambos están igual de locos?.

YiFan sonrió levemente y giro hacia el.

— ¿No es eso romántico?.

✎﹏﹏✎﹏﹏✎﹏﹏

MinSeok llegaba muy cansado de un largo día de trabajo. Había comenzado a hacer doble turno desde que había peleado con LuHan.

Lo hacia para distraerse y evitarlo obviamente. Pero al bajar de su coche, se sorprendió de ver que LuHan se encontraba sentado en su porche; a las cuatro de la mañana y con su mirada pérdida en la nada.

MinSeok comenzó a sentirse muy nervioso. No estaba muy seguro de querer escuchar lo que el menor quería decirle. Así que pensó estúpidamente, en que podía entrar por la puerta trasera y sin ser visto.

— Ni siquiera lo intentes.

MinSeok quedó paralizado en el pasillo que daba a su puerta trasera y giro de manera robótica para ver al menor.

LuHan no lo miraba, seguía con su mirada perdida en la nada y aparentemente tranquilo.

Por un momento, pensó en que tal vez había imaginado su voz. Pero eso era estúpido y MinSeok ya estaba harto de actuar o pensar de manera estúpida.

Se puso rígido y enfrento a su amigo como un hombre. Su mirada analizó el panorama y no supo como sentirse.

Era una noche helada; el no sentía mucho el frío por su uniforme y el abrigo encima de este. Pero podía notar por la nariz y las mejillas rojas de LuHan que el si, se estaba congelando. ¿Hace cuánto tiempo estaba allí?.

MinSeok sintió una terrible preocupación, pero no sabía como empezar ha hablar y mucho menos a invitarle a entrar a su casa. Se mordió el labio inferior indeciso.

LuHan finalmente giro a verlo. MinSeok se puso aun mas rígido, más, cuando el menor se levanto y comenzando a caminar hacia el.

— Vamos dentro. Si tanto te preocupa. — Dijo LuHan mirándolo directamente a los ojos.

MinSeok bajo la mirada y dejó de morder su labio. Mierda, ahora era cuando odiaba ser un libro abierto para el hombre ante el.

Pero no podía quedarse allí como un idiota toda la noche. Terminó cediendo y camino hacia su porche. Podía sentir la tensión obstruyendo su aire. Ni siquiera sabe quien esta molesto con quien, sólo sabe que LuHan por primera vez es consiente de sus sentimientos y eso lo aterra como el infierno.

MinSeok trata de relajarse y entra a la calidez de su hogar. Camina hacia el interruptor y enciende la luz de la sala. Extrañamente la oscuridad lo ponía mas nervioso.

LuHan lo sigue en silencio, el es quien cierra la puerta detrás de ambos. Actúa muy tranquilo para ser el LuHan que conoce.

MinSeok se quita el abrigo y camina hacia el pequeño armario junto a la puerta. De allí saca una percha y está colocando su abrigo en ella, cuando los fríos brazos de LuHan rodearon su cintura dejándolo congelado. Su corazón se agitó abruptamente.

— ¿LuHan?.— Su voz sale en apenas un murmullo.

— No digas nada. Solo responde una pregunta. — Dijo LuHan hundiendo su rostro en el hueco de su hombro y cuello. MinSeok ahogó un jadeo de sorpresa — ¿Desdé cuándo?.

MinSeok trago saliva y bajo la mirada al piso. Sentía a su corazón bombear fuertemente en su pecho y el silencio alargándose no hace más que asustarlo.

— No sabría responder, siempre te quise demasiado...— Susurró y se dio valor para seguir hablando. — Por lo que no sabría decir cuando mis sentimientos pasaron la linea.— Cerró los ojos .— Lo siento.— Alegó con una pequeña sonrisa amarga.

LuHan se mantuvo en silencio por casi un minuto. MinSeok comenzó a sentirse cada vez más nervioso.

— No debes disculparte.— Murmuró LuHan recargando su barbilla en su hombro.— MinSeok... — Susurro LuHan y sus brazos de lo pegaron más a su cuerpo, como si no quisiera soltarlo nunca más. — Maldita sea, MinSeok. — Gimió LuHan con voz lastimera.— No quiero perderte, pero tampoco puedo corresponder a tus sentimientos...— Farfulló esto último suavemente. — Seria incapaz de lastimarte de esa manera. No se que hacer.

MinSeok observó como las manos de LuHan se aferraban a su cuerpo. Era tan reconfortante sentir su calor de esa manera. Pero no estaba bien, LuHan no lo hacía porque lo quería como amante, mas bien, se aferraba a el como lo haría con su amistada... LuHan simplemente no quería perder su amistad.

Con cuidado, MinSeok deshizo el agarré de su cuerpo. Respiro profundo y se apartó del abrazo, girando para poder mirarlo directamente a los ojos.

LuHan clavo inmediatamente su mirada a sus zapatos, con su flequillo tapando sus ojos.

— Jamás espere que me correspondieras.— Confesó MinSeok apretando suavemente sus manos.— Pero es difícil tenerte así de cerca... No te das una idea de lo mucho que me afectan tus afectos de cariño. Me vuelven estúpidamente feliz, pero a su vez duelen como el infierno. No puedo seguir así LuHan, es por eso que te lo he dicho, yo no...

— No me has dicho nada.

— ¿Disculpa?.— MinSeok lo miro sorprendido.

LuHan levantó su mirada y lo enfrentó decidido.

— Yo no he escuchado nada sobre eso salir de tu boca, MinSeok.

MinSeok analizó el rostro de su amigo. Sin comprender su punto. No sabia si el menor quería que se lo dijera con palabras claras o quería que nunca lo hiciera. Fue confuso, pero optó por lo más correcto.

— Te amo, LuHan.— Lo dijo sin titubear y no supo descifrar la expresión en el rostro del menor. Pero algo le decía que era la segunda opción.— No estoy esperando nada a cambio. Solo quería quitarme este peso de enzima. Era un peso que cada día se volvía más sofocante y realmente pensé que me volvería loco.— Sonrió con amargura. — Irónicamente, ese peso aumento de intensidad, pero se que pasará con el tiempo.

El ceño de LuHan se fruncio en confusión.

— ¿Por qué hablas en pasado? ¿A qué te refieres?.

MinSeok lo miro a los ojos.

— Ahora que te lo he dicho. Siento que puedo seguir adelante. Tal vez, si solo... Si ahora solo intentó olvidarlo...

— ¿Estas insinuando que ahora puedes olvidar ese sentimiento, solo por que me lo has dicho?.— LuHan parecía escéptico.

— No con exactitud, pero si lo intento...

— MinSeok... — Susurro apenas audible LuHan y su mirada se clavo en el piso. — No se como sentirme al respecto.

MinSeok parpadeo confuso y se sintió terrible al caer en la cuenta de la situación.

— LuHan, lo siento. Esto debe ser muy confuso para ti y yo hablando tan estúpidamente. Soy un egoísta... Solo, solo olvidalo ¿si?.

— Claro, porque es tan fácil de olvidar esto.— Una risita sarcástica surco en los labios de LuHan, cuando viro los ojos.

— Lo siento.— La mirada de MinSeok bajo al suelo con tristeza. — Realmente no se que decirte ahora.

— MinSeok.— MinSeok arqueo sus cejas hacia arriba y abrió sus ojos sorprendido, cuando las manos de LuHan levantaron su rostro con delicadeza.— Sólo vuelve a ser tu, MinSeok. Detestó esta tensión que se a formado entre nosotros. Vuelve a ser mi amigo de siempre.

El nudo en el estómago de MinSeok se volvió aun más pesado, su garganta se seco y sus ojos castaños destellaron en tristeza.

— Lo siento.

— ¿Por qué te sigues disculpado?.

✎﹏﹏✎﹏﹏✎﹏﹏

Volvía a ser de día nuevamente y ChanYeol seguía aislado como si cargara alguna enfermedad contagiosa e incurable. Pero esta vez no estaba molesto por eso, es más, se sentía feliz, hoy era el día en que finalmente tendría a YiFan.

ChanYeol estiró su cuerpo al levantarse de la cama y bostezo con una sonrisa. Animado, comenzó a caminar hacia el baño distraídamente; una vez allí, se miro al espejo y no pudo evitar decirse lo atractivo que estaba ese día. Sonrió por lo estúpido que fue y comenzó a asearse.

ChanYeol sentía su pecho llenarse de amor, al pensar en su pareja. Dios, ayude a YiFan cuando lo tenga en frente. Había tomado una decisión y nada se la quitaría de la cabeza. Su cuerpo se estremeció de solo imaginarlo.

Volvió a sonreír y terminando de asearse, volvió hacia la habitación. Su camino termino frente al armario, en donde se quedo meditando que ponerse, hasta que decidió vestirse de manera casual. Después de todo seguía siendo YiFan quien lo visitaría y no al revés.

ChanYeol sonrió al colocarse una sudadera y decidió que limpiar la casa tal vez si era necesario... El timbre sonó, cuando aun acomodaba la sala. Eso lo puso un poco rígido pensando en la posibilidad de que fuera otro paquete anónimo y lleno de mierda homofóbica.

Apretó los puños molesto; Victoria no llegaba tan temprano, no había encargado nada de comer y YiFan normalmente avisaba antes de llegar. Así que no sabía decir que fuera uno de ellos.

El timbre volvió a sonar y término rindiéndose. Sea lo que sea, no le tenia miedo. Así que dejo la franela sobre la mesa y camino hacia la puerta.

Antes de abrir, peino sus cabellos castaños hacia atrás y acomodó un poco sus ropas. Debía estar bien por si se llegaba a encontrar con alguna cámara. Al fin, abrió la puerta y no precisamente siendo amable. ChanYeol poseía una postura firme y rostro serio. Tanto que daba miedo.

— Supongo que no es un buen momento.

Los ojos de ChanYeol brillaron de felicidad al verlo, pero no solo era un brilló de felicidad lo que había en sus ojos. había algo, algo que al visitante lo puso en alerta.

YiFan lo analizo; la postura de ChanYeol seguía siendo firme, sus amplios hombros estaban rectos y su espalda erguida en toda su altura. Pero eso era lo de menos, lo peligroso era un brilló alarmante en los oscuros ojos de ChanYeol.

Era inevitable no sentirse ligeramente en peligro. Algo en su cabeza le advertía sobre el riesgo de cruzar esa puerta. Kris estaba por hablar, cuando una de las manos del menor rodeo su muñeca con un poco de fuerza innecesaria.

— Bienvenido, mi amor.— Lo saludo ChanYeol mirándolo directamente a los ojos y sus dedos acariciaron la manga de su camisa.

Kris no quería admitirlo, pero ahora no quería pasar dentro y estar a solas con ChanYeol. No cuando este parecía haber estado encerrado en un jodido gimnasio y no en su casa. Porque podía jurar que se había vuelto mas fornido.

— Romeo, estoy jodidamente feliz de verte, pero recordé que debo ir a...

ChanYeol soltó una risita y tiro de el hacia adentro. Y repite, con una fuerza innecesaria.

«Demonios» Pensó YiFan cuando al cerrar la puerta, ChanYeol lo acorraló contra está.

— YiFan...— Kris se estremeció hasta la médula, al oírlo hablar tan malditamente grave, en su oído.— Te extrañe.— Ronroneo.

Ahora la respiración de ChanYeol acariciaba la piel de su cuello, como una brisa eléctrica. YiFan trato de recobrar la compostura y de ser posible, la dominancia también.

— Romeo, ¿qué mierda haces?.— Recriminó, colocando sus manos en el pecho de ChanYeol para apartarlo de su cuerpo.— Con un jodido "Hola" estaba bien.— Alegó y arrugo su nariz con disgusto.

— Hyung.— YiFan se pego mas a la puerta al encontrarse con los filosos ojos de ChanYeol.— ¿A qué le temes justo ahora?.

A Kris no le gusto en nada, la media sonrisa burlesca en los labios del menor. Se puso recto ante el y lo enfrentó con una mirada penetrante.

— ¿Yo?.— Soltó una risita chula y se cruzó de brazos.— Yo no le temo a nada, ni a nadie.— Espetó con seguridad.

— Hm...— Una de las fuertes manos de ChanYeol se poso firme en su cadera.-— ¿Estas aseguró?.— Cuestionó tirando de el, para unir sus pelvis.

YiFan quedó bastante sorprendido y su estómago se revolvió con un sorpresivo deseó. ChanYeol se estaba comportando como un idiota y solo dios sabe lo que eso significaba para el.

Su respiración se comenzó a agitar y sentía su piel hormigonear bajo sus ropas. Mientras que su corazón golpeaba su pecho de manera exaltada. Joder. Por un demonio. No podía negar que esa actitud del menor lo ponía caliente, pero...

— Ni lo pienses.— Espetó YiFan mirándolo fijamente.

ChanYeol sonrió socarrón, y se inclinó hacia su rostro divertido. Eso lo hizo sentir incomodo y estúpido.

— ¿Pensar en qué?. — Ronroneo ChanYeol sobre sus labios y dio un suave apretón en su cadera insinuante.

YiFan se estremeció, y su garganta se secó ante lo ardiente que le estaba resultando toda esa mierda del gato y el ratón.

Una sonrisa ladina apareció en sus labios. En un intento de complacer a su pareja; ladeó su cuello levemente. Los labios de ChanYeol no tardaron besarlo, acariciarlo y repartir suaves besos por su extensión.

YiFan podía sentir la respiración agitada de ChanYeol retumbar en sus oídos. Como también podía sentir, como su sangre hervía en sus venas con lujuria.

— Romeo...— Kris se sorprendió de si mismo y ChanYeol se detuvo para mirarlo con el mismo asombro en su rostro.

— Por dios, YiFan.— La voz de ChanYeol fue profunda y ronca. Kris tembló en sus brazos, cuando rodeo su cintura.— ¿Ese, ese gemido... salio de tu boca? ¿acaso estás sonrojado?.— Cuestionó sorprendido, pero pasando del asombro, la mirada de ChanYeol paso a estar cegada de deseó.— Joder.— Tomo a Kris del brazo y lo arrastró por el pasillo, yendo hacia la habitación.

— ¡Wo, wo, wo! ¡para ese poni, Romeo!.— Gritó YiFan sujetándose del marco de la puerta, para no ser adentrado en la habitación.

ChanYeol se detuvo y giro para verlo con una de sus cejas arqueadas.

— ¿Qué sucede, mi amor?.— Cuestionó con un tintineo de inocencia.

— No lo se, dímelo tú.— Dijo sarcástico y se relajó un poco, solo un poco.— ¿Por qué me atacas tan de repente? Tú no eres así.

ChanYeol soltó su brazo y dejo ir un ligero suspiró. Al mirarlo a los ojos.

— No estaba en mis planes actuar así ¿vale?. — ChanYeol humedeció sus labios.— ¿Pero cómo lo dirías tú?.— Murmuró pensativo y sus ojos volvieron a brillar de manera lujuriosa, cuando pareció encontrar las palabras. YiFan tragó saliva, cuando el menor dio un paso hacia el.— Vulgarmente hablando; tengo a un hombre sexy en mi casa. Que además de ponerme con sólo una mirada. Gime de manera linda y se sonroja estúpidamente adorable, solo porque bese su cuello. Y bueno, digamos que eso, me puso como el infierno.— ChanYeol sonrió ladino y dio un paso hacia el.

Kris se enderezó, miro fijamente aquello profundos ojos ante el y humedeció sus labios. Dios, el podía escapar de esa obvia situación. Podía escapar con sólo dar media vuelta, pero algo en el no quería moverse.

Lo había extrañado tanto. Quería besarlo, quería tocarlo, quería acorralarlo contra la pared, pero no podía moverse... Su cuerpo actuaba de manera estúpida ese día.

YiFan aceptaba y aceptaría todo de ChanYeol. Hasta se había acostumbrado a todo eso de la cursilería y el romanticismo por el. Pero encontrar este lado de ChanYeol. Dios, lo puso como el demonio. No había nada de romántico o tranquilidad en el menor, es más, parecía estar controlándose para no lanzarse sobre el.

— ¿Dónde esta Park ChanYeol y qué has hecho con el?.— Bromeó YiFan llevando sus dedos a los botones de su camisa con una mirada insinuante.

Los ojos de ChanYeol siguieron el camino de sus largos dedos. Kris lo observó pasar saliva y una sonrisa triunfal surco en sus labios.

— Hyung.— ChanYeol se quitó su playera y la lanzo al piso, quedando solo con unos pantalones de mezclilla.

YiFan comenzaba a tener el control lentamente y eso le encantaba. Termino de desprender los botones de su camisa y ChanYeol ya se encontraba ante el, para deslizarla por sus hombros.

Kris se estremeció al sentir los fríos dedos de ChanYeol acariciar el camino de sus brazos.

-— Hyung...— Cuando su camisa toco el suelo. Una de las manos de ChanYeol paro en su rostro y sus ojos penetraron su alma.— Por favor.— Susurró juntando sus frentes y cerrando sus ojos.

Cada palabra fue un golpe eléctrico hacia la entrepierna de YiFan. Podía sentir como la respiración de ChanYeol se volvía cada vez más agitada. La mano libre de esté, ya recorría su torso desnudo. Acariciando su cuello, sus clavículas y rozando sus pezones. No pudo evitar estremecerse bajo sus caricias.

Nada de eso lo ayudaba a pensar con claridad. Kris había planeado algo, había planeado tentarlo y luego revertir los roles. Pero según entendió, ChanYeol también sabia lo que planeaba. Dios... Quería tomar a ChanYeol allí mismo.

YiFan salio de sus pensamientos, cuando sintió la respiración de ChanYeol jugar en su oreja. Se vio buscando más de esa atención, y el menor se la entregó con gusto. Acariciando sus brazos, jugando con sus cabellos y lamiendo su lóbulo.

Kris jadeo y se arqueó levemente, cuando los dedos del menor pellizcaron su pezón derecho.

ChanYeol susurró algo en francés y mordió el final de su oreja. Nunca entendía nada de esa mierda, pero la voz de ChanYeol en ese idioma, era la jodida gloria.

YiFan siguió disfrutando de las caricias y de esa húmeda lengua; que delineaba el filo de su oreja lentamente. Dejándolo escuchar cada maldito sonido erótico que hacia con su boca y su respiración chocando con su piel.

— Vamos, Hyung. — Jadeo ChanYeol buscando sus labios. Mientras que su mano libré recorrió de su pecho, hasta la sensual línea que sobresalía de su pelvis.— Ambos sabemos que lo deseas...— Alegó mordiendo su mejilla y presionando sus caderas.

YiFan soltó un suave suspiró. Observando como los dedos de ChanYeol habrían su cinturón con habilidad.

— Joder, ChanYeol.— Gruñó observando como abría el botón de su pantalón y el como sus cortas uñas rasgaban la piel de su pelvis con discreción.

Una vez que su pantalón quedo abierto, enseñando el elástico de sus boxer rojos. ChanYeol levantó su mirada hacia la suya y en un movimiento rápido, unió sus labios por primera vez en días.

Las manos de YiFan se aferraron en las caderas de ChanYeol y pego más sus cuerpos. Creando una fricción maravillosa en sus caderas.

Su lengua se introdujo dentro de la boca de ChanYeol y busco contacto con la adversa. ChanYeol imitó su gesto, pero deslizando su lengua sobre la suya y chupandola como si fuera un chupetín, al apartarse.

ChanYeol rápidamente lo tomo entre sus brazos con una palpable posesión. Sus manos recorrieron el camino de sus hombros hasta llegar a su espalda baja. Sus yemas quemaban en la piel de Kris. Provocando que esté perdiera la cordura. Su cuerpo se estaba rindiendo ante el mas joven.

YiFan arqueo levemente su espalda y gruño extasiado, cuando ChanYeol comenzó a mover sus caderas, con un vaivén lento y apretado.

— Romeo...— Kris sintió a ChanYeol temblar entre sus manos y lo miro a los ojos.— No debo decirlo ¿cierto?.— Cuestión dudoso y acalorado.

ChanYeol soltó una risita ladina y lo abrazó de manera asfixiante.

— No, no debes .— Susurro sobre sus labios. Luego sonrió y beso la punta de su nariz con ternura.— Pero si te muestras más cooperador, no me molestare.— Alego mirándolo expectante.

YiFan hizo una mueca de disgusto por el doble sentido y ChanYeol sonrió más amplio.

— Rompere tu bonita cara.— Gruñó Kris mirándolo directamente a los ojos.

ChanYeol lo ignoró y tomó su mano, entrelazando sus dedos en el trayecto hacia la cama. Una vez allí, se detuvo, giró hacia YiFan y tomo su rostro entre sus manos.

Kris lo miro extrañado y cualquier malhumor desapareció de su cabeza, al ver como ChanYeol lo observaba. Sus ojos poseían un sentimiento que lo hacia estremecer. No había rasgo de diversión en su mirada, solo había cariño, deseo y amor.

Todo tan malditamente cursi.

— Te amo.— Susurró ChanYeol acariciando su rostro.

Kris sintió un revoltijo en su estómago y no eran ganas de vomitar exactamente. Todo era más cálido y relajante. YiFan llevó su mano libré hacia el rostro del menor y lo miro con cariño.

— Has ganado, Romeo. Joder, has ganado con honores.— Una sonrisa tonta apareció en sus labios.— Estoy tan jodidamente enamorado de ti.

ChanYeol no comprendió a que se refería en un inicio, pero luego recordó la estúpida apuesta que tuvieron en secundaria.

— Supe desde el principio que ganaría.— Respondió de manera arrogante.— Pero no me lo has hecho fácil, gilipollas.— Susurró atrapando su labio inferior entre sus dientes.

Kris fruncio su ceño, pero no pudo decir nada cuando ChanYeol lo lanzo hacia la cama de manera brusca. Quedo tendido de espaldas y con sus piernas fuera de está.

Arqueo una de sus cejas y observó como ChanYeol le quitaba los pantalones de manera insinuante. Bien, todo iba bien, hasta que la caliente boca del menor beso su hombría por encima de la tela de los bóxer, mandando un fuerte escalofrío a su cuerpo.

YiFan gruño leve y aprecio en silencio como el menor bajaba su ropa interior. Dejando rápidamente a la luz su pene erecto.

ChanYeol humedeció sus labios observando el mismo y inclinándose, paso su lengua del tronco hasta la punta de su falo. Repitió el gesto hasta propinarle pequeñas lamidas a su glande. YiFan soltó el aire y se dejo caer en la cama.

La boca del menor rápidamente acobijó su miembro dentro de ella. El calor y la húmedas, provocó un espasmo en Kris, haciendo que levantara su pelvis en busca de mas profundidad.

Una de las manos de ChanYeol mantuvo sus caderas a raya, mientras comenzaba a hacerle una felación perfecta. YiFan se aferro a las sabanas y disfruto de la atención. Finalmente la lengua de ChanYeol dio una ultima lamida a su glande y termino de quitarle sus bóxer.

El pecho de Kris subía y baja en busca de mas placer. ChanYeol subió por su vientres con suaves besos. Deteniéndose en uno de sus pezones, el cual beso y rasgo con sus dientes.

YiFan cerro sus ojos, disfrutando todo a gran escala. La respiración agitada y la humedad de la boca de ChanYeol lo tenían tocando el cielo. En un momento, una de las manos de ChanYeol lo tomo de la cintura y lo subió más en la cama. No le dio mucho rollo, hasta que algo frío se aferro a una de sus muñecas y un tintineo estúpidamente familiar llego a sus oídos.

YiFan abrió sus ojos sorprendido, pero ya era tarde. ChanYeol había subido sus manos encima de su cabeza y las esposó, con unas esposas que no tenia idea de donde habían salido. Fruncio el ceño e intento incorporarse pero ChanYeol aferro sus manos al colchón con firmeza y lo miro con una sonrisita ladina.

— No, cariño.— Ronroneo ChanYeol y se inclinó hacia su rostro.— Aun no.— Alegó incorporándose un poco, para agarrar algo de debajo de su almohada.

Kris abrió sus ojos entre sorprendido y asustado. ChanYeol deslizo la fina tela oscura entre sus dedos y luego lo miro a los ojos.

— ¿Cómo es qué tienes eso?. — Cuestionó YiFan observando como acariciaba la tela del antifaz.— ¿Y esto?.— Alegó haciendo sonar las cadenas de las esposas en sus muñecas.

— Digamos que pensé en una forma de castigarte y bueno, llegue a esto.— Responde ChanYeol con una sonrisa maliciosa.— Usar tu propio método.

— Espera.— YiFan se alarmó.— ¿Qué más hay bajo la almohada mágica?.— Preguntó un poco inquieto por la respuesta.

ChanYeol parecía disfrutar verlo de esa manera y en un movimiento tranquilo deslizo su mano bajo la almohada. Sacando de allí un pote de lubricante, condones y otro pote que no reconoció. YiFan lucho para incorporarse.

— Vamos, Hyung.— ChanYeol se ubicó a horcajadas sobre el y lo inmovilizó de esa manera.— Sera divertido.

Y una mierda. YiFan veía en aquellos ojos el reflejo malvado de la satisfacción. ChanYeol quería castigarlo y dios sabe que ya lo había logrado. El susto que le provocó no era una broma.

— ChanYeol, enserio. Para esto.— Pidió sintiéndose vulnerable y estúpido. Ya que no solo estaba esposado como un corderito indefensos, sino que también estaba desnudo. Algo que ChanYeol parecía disfrutar mucho.

— Oh~ mi cielo.— ChanYeol se inclinó hacia el con el antifaz en las manos.— No lo hagas más excitante para mi.— La voz excitada y ronca del menor, le puso los pelos de punta.

YiFan se estremeció y ahogó un gruñido molesto, cuando ChanYeol tapó sus ojos con el antifaz. Genial, ahora estaba vulnerable, desnudo y ciego. Gimoteo en un claro berrinche y gimió cuando ChanYeol comenzó a masturbarlo con su mano.

Kris mordió su labio inferior para no demostrar lo mucho que estaba disfrutando de eso. Pero su cuerpo tembló de manera automática, cuando un liquido frío cayo sobre su pecho y un aroma embriagante comenzó a inundar sus sentidos.

— ¿ChanYeol?.

Las manos de ChanYeol comenzaron a esparcir aquella sustancia por todo su pecho, hombros y vientre. YiFan se arqueó cuando pellizco ambos pezones, provocándole gloriosas descargas eléctricas.

Joder. Su piel parecía más sensible. Hasta la suave y simple presión de los dedos de ChanYeol sobre su piel, le resultaba excitante.

Un gemido escapo de sus labios, cuando las manos del menor llegaron a su miembro. Bañándolo con aquel liquido, pero su cuerpo se tenso, cuando un par de sus dedos se hicieron paso por sus nalgas.

— Relajate.— Susurro el menor sin detenerse.— El aceité afrodisíaco hará su trabajo en unos minutos y prometo que lo hará más fácil para ti.

Kris soltó un bufido incrédulo. ChanYeol tenia todo fríamente planeado, tanto que hasta pensó en usar un afrodisíaco en todo su cuerpo. Y lo fastidioso era que los leves masajes en su torso, brazos y piernas lo estaban volviendo loco.

Su cuerpo gimoteo en contra de su voluntad y busco mas fricción con el caliente cuerpo del menor. En respuesta, obtuvo los labios de ChanYeol sobre los suyos. Besándolo de esa manera lenta y profunda que solo el lograba ejercer sobre el.

La lengua de ChanYeol recorrió su boca a la par en que sus manos masajeaban su pecho y movía su pelvis deliciosamente. Kris gimoteo por el placer y jadeo de manera vergonzosa en la boca del menor. Joder.

ChanYeol no pareció inmutarse, seguía besándolo de manera apasionada. Su respiración profunda retumbaba en sus oídos y el chapoteo de sus lenguas al rosarse lo volvían loco.

No podía ver nada, por lo que sus sentidos volvía el sonido mas insignificante, el más fuerte. No quería admitirlo, pero no creía durar demasiado y eso era un problema. Era un problema porque no quería terminar sin haber siquiera tocado al menor.

— ChanYeol.— Lo llamó estremeciéndose cuando este se ubicó entre sus piernas. Un grave gruñido fue su respuesta. — Quitame las malditas esposas.— Pidió moviendo sus muñecas y haciendo sonar las cadenas.

Mala idea. Su cuerpo sufrió un gran espasmo al oírlas y se removió bajo ChanYeol. Dios, se sentía tan estúpido.

ChanYeol en respuesta, chupo y mordió sus labios, antes de bajar y hacer lo mismo con su barbilla y cuello. No paso mucho para sentir uno de sus dedos prepararlo lentamente. Su cuerpo no se tenso ante eso, es más, estaba tan malditamente relajado que le resultaba absurdo. ¿Qué le había hecho?.

Kris arqueó su espalda, cuando un segundo dedo lo invadió y un tercero, provocó que sus piernas se abrieran aun más. Los labios de ChanYeol no dejaban de besar cada rincón de su cuerpo y eso no lo dejaba pensar con claridad. Se removió inquieto, cuando más espasmos lo invadieron, haciéndolo gruñir de lujuria.

Podía sentir el pecho desnudo de ChanYeol subir y bajar por respirar de manera profunda. Sus jadeos eran bajos gruñidos y su respiración agitada golpeaba su piel como un estimulante. No soportaría mucho más.

— ChanYeol, no creo... No creo durar demasiado.— YiFan humedeció sus labios ansioso y avergonzado. Dios, que estúpido debe verse en ese estado.

ChanYeol retiró sus dedos y se aparto un poco de su cuerpo. YiFan sintió el frío azotar su piel y suspiro.

— ¿Sabes lo que es más excitante de todo esto?.—Preguntó ChanYeol con su voz ronca y quitándose los pantalones.

— ¿Torturarme? ¿dejarme en ridículo?.— Había un tintineo de molestia en su voz.

ChanYeol sonrió divertido y dejo sus pantalones y su bóxer en el piso. Luego cogió un condón y abrió el paquete con sus dientes, mientras admiraba la figura hermosamente revuelta de YiFan. Por un jodido demonio. Nunca imaginó que ese hombre de apariencia chula podría verse tan lascivo y erótico.

Su piel brillaba bajo la luz tenue que entraba por la ventana. Sus cabellos desordenados y que apuntaban en todas direcciones, era atractivo y tierno. Ni hablar de su postura; tendido boca arriba en la cama, con sus ojos vendados, sus manos esposadas sobre su cabeza, y lo mas excitante, su pene plenamente erecto, brilla por su presencia.

ChanYeol término de colocarse el condón y volvió a ubicarse entre las piernas de su amante. Parecía estar hipnotizado por aquella imagen.

— Puedes...— ChanYeol aclaró su garganta.— Puedes ubicarte mas al centro.

YiFan fruncio el ceño y refunfuñando se removió hasta estar bien ubicado sobre la cama.

— ¿Feliz? ¿o quieres que... ¡Gilipollas!.— Gruño finalmente, cuando sin una pizca de piedad, ChanYeol se hundió en su interior. En — Bastardo. Juro que te mataré. Lo juro. — Siguió gruñedo. Pero ChanYeol ya había escuchado esas amenazas.

— Lo mas excitante de todo esto YiFan; es saber que eres y serás solo mio.— Ronroneo ChanYeol al salir lentamente de el, pero dejando la punta dentro.— Es saber que solo te entregas y te entregaras a mi...— Volvió a hundirse sin previo aviso y logro que Kris se retorciera de placer.— Es saber que solo yo veo y veré este lado tuyo.— Salio nuevamente, hasta la punta.— Es saber que solo te removerás y gozaras bajo mi cuerpo.— Volvió a entrar en el, pero esta vez dio de lleno en su próstata. YiFan gimió alto y se aferro a la poca tela que sus manos lograron agarrar.— Saber todo eso, cariño... Me pierde, me excita y me enloquece al borde del delirio.— Gruñó comenzando a embestirlo de manera asfixiante y brusca.

YiFan arqueo su espalda y abrió su boca, dejando escapar el gemido mas largo de su vida. Maldijo y se removió de placer. ChanYeol daba en su próstata sin piedad y devoraba sus labios con hambre. Joder, tan excitante. Ni siquiera podía quejarse por las palabras anteriormente dichas por el menor.

La cama seguía el ritmo de sus cuerpo y las paredes amortiguaban los sonidos eróticos que salían de sus bocas. El chapoteo insistente de sus cuerpos al chocar, lo hacia sonar mas vulgar de lo que realmente era. Joder, YiFan arqueo su espalda cuando finalmente se corrió entre sus vientres y ChanYeol mordió su hombro, cuando su propio orgasmo lo azoto.

Kris se quejó por el dolor y ChanYeol sonrió satisfecho, antes de tomar impulso y apartarse del cuerpo del mayor. Se tumbo a su lado y con una tonta sonrisa en su rostro.

YiFan aclaro su garganta antes de hablar.

— Señor, te follo mientras te confieso mis secretos más egoístas ¿no te estas olvidando de algo?. — Preguntó sarcástico.

ChanYeol soltó una risita, ante el divertido sarcasmo y se coloco de costado. Admirando el perfil de YiFan, antes de quitarle el antifaz.

Kris parpadeo un par de veces, acostumbrándose a la luz y su ceño se fruncio de manera automática. ChanYeol lo tomo de la cadera y lo obligó a colocarse de lado. Quedando frente a frente. Sus miradas chocaron y la sonrisa de ChanYeol fue automática.

— ¿Estas bien?.— Le preguntó apartando un mechón de su frente.

— ¿Además de estar bañado en afrodisiaco, esposado y con dolores en lugares que no puedo mencionar?.— Cuestionó YiFan sarcástico.— Creo que podría estar mejor.— Alegó.

ChanYeol soltó una suave carcajada y deslizando una de sus manos por debajo de la almohada, saco una diminuta llave.

— Solo te soltare, si prometes no hacer nada en venganza.— Chantajeo enseñándole la llave.

YiFan refunfuño en chino, pero termino asintiendo.

— Claro, lo prometo.— Dijo y en un tono que alertó a ChanYeol.

— ¿Qué a sido ese tono?.— Cuestionó entre cerrando sus ojos.

— No se de que hablas. Quitame las malditas esposas.— Respondió con una sonrisa sospechosa.

Pos, claro que sabia de que hablaba. Porque con lo que tenia planeado hacer, ChanYeol definitivamente lo golpearía.

✍✍✍✍✍✍✍

(*゚▽゚)ノ Yoi, gente beia. Adivinen quien por fin consiguió en que poder plasmar su perversión.... Digo, imaginación (?)

(๑❛o❛๑) Bueno personitas bellas, se que ha pasado mucho tiempo y se que el cap no podrá recompensar la tardanza. Pero espero lo hayan disfrutado ฅ'ω'ฅ

Anteriormente había dicho que este podría ser el final, pero como no e podido subirlo antes, decidí que sera en el próximo capítulo. No prometo que sera largo, pero lo intentaré.
(^ω^) Gracias por todo.

Por cierto, Feliz día del trabajador personitas bellas (๑•o•๑)♡ Nos estamos leyendo ;)

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro