Autor: ¡Jaja! Dos caps de una, esa no se la esperaban ¿Eh?

Lector mas fiel: WTF? Vos quien carajo sos y que hiciste con el vago?

Autor: calla y disfruta

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El vehiculo volvio al almacen, Inko habia intentado desatarse pero sin exito, ella solo se retorcia cual gusano en su panico. El yakuza segundo al mando la habia agarrado listo para llevarla con el jefe, pero uno de los otros miembros del grupo aprovecho para preguntar.

Yakuza 2: ¿Por que estamos haciando todo esto de repente? El jefe no nos cuenta nada ¿Estamos bajo ataque?

Yakuza: *Suspira y asiente* Si, algo asi...

Yakuza 3: *apunta a Inko* ¿Y ella quien es, por que le importaba al jefe tenerla?

Yakuza: no tengo ni idea.

Yakuza 2: no nos tomes de idiotas, te tuvo que contar algo.

Yakuza: *Irritado* a mi tampoco me gusta nada de esto ¿Sabes? Todos conocíamos a los que murieron en el bar, pero si no te les quieres unir, hazle caso a Yukata-Sama el sabe lo que hace. (Espero)

Yakuza 2: *bufa y se encoje de hombros* bien.

Los otros 2 Yakuza se fueron y la mano derecha del jefe fue finalmente hacia la oficina del mismo, con la mujer peliverde cargada sobre su hombro cual saco de papas. Finalmente al llegar, Yukata se levanto rapido, acercandose a Inko y mirándole la cara de cerca.

Yukata: ...Si, es ella.

Inko: *Intenta decir algo pero no puede por que esta amordazada* mmm ¡Mmm!

Yukata: *mirando al Yakuza* bien es importante que la tengas cerca de ti en todo momento

Yakuza: ¿Por que?

Yukata: por que necesito que tu la...

Un par de horas mas tarde:

Los yakuzas ya estaban algo aburridos de esperar. Las defensas estaban colocadas, puertas cerradas con candados. Y barricadas. Muchos de los criminales miraban sus telefonos o jugaban cartas entre ellos. Sentian que todo esto era una perdida de tiempo. Algunos de hecho quisieron irse a casa pero sabian que probablemente el jefe se daria cuenta.

De repente el inconfundible sonido de un cristal rompiendose sono. Una de las ventanas se habia roto ¿Una piedra? No...al mirar hacia abajo vieron una lata con clavos y...¿Una mecha encendida? Solo pocos lograron cubrirse antes de que explotara violentamente disparando sus clavos hacia toda dirección.

No conforme con eso, mas y mas de esas bombas improvisadas iban entrando de manera desorganizadas por cada ventana del almacen. Los yakuzas se veian esquivando clavos dando saltos de cobertura en cobertura. Otros pocos simplemente se ponian en posición fetal rezando para que ninguno les diera.

Lentamente mas y mas cadaveres se iban acumulando en el piso mientras el sonido de las explosiones sonaba con eco entre las paredes metalicas del lugar, acompañado de los gritos de dichos criminales que se sentian como en un campo de batalla en una guerra... finalmente se detuvo. Los criminales rápidamente se cubrieron intentando atemder a los heridos.

Unos se iban sacando con dolor ellos mismos los clavos de las piernas, los brazos o incluso el abdomen y el techo. El mas desafortunado tenia uno en el ojo. Pero eso estaba lejos de ser lo peor. La puerta principal se abrio con otra explosion, su atacante no parecia preocuparse por la cautela. Los yakuzas ya muy alertas y nerviosos apuntaron sus armas y quirks hacia esa dirección pero...¿Nada? Solo un pedazo de papel volando con el viento.

De repente el "papel" se transformo en un gran hombre con gabardina, chaleco antibalas y sombrero marron frente a ellos...lo mas destacable era esa ametralladora ligera que el desconocido sostenia, los criminales no tuvieron tiempo a reaccionar cuando tuvieron que cubrirse nuevamente. Las balas volaron cortando el aire y todo lo que se interpusiera en su camino.

Madera, metal, piel, carne y huesos. Los casquillos ya vacios caian al suelo y rebotaban en una sinfonia de muerte. A pesar de su tamaño y de tener un arma tan pesada en brazos Daichi se movia de lado a lado de manera impredecible. Mientras menos yakuzas quedaban el detective disparaba menos, dando cortas rafagas de 2-3 disparos para ahorrarse municion. A los que estaban muy heridos para contraatacar los remataba aplastandoles la cabeza de un pisoton o golpeandolos con la culata de su arma.

Sus movimientos eran todos calculados pues a mas de una de sus victimas las atacaba por la espalda aprovechando tanto su quirk como las coberturas que ellos mismo pusieron. El hombre finalmente quedo en completo silencio viendo a su alrededor...solo habia sangre y cadaveres llenos de agujeros. Algunos aun tenia leves movimientos post-morten y otros incluso aun sostenian sus armas por lo repentino de sus muertes.

El hombre aprovecho su leve momento de paz para Recargar su arma...luego, siguio avanzando hasta que sus ojos captaron algo que a el no le gusto para nada el unico Yakuza que quedaba vivo tenia a Inko justo delante de el, agarrada en una llave y con una pistola contra la cabeza de la mujer.

Yakuza: ¡Manos arriba o la mato!

Daichi no tuvo de otra que aceptar la demanda, dejo caer su ametralladora al suelo y subio sus manos lentamente por encima de la cabeza. De fondo se escuchaba un vehiculo encendiendose... claramente era Yukata preparandose para huir. La situacion parecia muy muy mala por todas las partes. Inko miraba fijamente a Daishi mientras contra su voluntad iba retrocediendo, agarrada aun por el yakuza que sin dejar de apuntarle a la cabeza iba dando pasos hacia atras.

Daichi hizo un leve gesto con la cabeza mirando fijamente a los ojos de la mujer. El movio su cabeza hacia adelante y luego con fuerza oara atras. A pesar de que le tomo varios costosos segundos Inko finalmente entendio que queria. Imitando el gesto de manera mucho mas rapida y violenta La pecosa le dio un cabezazo en la nariz a su captor. El yakuza quedo aturdido un momento y disparo por que se le escapo el dedo.

Daichi saco una pistola rápidamente de su gabardina y dio un tiro directo a la Cabeza del Criminal. Corriendo y atrapando a Inko antes de que caiga al suelo. Se escuchaban de fondo sirenas de policia y la Furgoneta del dicho Yukata que probablemente ya daba por muerto a su propia mano derecha y se decidio a escapar solo. Daichi tuvo pocos segundos para pensar y lo que decidio fue tomar a Inko en brazos y cargarla fuera del edificio.

El detective puso a Inko rápidamente en el asiento de copiloto, ajustandole el cinturón de seguridad y se sento el mismo en el de conductor acelerando el vehiculo con fuerza. La Peliverde estaba soltando quejidos cada vez mas fuertes y violentos por lo que Daichi finalmente le saco la cinta que le impedia hablar

Inko: *Alterada* ¡¡¿A donde carajo me llevas?!!

Daichi: *Sin dejar de manejar* Los heroes y la policia estan al caer y aun no atrapo al cabecilla de todo esto.

Inko: *Molesta* ¡¿Pero por que me llevas contigo?!

Daichi: es mejor que no estes en una escena del crimen tan sangrienta, puede ser muy sospechoso

Inko: *Furiosa y nerviosa* ¡¡¡ESTABA ATADA DE PIES Y MANOS MALDITO IDIOTA!!! ¡¡¿Como es eso mínimamente sospechoso de que yo mate a todos esos yakuzas?!!

Daichi: *Aun manejando y ya algo irritado* ¡Ok, ok, Lo siento por intentar no dejarte con ninguna situacion dificil de explicar a las autoridades o a tu hijo!

Inko: *Bufa entre aún enojada y con Claro panico*

Mientras el auto seguia llendo a Una velocidad peligrosa finalmente se cruzó con la Furgoneta de Yukata. Daichi no dudo ni un segundo en embestirlo levemente por la parte de atras. Esquivando otros vehiculos y manteniendo una Persecucion urbana.

Inko: ¡¡¿Estas intentando matarnos?!!

Daichi: *Girando rapido el volante* No, solo a el.

Inko: ¡Pero no me metas a mi en tus locuras!

El detective ignoro las quejas de la mujer a su lado y siguio presionando a la furgoneta. Se escuchaban de fondo algunas patrullas de policia que probablemente despues del tiroteo los perseguían a ambos. Finalmente el hombre logro su cometido, Obligo a Yakuta a salirse de la Urbanización y meterse por el camino hacia los bosques a las afueras de la ciudad.

Una vez asi, Daichi asomo la mano por la ventana y empezo a disparar su pistola con una mano mientras con la otra sostenia el volante. Gasto casi todo el cargador pero logro finalmente acertarle a las dos ruedas de atras, obligando a Yukata a detenerse. Daishi entonces tomo su revolver 357 magnum de la guantera y miro a inko.

Daishi: *Saliendo del vehiculo* No te muevas, volvere.

Inko: *Retorciéndose en el asiento de copiloto* ¡Al menos desatame!

Nuevamente el Hombre ignoro la peticion de Inko saliendo del auto con su arma en la mano se acerco de manera muy cautelosa pues sabia que lo que venia no seria nada facil...El tigre y Yukata salieron finalmente de un salto. El jefe yakuza ahora usaba su quirk, teniendo una forma de tigre Antropomorfico. Daichi intento dispararles pero ambos felinos se movian muy rapido a 4 patas y en patrones cordinados pero erraticos, haciendo que el detective falle.

Mientras Yukata en su forma de tigre distraia momentáneamente al hombre. Su mascota aprovecho para darle un ataque por la espalda. Daichi logro evitar que le de de lleno, pero la espalda de su gabardina tenia las marcas de rasguño por las afiladas garras de la criatura. El jefe yakuza y su bestia daban vueltas al Humano, buscando el momento perfecto para atacarlo. Ya habia disparado 5 veces, solo quedaba una bala...solo un ultimo cartucho mantenia al detective de pie, como una especie de muro invisible.

Los dos tigres esperaban su momento, un fallo mas y seria el final, tendrian su momento, saltarían sobre el y le arrancarían la garganta de un solo mordisco...pero entonces algo paso... Daichi se dejo caer al suelo boca arriba...una posicion que en el reino animal te dejaba indefenso, Vulnerable. Yukata sabia que esto era una trampa. Pero el tigre no fue lo suficientemente listo.

Salto al ataque sobre el hombre. Su mandíbula abierta y sus garras en forma de gancho listas para destrozar la carne. Sin embargo eso no llego a ocurrir, pues si bien el felino era increíblemente rapido, la polvora lo era mas. El tigre murio en el aire, antes de tocar el suelo. Su salto al ataque termino en que por el impulso, el ahora cadaver del animal cayo al otro lado del detective en lugar de sobre el.

Por su lado Yukata tenia los ojos abiertos como platos y los pelos de su pelaje herizados. Mirando fijamente el craneo de su mascota. La herida estaba ahi, era innegable. Un agujero visible en la cabeza del animal, por muy resistente que sea, no había posibilidad de que siga vivo. Al criminal se le calento la sangre hasta el punto que le dolia.

A pesar de siempre quererse hacer el duro frente a sus lacayos o sus victimas. Ver asi al animal con el cual habia compartido años de su vida era un dolor en el corazon imposible de ignorar, que hacia que las lagrimas se le escaparan. Siendo que lo habia criado desde una edad tan temprana que seria dificil diferenciarlo de un gato domestico. Sentia como si hubiera perdido a su propio hijo.

El shock rápidamente evoluciono, convirtiendose en tristeza y la tristeza en enojo...no, en Furia, una ira asesina que le carcomía hasta el ultimo centímetro del cuerpo. El instinto de autopreservacion habia desaparecido, el ya solo queria hacer daño, solo queria venganza. Se lanzo directo contra el humano, con un rugido que a la vez hacia de grito de guerra.

Daichi solto su revolver y saco en cambio de su gabardina el subfusil que traia guardado, disparo directo a la cara de Yukata pero aun asi el Jefe mafiosos logro clavarle las Garras en el antebrazo al detective. Daichi tuvo que vaciar completamente el cargador...pero finalmente la bestia cayo muerta. El se tomo un momento para resisparar.

Una vez calmado vio como Yukata volvia ahora muerto a su forma humana. El hombre se levantó recaomodandose el sombrero sobre la cabeza y moviendose con prisa hacia su auto. Alli se puso algo de agua oxigenada para desinfestar la heridas por los cortes y luego lo vendo todo para evitar que se desangre. El dolor era molesto, pero soportable.

Una vez curado el detective abrio la puerta de su vehiculo viendo a Inko quien seguia alli. El se apresuro en desatarla finalmente, las marcas por lo apretadas que estaban las cuerdas se veian en la muñecas y tobillos de la mujer. La peliverde no tardo en darle una mirada molesta a Daichi.

Inko: ya era hora *Frotandose las muñecas*

Daichi: *Suspira y se recuesta contra el auto* Lo siento por...meterte en esto...otra vez...no sabia que estabas en su guarida.

Inko: fue hoy mismo...casi diria que fue por ti, como de costumbre.

Daichi: *Se encoje de hombros y baja la mirada* ¿Que puedo decir? Siempre pasa eso...

Inko: ...

Daichi: deberias...irte. Esto termino.

Inko: ¿Estas seguro que termino?

Daichi: todos los que estaban encontra de tu hijo o su novia estan muertos, me asegure de eso...ya no estan en peligro y yo...*Apreta el puño y suspira* Me ire lejos...es mejor que Izuku no se involucre nunca conmigo...solo traigo violencia a donde voy.

Inko: *Ella mira para otro lado, pensando, su semblante parece mucho mas suave que antes* Hubo...una época en la que pense que estabas muerto ¿Sabes?...y a pesar de todo...me alegra ver que no es asi

Daichi: *Mira a Inko de reojo algo sorprendido, la mujer solia ser bastante fria o estar enojada con el desde...que eso paso*

Inko: *Suspira y mira hacia Daichi* Izuku va a ser padre, no se si de alguna manera te enteraste tu mismo.

Daichi: *Sorprendido* Wow...no...no lo sabia...Inko

Inko: ¿Si?

Daichi: ¿Por que me dices esto?...

Inko: esto es...de alguna manera un "Adios" ¿Verdad?

Daichi: *Su voz y su mirada se tornan melancolicas*...si...si, supongo que lo es.

Inko: me hubiera gustado que las cosas fueran mejores pero...de alguna manera creo que...con los años...te entendi un poco mejor.

Daichi: lo que hice no estaba justificado.

Inko: lo se, lo se... pero...Nunca quisiste nada de eso tampoco ¿No es asi?

Daichi: *Suspira pesadamente* ...No...

Inko: ...Ito.

Daichi: ¿Si?

Inko: antes de que te vayas me gustaria decirte que...Te perdono

El hombre miro a la peliverde con sorpresa...jamas esperaba esas palabras pero...le hicieron sentir un alivio imposible de describir, como si todo su cuerpo se hiciera mas ligero de golpe. No hicieron falta mas palabras. Inko y Daishi intercambiaban una mirada, una comprensiva y la otra de gratitud.

La mujer se dio la media vuelta y empezo a caminar para salir del bosque y volver a la ciudad dejando atras al detective que ahora se le notaba una leve sonrisa de esperanza. El se movio para revisar la furgoneta de Yukata, tenia un presentimiento bueno sobre lo que estuviera llevando el Jefe yakuza en su escape.

Sy instinto fue correcto. Daichi tuvo una sonrisa de oreja a oreja y un brillo en los ojos mientras miraba bolsos llenos de fajos de billetes, debia haber al menos 100 millones de yenes o incluso mas. El hombre no tardo ni un segundo y tomo todo su botin, guardandolo en su propio vehiculo. Daichi se sento en el asiento de conductor sintiendo como si el ambiente dentro de su auto fuera mas colorido que nunca.

El hombre tamborilio con su volante y acelero mientras se encendia un cigarrillo y miraba aun sonriente su pila de billetes. Tenia todo lo que necesitaba para alejarse y empezar una nueva vida desde cero, esta vez, mejor que antes, mejor que nunca...al fin...En paz, sabiendo que la poca gente que aun le importaba estaria a salvo sin el.

¡¡¡SOMOS BICAMPEONES DEL MUNDO PAPÁ!!! La puta madre como se sufrió ese partido, no les puedo decir nada a los colombianos (a parte de que se estaban re colando sin tickets los hijos de puta) pero jugaron re re pero re bien. En todo momento fue impresionante.

Volviendo a la historia. Ya se que en este capitulo no aparecio en ningun momentos la pareja que justamente protagoniza la historia, pero como ya se da a entender, esto es el final para Daichi (en esta historia) es decir, ahora nos centraremos bien bien en la pareja que tanto nos gusta y como pasaran por el embarazo y porsteriormente cuidar a sus peculiares bebes dragonicos.

Ya se que esto es una historia de ship y no de accion, pero ya que se va mi OC me queria despedir de el por todo lo alto y al que no le guste, que se joda. Sin mas que decir, nos vemos hasta dentro de dos meses...o dos dias o dos semanas, no se sabe, a veces me pinta escribir de la nada XD