No era agradable a los oídos de la pequeña escuchar los rayos que caían cerca de su casa, aun sabiendo que anda malo pararía sus oídos de zorro no soportaban mucho caos. Su cabeza parecía que iba a estallar de tanto ruido.

Uno de los tantos rayos le dio las fuerzas de hacerle caso y buscar un refugio, la protección de alguien más - ¡Papás! – sus gritos de su cuarto y por el pasillo al correr a la habitación de sus creadores en busca de refugio. Salto hacia la cama y se escondió entre las cálidas sabanas.

- ¿Qué pasa mi damita? -pregunto entre sueños- Ven, ponte al medio de los dos-

Gateo hasta colocarse entre sus dos padres, el hibrido acomodó a su cría para que los tres entraran en cama. Por otro lado, el chico de hebras cenizas giro su cuerpo para poder mirar a ambos individuos.

- ¿Qué pasa? -pregunto entre sueños.

-Los rayos, los rayos están haciendo mucho ruido para que ____ logre dormir, Dream -dijo tapando a la menor con las sabanas- Últimamente están muy movidas las tormentas-

-Todo estará bien mi amor, no pasa nada –

Los abrazos de los dos padres hacia su hija eran muy cálidos y protectores, emanaban buenas vibras. Sus ojos comenzaban a pesar y serrarse poco a poco.

-Recuerda esto ____ -levemente giro su cabeza hacia el de verde- Si alimentas el miedo logrará derrumbarte, sin embargo, si logras controlarlo podrás convertirlo en algo diferente-

- ¿Cómo en mariposas azules? –pregunto adormilada.

-En lo que tu quieras, tan solo se consiente que toma tiempo en aprender a manejarlo-

-Si... papá...-

-Tiempo... controlar mis miedos...-

Dolor de pecho.

Al incorporarse pudo notar la sangre que brotaba de su cabeza, su ropa sucia al igual que su rostro y manos, lo peor de todo es que de fondo se escuchaban los gritos de su familia tratando de controlar la situación.

Giro levemente su cabeza y pudo observar a esa semejante criatura de piel pálida, dientes afilados y garras largar. Esos ojos, esos mismos ojos rojos con sed de sangre.

Aquella cosa antes mencionada había salido desde el interior del huevo. Esa cosa no tendría piedad, no sabia que era y tomaría todo a su pasa para reclamarlo como suyo.

-No quiero que sufra más gente... no ellos, déjalos...-

Sus palabras eran apagadas por la falta de fuerza y sangre en su cuerpo, se lograba ver como la sangre comenzaba a recorrer y manchar partes de su ropa, trataba de pararse y ayudar a su familia, no los quería perder. Aun sabiendo que solo iría directo a su muerte si hacia eso.

1... 2... 3...

Esos fueron los pasos que dio para nuevamente caer al frio suelo, sintió como gotas de lluvia comenzaban a caer en su rostro, una tormenta se estaba haciendo presente en todo el caos. Sus ojos pesaban mucho, su vista nublosa y la sangre mezclándose con la lluvia no era una bonita forma de describirlo. Su estado era muy deprimente.

-Esto apesta... Clay, vete y busca un refugio -dijo al mirar como el pequeño se acercaba a ella y trataba de animarla- Ayúdalos, por favor. Creo que yo ya hice lo suficiente para poder seguir...-

Quedo totalmente inconsciente al terminar la oración, no iba sobrevivir por mucho tiempo si no lograba tener una atención medica pronto. Iba a morir.

La desesperación de despertarla le hacia saltar, mover e incluso morderla levemente, sin embargo, nada hacía resultado. Sin embargo, algo llamo la atención de nuestro pequeño amigo... una mariposa azul posada en el kitsune de la chica. La máscara de zorro blanco.

4... 5... 6...

Salto para llegar hacia el logrando observarla mas detenidamente su contenido, ¿Por qué se le hacia familiar? Lo iba a comprobar. Se lanzo dentro de esta y poco a poco comenzó a tomar forma.

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-¡¡CUIDADO!! ¡¡EL ARBOL!! –

El de hebras doradas logro tomar vuelo nuevamente con un individuo en sus manos, lo había salvado de una muerte segura. La flechas y fuegos artificiales no le hacían ningún daño a su piel, o a eso se le podía considerar piel.

- ¿Esa cosa es inmortal o qué? -se preguntó al tocar el suelo con sus pies- No veo que logremos hacerle nada, no tiene ningún rasguño-

-¡¡No encontramos a ____!! -exclamo agarrándose los cabellos- ¡¡Se supone que debe estar entre esos escombros, pero nada!! -

- ¿Qué? ¡¿Buscaron bien?! -

- ¡Si, Techno! ¡No encontramos ningún rastro de ella! -sus ojos se humedecieron- ¿Ahora que hacemos? Que tal si ese monstruo se la... -

-No pienses eso, ella es muy ágil e inteligente -respondió su compañero- No creo que se deje vencer tan fácilmente-

Las preocupaciones en ese pequeño grupo comenzaban a crecer poco a poco y la desesperación se apoderaba de ellos ¿Cómo harían para matar a esa cosa? No le afectaba para nada sus armas, era inmune a ellas, incluso si estaban bañadas por las pociones de nuestra protagonista no le hacían nada.

- Disculpen, pero ¿Pueden ayudarme? –

Esa voz se les hacia muy conocido, pero que extraño ¿No? Ya la habían escuchado hace unos segundos antes hablar y además estaba en vista de todos, aquel que dijo eso provino de sus espaldas.

Giraron sus cabezas para presenciar a un chico algo, polera verde, pantalón negro, botas marrones hasta las rodillas y una mascara blanco con una sonrisa marcada en ella; también llevaba un arne de la cintura para bajo que sostenía varios bolsillos. Cave aclarar que su ropa estaba sucia y algo manchada, pero sin ninguna sangrado o herida.

En su espalda cargaba a la menor totalmente inconsciente durmiendo plácidamente con su cabeza en el hombro de aquel hombre.

- ¿Quién demonios eres tú? -pregunto la persona que traía sus mismas características, la diferencia era la estatua y tono de voz.

-Luego las preguntas, por favor -aclaro al colocar a la fémina en el suelo y acomodarla- Tommy, dame tus vendas, Ranboo las botellas de agua y Techno la cinta adhesiva, soy consiente que lo traen en sus inventarios...-

La reacción de los mencionados era clara, había acertado en que traían. No se impusieron en dárselo, pues después de todo era para su compañera.

Logró parar y desinfectar el sangrado de su cabeza junto a las heridas de su cuerpo, aquella persona parecía que sabía muy bien cómo hacerlo. Cuando termino mira a los demás.

-Gracias, ella estará bien -dijo incorporándose del suelo y dirigir su mirada hacia esa cosa- Con que ahora estamos en el momento perfecto para destruirlo-

- ¿Qué cosa? –

-De verdad son un poco idiotas y me sorprende que yo mismo no me hubiera dado cuenta...-

- ¿Clay? –

- ¿Pues quien más? -alzó las manos- Soy el padre de ____, un gusto en conocerlos a todos de nuevo –

Se había alzado la mascara para presenciar mejor su rostro sonriente al ver las expresiones de sus presentes, notaban como algunos incluso abrían la boca por la sorpresa -Estoy agradecido que mi hija se halla topado con buenas personas en su trasladado aquí, gracias Philza- menciono inclinándose al estar frente al adulto, el cual solo retrocedió por la acción del verde.

-Y les devolveré la deuda matando esa cosa-

- ¡¿QUÉ?! -todos exclamaron al unisonó.

- ¿Qué? ¿Por qué no? -miró a todos con su rostro confundido. De su inventario saco un hacha de netherita encantada al máximo- Es un buen pago, además será bueno para mi mundo paralelo-

-No, no nos referimos que no lo mates, sino a que ¿Cómo vas a hacerlo? –

-Oh, es fácil -respondió con una sonrisa en su rostro, era una tacha para no demostrar lo preocupado y ansioso que estaba para ver los resultados, dado que a pesar de saber como derrotarlo no lo había comprobado del todo – Solo necesitaré que me ayuden en esto, lo mínimo. Estoy seguro que mi hija no querrá que terminen lastimados-

Todos intercambiaban miradas, hablaban en ellas. Llegaron a la conclusión de ayudar.

- ¿Qué es lo que tenemos que hacer? -

-Me gusta su determinación...-

-____, querida ¿Qué haces acá? -pregunto el hibrido ladeando la cabeza- Aun no es tu hora, ellos aun te necesitan-

-Lo sé, solo quise darte una pequeña visita, padre-

La menor se había aferrado en un gran abrazo al mayor, extrañaba esos cálido y feliz sentimiento.

Se localizaban en un bajo recuerdo de la fémina, su casa. Un lugar en donde la mayor parte de su vida, hasta cierta edad, había vivido ahí.

Un pequeño punzón en su pecho hizo que se separarán.

-Ya es momento de despertar -coloco un mano en tu mejilla- Pronto nos vamos a ver, cuida de tu padre, el esta un poco loco –

Su comentario le causo gracia, soltó una pequeña risita.

-Cuidaré de él, aun que sea una pequeña masita-

Tapó sus ojos con las mangas de su suéter, pues la luz del sol le estaba dando directo al rostro. Nuevamente el punzón en su mecho se hizo presente, alzo su ropa logrando ver el vendado perfecto que tenía.

Un nudo en su garganta.

Sabia exactamente donde había visto eso, además de que los doblados en las esquinas y el toque final de este, estaba claro.

- ¿Papá...? -

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((Gente, ya voy a terminar esta historia. La verdad planeaba hacerle un poco más corta, pero se me extendió sin querer, perdón xd))

((Gracias por los consejos para salir de mi bloqueo artístico, les doy mi kokoro uwu))

((Espero que fue de su agrado este capítulo, no olviden de comentar y darle una estrellita :D))

((¡Cuídense mucho! ¡Tengan cuidado al salir de casa! ¡Byeeee!))