Traducción del título: "Curaré tus heridas"

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Sanar las heridas tanto del alma mente y corazón, no es tan fácil como decirlo. Lan Wangji muy bien lo sabía.

Las primeras semanas viviendo en Yiling antes de iniciar el plan, Wei Ying sufría constantes pesadillas en las cuales padecía de gritos nocturnos. Lan Zhan, por petición tanto del niño más pequeño como de la misma Wei Qing, había optado dormir con su amado. Se dieron cuenta de que en su presencia se calmaría de inmediato, solo bastaba que le diera un vistazo y Wei WuXian se tranquilizaría.

No fue fácil, ni gratificante obviamente. Wei Ying estaba sufriendo.

La mayoría de las crisis consistía en intentos de autolesionarse, que gracias a los dioses evitaron todas las veces. Wei Ying se depreciaba así mismo, y a Lan Zhan le dolía escuchar las palabras de su amado hacia su propia persona como una basura.

No debía ser así. Para Lan Wangji, Wei WuXian es lo más preciado en el mundo, la persona más pura que existe, él debería ser catalogado como un tesoro universal.

Él intentaba con todo el esfuerzo del mundo hacerle saber que no era como pensaba. Que Wei Ying valía mucho, que él no tenía un precio porque es tan valioso que nada podría pagar su costo.

—Pero Lan Zhan, ¡estoy marcado, sucio! —sollozaba entre los brazos de Lan Wangji cada vez que sus crisis venían—..¡mereces alguien mejor que no tenga cicatrices! ¡mi cuerpo está sucio, ya no es puro!

Para Lan Wangji, independiente de lo que haya sucedido, Wei Ying seguía siendo el ser más puro en el universo. Él lo seguiría amado de todas las maneras posibles, nada lo detendría de amar a Wei Ying. Esté en el cuerpo que esté, tenga las cicatrices que tenga, sea hombre o mujer, sea casto o no, él lo amara incondicionalmente.

Por que es Wei Ying, y nadie más que Wei Ying.

—Wei Ying no está sucio. Wei Ying es la persona más pura del mundo...

Wei WuXian alzó la mirada con lágrimas en sus ojos, provocando que el corazón del Jade se estrujara. —Pero Lan Zhan, ellos me usaron. Ya no soy el loto blanco que alguna vez fui...ellos se encargaron de quitármelo...

Lan Wangji inclinó su cabeza, y besó la frente de su amado. Comprende o trata de entender la desesperación de Wei WuXian, al sufrir porque lo que deseabas entregar al dueño de tu corazón te fue arrebatado a la fuerza. Él sentiría lo mismo si le llegase a ocurrir aquello, jamás se volvería a sentir puro.

—No importa lo que haya sucedido. Amo a Wei Ying de todas maneras —pronunció mirándolo directamente a los ojos—...si hace sentir mejor a Wei Ying, esta es otra oportunidad. Nada de eso ha pasado...

Y, como si algo hubiese hecho clic en la mente de Wei WuXian, tanto sus ojos como boca se abrieron grandes. El brillo nuevamente reluciendo en ese precioso mar plateado, como siempre debió ser. —¡Lan Zhan, Lan Zhan!, ¡tienes razón, aún no ha pasado!

—Jamás ocurrirá. —Lan Wangji estrechó el cuerpo del menor entre sus brazos—..no permitiré que nadie más vuelva a lastimar a Wei Ying...

Las mejillas del niño más pequeño se ruborizaron adorablemente, desatando la cordura de Lan Wangji quien no se privó de besar aquellos apetitosos labios. Jamás imaginó que tendría la libertad absoluta para besar cuando quisiera a su amado. Y, saber que ahora tiene ese privilegio por supuesto no lo desaprovecharía por nada del mundo.

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Con el pasar del tiempo las pesadillas y gritos nocturnos disminuyeron en gran cantidad. Lan Wangji no sabe si fue a causa de aquella conversación, o porque realmente Wei Ying se está recuperando. Sin embargo, seguirá esforzándose para curar los traumas de su alma gemela.

Durante sus momentos a solas que son en su mayoría, Lan Wangji se encargaría de demostrarle a Wei WuXian lo valioso que es. Se encargaría de decirle que, aun con cicatrices en su alma él lo ama. Demonios, ama a Wei Ying tanto que piensa se volverá loco. —¡Lan Zhan, eres demasiado cursi! —carcajeó el menor con sus hermosas mejillas rojas.

Lan Wangji le regaló una suave sonrisa. —Mhm. Solo para Wei Ying...

Wei WuXian chilló escondiendo su rostro en las túnicas de su amado. Oh, eso fue bastante nuevo para Lan Zhan.

Desde que se fue con su alma gemela, sus blancas túnicas cambiaron a las tonalidades de Qishan: blancas con los bordados carmín, y el emblema del sol naciente en el centro. Claro que un diseño mejorado por la familia Wei, con el fénix resurgiendo de las cenizas, ya que será la nueva representación de QishanWei. Por supuesto el Segundo Jade las utiliza con orgullo en su pecho.

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Lan Wangji, para sanar el corazón de su Wei Ying, se ha dedicado ha cortejarlo como su amado se merece. Ha aprendido a hablar más, expresarse abiertamente, encontrar las palabras necesarias para llenar de elogios y dedicatorias a su alma gemela.

Vale la pena si cada vez recibe esa deslumbrante sonrisa, besos como recompensa y la risita más preciosa que ha escuchado en la vida.

También incluiría dentro de aquello, obsequios como horquillas o la famosa peineta como símbolo de desear peinar sus cabellos hasta que el blanco los cubra por completo.

Wei Ying merece ser cortejado como corresponde, dándole a saber lo muy valioso y amado que es.

El día en que al fin los Wen llegarían a su fin llegó. Lan Wangji respaldaba a Wei WuXian en todo momento. Lo hizo cuando el menor tocó su flauta con los ojos rojos. Cuando los cadáveres llegaron hasta los territorios de Qishan. Cuando sus ghoul atravesaron a Wen Xu. Cuando hizo a Wen Chao desgarrarse por la locura, como cuando asesinó a su propia amante. Lo hizo cuando se enfrento a Wen RuoHan, y lo hizo cuando la cabeza del hombre rodó por el piso del Palacio infernal, marcando el final de QishanWen.

No sintió remordimiento alguno cuando agitó a Bichen, eliminando los restos de sangre preparándola para volar. Luego con toda la dedicación del mundo, tomó a Wei WuXian entre sus brazos y se lo llevó lejos de ese asqueroso mar de cadáveres. Wei Qing enviaría a sus hombre para que hicieran la limpieza.

Fue mucho más rápido de lo que imaginó.

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Cuando se presentaron como la nueva Secta QishanWei. Lan Wangji jamás se había sentido tan orgulloso de ser de Qishan como en ese momento. Revelaron los crímenes cometidos por los verdaderos culpables. Las verdades salieron a la luz, los confinados fueron ejecutados, y desde entonces los días de paz llegaron.

Nunca se sintió tan satisfecho por presenciar la ejecución de una persona como cuando Meng Yao y Su MinShan murieron frente a sus ojos.

La única razón por la que Lan Wangji no cambió su apellido a Wei, aunque no lo hubiese dudado ni un segundo si no tuviese razones. Fue tanto por su padre como por Wei Ying. Su amado es tan, pero tan bueno que le insistió. —Sea lo que sea que haya ocurrido, sigue siendo tu familia Lan Zhan.

—Tú eres mi familia, tu familia es mi familia —respondió, como si fuese la respuesta exacta para zanjar ese tema.

Wei WuXian sonrió. —Lo sé. Sin embargo, ¿papá merece que borres ese vínculo con él?

Lan Wangji meditó. Si bien su relación con su padre en su vida pasada no fue de las mejores, ciertamente ahora había mejorado considerablemente ya que mantienen por obviedad comunicación. Además, Wei Ying y Lan Qinyue son también muy cercanos.

Entonces, no. —Él no lo merece... —Lan Zhan asintió—...padre no lo merece...

—Así es. Por eso, es bueno que mantengas tu apellido. Independiente de donde vayas, eres un Lan, por papá debes sentirte orgulloso de ello —Wei Ying le dio un casto beso que agitó su débil corazón—....no importa si no llevas mi apellido, igual estas considerado como Wei de todas maneras..

¿Cómo no iba a amarlo?, ¡Wei Ying es demasiado bueno para ese miserable mundo! Definitivamente cada vez se enamora más y piensa que debe protegerlo más aún.

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Había veces que algunos avances retrocedían. Era justo en noches que la pareja se dedicaba a demostrar su afecto. Todo marchaba bien, entre besos y suaves caricias sin segundas intenciones. Pero los recuerdos se disparaban en la memoria de Wei WuXian, y se alejaría bruscamente en busca de refugio. —¡No! ¡Aléjate no me toques!

Su mirada yacía en blanco con su vista desenfocada. Aunque Lan Wangji sabía que eran crisis de pánico por los recuerdos, no significaba que no doliera que su amado se alejara mirándolo como una amenaza. De todas maneras se tragaba su propia angustia, y con todo el amor que tiene solo para Wei Ying, se acercaría para abrazarlo y hacerle saber que nadie le hará daño.

—Está bien, estoy aquí. —dijo a unos pasos del menor—...Wei Ying, soy yo...no te lastimaré..

Wei WuXian parpadeó, deslizando su mirada en dirección al jade, el reconocimiento sería enseguida. —¿Lan Zhan? —se oía tan pequeño, pero de nuevo, diciéndose que debía ser el pilar de su alama gemela, Lan Wangji reprimía sus emociones.

—Sí. Soy yo, Lan Zhan...

Las lágrimas deslizándose por las mejillas de Wei Ying, eran la evidencia de la culpa que sentía en el momento. —¡Lan Zhan lo siento tanto!

Él gritaría lanzándose a los brazos de Lan Wangji llorando, pidiendo una y otra vez disculpas por algo que él no tenía culpa. —¡Perdóname Lan Zhan! ¿cómo fui capaz de confundirte con uno de esos bastardos? ¡Soy un completo idiota!

—Wei Ying no es un idiota. No es su culpa.... —Lan Wangji acariciaba la cabeza del más joven, suavemente—.....entre nosotros no hay necesidad de "Lo sientos" y "Gracias". Jamás estaría molesto con Wei Ying...

A veces las pesadillas consistían en los eventos ocurridos. Como la muerte de Jin ZiXuan y Jiang YanLi. La muerte de Wei Qing y los Remanentes Wen. Incluso, el dolor y miedo era tan mortificante que se creaba el ficticio escenario en el que Wei Ying vería a su precioso A-Yuan siendo asesinado por uno de los cultivadores.

Aquello desataba la histeria del menor en su totalidad. Reprochándose por ser débil, incapaz de proteger a su propio hijo. —A-Ying, eso no pasó. A-Yuan fue rescatado por Lan Wangji, ¿lo recuerdas?, tú hijo estaba a salvo con su padre...

Wei WuXian hipó. —L-Lo recuerdo. Lan Zhan me lo dijo, ¿verdad Lan Zhan?

Lan Wangji. —Así es. A-Yuan estaba a salvo en el Receso de las Nubes...

Lan Zhan a veces piensa en lo egoísta que fuedejando a su hijo solo para tomar la decisión de la propuesta que le hizo NieHuaiSang. Sin embargo, toda culpa quedó en el olvido cuando le explicó queaquel conjuro es de retroceso, es decir, retroceder el tiempo completo como sinunca hubiese ocurrido lo que ocurrió. Empezar desde cero.

El Segundo Jade mentiría si dijera que no sintió satisfacción cuando los ghouls de Wei Ying simularon ser las prostitutas que visitaba con frecuencia Jin GuangShan, siendo ellas mismas quienes le dieron una lenta, tortuosa e indigna muerte a ese degenerado.

—Muy bien chicas, pueden hacer lo que les plazca con eso —pronunció el menor con ojos rojos y una sonrisa sádicamente aterradora.

Bueno, cada quien obtiene lo que merece.

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Lan Wangji no se sorprendió cuando Wei Ying le pidió acompañarlo a la Secta Zhao en busca de cierta persona. Después de todo fue la única persona que no hirió de esa manera a su amado, y se encargó de mantener la dignidad de su alma gemela. A Lan Zhan podría agradarle si decidiera también proteger a su amor.

—Líder de Secta Zhao —saludaron ambos al hombre de expresión impasible. Aunque de todas maneras se detectaba lo desagradable que era.

—Mi nombre es Wei Ying, Wei WuXian de QishanWei

—Lan Zhan, Lan Wangji de QishanWei

El hombre ahora sí que tuvo cambio de expresión, a una de completo interés y vanidad. Claro que para Lan Wangji por supuesto que no pasó desapercibida. —¿QishanWei? ¿Eres el Primer Maestro Wei?

Wei WuXian asintió. —En efecto, Líder de Secta.

El hombre inclinó su cabeza. —Este se presenta como Zhao ZhenSheng, ¿A qué se debe su visita, Jóvenes Maestros de Qishan?

—He venido por su hijo, Zhao Zhuliu.

Las cejas de Zhao ZhenSheng se crisparon. —¿Hablan de ese hereje? ¿para qué querría el Joven Maestro Wei ver a esa escoria?

Los labios de Lan Wangji se presionaron en una línea recta. Wei WuXian, manteniendo la paciencia dijo. —¿A qué se refiere con hereje o escoria, el Líder de Secta Zhao?

Zhao ZhenSheng agitó la mano con ademanes, restándole importancia al asunto. Él respondió. —Es la desgracias de la familia, Jóvenes Maestros, ¡ese niño se ha convertido en un monstruo!

Wei WuXian se inclinó. —Si no es mucho pedir, ¿podría permitirme ver a Zhao Zhuliu?

El Líder Zhao pareció pensarlo unos momentos antes de acceder. Incluso les asignó unos discípulos escoltas para que los llevaran a. —¿La mazmorra?

—Por supuesto Joven Maestro Wei —el discípulo Zhao dijo—...Zhao Zhuliu es demasiado peligroso para dejarlo fuera de la mazmorra...

—¿Qué fue lo que realmente sucedió? —curioseó Lan Wangji, intercambiando miradas de entendimiento con su amado.

—Ah, Segundo Maestro Lan, no quisiera andar de hablador, pero —mirando hacia todas partes, el discípulo comentó—...se dice que los Líderes de Secta experimentaban con sus hijos; antes de Zhao Zhuliu había un hermano más, él no sobrevivió y su núcleo se destruyó con su vida, en cambio con Zhuliu resultó en un defecto. Tiene la habilidad de fundir núcleos dorados...

Wei WuXian presionó los puños detrás de su espalda. Lan Wangji notando aquello, sin importarle disimular tomó con su mano las del menor.

—¿Qué clase de experimente provocaría ese tipo de habilidades?

El discípulo agitó la mano. —El Líder de Secta Zhao encontró unos escritos de operación de núcleos para acelerar el proceso de crecimiento. Desafortunadamente no leyó las advertencias que afirmaban se trataba de una teoría, con menos de la mitad de probabilidades que funcionaría..

Wei WuXian se sorprendió ante ello. En su vida pasada, había leído sobre la operación de núcleos. Era una técnica prohibida, la única persona que fue capaz de dominar esa técnica, no, más bien quien creó aquella, ya está muerta. CangSe SanRen, su madre. Él estaba realmente impactado cuando supo aquello, por lo que investigó más sobre el tema logrando un considerable avance para poder llevar a cabo la técnica.

Se lo había comentado a Wei Qing, ella dijo que podría servirle hasta para poder formar nuevamente un núcleo dorado así que ellos lo pondrían en práctica. Desafortunadamente Wei Ying completó su investigación, dos días antes de la celebración del mes de Jin Ling y la teoría quedó en el olvido. Ahora que ha vuelto a resurgir, tal vez encuentre una manera de ayudar a Zhao Zhuliu si encuentra aquello como un defecto incómodo.

Wei WuXian no cree que alguien se sienta a gusto con algo que resurgió por una especie de experimento, llevándote a convertirte en un objeto que recibe constantes desprecios.

Cuando llegaron a la mazmorra, Wei Ying tuvo que sostener la mano de Lan Zhan para no caerse de la impresión. El hombre yacía atado de brazos y piernas con cadenas, luciendo lo más indigno que alguna vez lo vio. Tenía incluso marcas de azotes y cortes en los muslos expuestos. ¡Y qué decir de su torso!

—¡¿Qué demonios?! ¡¿Cómo se atrevieron?! —incapaz de contenerse, los ojos de Wei WuXian se tornaron carmesí. Comprendiendo su ira, Lan Wangji no intentó detenerlo cuando su amado con una fuerza descomunal rompió las cadenas liberando a Zhao Zhuliu.

Aquel ruido llamó el alboroto, y ya todos estaban en la mazmorra para saber qué era lo que sucedía. El Líder de Secta Zhao estaba furioso, él arrogantemente ya estaba reclamando por haber liberado al supuesto hereje. —¡Niño tonto! ¡¿Cómo te atreves a venir a mí Secta e intentar destruirla?!

Wei WuXian rio con ironía. —¿Destruirla? ¿sabes? ¡Eso es precisamente lo que debería hacer! ¡todos ustedes son unos malditos inhumanos que experimentan con las personas! ¿De quien es la culpa de que Zhuliu esté en esas condiciones? ¿acaso él deseó tener esa habilidad?

Zhao ZhenSheng palideció. —¡T-Tú!, ¡¡¿cómo lo sabes?!!

El cultivador demoníaco chasqueó la lengua. —Preguntas inservibles, ¿dónde demonios tienes el libro?

Aquello pareció hacer que el Líder Zhao retomara la compostura. —¿Por qué debería entregarte una reliquia de la Secta Zhao?

—¿Reliquia de la Secta Zhao? —Wei WuXian encarnó una ceja burlesco— ¡Por favor! Ese libro no es de su pertenencia, Líder de Secta Zhao. Ese libro le pertenecía a CangSe SanRen, ¡Mi madre! ¡Así que exijo ahora mismo que me devuelva el legado de mi madre, antes que opte por reducir su estúpida e inservible Secta a cenizas!

Zhao ZhenSheng abrió los ojos grandes, la Secta completa quedó impactada. Lan Wangji también se sorprendió por la declaración. Él no tenía ni la más mínima idea que la madre de Wei Ying tuviese ese tipo de habilidades.

—¿Eres hijo de CangSe SanRen? —una voz, que se oía bastante vieja llamó la atención del nigromante.

—Así es... —respondió Wei WuXian, mirando al anciano que acercaba hasta él con las manos a las espaldas. A diferencia con la arrogancia que emanaban los miembros de la Secta Zhao, este hombre enmarcaba la misma gentileza de QingHeng-Jun.

—Saludos, Jóvenes Maestros —el aciano inclinó la cabeza, recibiendo de vuelta una inclinación de la pareja. — Mi nombre es Zhao ZeMin. Conocí a CangSe SanRen en una cacería nocturna, esa niña desenfrenada siempre causaba alboroto por donde quiera que fuera —negó con una sonrisa, que Wei Ying y Lan Zhan percibieron como afectuosa—...¡Era el dolor de cabeza de Lan QiRen!

Lan Wangji lucía curioso. —¿Conoce a mi tío?

Zhao ZeMin parpadeó en dirección a él. —¿Eres sobrino de QiRen?

Lan Wangji asintió. —Mi nombre es Lan Zhan, Lan Wangji.

—Oh, Segundo Maestro Lan.... —sonrió en reconocimiento— así es, Lan QiRen siempre se quejaba del caos que SanRen provocaba. Pero, a pesar de ser una muchacha descontrolada, era muy brillante. —miró a Wei Ying, dejando a la vista el dichoso libro del que hablaban—...esto te pertenece, Joven Maestro...

Wei WuXian se inclinó rápidamente en agradecimiento. —Muchas gracias, Zhao-Xiansheng...

Zhao ZeMin agitó su cabeza. —De ninguna manera. Era momento que regresara con su verdadero dueño. SanRen creó aquella técnica para estimular el núcleo dorado y apurar la curación en las personas cuando sus núcleos se hallaban débiles.

Por supuesto, Wei Ying tenía el intelecto de su madre al igual que su corazón. No por nada crearían lo necesario para ayudar a facilitar la vida de los cultivadores. Lan Wangji cada vez se siente más afortunado de que Wei Ying lo haya escogido a él.

Jamás, ni en un millón de años hallará a alguien con el corazón de Wei Ying.

Cuando Zhao ZeMin se despidió, para permitir que Wei WuXian y Lan Wangji tomaran el asunto de Zhao Zhuliu entre sus manos, la atmosfera cambió por completo.

La tierra pareció temblar, los arboles se sacudieron, los pájaros huyeron, las nubes cubrieron el sol. Los rostros de los discípulos palidecieron, y Zhao ZhenSheng casi se orinó del terror.

—Zhuliu se vendrá conmigo, porque en tus mugrosas manos tal vez muera —habló el nigromante con detenimiento. Sus ojos brillantemente rojos—...les aviso de antemano que, el crimen cometido en contra de Zhao Zhuliu no quedará impune. Tarde o temprano vendré yo mismo a resolver ese problema, ¿comprendió, el Líder de Secta Zhao?

Asintiendo frenéticamente el hombre, el pacto quedó sellado. Wei WuXian y Lan Wangji se llevaron a Zhao Zhuliu a Qishan, en donde le darían una nueva oportunidad de vida. Está demás señalar que desde ese día por el mundo de la cultivación se extendió un nombre que se hizo conocido por todos; a quien nombraron como la peor pesadilla, la justicia en persona, el ser que castiga a los desgraciados, y categorizado como el salvador. El Sol Escarlata de Qishan.

Algunas veces Lan Wangji se sentaría a mirar el atardecer con Wei WuXian, para entregarle un nuevo presente de cortejo a su amado. Aquellos bellos momentos de felicidad, eran suficientes para eliminar toda desagradable experiencia.

—Me gusta tú, solo tú, y nadie más —pronunció el Jade mientras llevaba un mechón de cabello del más joven detrás de su oreja. Había acomodado la horquilla de plata que contenía la flor de loto con sus nueve pétalos, hecha de jade rosa en el cabello de su amado. —....solo quiero estar donde tú estés..

Wei WuXian pegó un gritillo lanzándose a los brazos de su amado, con una enorme sonrisa en sus labios. —¡Lan Zhan, tienes que avisarme cuando dirás algo como eso! —el menor lo besó con ternura, antes de alejarse lo suficiente para mirarlo a los ojos—....¿sabes Lan Zhan?, soy la personas con más suerte en el mundo...

Lan Wangji lucía intrigado. —¿Por qué?

—Porque sin buscarlo encontré la felicidad y ahora descubrí que es el amor, ¡y es todo gracias a ti Lan Zhan!

Lan Wangji quedó sin palabras, y sus orejas hirvieron por la vergüenza. Aun así, se lanzó a devorar los labios de su amado con si el mundo se fuese a acabar. Fue un beso dulce, apasionado, cálido, suave y tierno a la vez.

Momentos después, se separaron. Lan Wangji miraba al menor con un resplandor en esos orbes dorados. —Sé mi esposo...

Wei WuXian contuvo el aliento. —¿Q-Qué?

—Sé mi esposo Wei Ying —repitió con determinación—...sé mío, yo te protegeré...

Los ojos del menor brillaron en lágrimas. Él miraba a su amado como si no pudiese creer lo que estaba escuchando. Luego de unos segundos, mientras las lágrimas se deslizaban por sus mejillas respondió. —Sí, sí, ¡sí quiero Lan Zhan!, ¡Sí quiero ser tu esposo!

Con la maravillosa noticia, hubo una celebración de prácticamente una semana completa antes de que se comenzaran los preparativos. Primero asignarían una fecha para la boda, luego qué se realizará. Ya sea una solo una comidilla o un gran banquete. Después de todo se casa el hermano menor de la Líder del Clan además de unos de los herederos de GusuLan, independiente de haber abandonado su Clan.

Ya estando todo calculado, recién enviarían las invitaciones.

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El día de la boda ambos estaban más que nerviosos. Wei WuXian se preguntaba una y otra vez si, esta vez al fin podría dejar ir sus traumas. Él quiere, desea consumar su matrimonio con Lan Wangji cuando sea el momento. No quiere saltar, gritar o correr lejos de su amado como lo ha hecho varias veces, confundiéndolo con esos bastardos desgraciados. Lan Zhan no se lo merece, por eso, con determinación en pie Wei Ying se dijo a sí mismo que esta vez será distinto.

Porque Lan Zhan lo ama. Porque Lan Zhan jamás lo herirá. Porque Lan Zhan lo protegerá de todo peligro, y siempre lo hará.

La celebración fue inigualable. Todas sus personas más queridas estaban presentes, incluso su esposo recibió de vuelta la cinta de su frente por parte de su padre, asegurándole que a pesar de todo siempre será parte de la familia. Wei WuXian estaba feliz de que su amado Lan Zhan estuviese reparando sus lazos con su familia; él mismo le había insistido que les diera una oportunidad, después de todo aquellas horribles experiencias quedaron en el pasado y pronto olvido.

A la hora de consumar el matrimonio, Wei WuXian estaba temblando. Lan Wangji se dio cuenta del nerviosismo de su esposo, y aunque él no podía estar mejor, de todas maneras se acercó hasta el menor y lo tomó de los hombros.

—No obligaré a Wei Ying si no está listo. —dijo con suavidad— Puedo esperar el tiempo que sea necesario, hasta que Wei Ying lo sienta....

Wei WuXian negó con frenesí. —¡Estoy! ¡Yo realmente lo quiero! —jugueteó con sus manos tembloroso— Es sólo que me siento, ansioso, ah, Lan Zhan, puedo ser desvergonzado pero creo que hasta alguien con una cara tan gruesa como la mía tiene sus debilidades.. —rio con nerviosismo.

Lan Wangji se obligó a respirar ante la hermosa imagen de un Wei Ying avergonzado. ¿Cuánto más adorable podría ser su alma gemela?

Entonces, con suma delicadeza deslizó sus manos por los hombros y brazos de su esposo hasta posarlos en su cadera. De donde lo atrajo más cerca suyo para unir sus labios en un cálido y sensual beso.

Si Wei Ying estaba avergonzado y nervioso por ello, Lan Wangji haría que se sintiera a gusto. Él se encargaría de guiarlo y darle la mejor de las experiencias a pesar de que tampoco era un gran experto o algo parecido.

Pero el instinto es el mejor de los acompañantes de todos.

Lentamente se fueron despojando de sus prendas nupciales. Nunca dejaron de besarse mientras lo hacían. De aquella manera, al menos tendrían cómo mantenerse distraídos del nerviosismo.

Cuando la última prenda de Wei Ying se deslizó hasta el suelo, Lan Zhan, con el corazón agitado alzó el cuerpo de su esposo para llevarlo hasta la cama en donde lo posicionó con suma delicadeza, demostrándole su devoción.

Besó la frente del más joven, con tanta ternura que Wei WuXian creyó moriría de tanta calidez. —Wei Ying es precioso.. —pronunció el Jade— Te amo..

Y el tono en que lo hizo, provocó a Wei WuXian sentirse el hombre más amado y precioso del mundo. Porque él le creyó, le creyó a ojos cerrados. Lan Zhan nunca miente, entonces quiere decir que es verdad.

—Lan Zhan es el más hermoso.. —él besó sus mejillas para luego dejar un casto beso en los labios de su marido— Yo también amo a Lan Zhan...

Se fundieron en un pasional beso lleno de amor. Se desenvolvieron en las sábanas como si no hubiese un mañana. Delicado, suave, caliente y amorosamente.

Las caricias devotas no faltaron. Al igual que aquellos juramentos de amor eterno. Ellos se unieron cuerpo a cuerpo cerrando sus destinos juntos. Dos almas destinadas la una a la otra. Amándose, cuidándose, protegiéndose. Dos vidas atadas por el hilo rojo del destino. En esta y todas las vidas.

Llegaron al clímax sin dejar de profesar el amor del uno al otro. Sin detener los besos sin aliento y caricias. Sin permitir que el mágico momento perdiera su efecto. Lo hicieron hasta que sus almas estuvieron saciadas. Lloraron juntos porque al fin estaban unidos. Porque al fin lograron dar el siguiente paso. Porque Wei Ying decidió dejar el miedo de lado. Porque su hermoso sol, ya no sufría por esas dolorosas heridas.

—Lo hice, Lan Zhan. No tuve miedo, no grité, no te alejé... —sollozó hundiendo su rostro en el cuello de su esposo.

—Wei Ying es muy valiente. Estoy orgulloso de ti... —él abrazó con fuerza a su mundo, sin intención de soltarlo nunca.

Resulta que el Clan QishanWen tenía secretos que jamás salieron a la luz en la línea de tiempo anterior.

Secretos que incluían campos de trabajos forzados de personas e incluso prisioneros tomados a la fuerza. Todos y cada uno de ellos yacían lejos de las fronteras de la región, en terrenos nunca visitados por los cultivadores. Wei Qing leyó en uno de los escritos perteneciente a Wen RuoHan, algo referente a la colección de reliquias del antiguo Líder Wen. —Según entendí, Wen RuoHan cazaba cultivadores errantes hábiles... —ella habló con detenimiento, mirando preocupada a su didi—...¿sabes lo que significa eso, verdad?

Wei WuXian quedó en silencio por unos momentos, antes de asentir con lentitud. Wei Qing continuó. —Estos cultivadores se negaron a ceder, entonces... —un movimiento de manos a la altura de su cuello, y ambos comprendieron—...lo siento tanto A-Ying...

Lan Wangji abrazó más cerca a su esposo, dándole apoyo moral. No se necesitaron de muchas palabras para entender qué decía su hermana. Los padres de Wei Ying eran cultivadores errantes reconocidos por sus habilidades y grandes hazañas. La madre de Wei Ying por sobre todos, ya que era discípula directa de BaoShan SanRen. No se requiere ser un genio para concluir cual fue el destino de ambos.

Wen RuoHan estuvo detrás de la muerte de los padres de su amado.

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La misión que habían tomado ambos, era viajar para descubrir aquellas tierras y encontrar a los prisioneros para darles libertad. Fue en pleno viaje, de paso por los territorios de Kuizhou, que los dos encontraron a un pequeño niño de cuatro años, llamado Xue Yang.

Lan Wangji tuvo que consolar a su esposo durante todo el trayecto de vuelta a Qishan. Wei Ying estaba demasiado sensible con respecto al niño; él repetía una y otra vez que le recordaba a su pequeño A-Yuan cuando vivían en Túmulos Funerarios y no tenían los suficientes medios para sobrevivir. Solo que Xue Yang estaba solo sin padres o alguien quien lo cuidara además de haber sido maltratado.

—¡Lan Zhan!, ¿cómo fueron capaz de lastimarlo?, ¡es solo un niño, es como A-Yuan! —lloró en sus brazos. Habían dejado a Xue Yang a manos de Wei Qing, ella se encargaría de la salud del niño mientras intentaba tranquilizar a su esposo—.. ¡no puedo imaginarme lo que ha de haber vivido!, ¿sabes?, él me recuerda a mí cuando vivía en las calles de Yiling, en donde tenía que luchar con los perros salvajes para poder comer... —sus ojos se abrieron alarmados—...¡¿Acaso él habrá tenido que hacer lo mismo?!, ¡Lan Zhan, es demasiado pequeño!

Tuvo que estar con su esposo casi dos horas para que al fin lograra tranquilizarse. Lan Wangji no había visto a su amado tan angustiado, era realmente algo doloroso de ver.

Ese día por petición de Wei Ying, adoptaron al pequeño Xue Yang, cambiando su nombre a Lan Yang. —¿De verdad puede tener tu apellido? —preguntó su sol con una sonrisa radiante— ¡sonaría perfecto, Lan Zhan!

Lan Wangji asintió, besando la coronilla de su marido. —Si Wei Ying lo desea, que así sea...

Tiempo después le llegó un aviso de su padre por medio de una carta. Lan BaiMei, una prima lejana falleció dando a luz a su hijo; su marido había muerto no hace mucho en una cacería nocturna, por lo que su salud se deterioró debido a la tristeza y causó que estuviese débil durante el parto. Eran demasiadas emociones que BaiMei pasó, lo que la llevaron a la depresión.

—Su nombre es Lan Yun... —pronunció su padre sosteniendo al infante en sus brazos—...A-Mei pidió que su nombre de cortesía fuera el de su padre, JingYi

Lan Wangji sintió cómo su garganta se cerró, pestañeando en reiteradas ocasiones para disipar las lágrimas. —A-Yun... —murmuró, con sus emociones haciendo de las suyas en su pecho. Ese pequeño niño quien fue el amigo y compañero de su pequeño A-Yuan. Ambos bajo su tutela, convirtiéndose en unos buenos niños de habilidades increíbles al igual que sus intelectos. A pesar de que A-Yun poseía una personalidad para nada Lan, era de todas formas un discípulo destacable.

Mientras cuidaban del bebé, Lan Wangji le envió un mensaje a su esposo para mencionarle la urgencia de la visita. Wei Ying, oh su adorado esposo de un corazón tan grande, le envió de vuelta el mensaje más maravilloso del mundo. "Si papá está de acuerdo, podemos adoptas a A-Yun, Lan Zhan; y así, cuando nuestro rabanito llegue tendrá como su hermano mayor a alguien que pudo ser su mejor amigo..."

Cuando le transmitió los deseos de su esposo a su padre, Lan Qinyue sonrió lleno de calidez y alegría. —Nada nos haría más feliz que saber que A-Yun estará en buenas manos —pronunció estando de acuerdo—...estoy seguro de que A-Mei y JingYi se sentirían muy honrados de que ustedes cuidaran de su hijo...

Entonces Lan Wangji tomó al pequeño en brazos mirándolo completamente embelesado. Ese niño será tan amado como ya lo es su pequeño A-Yang, y ya lo está siendo A-Yuan. Wei Ying y Lan Zhan tienen mucho amor para darles, se encargaran de ser los mejores padres del mundo y sus pequeños estarán muy orgullosos de ser sus hijos.

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Si Lan Wangji pensaba que ya estaba siendo muy, demasiado feliz. Vaya que estaba equivocado. Nunca imaginó que se podría ser más de lo que se estimaba. Todo fue cuando Wei Ying en medio de las practicas con los discípulos de QishanWei, comenzó a sentirse mareado. Entonces se desmayó en los brazos de Wei Ning. —¡Ying-ge! ¡Wangji, Ying-ge se ha desmayado!

Lan Wangji voló en dirección a su cuñado para tomar en brazos a su marido y correr en dirección a ala médica. Wei Qing a pesar de estar ocupada con sus quehaceres de Líder, dejó de lado todo para ir a revisar a su didi.

Tardó lo que demora en quemarse una varilla de incienso antes de suspirar, secarse la frente y sonreírle tanto a él como Wei Ning. —Creo que pronto tendremos a A-Yuan con nosotros. Felicidades Wangji..

Él quedó boquiabierto. A su lado, Wei Ning carcajeó felicitándolo por ello. Lan Wangji solo tenía ojos para su amado que aún yacía dormido en la cama. Se acercó lentamente hasta él como temiendo hacer un mal movimiento y lastimarlo.

Wei Qing, notando aquello rodó los ojos y tiró de su mano. —Aquí, siente el pulso con tus dedos...

Lan Wangji intentó retraer su mano, pero terminó cediendo ante la insistencia de su hermana mayor; después de todo nadie puede en contra de Wei Qing.

Fue ahí que lo percibió. Era pequeño, muy diminuto. Un pulso, hasta que fueron dos. Su pequeño hijo que ya estaba creciendo en el interior de su amado. Él jadeó incapaz de procesar tantas emociones. —Está ahí... —pronunció entrecortado—.. Qing-jie, él está ahí..

Wei Qing le dio palmaditas en la espalda con una enorme sonrisa. Se había acostumbrado más al contacto con su familia por incentivo de Wei Ying, y resultó ser algo realmente gratificante. —Así es, a pesar de ser tan pequeño tiene un pulso de todo un luchador...

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Si creyó que al enterarse sobre el embarazo de A-Yuan sería lo único que lo haría llorar. Pues nuevamente estaba equivocado. Fue su nacimiento que lo hicieron llorar como nunca lo había hecho.

Lan Wangji siempre se dedicó a reprimir y controlar sus emociones, resultándole algo inservible. Sin embargo, debía suponer que expresarse abiertamente era algo que ocurriría con frecuencia ahora que tenía en su vida un ser de puro amor.

A-Yuan, su pequeño conejo. Él realmente era muy, muy pequeño. Tan pequeño que Lan Wangji sintió iba a romperse, tan pequeño que podía sostenerlo con una de sus manos mientras con la otra abrazaba a su esposo. —Te amo, te amo, te amo... —recitaba como su sagrado mantra con el aliento entrecortado—...gracias por todo, gracias...te amo...

Wei Ying sonrió, sus ojos llenos de fatiga pero radiantes e inundados de calidez, lo miraron con adoración. —Tú mismo lo dijiste, entre nosotros no hay necesidad de "Lo sientos" y "gracias"... —besó las lágrimas de su marido—...Te amo, mi vida...

Entonces él lo besó, lo hizo con desesperación, lo hizo incapaz de describir en palabras la felicidad que estaba sintiendo en aquel maravilloso momento. Lo hizo con todo el amor que quemaba en su interior por su alma gemela. Lo hizo con la finalidad de dejar en claro, que él es su mundo entero y jamás lo dejará.

Y desde aquel día, todo fue solo felicidad en sus vidas, gracias a la gran oportunidad de tener un nuevo comienzo.

El Sol volvió a brillar como nunca.

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大

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Somos dos personas
en mundo complicado,
que está en guerras
hasta consigo mismo.

Sé que podemos
cambiar el destino,
del camino en que vamos
hacia el fracaso.

Te pido que triunfemos,
que el amor sea remedio,
que nos ayudemos.
Aprendamos, te quiero.

Hoy mismo perdonemos
basta de discordias,
un nuevo comienzo
y sólo victorias.

Mi amor te amo
y tú me amas
démonos besos,
mi corazón te llama.

ㅡJavier R. Cinacchi

Nota: ¡Hemos llegado al final de éste camino!

Muchas gracias por leer esta historia, espero recibir su apoyo con la otra que me está quedando ya que incluso "Eterno" está llegando a su final. ¡No puedo creerlo!. 😱😱

Me emocioné escribiendo éste extra, el curar ese tipo de heridas no es fácil, pero tampoco imposible. Solo se necesita el apoyo, dedicación y amor. 💙❤

Espero que haya sido de su agrado, me enfoqué solo en el WangXian y su avance más que lo otro, después de todo era para ellos el momento. ¡Gracias mis queridas lectoras! ¡nos leemos!✌❤

Nota añadida: ¡Estamos terminando la edición, gente! ¡Sólo un capítulo más! XD