Desde antaño se hablaban de criaturas divinas que traerían la paz al mundo. Seres celestiales que vendrían al mundo mortal y dar no solo esperanza, sino que a curar todos los males existentes para los mortales.

Los cultivadores por años se dedicaron a orar hacia aquellas criaturas, a quienes llamaron "Tiānshǐ"¹. Estos seres se hacen llamar guardianes de un ser supremo que todo lo ve, todo lo siente y todo lo piensa. Su nombre es Shàngdì².

Se decía que los Tianshi son capaces de arrasar con un ejército completo con el simple hecho de batir sus alas. Por ello, son también los soldados más fuertes de Shangdi y basta contar con la presencia de uno solo de ellos para una batalla.

Los Tianshi nunca envejecen y no pueden ser asesinados. Poseen fuerza, velocidad y resistencia sobrehumana. Se sabe que los Tianshi vuelan a la velocidad del pensamiento, pueden estar en todos lados a la vez. Ellos tienen habilidades telepáticas, pudiéndose comunicar no verbalmente sino que por medio de la mente. Los poderes de los Tianshi están conectados desde el cielo, por lo que mientras ese vínculo permanezca, pueden reponer sus habilidades.

La fuerza física de un Tianshi es significativamente mayor que la de un ser humano. Además de la telepatía, ellos poseen la telequinesis, por la cual tienen la capacidad de mover e influir en los objetos con sus mentes. Son capaces de ver objetos y seres que son invisibles a los seres humanos.

Los Tianshi pueden entrar en los sueños humanos con el fin de comunicarse con ellos. No es necesario saber si la persona es el uso de esta habilidad. Tienen la capacidad de sonar como cualquier ser humano de su elección, además de ir hacia atrás y hacia adelante a través del tiempo, aunque esto es difícil sin la ayuda del cielo.

No se debe olvidar que los Tianshi poseen habilidades especiales como, la manipulación de la memoria. Los Tianshi tienen la capacidad de tomar distancia y recuperar los recuerdos de un ser humano. Los Tianshi también pueden implantar recuerdos falsos.

Algunos Tianshi son lo suficientemente poderosos para resucitar a los seres humanos, incluso desde el Diyu. Infligir daño, piroquinesis, control de la electricidad. Crioquinesis –congelar objetos–. La manipulación del tiempo y alteración de la realidad.

Los Tianshi realmente son seres poderosos, de los cuales agradecer al cielo que pertenezcan al lado bueno. De lo contrario, sería el fin de la humanidad.

Lan Wangji jamás se vio como creyentes de dichas criaturas, mas las respetaba como creencias de los demás. No es un adorador de divinidades, sin embargo, de su boca jamás saldría una blasfemia en contra de estas.

Entonces, cuando un ejército de soldados Wen se encontraron a la entrada del Receso de las Nubes amenazando con llevar a la completa ruina su hogar. Con el cero por ciento de probabilidades de salir ilesos en la batalla, preocupados de proteger lo que pertenece a sus ancestros por el miedo de perder años de esfuerzos de generaciones anteriores. Y de la nada, un sonido que podría definirse como el de celestiales campanillas se oyeron por doquier, tal vez su idea sobre aquellos seres pudo haber cambiado.

Una furiosa ventisca a la gran velocidad arrasó con el batallón completo, derribándolos a todos y cada uno de los miembros de este mismo; frente a los ojos de GusuLan, únicamente en pie quedó el heredero de QishanWen con la mirada llena de incredulidad compartida con los Lan; con la figura de una persona si así podría llamársele, parada con imponencia, manos a los lados y una mirada serena de indiferencia. Sin embargo, sus ojos plata como la luna brillaban feroz y amenazantemente.

No obstante, si bien su aparición fue sorprendente e inesperada. Todo fue con mayor rigor cuando se fijaron en aquellas dos grandes y largas alas emplumadas blancas, extendidas en su espalda de una forma gloriosa y hermosa.

—E-Es un...T-Tianshi —pronunció QingHeng-Jun, con la respiración entrecortada incapaz de asimilar que lo que estaba delante suyo, era en realidad una de aquellas criaturas divinas tan respetadas y adoradas.

Los hermanos Lan boquearon en sincronía, con la misma expresión que su tío y padre, sin lograr digerir aquel acontecimiento y aparición. Lan Wangji se dio el lujo de apreciar a dicho ser Celestial.

Era un hermoso Joven de cabellos largos y negros, con ojos color mercurio brillante y resplandeciente. El aura que lo rodeaba, emanaba una luz pura y presencia santa que pulsaba de un modo paradisíaco. Llevaba una corona de oro con la forma de las ramas de un cerezo tejidas que rodeaba su cabeza; difiriendo a lo que se tenía estimado, el Tianshi no llevaba una armadura total, sin embargo vestía unas túnicas ámbar con hombreras y muñequeras de oro puro. Sus botas aseguradas con cadenas entrelazadas del mismo material que los accesorios anteriores.

Era el ser más bello que Lan Wangji ha visto en su vida. Y sin que pudiese evitarlo, sus oídos ya se estaban calentando en su totalidad. Pero el impacto fue más, cuando el Tianshi le dirigió una mirada directamente a él, y el Segundo Jade no sabía a dónde meter su cabeza.

—Tiānshǐ-Shèng³ —todos se inclinaron frente al ser, con el debido respeto que ha de merecer como una criatura divina.

El Tianshi asintió en reconocimiento, manteniendo su rostro tan estoico compitiendo contra el del Segundo Jade para maravilla de muchos. Con un movimiento de muñecas, Wen Xu estaba siendo sometido por unas cuerdas sagradas que lo inmovilizaron.

"Me encargaré del resto. Pueden volver en paz a su hogar. La batalla ha terminado"

La voz profunda hizo eco en las mentes de todos. Y ellos estaban seguros de haberla escuchado, puesto a que el Tianshi, ¡ni siquiera movió un centímetro de sus labios!

—¡Enaltecido sea Tianshi-Sheng!

El Tianshi negó con su cabeza. "Mi nombre es Wei WuXian, dado por el mismo Shangdi. Refiéranse a mí de esa manera."

QingHeng-Jun tenía una postura llena de determinación. —Así será. Estaremos eternamente agradecido con usted, Wei WuXian.

Para sorpresa de todos, y digo todos porque quedaron sin respiración por unos momentos. El Tianshi Wei WuXian les dio una amplia y hermosa sonrisa llena de blancos dientes, opacando el brillo del mismo sol en el cielo.

Entonces, en ese momento, Lan Wangji entendió a que se referían con ser divinizado por un Tianshi, si es que se le puede decir así a lo que sea que estaba sintiendo. Porque, desde ese momento nunca más pudo quitarse aquella sonrisa de la cabeza.

Wei WuXian le había dado un divino golpe a su corazón.

Nota: Holiwis 👁👄👁

Fue una idea flash que se me vino a la mente, mientras hablaba con mi mamá xD

Así que, por eso fue cortito. ¡No hay nada más que agregar!

Todo lo que está escrito fue parte de mi investigación personalizada, por lo que esta redactado por mí. No acepto plagio o tomar ideas sin consultarlo conmigo primero. 😉

Por cierto, aquí está el glosario.

¹Tiānshǐ = Ángel.

(Una vez les mencioné en "La Leyenda de Shui Ziyou" que Xiao-RenYu se refería a Lan Wangji como "Ji-Tianshi" es decir, "Ángel Ji". Cuando se me ocurrió, debido a que según mi madre los ángeles no tienen expresiones 😉)

²Shàngdì = "De todo lo grande, él es más grande". Shangdi es el nombre usado en la mitología china para referirse al Dios supremo. Entonces, era justo que lo utilizara.

³Shèng = Es un honorífico indicar santidad. Literalmente significa "Santísimo". Si lo ponen en el traductor de Google les arrojará  "Smo", que es la sigla de Santísimo. XD

¡Eso es todo! ✌🏻😘🏳️‍🌈