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38

Jungkook observo el número de Mikhail y suspiro frotando su frente sin saber si llamar al número o no. No había podido conciliar el sueño ya eran las dos de la mañana, ya se había convertido en una costumbre dormir con Jimin, lo extrañaba en su cama, a su lado.

Jungkook suspiro frustrado—. Ah... Maldita sea— susurro, se sentía enojado consigo mismo, era su culpa por no decirle la verdad, que idiota era.

Busco su cajetilla de cigarros en uno de los cajones de la habitación, hace mucho que no fumaba pero ahora mismo necesitaba uno. Saco un cigarrillo y buscó su encendedor para encenderlo, Jungkook comenzó a inhalar el humo satisfecho, esto era lo que necesitaba para tranquilizarse.

Volvió a mirar el número de aquel hombre mientras exhalaba el humo. En Rusia deberían ser las ocho de la mañana, era el momento exacto para llamar, tomó su teléfono en su mano derecha mientras que en la otra sostenía su cigarro volviendo a inhalar el humo.

Llamó al número, uno, dos, tres timbridos y se escuchó una voz aguda.

—. Доброе утро, мистер Михаил (Buenos días señor Mikhail)—

—. Кто вы? Если это не что-то важное, повесьте трубку, у меня нет времени на дружеские беседы (¿Quien eres? Si no es algo importante cuelga, no tengo tiempo para conversaciones amistosas)—

Jungkook chasqueo su lengua, que arrogante—. Es sobre su hijo ilegítimo por así decirlo, ya me aburrí de hablar ruso mejor hablemos mi idioma— dijo Jungkook mientras le daba algunos toques al cigarro para que cayera la ceniza

Jungkook escuchó un silencio profundo al otro lado de la línea y río—. ¿Se le comieron la lengua los ratones?— dijo burlón

—. ¿Cómo sabe que tengo un hijo ilegítimo?—

—. Kim Yu-Na me lo dijo—

Jungkook volvió a reír al no escuchar nada a través de la línea—. Otra vez mudo—

—. ¿Quien eres?—

—. No sé lo diré, pero tengo una razón que le dejo Jimin, dice que quiere verlo y hablar con usted, eso se lo dejo a su criterio señor Mikhail—

—. ¿J-Jimin sabe sobre mi?—

—. Así es, lo sabe todo—

—. Bien, por él iré a corea ¿Cuando quiere que nos veamos?—

—. Mmm... Lo más pronto posible, llámeme cuando llegue a corea. Entonces me despido, que tenga un buen resto de día, oh perdón no creo que lo tenga después de saber que Jimin sabe de usted— dijo Jungkook riendo colgando la llamada

Jungkook apagó el cigarro y se tiró de cara a la cama, su Jimin ya estaba dormido hace mucho rato, ojalá pudiera dormir como él y también significaba que no lo necesitaba como él lo necesitaba. ¡Ja! que gracioso, eso lo hacía sentir peor de lo que se sentía, sabía que Jimin hacia su mejor intento para amarlo como él lo hacía pero sabía que no lo amaba del todo y no estaba seguro que si su menor gustará de él, tal vez estaba confundido, tal vez dejaría que pensará algunos días y organizará sus pensamientos y también debía hacer lo mismo, sus pensamientos ahora mismo eran un caos.

"Oye ¿Que pasa si nuestra pareja ahora mismo nos odia?"

Jungkook suspiro al escuchar la voz de su dragón "Prefiero  matarme ahora mismo a qué Jimin nos odie"

"Le ocultamos algo que debimos haberselo dicho desde mucho antes"

"Sabes que él ha tratado de amarnos como nosotros lo amamos pero lo entiendo es difícil para él, yo no me enamoraría de alguien como lo soy yo. Todo esto es una maldición Ewan, somos la maldición de Jimin"

"Se que lo somos pero nunca podríamos vivir sin él, pero es imposible que no nos ame, estamos vinculados con él y se que nos ama, no tan fuerte como nosotros pero nos quiere a su manera, así que no digas que no nos ama Jungkook"

Jungkook suspiro, se levantó de la cama y pasó sus manos por su cara con frustración. "Lo sé pero todavía me es difícil de creer que Jimin nos ame, todo a nuestro alrededor ha dado un giro inesperado y me siento desesperado y frustrado Ewan, me considero un horrible novio ¿Por que no puedo ser mejor para él? Un día de estos va a terminar odiandonos y abandonandonos por ser lo que soy, por ser lo que somos Ewan, todo esto es una maldita mierda"

"Si él nos termina odiando y abandonando nosotros moriremos, deja de pensar en esas cosas idiota que haces que yo también me preocupe. Mejor Cambiemos de tema, ¿Vamos a darle tiempo a nuestra pareja para que piense? ¿O que hacemos?"

"Por supuesto que le daremos tiempo, trataré de darle todo el espacio personal posible, no quiero que se sienta incómodo con mi presencia y menos que se sienta presionado, cuando él quiera hablar de nuevo, pues ahí estaremos"

"Mmm... No me gusta estar separado de él pero lo haremos para que se le quite el enojo con nosotros y volvamos a ser felices de nuevo"

Jungkook asintió "Bien entonces trataré de dormir"

"Oh sí, duerme si no te vas a volver más viejo de lo que estas"

Jungkook gruño y no quiso volver a contestarle, mejor se acostó en la cama de nuevo tratando de conciliar el sueño, si es que podía.






.......








Jimin bajó las escaleras con pereza mientras frotaba sus ojitos inchados de tanto llorar. Había llorado hasta quedarse dormido, también había extrañado a Jungkook envolviendolo con sus brazos, extraño la calidez de su cuerpo y su delicioso aroma, lo extraño demasiado al no estar a su lado. Que terrible ¿Tanto así ya dependía de Jungkook?

Le haría el desayuno a su mayor y le pediría disculpas por tratarlo así el día anterior. Jimin comenzó a hacer el desayuno para Jungkook y para él después de casi una hora el desayuno estaba listo, escucho los pasos de su novio bajar lentamente las escaleras, lo sentía totalmente deprimido y cansado.

Jungkook dio un gran suspiro, no había podido dormir ni un maldito segundo, se sentía enojado, estresado, frustrado y la más importante de todas, deprimido y sin ganas de vivir.

Jungkook entró con pasos perezosos a la cocina, quería un café bien cargado, no, lo necesitaba con urgencia. Cuando iba a entrar a la cocina sintió a Jimin allí, decidió mejor voltearse e irse, era mejor así no lo incomodaba.

—. Jungkook ¿A donde vas? — pregunto el Rubió detrás de Jungkook

Se volteo y lo miro, vio sus ojitos inchidados y rojos, sintió una punzada en su corazón al verlo así—. Yo... Ya me iba a la Universidad— respondió desviando su mirada a la puerta

Jimin observo el rostro demacrado de su novio, tenía ojeras de bajos de sus ojos y se notaba bastante cansado, seguro que no había dormido por su culpa.

Jimin aclaro su garganta—. ¿N-No quieres desayunar conmigo? — preguntó

—. Esta bien, puedo hacerlo más tarde, no tengo hambre, puedes comer tú— dijo con una sonrisa

Jimin frunció su ceño—. ¿P-Pero no quieres ni un café?—

Jungkook rasco su nuca—. No, enserio desayunaria contigo pero voy tarde a mi primera clase— se excusó, Jungkook lo observo enserio no quería incomodarlo

—. ¿Por qué no te tomas el día libre hoy Jimin? Descansa y piensa sobre todo— dijo mientras abría la puerta

Jimin lo miro y asintió—. Esta bien, lo haré— dijo mientras veía como Jungkook se iba, había esperado su besó de despedida pero nunca llegó, Jungkook cuando siempre se iba lo abrazaba y besaba pero ni siquiera lo miro de una forma correcta, solo desviaba su mirada a otro lugar.

Cuando volviera de la Universidad hablaría con él, y volvieran a la normalidad, seguro se sentía herido después de lo que le hizo anoche y se sentía muy culpable por ello.










........









Jae-Woo observo todas las cosas que su difunto padre tenía en su vieja habitación, su padre siempre le había parecido alguien misterioso y frio, siempre se preguntaba lo que hacía y pensaba. Busco en los cajones de la mesita de noche, observo una foto de él con su padre y madre, pero también observó una caja de madera color negra, tenía un símbolo extraño de un dragón, la  curiosidad se apoderó de él y la abrió, al abrirla pudo ver unas balas pero diferentes, dentro de ellas se encontraba una sustancia de color azulesca, la tomó entre sus dedos y la miro detalladamente, parecía algo viscoso ¿Que era eso?

—. Oh, ya había olvidado la existencia de esas balas— dijo el viejo hombre detrás de Jae-Woo

Jae-Woo se volteo para verlo intrigado—. ¿Que es esto abuelo? —

—. Tu padre trabajo mucho en ellas, me mostro algunas muestras antes de morir, parece que lo logró con éxito. Pudo crear las balas que pueden herir y matar a un dragón y sabes lo que significa ¿Verdad?—

Jae-Woo sonrió—. Por supuesto que se que significa, con esto podré matar a Jeon Jungkook sin secuestrar a su pareja, pero abuelo ¿Y si no funcionan? —

—. Claro que funcionarán, si no funcionarán piensas que tu padre las dejaría allí en esa caja, tu padre eran de los que tiraban las cosas si ya no servían y las dejó allí, eso significa que sirven pero no pierdes en intentarlo, si lo intentas y le disparas tal vez lo hiera y lo mates lentamente—

Jae-Woo asintió—. Entonces lo intentaré, pero si no funciona moriré en las manos de Jeon Jungkook—

—. No podrás morir, eres inmortal así tu dragón este dormido, pero ten cuidado no dejes que se transforme, después de que lo haga morirás por el dragón  negro y no será una muerte bonita, te lo aseguro—

—. Muy bien, tomare tu recomendación abuelo, entonces me iré— dijo tomando las pocas balas que habían en la caja, solo habían cinco, no debía desperdiciarlas

Jungkook salía de la Universidad y se dirigia al estacionamiento subterráneo, a veces se preguntaba porque habían hecho el estacionamiento allí abajo, podían a verlo hecho junto a la Universidad.

Camino hasta su auto y sacó la llave para abrir el auto, quería llevarle un pastel de chocolate a su lindo Rubió, quería complacerlo y llevarle su postre favorito, lo compraría de camino a casa.

—. ¡Jeon Jungkook!— grito y Jungkook se volteo pero al hacerlo sus ojos se abrieron al sentir cómo un bala perforaba su pecho

¿Que? ¿Que estaba pasando? ¿Que era esto que sentía?

Jungkook cayó al suelo y se puso su mano en su pecho y vio como sangre de color negro salía de allí, Jungkook río—. Ah... Maldito hijo de puta— dijo levantando su mirada al hombre encapuchado que se encontraba en frente de él

Jungkook escupió la misma sangre negra, ¿Esto era sangrar? ¿Esto era recibir una bala? Pues porque se sentía de la mierda, sentía demasiado dolor y su vista se estaba tornando borrosa

Jungkook soltó una carcajada—. ¡Te mataré! ¡Nadie se atreve a meterse conmigo! — grito

Jae-Woo sonrió satisfecho y volvió a puntar hacia él—. No podrás hacerlo en ese estado, no te mataré tan fácil te haré sufrir, Jeon Jungkook— dijo mientras le volvía a disparar a su hombro

Jungkook vio como todo se tornaba de color negro y solo sintió como lo arrastraban, eso fue lo único que pudo sentir hasta desmayarse.

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