20
Jungkook miro a Jimin fijamente, el rubio solo pudo fijar su vista en el piso, ¿Sera que hizo mal en preguntar? Solo tenía curiosidad de como era ser la pareja de su profesor.
—. Perdón por preguntar, esta bien si no me quiere explicar— dijo Jimin en voz baja, Jungkook extendió su mano hacia su rostro y hizo que lo mirara a los ojos
—. Jimin ¿Por que me negaría a explicarte? Por supuesto que te explicaré— dijo acariciando su cara, Jimin asintió—. Gracias pro... Digo Jungkook— agradeció avergonzado
Jungkook lo miro con ternura y beso su mejilla—. Eres tan tierno y lindo— dijo acariciando en donde había besado, Jimin otra vez se había puesto rojo como un tomate.
—. Bien, pero primero ¿Quien te contó que eres mi pareja? — pregunto poniendo un mechon rubio detrás de su oreja
Jimin aclaro su garganta y lo miro—. H-Hoseok—
Ah... Su hermano y su grandísima bocota
—. Muy bien, aunque creo que si él no te lo hubiera dicho, tú nunca estarías aquí y yo ya estaría muerto—
—. Lo siento profesor, nunca quise reaccionar como lo hice ese día, solo que estaba asustado— justificó mirándolo de reojo
—. ¿Estabas asustado de mí? — pregunto mirándolo preocupado por su respuesta
Jimin negó—. A usted nunca le tendría miedo, solo me dio miedo lo que hizo al chasquear sus dedos, me dio miedo el poder que usted esconde— dijo mirando la hermosa cerámica de color azul oscuro
Jungkook sonrió satisfecho por su respuesta, entendía a Jimin ¿Quien no en su sano jucio no le tendría miedo a alguien como él?
Jungkook atrajo el cuerpo del rubio hacia él y lo abrazo escondiendo su rostro en el cuello de este.
—. Gracias Jimin, y te entiendo ¿Quien no le tendría miedo a un monstruo como yo? —
Jimin se separó de él y lo miro con el ceño fruncido—. Usted no es un monstruo, no vuelva a decir eso— dijo Jimin enojado, no le gustó como su profesor se trató, él no era ningún monstruo, solo no estaba enseñado a ver una persona tan sorprendentemente fuerte como lo era él.
Jungkook se sorprendió por la respuesta de su rubio, nunca pensó que reaccionaría de esa manera y se conmovió por como pensaba de él—. Esta bien, lo siento— Jimin asintió y le dio una sonrisa leve
—. Bien, comenzaré a explicarte lo mejor que pueda el tema de esto de las parejas—
Jimin asintió intrigado, tenía también mucha curiosidad sobre esto.
—. Bueno, el tema de las parejas destinadas en los Jeon es demasiado importante, y más para los que llevan la marca del dragón como yo, nuestro dragón después de escogernos escoge también una pareja antes de que esta nazca, para protegerla, amarla, cuidarla y tener nuestra decendencia, si mi pareja me rechaza o muere yo morire, para los dragones su pareja es fundamental, es su vida, la persona más importante, su razón de vivir— explicó Jungkook lo más detalladamente posible, Jimin lo escuchaba atentamente, pero había escuchado bien ¿Decendencia?
—. Mmm.... ¿Decendencia? — pregunto confundido, imposible él era hombre, Jungkook río y lo miro a lo ojos
—. Cariño como mi pareja te desarrollaste para tener a nuestros hijos— respondió con una sonrisa poniendo su mano en el vientre de Jimin
Jimin se asustó ¿Como así? ¿Podia tener hijos? Eso era imposible
—. ¿C-Como? — pregunto preocupado
Jungkook soltó una carcajada al ver la cara de su Rubió, Jimin fruncio el ceño—. ¿Se está burlando? — pregunto ofendido
Jungkook negó y paro de reír—. ¡Lo siento, Lo siento! —
—. Perdón Jiminnie, fácil, de pequeño te fuiste desarrollando hasta que tu cuerpo se acostumbro a tener un útero y ovarios y tu nunca te diste cuenta de eso, porque mi dragón al escogerte estabas destinado a llevar mis hijos— explico Jungkook
Jimin abrió su boca sorprendido ¿Entonces podía tener hijos cómo una mujer? Era sorprendente pero terrorífico a la vez
—. Ohh... Ya entendí, p-pero entonces no me va a usar solo para eso ¿O si?— pregunto preocupado, Jungkook fruncio su ceño
—. Jamás te utilizaría para eso, si tu no quieres tener un hijo yo tampoco, es cuando tu quieras no cuando yo lo quiera ¿Entiendes? — dijo enojado por lo que dijo Jimin ¿Como podía pensar eso? Él nunca haría algo así.
Jimin bajo su cabeza apenado—. L-Lo siento— se disculpó
—. Esta bien, pero nunca quiero que pienses de esa manera Jimin— Jimin asintió y miro el suelo
—. ¿E-Ese tatuaje que tiene en su mano es la marca? — preguntó cambiando de tema
Jungkook miro su brazo, la marca venía desde la muñeca hasta su espalda—. Si, así es—
—. Es la primera vez que lo veo— dijo admirando el brazo de su profesor
Jungkook sonrió—. Es que nunca me ha gustado mostrarlo— respondió viendo como el Rubió miraba su brazo con admiración
—. ¿Por que? — preguntó curioso
—. Porqué cuando era pequeño me molestaban mucho por esto, decían que era un raro y que mis padres eran unos monstruos por tatuarme a esa edad, hasta llegaban a golpearme y después cuando llegaba golpeado a mi casa mi padre me daba otra golpiza por débil—
Jimin se sorprendió ¿Asi de mala fue la infancia de su profesor?
—. Oh... Profesor su infancia suena muy fea— dijo Jimin tomando el valor y tomar la mano de su profesor, Jungkook se sorprendió por esa acción y sonrió
—. Ni tanto, a veces podía jugar con mis hermanos como cualquier otro niño, aunque si mi padre nos descubría a mis hermanos y a mi nos darían la golpiza de nuestras vidas, pero no me quejo, si mi padre no me hubiera convertido en lo que soy ahora, no sería capaz de manejar una mafia, ni menos una empresa— dijo Jungkook entrelazando la mano con la de su Rubió
—. Ya que hable de la Mafia ¿No te importa que yo sea el jefe? — pregunto temoroso, tenía miedo de la respuesta de Jimin
Jimin negó—. No me importa, mientras que sea usted mismo siempre y no cambie su manera de ser conmigo, yo siempre estaré para usted Jungkook, en las buenas o las malas— respondió Jimin con seriedad, era verdad todo lo que dijo siempre estaría para él.
Jungkook se había sorprendido a sobre manera con la respuesta de su Rubió, espero cualquiera pero nunca esa, Jungkook sonrió feliz y tomó entre sus manos la cara de su hermoso Rubió.
—. ¿Puedo besarte? — preguntó acariciando con las yemas de sus dedos las mejillas de Jimin, el Rubió se sorprendió por esa petición, ¿Un beso con su profesor? Iba a admitir que lo había deseado pero se sentía inseguro ¿Y si no le gustaban sus labios? Un recuerdo feo llegó a su cabeza.
Lo pensó unos momentos y llegó a la conclusión que esa persona no era su profesor.
Jimin asintió—. S-Si— respondió en voz baja
Jungkook sonrió satisfecho, acerco lentamente sus labios a los de su manor y juntaron sus labios en un beso lento y dulce, no había lengua, solo era un beso demostrando lo que él pelinegro sentía por su hermoso pelirubio.
Lo había deseado tanto, besar esos brillosos y regordetes labios, y ahora su deseo se había hecho realidad, los estaba probando y eran totalmente adictivos.
Jungkook se separó de su Rubió con pesar por la falta de aire, observó el rostro de Jimin, tenía sus ojos cerrados, sus mejillas totalmente sonrojadas y sus labios medio abiertos, un manjar para la vista.
Jungkook lo pensó unos segundos si en decirlo o no, siempre lo había querido decirlo él y su dragón, quiere que Jimin sea solo suyo y de nadie más, quiere que Jimin solo lo mire a él, quiere que su atención sea exclusivamente para él.
—. Jimin, se mi novio— pidió Jungkook, Jimin abrió los ojos por la sorpresa
—. ¿Q-Que? — preguntó confundido
—. Se mi novio, te juro que yo te daré todo lo que quieras, haría cualquier cosa por tí, me convertiría en una gran pareja para ti, te apoyaré en todo, porque te amo y por eso también sería capaz de destruir este mundo por tí— dijo tomando sus manos entre las suyas sonando lo más sincero posible
Jimin se quedó perplejo, nunca pensó que su profesor le pidiera y hablará de algo así y allí estaba pidiendoselo, no sabía si aceptar pero algo le decía que lo hiciera y que no se arrepintiria, pero tenía miedo que su profesor lo dejara tirado como esa persona que creyó que lo amaba, sabía que su profesor era diferente, totalmente diferente, no perdía nada con intentarlo.
Jimin lo miro a los ojos y envolvió sus brazos en su cuello—. Si, si quiero— dijo con una sonrisa
El corazón de Jungkook se aceleró por aquella respuesta y sonrió totalmente feliz, este era el mejor día de su vida.
—. Gracias, gracias, muchas gracias por aceptar— dijo conmovido y emocionado volviendo a besar sus labios con amor.
Confiaría en su profesor, rezaba para que nunca lo decepcionara y nunca cambiará su forma de ser con él porque si eso pasará esta vez decidiría morir y dejar el dolor, no le había preguntado pero estaba seguro que lo de ser su pareja también le afectaba, sentía que si lo dejaba moriría y no quería eso.
Holas, otro capítulo más, ojalá les guste
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