—Taehyung... Yo... Lo siento.

Sí quiero, pero no puedo...

Las lágrimas no paraban de salir de sus ojos, mayormente por culpa.

—creo que será mejor no volvernos a ver —dijo Jungkook y tragó. Cuando vio a Taehyung este estaba mirando la mesa en silencio.

No quiero que sufras más por mí Taehyung

—¿Por qué no? ¿Por qué no quieres estar conmigo? —le reclamó Taehyung—. Puedo darte todo lo que quieras. Sí quieres que me divorcie, lo haré. No vengas a apuñalarme para luego marcharte mientras me desangro. No puedes.

Taehyung lo miraba tranquilo pero en sus ojos se podía notar el enojo contenido.

—en realidad... vine a despedirme y luego tú me besaste, olvidé mi propósito aquí. También te extrañe mucho, pero aún hay algo que debo hacer. Por eso no puedo ir contigo, Taehyung.

—No importa, acepta y vete, pero prométeme que regresarás.

Jungkook suspiró y quitó su mano de la de Taehyung, al hacerlo este hizo su agarre más fuerte y Jungkook tuvo que hacer fuerza para soltarse. Se vieron a los ojos, Taehyung no quería dejarlo ir.

El pelinegro quedó en silencio.

es lo mejor...

Jungkook se levantó y se fue. Escuchar una puerta cerrarse nunca fue tan doloroso.

***

Cuando iba saliendo del edificio de apartamentos recibió una llamada de SooRi.

—¿Ya lo conseguiste? —preguntó con voz divertida.

—si... Ya la tengo. Voy para allá —el miedo estaba en su voz, nervioso por lo que estaba a punto de hacer.

***

Esta vez tenerla al frente era difícil. Debía buscar las palabras adecuadas, pero en todo el viaje había meditado que frases utilizar.

—Y bien... ¿Cuándo sacarás el dinero de la cuenta de Taehyung? ¿Dos meses? ¿Tres, cuatro?

—no lo haré. —contestó Jungkook. SooRi hizo una cara de confusión. Jungkook la había sentado en el sofá.

—¿Cómo que no lo harás? ¿Ya tienes su contraseña no?

—si la tengo, la tengo desde hace mucho tiempo —SooRi abrió los ojos en una cara de incredulidad—. Pero aún así, no lo haré. Taehyung no era como pensábamos, él es bueno, no es odioso, no se cree mejor que otros, es amable, es sincero, no es infiel, no es idiota. Ya tiene una vida triste para que yo venga y hacerle más daño. No quiero dañarlo. Por eso digo que no.

—¿y eso que importa? —gritó SooRi—. Ya tenemos todo. Qué importa lo que él sea. No es nadie sólo un idiota.

—deja de decir eso de él —le advirtió Jungkook perdiendo la paciencia—. Te recuerdo que es el ministro de nuestro querido país. Y lo más importante, te pido que lo dejemos en paz porque yo...

—¿tu qué? —dijo casi gritando, temiendo lo peor.

—¡yo lo amo! —por fin lo admitió. Jungkook se mordió el labio y SooRi lloró. Ella en un arranque de ira, le dió una fuerte bofetada dejando su mejilla roja.

—¡Mientes! —le gritó SooRi histérica. Llorando se puso de rodillas en el suelo pensando—. Salías con él porque querías... No querías seguir el plan porque... Te gustaba revolcarte con él... —balbuceó, apenas se entendió lo que dijo—. ¿Y vas a dejarme? Quieres irte con él ¿Verdad?

Jungkook suspiró pesadamente.

—antes de que cometas alguna estupidez —Jungkook la tomó de las muñecas. SooRi intentó soltarse, pero Jungkook era fuerte—. Te pido que dejes todo en calma, yo me quedaré contigo, pero no le harás daño. Y si quieres irte o quieres que yo me marché también lo haré. Sólo no compliques las cosas. De lo contrario pueden venir fuertes consecuencias.

—¿Te quedarás conmigo amandolo a él? ¿Ah? ¿Eso es lo que estás diciendo, Jungkook? Yo siempre hice el trabajo sucio por ti ¡siempre! Tú sabes todo lo que yo pasé. Y ahora tú, la primera vez qué haces esta parte... Me dices que te enamoraste ¡de un hombre! —le gritó lo último—. ¿Acaso eres gay?

—no lo sé... —contestó honestamente. No quería pensar aquello. No quería complicarse—. Lo que siento por él es más fuerte de lo que pude imaginar.

Y con esas palabras dichas Jungkook soltó a SooRi. Ella llevó las manos a su cabeza, halando su pelo, haciendo berrinche y maldiciendo.

—déjame en paz. Jungkook. Tengo que pensar—SooRi salió de su casa y Jungkook se frotó el rostro.

De verdad esperaba que no hiciera nada precipitado.

✘✘✘

Por supuesto que no dejaría las cosas así. Jungkook podía ser un tonto, pero ella no iba a dejar las cosas así de simple, al menos en sus planes. Sí Jungkook no la quería, haría que Taehyung tampoco quisiera estar con él.

SooRi estaba en el auto, se quedó pensando muy bien si hacer la estupidez más grande que se le ocurrió o no, pero estaba dolida y enojada. Finalmente después de una hora salió de su auto.

¿De verdad la estaba dejando por un hombre?

Llegó al edificio de Taehyung y entró, el portón estaba abierto. Mejor, eso no le complicaría las cosas.

Tocó el timbre del apartamento de Taehyung y cuando esté le abrió un poco la puerta. Él frunció levemente las cejas, tratando de recordar si la conocía o algo, después de un par de segundos, alzó las cejas y le abrió completamente la puerta.

—¡estoy aquí por Jungkook! —atacó sin darle tiempo al castaño de preguntar quién era—. Es mi novio. Él ha sido mi pareja por cuatro años. ¡Sí te busca aléjate de él! Me ama a mí no a ti. Eres un idiota ingenuo, ¿no ves que sólo eras un juego para él?

Al parecer sus palabras dejaron a Taehyung perplejo.

—parece que tú y yo tenemos que hablar —dijo Taehyung tranquilo, honestamente SooRi se extrañó por la tranquila reacción del mayor—. Pasa. Por favor, toma asiento.

Con enojo y desconfianza caminó hasta la sala del castaño, sonando los tacones de sus botas altas color negro, mientras él iba por dos copas y sirvió una con vino y la otra con jugo de uva.

SooRi se quedó de pie en la sala con la expresión furiosa. Taehyung se acercó a ella extendiendo su mano con la copa.

—tu tienes vino, yo no tomó alcohol. Siéntate.

Ella lo tomó y vió a Taehyung sentarse en el sillón de en frente, de una manera algo fresca, totalmente recostado al respaldar y con un pie puesto en la rodilla de la otra. Ahora estaban viéndose cara a cara.

—te he estado esperando... Jeon SooRi —dijo Taehyung y tomó un poco de su jugo—. Por favor, bebe.

SooRi se alarmó al escuchar su nombre. ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Acaso Jungkook le dijo?

—¿Cómo sabes mi nombre? —por los nervios SooRi tomó un poco del vino, sintiendo su dulce y al mismo tiempo amargo sabor deslizarse por su garganta.

—hace unos meses, mandé a investigar a Jungkook, por cuestiones de la vida mis contactos me informaron que tú vives con él  —rió con ironía y tomó su bebida.

SooRi hizo un movimiento con su mandíbula y suspiró. Ella había sospechado que Taehyung la había investigado desde que envió las flores a su apartamento y trató de advertirle a Jungkook pero él no lo quiso ver. Al final ella tenía razón.

—Bueno, ya que sabes de mi existencia ¿por qué seguiste con Jungkook?

—yo lo quiero —dijo así de simple—. Cuando supe que Jungkook tenía pareja quise que tú supieras de mi existencia. Por eso envié las flores cuando él no se encontraba en casa, supongo que tú las recibiste. Te dejé mi nombre y dirección —sonrió altanero—. Desde ese entonces esperé tu visita.

SooRi apretaba los dientes y su respiración se volvió pesada. Estaba alterada y terminó de beber su vino de un trago.

—¿Y qué querías o qué ganarías con que yo viniera aquí?

—para decirte que te alejaras —esta vez el mayor se acomodó en el sofá con las piernas levemente abiertas e inclinado hacia adelante—. Sé que quieres dinero así que te daré dinero para que vayas al lugar que quieras, sólo dime una cantidad —Taehyung sacó un cheque y tomó un bolígrafo para apuntar cierta cantidad de dinero. Observó a SooRi a los ojos, la chica estaba demasiado conmocionada.

—¿Cómo estás seguro de eso? —preguntó SooRi. Él no podría saber...

Taehyung se movió a la derecha a un pequeño mueble y tomó unos papeles, se colocó unas gafas y leyó:

—Jeon SooRi. Nacida el 7 de marzo de 1997. Lugar de nacimiento: Busan Mangdeok-dong. padres: Jeon JongSung y Jeon YoonRim. Según el informe, no tienes hermanos y vienes de una familia pobre, lo cual no tiene nada de malo —aclaró—. Sin embrago a los 19 años comenzaste a tener grandes ingresos de dinero cada cierto tiempo ¿Cómo me preguntó yo? no trabajabas en algo que pagarán tan bien y ahora pagas estudios muy caros. No tienes préstamos, ni deudas. ¿De dónde sale todo ese dinero?

¿Cómo iba a enfrentar eso? Parecía que tenía todo calculado. Sin embargo, no sé explicaba por qué siguió con Jungkook. ¿Cómo sabía que Jungkook y ella planeaban sacarle dinero?

—veo que no responderás —dijo Taehyung—. No compliquemos las cosas ¿Aceptas?

—¿Y Jungkook? ¿Qué sabes de él? ¿Acaso sabías sobre...?

—de él sé lo necesario. Al principio pensé que era muy bueno y lo es. Él no quería algo serio conmigo, pero seguía viniendo a mí. Yo quería saber qué problemas tenía él ¿Qué inconvenientes tenía? Ya que no suele hablar mucho de él, quería ayudarlo.

Taehyung hizo una pausa.

—Cuando recibí las noticias sobre ti... Yo... me moleste mucho —Taehyung se rascó el cuello—. Mandé a investigarte. Encontré eso sobre ti y me pareció extraño, luego le puse atención a Jungkook. Una vez él estaba en mi habitación y yo... no sé por qué me asomé para verlo. Él se levantó para ver mi billetera...

Taehyung se mordió el labio para agachar la cabeza

—yo lo ví... con mi tarjeta introduciendo cada dígito en su celular —una lágrima salió de su ojo y la quitó rápido de su rostro—. Me lastimó mucho saber eso, inmediatamente pensé en ti, en lo extraño que era todo y lo supuse. Pero yo no quería que fuera cierto, Jungkook es tan dulce conmigo, no tienes idea... —la mirada del mayor estaba pérdida—. El mismo día que vi a Jungkook con mi tarjeta, lo lleve a un lugar para emborracharlo y tratar de sacarle la verdad. Para ser sincero, fue difícil para mí fingir o actuar que todo estaba bien —el castaño movió la cabeza haciendo una mueca—. Mi plan de emborracharlo no salió como esperaba, yo estaba dolido y también terminé ebrio —sonrió en ironía—. Yo estuve convencido de que Jungkook sentía algo por mí a pesar de lo que hizo. Así que le dejé una pequeña prueba.

SooRi estaba respirando muy pesado. Por momentos sentía que era mujer muerta, estaban acabados.

—dejé que Jungkook estuviera a mi lado cuando yo pusiera la contraseña de mi tarjeta, lo arrastre a mi lado para que viera y después de eso esperé. Esperé a que mi cuenta se pusiera en 0. Pero no pasó. Quizá estoy loco, pero quiero a Jungkook a mi lado.

—¿Eres un idiota? Cómo estarías con alguien que te traicionó de esa manera —incrédula por lo que escuchaba se puso de pie. Estaba loco, ¿cómo quería a Jungkook? A pesar de todo.

Taehyung se rió un poco bajo.

—porque me ama a mí. Y estoy seguro que por eso tú viniste cómo una loca diciéndome que me alejara de él. Además... Sí él tenía que darte mi contraseña, no lo hizo. Porque eres tú la que aparece con dinero de la nada. Te ha traicionado a ti y no a mí.

SooRi estaba al borde del colapso. Quería tirarse por la ventana.

—todos hemos hecho cosas estúpidas por amor. Tu viniste aquí. Y yo quiero a Jungkook sin importar el costo —hubo un breve silencio—. Con lo que yo sé podría enviarlos a la cárcel, pero no compliquemos las cosas. Toma el dinero y vete.

—no vas a chantajearme —el poco alcohol que había consumido la volvió más impulsiva.

—piénsalo, te espero mañana antes de la 1pm.

El idiota no era tan idiota después de todo...

SooRi aún tenía un as bajo la manga. Sus queridas fotos de Jeju. Ya no le importaba nada más, quería joder a Taehyung y lo iba a hacer, él no sabía sobre esas fotos. Estaba segura. Las enviaría a la prensa y haría que Taehyung perdiera su trabajo, sería criticado por la sociedad, lo dejaría mal frente a su familia, frente a todos.