UNICO
Park Jimin
Cruzo mi pierna bajo su atenta mirada mientras agarro la copa de smoothie entre mis dedos y la balanceo muy delicadamente al final la llevo hasta mis labios y bebo de ella.
Alejo la copa dejándola en la mesita que estaba a mi costado, limpio con la yema de mis dedos mis esponjosos mojados labios, y sonrió al ver como aquel pelinegro muerde su labio inferior y me guiña uno de sus gatunos ojos.
Con mis manos me arreglo mi cabello rubio llevándolo hacia atrás y sonrió sutilmente.
Luego me levanto del cómodo sofá y camino hacia la barra moviendo mis caderas suavemente.
—Me da otro smoothie por favor. —pido amablemente.
—¿De qué sabor lo desea esta vez joven? —pregunta entregándome una carta, donde hay muchas opciones de sabores—el más pedido es el de piña—me sonríe señalando con su dedo índice el dibujo de aquella bebida.
El smoothie que había tomado anteriormente era de sandía , estaba muy rico, pero ahora quería probar otro sabor, así que asiento de acuerdo moviendo mi cabeza.
—Está bien, me da el de piña por favor.
—Se lo llevare en unos minutos joven. ¿Algo más?— inquiere ladeando su cabeza.
—Eso sería todo.
Respondo y El joven beta asiente empezando a hacer su trabajo, yo opto por regresar al cómodo sofá. Miro de soslayo al apuesto pelinegro que sigue sin quitarme la mirada de encima, me incita a querer menear las caderas y lo hago.
Me siento nuevamente cruzando mi pierna, de repente mi celular suena y lo saco de mi cartera, un mensaje de mi mejor amigo, Taehyung es lo que veo en la pantalla, lo desbloqueo colocando mi clave.
091319
Taehyungie. ❤️
¡Minie!
¿vayamos de compras mañana?
Confírmame Baby...
Yo.
Tae, ¡Sí! Vayamos, necesito lencería nueva. *guiño* *guiño*
Taehyungie ❤️
*sonríe de manera coqueta uwu*
Te iré recogiendo mañana en la tarde.
Yo.
Está bien my love <33 te estaré esperando.
Por cierto, ¿dónde estás?
Taehyungie ❤️
Estoy con Jungkookie ❤️
Yo.
👀 ¿dónde bebe?
Taehyungie ❤️
En su casa, hoy es el cumple de mi suegra.
Yo
¿Ya les diste la noticia? ❤️✨✨
Taehyungie ❤️
Aún no 🙊
Yo.
¿Kook no sospecha?
Taehyungie ❤️
Nop, mi lobo y yo decidimos ocultar nuestras feromonas.
Yo.
Ay!! Seré el padrino.
No es una pregunta.
Taehyungie ❤️
Clarooo que serás el padrino Minie...
Bebé, te dejo, mi suegra me está llamando, bye te amooo.
Yo.
Yei!!
Nos vemos, cuídate bebé y también te amooo!!
Le dejo un último mensaje y guardo mi celular, levanto la mirada y hallo al pelinegro bebiendo un mojito de mango. Nuestro juego de mirarnos y coquetearnos sigue por muchos minutos más, el Barman deja mi bebida en la mesita y yo le agradezco. Bebo del smoothie relamo mis labios y sonrió.
—Hola bonito.
Mi sonrisa se desvanece, al ver a un alfa sentarse a mi costado.
Hago una mueca disconforme, ¿Por qué habiendo más sitios libres se sentó justo a mi costado?, suspiro.
—Hola.
Saludo amablemente, aunque me sienta incomodo con su presencia.
—Eres muy lindo...
—Lo sé, me lo dicen siempre. —Respondo, me sobresalto al sentir su mano en mi pierna—no te di el consentimiento de que me tocaras. Así que deja de hacerlo.
Cuando quiero quitar su mano de mi pierna el alfa me da un fuerte apretón haciéndome jadear de dolor.
—ustedes los omegas solo sirven para complacernos. —Su rostro está a centímetros del mío, su olor a alcohol y cigarrillos me hace querer nausear. Quiero nausear.
—Usted está equivocado, los omegas no somos ningún juguete sexual. – replico con mis puños cerrados—Nadie lo es.—mi lobo gruñe mostrando sus colmillos.
—Ríe socarronamente, volviendo a apretar mi pierna—si yo quiero lo serás, solo debo usar mi voz de mano y en menos de un minuto estarás de rodillas chupando mi polla y rogando porque te coja como la perra que eres.—tienes un buen culo para que me recibas y una buena boca para que me la chupes.
Lo que me dice me hace hervir la sangre, malditos alfas machistas que se creen mucho por tener un rango mayor que el de nosotros los omegas y betas. Miro de reojo a aquel alfa rubio pero el ya no está.
—le pido amablemente que me suelte—ejerce fuerza en su agarre—me está doliendo—me quejo de dolor frunciendo el ceño y aguantándome el chillido de miedo que quiere soltar mi lobo.
Su mano libre se pasea por toda mi espalda, dando a parar en el tiro de mi pantalón, su olor a fuego y sidra se insetifica impregnándome, esto no me gusta, quiero salir huyendo de aquí, trato de levantarme, pero empuña una parte de mi blusa con su mano.
—No te he dado permiso para que te vayas.
Muerde el lóbulo de mi oreja, trato de empujarlo, pero me sujeta ambas manos.
—Suéltalo.
Una voz muy varonil me hace levantar la mirada, mi lobo se tranquiliza al ver al alfa pelinegro.
—Este asunto no es contigo así que lárgate—gruñe molesto.
—Le estoy ordenando a que lo suelte—su olor, Menta y chocolate amargo se pone agrio lo que quiere decir que está molesto.
—Lárgate idiota.
—Suficiente.
Sus ojos se tornan de un color rojo intenso, saca sus colmillos a relucir y lo siguiente que sucede es que le tira un puñete en la mejilla tan fuerte que lo hace caer de trasero en el piso y quejarse de dolor, por instinto me abrazo y agacho la mirada.
—Te dije que lo soltaras—su rostro refleja molestia, mucha molestia, suelta un gran gruñido y empieza a patearlo, el alfa se queja de dolor diciéndole que pare, pero el pelinegro no se detiene. —debes respetar a todos, alfa, omega u beta—se posiciona arriba de el –justo en el pecho—lo sujeta de la chaqueta y le tira un último puñete rompiéndole la nariz. —Idiota. — lo tira y Se levanta girándose hacia los guardias que recién habían llegado—ya saben lo que tienen que hacer.
—¡Si señor Min! —responden al unísono.
Una de las meseras le alcanza una toalla mojada con la cual se limpia las manos y parte de su cara, se la devuelve agradeciéndole, se acomoda su ropa y el cabello acercándose a mí.
—¿Te lastimó? – pregunta a lo que yo asiento—hijo de la gran puta—refunfuña apretando sus puños. —le daré su merecido...
—Ya estoy bien...-- hago una mueca con los labios.
—Sé que no.
Me mira directamente a los ojos, ese verde esmeralda brilla mucho, ese color de ojos me recuerda a cuando era un niño e iba con mis padres a las praderas en verano, solíamos convertirnos en nuestra forma lobuna y corríamos atrapando a las mariposas que había en aquel lugar, los ojos del pelinegro me envuelven en una paz única, esos ojos son los más bonitos que he visto en mi vida.
—Tu presencia me hace sentir bien, seguro. —digo y siento mis mejillas arder.
Min Yoongi
Aquellas palabras del bonito rubio hacen que mi bobo corazón lata de manera rápida en cada rincón de mi anatomía, mis ojos se centran en ver los suyos, un azul que es adornado por unas espesas y largas pestañas, un azul brillante que me hace recordar al océano, uno de mis lugares favoritos.
—¿Aceptas tomar una bebida conmigo? —pregunto, y el asiente, su rostro es decorado por un bonito color rosa en sus mejillas, me hace querer besarlas y morderlas. —¿Qué es lo que desea tomar usted, joven y apuesto omega?
—Sonríe de manera tímida—Un smoothie de fresa, por favor.— apresa su labio inferior con sus dientes.
—Una bebida sin alcohol.—digo pensando.
—Si—sonríe— he venido solo y no quiero pasarme de copas- hace una pausa bateando sus pestañas – no quiero que me pase alguna tragedia.
—Un omega precavido, me gusta.
Llamo a la mesera y le hago los respectivos pedidos, mientras ella se va me recuesto en el sofá. Observando al bonito rubio que esta con su mirada puesta en una pareja que está bailando.
I saw the fire in your eyes
I saw the fire when I look into your eyes
Take my breath de The weeknd resuena por todo el salón, el rubio se deja llevar por la canción y empieza a bailar en su mismo sitio.
—Me pongo de pie y estiro mi mano hacia el—¿Me concedes esta pieza...—espero a que me diga su nombre.
—Me mira con una gran sonrisa plasmada en su rostro—Jimin, Park Jimin. —se presenta.
—¿Me concedes esta pieza Park Jimin?
—Claro que si...-- ladea su cabeza esperando a que le diga mi nombre.
—Yoongi, Min Yoongi.
—Te concedo esta pieza Yoongi.
Entrelazo mis dedos con los del bonito omega y nos vamos a la pista de baile.
You tell me things you wanna try, uh
I know temptation is the devil in disguise.
—¿Puedo?
Le pido permiso para tomarlo de la cintura, el asiente con una sonrisa tímida que me causa mucha ternura.
Poso ambas manos en su delicada cintura y lo atraigo hacia mí, Jimin por instinto rodea mi cuello con sus brazos.
You risk it all to feel alive, oh, yeah
You're offering yourself to me like sacrifice
You said you do this all the time
Tell me you love me if I bring you to the light
Su cabello roza con mi nariz, hago una mueca y Suelto de mi aroma para impregnarlo con mi olor, no me gustaba el que llevaba encima, fuego y sidra, de aquel alfa hijo de puta que se atrevió a tocarlo.
Huelo su cabello y sonrió conforme, esta bañado de mi olor y mi lobo aúlla feliz.
It's like a dream what she feels with me
She loves to be on the edge
Her fantasy is okay with me
Then suddenly, baby says
Seguimos moviéndonos de un lado hacia el otro, Jimin recuesta su cabeza en mi pecho y yo dejo suaves caricias en su espalda. Aquel bonito rubio me hacía sentir dichoso.
Take my breath away
And make it last forever, babe
Do it now or never, babe (ah)
Take my breath away
Nobody does it better, babe
Bring me close to-
Se aleja de mi pecho, lo tomo de su mano derecha y le doy una vuelta, Jimin sonríe mostrándome esa bonita sonrisa, lo jalo delicadamente hacia mí, nuestras miradas se encuentran, él está con sus labios entre abiertos y me atrevo a chocarlos con los míos. Aquel toque de labios me hace sentir un cosquilleo que sube desde mi estómago hasta mi pecho, sus labios son tan suaves como las flores de nube. Sus labios son muy rositas, sus labios encajan perfectamente con los míos.
—Al parecer si probé el whisky esta noche. —se relame los labios bajo mi atenta mirada—es muy rico pr...
Su oración fue interrumpida porque lo bese muy delicadamente, lleve una de mis manos a su mejilla y la acaricie, Jimin tenía sus ojos cerrados, disfrutando de nuestro beso sabor a whisky y mango .
—Vayamos a un lugar más privado—se pone de puntillas para rozar su nariz con la mía-- ¿Si? —deja un casto beso sobre mis labios y yo muy bobamente asiento.
Entrelazo nuestros dedos y nos encaminamos hasta el estacionamiento del bar, como el rey que es, le abro la puerta de mi mercedes, sonríe mirándome y me dice un gracias seguido de otro casto beso en los labios, me estaba volviendo adicto a ellos.
—El cinturón Gi— me lo hace recordar así que me lo pongo.
—¿Alguna canción que desees?
—Just the way you are, por favor.
Asiento con mi cabeza y reproduzco la música.
.
.
.
Alrededor de veinte minutos llegamos a mi Pent-house, bajamos del mercedes y subimos por el ascensor hasta el último piso, un rico aroma a fresa y mango inundan mis fosas nasales, inhalo la rica combinación de aromas llenando mis pulmones de ellos, mi lobo y yo somos los más felices por tener el privilegio de estar en este momento con Park Jimin.
Las puertas se abren, soy el primero en salir, extiendo mi mano invitando a Jimin a seguirme, él no lo duda ni un segundo y entrelaza sus dedos con los míos.
Se sienta en el sofá de color beige que hay en la sala de estar, yo opto por ir a la cocina y traer algo de beber, sirvo vino en una copa y en la otro jugo.
A zancadas llego al rubio, me siento a su costado y le doy el jugo.
—Tu sala es muy bonita—mira los alrededores.
—Asiento conforme a lo que dice—una persona muy especial para mí la decoro.
Como el, también miro alrededor, la sala de estar es de color blanco, hay algunos cuadros colgando en las paredes, los sofás son de color beige, a excepción de uno que es de color negro, un candelabro de cristal cae del techo, hay un tocadiscos, un estante donde hay discos de canciones clásicas y un gran televisor.
—El jugo está muy rico, gracias.
Llevo la copa de vino hacia mis labios y bebo de ella luego la dejo a un costado, mis ojos se vuelven a encontrar con los zafiros azules, nos miramos por muchos segundos y tomo la iniciativa de acercarme y besarlo, Jimin lleva sus manos a mis hombros y se deja caer de espalda en el sofá, abre sus piernas dándome un mejor acceso, trazo un camino de besos por todo su cuello mientras me lleno de ese rico aroma.
Los apretones que me deja en mis hombros más los jadeos que suelta me están poniendo loco. Dejo una pequeña mordida en su cuello, me separo de su tacto a lo que el frunce el ceño confundido. Pero antes de que diga o se queje de algo lo cargo al estilo nupcial.
—Haremos el amor en un lugar más cómodo—dejo un beso sobre su cabeza. —no quiero lastimarte.
Se recuesta en mi pecho y asiente cerrando sus ojitos, con mi pie empujo la puerta de mi habitación, con suma delicadeza lo dejo sobre la grande cama. Abre sus brillantes orbes y me sonríe de manera un tanto coqueta. Le guiño uno de mis ojos haciéndolo sonrojar.
Jimin está sentando en forma de indio, yo subo a la cama posicionándome detrás de él, su espalda choca con mi pecho, dejo un beso en su nuca, luego se inclina, gracias a la blusa de encaje con abertura puedo ver su bonita espalda y su pequeña cintura, desabrocho botón por botón y se la saco, su piel brillante y suave hace que me piquen las manos por querer tocarla.
Su espalda está expuesta ante mis ojos y no desaprovecho la oportunidad de dejar besos húmedos en esta.
—Hmm~
Suelta un jadeo debido a que le había dejado una mordida en el lado izquierdo de su cuello.
De un momento a otro está sentado en mi regazo, una de mis manos está en su cintura y la otra está trazando círculos en su aureola, relamo mis labios y me acerco al botoncito rosa, saco mi lengua y lamo.
—Ah~
Me prendo de aquel rico pezón, chupo y muerdo como si mi vida dependiese de ello.
—Delicioso.
Lo recuesto en la cama y me acomodo entre sus piernas, ahora es el turno de chupar el pezón desatendido, me lo meto a la boca, y mamo como si fuese a salir leche de ahí, lo tomo entre mis dientes y lo jalo, Jimin emite un chillido de satisfacción,
Subo por su pecho en busca de su boca, apreso su labio inferior con mis dientes y lo jalo, nos empezamos a besar de manera vehemente mientras me desabrocho la camisa y la tiro por algún lugar de la habitación, luego aprovecho para meter el brazo bajo su espalda y estrecharlo contra mi pecho.
—Yoonie~
Nuestros torsos desnudos están calientes debido a la excitación, beso su cuello dejando marcas que más tarde se volverían violetas.
—Por... por favor—balbucea con los ojos cerrados.
—¿Lo quieres ya Minie?
Asiente frenéticamente, nuevamente lo recuesto en la cama, desabrocho su pantalón –Palazzo- luego lo deslizo con todo y bragas por sus largas y delicadas piernas, siento un tirón en mi parte baja al ver como su lubricante natural se desliza por sus nalgas, está preparado para recibirme.
Relamo mis labios y unto mi dedo índice con el lubricante, lo llevo a mi boca saboreándolo.
—sabes tan bien.— suelto un gemido de satisfacción.
Me pongo de rodillas, meto ambos brazos por debajo de sus piernas, tengo una excelente vista de su entrada y su pene erecto.
No pierdo el tiempo y trazo mi lengua por ese delicioso agujero de donde sale el lubricante, chupo sus nalgas y meto mi lengua en su entrada dando círculos, necesitaba prepararlo.
Parte de mi rostro esta mojado gracias al lubricante, ¿Me disgusta?, claramente no, quiero más de Jimin y lo voy a conseguir.
—Uh, si si.— Enreda sus dedos en mi cabello y me los jala, eleva un poco sus caderas queriendo más, y yo no soy nadie para negárselo.—si..siento que ya—su respiración es pesada—Yoon...
Dejo su entrada de lado –por el momento- y tomo entre mis manos su miembro para engullirlo en mi boca.
—Ah... hmm, ya, ya quiero...
—Hazlo cariño, córrete para mí.
Digo volviendo a meter su pene en mi boca, segundos después, siento el líquido caliente en mi garganta, lo trago todo sin dejar que ninguna gota se me escape.
—Lo reitero, sabes muy bien.
Me da una sonrisa cansina y se cubre sus pezones, me saco los pantalones junto a mi bóxer, al igual que mi camisa lo tiro por algún lugar de la habitación, con mi mano derecha agarro mi miembro y lo masajeo.
—Mi verga está ansiosa por entrar en tu estrecho agujero.
Esparzo el líquido prese-minal por todo mi falo, bajo la atenta mirada del bonito peligris, quien tiene la boca entre abierta y las mejillas muy sonrojadas.
—Primero te preparare, no quiero lastimarte...
—Ya estoy dilatado...-- dice abriendo sus piernas—tu lengua me dilato muy bien—más lubricante chorrea de su entrada, mojando las sábanas blancas.
—Joder Jimn, te juro que quiero mantener la cordura, pero no me ayudas...-- me inclino hacia él y lo beso de manera vehemente, manoseo su gran y redondo culo a mi antojo, doy falsas embestidas y el gime—aun no estoy dentro pero ya estas gimiendo como todo un putito.
—Tu putito Min, solo tuyo.
Sonrió de lado agarrando mi miembro, nuevamente lo masajeo esparciendo el líquido prese-minal.
—Voy a entrar...
—Hazlo ya...
Delineo mi miembro contra su entrada, nos miramos a los ojos, el asiente moviendo su cabeza dándome a entender que ya era el momento, no espero más y entro lentamente, clava sus uñas en mis hombros y suelta un fuerte gemido.
—Relájate cariño.
Su agujero es muy estrecho, siento que me lo va a partir.
—Jimin, cielo—empiezo a dejar besos en su rostro—relájate, no puedo entrar del todo.
—Eres muy grande...
—¿Pero te gusta?
Le pregunto, quería que se distraerá del dolor.
—Me encanta lo grande que eres...
Ahora que ya está más relajando entro del todo, me quedo quieto para que se acostumbre a la intromisión, me inclino a besarle delicadamente los labios.
Su cadera se empieza a mover dándome a entender de que ya podía moverme.
Salgo y entro nuevamente, suelta un sonoro gemido hundiendo sus uñas en mis hombros.
Repito el procedimiento un par de veces más, siento que me aprieta y desprende calor, saco la mitad de mi pene, está rojo y las venas están hinchadas, sujeto su cadera y embisto nuevamente, doy en su punto dulce que lo obliga a gemir y aferrarse a las sabanas.
—Hmm, si, Yoongi, justo ahí, ¡si si!
Sus gemidos son música para mis oídos, del cual quiero oír siempre, lo atraigo hacia mí, choco una y otra vez con su pelvis, hundiéndome todo lo que puedo en el.
—¡Mas, mas! Quiero todo Gi—cerro sus ojos con fuerza y arqueo su espalda.—ah, hmm...
Tome las piernas del peligris y las alce chocando sus rodillas contra mi pecho, embestí una y otra vez.
--Si, si ahí, ahí dale otra vez—gimió—mierda se siente tan bien...
—Me aprietas muy bien, estoy en el puto cielo...-- jadea relamiéndome los labios.
—Ya, ya siento que me voy ha...
Tome el miembro del omega y lo masturbe para ayudarlo a llegar más rápido.
—Hmm... ah...
Unos movimientos más y Jimin se corrió manchándome mi mano y parte de su estómago, su reparación era agitada y cansina, bajo sus piernas y deje de moverme.
Un anillo de oro con diamantes azules y verdes decoraba su dedo anular, sonrió elevando su mano hasta la comisura de mis labios, dejo un beso en aquel bonito accesorio y doy un par de embestidas más, llenando el interior del omega, mi nudo empieza a crecer dentro de él y suelta un quejido.
Dos aromas más llenan la habitación uno es vainilla, aquel aroma sale a relucir cuando anudo a mi precioso omega, es nuestro aroma de destinados.
El segundo aroma es leche, hace un mes recibi la mejor noticia del mundo, mi precioso esposo me daría unos de los regalos mas grandes que podría tener, un bebe.
—Alfa...—gimotea.
—Aquí estoy mi precioso omega, dejemos que el nudo baje...
El asiente con su cabecita, me acerco a olfatear su cuello, lamo donde está mi marca, preparándola para morder nuevamente, cuando siento que ya está listo, saco a relucir mis colmillos y muerdo, mi esposo chilla de dolor, saco mis dientes de su cuello y lamo limpiando los rastros de sangre.
—Te amo.—beso su nariz.
—Te amo mucho más alfa—ronronea feliz y ladea su cabecita dándome a entender que quiere que le siga dando cariñitos en su cuello, rozo mi nariz en la glándula de olor
—Eres mi todo, eres mi vida, mi >>dulce<< amor...
El nudo bajo y con cuidado salgo de él, mi semen se escurre de su agujero, y yo como todo un receloso, lo vuelvo a meter con mis dedos, quería que todo estuviera dentro.
—Ya me embarazaste ya—suelta una risilla.
—No está de más llenarte mas—niega con su preciosa sonrisa, llevo mis manos a su apenas abultado vientre-- ¿los lastime?—pregunto con miedo.
—Nuestro bollito y yo estamos bien—dice y dejo caricias en su vientre.
—¿Seguro mi amor?, ¿te llevo al hospital?
—Alfa, nuestro cachorro y yo estamos bien, lo prometo.
—Dejo muchos besos en su vientre—está bien omega, pero si sientes algún dolor dímelo.
Estiro mi brazo hasta la mesita de noche y agarro el paquetito de pañitos húmedos, saco unos y limpio a mi bello esposo.
Cuando termino de limpiarlo, me limpio yo, luego tiro los paños sucios por el piso ya mañana limpiaría, me acuesto al costado de Jimin y lo atraigo hacia mí, acaricio su cintura mientras dejo un beso es su frente.
—El próximo fin de semana jugaremos al jefe y secretario. —dice mirándome a los ojos-- ¿si alfa?
El juego de esta noche consistió en ir a una discoteca, hacernos los que no nos conocíamos y coquetearnos, hasta llegar a como estamos ahora, estaba bien salir de lo monótono.
—Lo que me diga mi rey—lo beso y de manera traviesa le muerdo el labio. – ahora dime, que es lo que te dijo ese hijo de la gran puta...
—¡Yoon no digas esas palabrotas! —me riñe.
—Se atrevió a tocarte—replico, mi lobo se remueve furioso en mi interior—ahora dime que es lo que te dijo, dame todos los detalles.
Mi rubio suelta un gran suspiro y empieza a contarme todo con lujos y detalles, yo escucho atentamente mientras mi sangre empieza a hervir de la rabia.
🌙💕
Sus cabellos tapan parte de su frente, su respiración pausada y tranquila me hace saber que está descansando muy bien, me tiene abrazado de la cintura, agarro una de las almohadas que estaban detrás de él y la impregno con mi olor, levanto su brazo con cuidado y me muevo tratando de soltarme de su agarre, cuando lo logro coloco la almohada debajo de su brazo, frunce su ceño y abulta sus labios, pero no se despierta.
—Ya regreso mi amor- me inclino hacia él y le dejo un beso en su frente.
Me fijo en la hora, cuatro y media de la mañana, me pongo un pantalón, un polo, encima una chaqueta de cuero negra y unas botas altas del mismo color , miro por última vez a mi esposo y salgo.
Manejo por veinte minutos hasta llegar a un club abandonado, abro las puertas, y escucho lloriqueos.
—¿Dónde está?
Le pregunto a Namjoon y Hoseok
—Está en la última habitación.
Namjoon responde y me encamino hasta donde me dijo, ellos siguiéndome el paso, abro la puerta, miro a mi costado, agarro el palo de metal y lo arrastro por el piso.
——Agarren de los brazos a esa escoria—señalo con el palo de metal— así que te atreviste a poner tus mugrosas manos en los más preciado que tengo—me acerco de manera amenazante al peli azul—le dijiste que era un juguete sexual, ofendiste a mi esposo y a mi cachorro, los insultaste, no sabes cómo me estoy conteniendo para no arrancarte la cabeza ahorita mismo—agarro su cara de manera brusca haciéndolo gemir de dolor— vas a morir lenta y dolorosamente— me alejo un poco de la escoria, con ambas manos agarro el palo y golpeo su estomago, un quejido de dolor resuena por todo el lugar—esto y lo que te hice en el bar es un inicio de todo lo que te hare—mis ojos se tornan de un rojo brillante y dejo que mi lobo tome el control.
❤️
Min Jimin
Omega
Aroma: Fresa y durazno.
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