[15] Te lo dije
—¿N-no quieres comer? —preguntó el omega notablemente avergonzado por la reciente escena, habían compartido varios besos algo animados y ahora estaban en otra posición, ninguno de los dos sabía como el omega había terminado sobre el abdomen del alfa mientras que las manos del mismo estaban en sus muslos. El alfa sonrió y alzó su mano para acunar su mejilla, dejando pequeñas caricias con su pulgar.
Todo parecía irreal, casi un sueño, no podía creer nada de lo que estaba pasando.
Sin querer avergonzar más al omega, asintió.
Los dos se levantaron y acomodaron sus ropas antes de ir a la cocina, SooBin se apoyó en la encimera y miró con una leve sonrisa el girasol dentro del vaso.
—No sé cocinar otra cosa que no sea pasta y kimchi, así que elije cual de las dos —dijo luego de revisar los gabinetes y la nevera. El alfa ladeó su cabeza pensativo buscando algo que él supiera hacer para así cocinar junto al omega.
No se sentía bien mirar como el omega cocinaba pudiendo ayudarlo, o eso pensaba él.
—¿Por qué no hacemos un pastel? —propuso sonriendo a la par del omega.
—Agradece que viva con una omega amante del dulce y la repostería, tengo todo para hacerla —habló mientras se acercaba a él, por alguna razón que los dos desconocían querían permanecer todo el tiempo juntos, por eso el omega se dejó abrazar por el alfa mientras acariciaba sus mejillas— ¿De qué sabor, SooBin-ssi?
El alfa volvió a llevar su nariz a la glándula de olor del omega e inhaló sintiéndose demasiado calmado por aquel olor dulzón.
—Vainilla —mencionó haciendo reír al omega que estaba encantado por el gusto notable del alfa por su olor.
—Te reto a abrir el huevo con una sola mano —retó YeonJun al alfa con los brazos cruzados y una ceja arqueada. SooBin hace minutos le había retado a hacer malabares con los mismos huevos y lo había hecho sin ningún problema, solo uno quedó en el suelo.
SooBin hizo un sonido denotando lo fácil que era el reto, tomó uno de los huevos y lo golpeó en el borde de la encimera, lo llevó al cuenco de la mezcla y le guiñó un ojo al omega que solo estalló en risas cuando vio como el huevo caía destruido sobre la harina, con cáscara incluida.
—¡Ayudame y deja de reír! —exclamó el alfa a pesar de estar riendo igualmente, el omega fue a ayudarlo, la sala quedando en silencio por lo concentrados que estaban en quitar la cáscara de la mezcla.
Al terminar el omega dejó un beso en la mejilla del alfa.
—No has cumplido el reto así que te toca una penitencia —dijo vertiendo harina en su mano para luego dirigirse al alfa que negó.
—¡No es justo! —se quejó tomando otro huevo para verterlo esta vez, usando las dos manos. YeonJun rió y estampó su mano llena de harina en su cara, riendo por como había quedado.
El alfa se dio la vuelta y lo besó con fiereza. El omega se dejó hacer y rió en cuanto se separaron.
Los dos siguieron preparando la mezcla, SooBin mezclando con su mano alegando que así lo hacia su madre.
Aunque en realidad lo hacía la mujer que cocinaba, pero YeonJun no tenía porqué saberlo aún, ¿verdad?
—Es la primera vez que veo a un alfa, que no sea mi padre, cocinando —comentó el omega mientras guardaba todo en su lugar, abriendo un gabinete cerca del alfa en donde ChaerYoung tenía moldes de todas las formas.
SooBin sonrió, sintiéndose feliz por aquel comentario del omega.
Aún estaba mezclando, no podía dejar de mezclar si quería que el pastel quedase bien así que solamente estiró su cuello y miró los múltiples moldes que YeonJun tenía en frente.
Se sintió un cursi por lo que iba decir, pero estaba enamorado, no podía hacer nada en contra eso.
—Me gusta la de corazón —dijo sonriendo. El omega sacó dicha bandeja y la dejó a su lado.
El peligris apoyó su barbilla en el hombro del alfa y lo miró fijamente.
—Eres un alfa muy cursi —dijo estirando sus labios en forma de pato lanzando múltiples besos— Me gusta —y se separó llenando la bandeja de mantequilla usando una paleta.
—Eso lo puedes hacer con las manos, así puedes llegar a los bordes —informó SooBin cuando vio lo que el omega estaba haciendo.
YeonJun se quejó intentando llegar a los bordes del molde con la paleta, pero fue en vano, debía hacerlo con las manos.
Pero no le gustaba la sensación aceitosa o espesa en sus manos, por eso lo terminó haciendo SooBin que reía por las caras que ponía el omega al hacer algún ruido viscoso con la mantequilla.
El alfa vertió toda la mezcla en el molde asegurándose de que quedase pareja y que no quedase nada de mezcla en el cuenco.
Al terminar llevó un dedo a su boca probando la mezcla.
Hizo un sonido de aprobación.
—Quedó buena la mezcla —halagó estirando su mano al omega que también hizo una mueca de asco.
—Eso me causa dolor de estómago, tiene huevo crudo —negó solamente oliendo la mano del alfa que rió notando lo delicado que era el omega en ese ámbito.
YeonJun se encargó de encender el horno y meter el molde, colocando también el temporizador para treinta minutos.
Por otro lado, SooBin con la cara y las manos ya limpias y secas pellizcó la nariz del omega.
—No te lo había dicho, me encanta tu aroma —dijo pasando su mano por el cabello ajeno, YeonJun sonrió sintiendo su corazón agitado— Es... Increíble, no es lo que yo imaginé, ni la cuarta parte.
El omega sonrió y, accidentalmente, dejó salir feromonas de alegría que hicieron sonreír al alfa. Estaban en paz, estaba felices, no existía otro mundo, solo ellos dos.
—Te vas a quemar —dijo YeonJun moviendo su pié insistentemente contra el suelo.
—No lo voy a hacer —le contestó el alfa colocándose los guantes, hace minutos había sonado la campana que indicaba que el pastel estaba listo y los dos habían entrado en una pequeña pelea para saber quién sacaría el pastel.
SooBin no quería que el omega se quemara.
Y YeonJun solamente quería sacar el pastel, ChaerYoung nunca le dejaba cuando hacía ese postre y pensaba que con el alfa sería diferente.
—Te vas a quemar, SooBin —descruzó sus brazos en cuanto el alfa tambaleó levemente con el pastel.
—Que no, no es mi primera vez haciendo un... ¡Mierda!
—Te lo dije —rodó los ojos y fue a ayudar al alfa. El pastel había salido ileso, así que, luego de curar la leve quemadura del alfa ya tenían el pastel en una rejilla para ayudar a que se enfriase.
SooBin abrazó la espalda del omega y besó castamente su cuello sonriendo por el escalofrío notable que tuvo.
—¿Aún quieres que te corteje? —preguntó algo dudoso y temeroso de la respuesta del omega que rió mirando las manos del alfa entrelazadas sobre su estómago— ¿O quieres...
—¿Ser algo más? —preguntó dándose la vuelta entre sus brazos, sus narices se rozaron suavemente y sus ojos conectaron por una milésima de segundo en donde supieron que la pregunta y las respuesta estaba de más, ya el cortejo había acabado.
—Eres mi omega de vainilla entonces —murmuró cerca de sus labios, el omega rió y asintió avergonzado por el apodo que había quedado fijo en él.
Su pequeña burbuja fue rota por el sonido de un celular, el omega rodó los ojos y fue a ver quien era, atendiendo de inmediato en cuanto observó el nombre.
—¡Yeon-ye! ¡No sé que hacer! —la voz de ChaerYoung resonó por la bocina.
—¿Qué pasa? —preguntó recordando el glaseado de chocolate que había en la nevera, caminó hasta ella y lo sacó dejándolo a la vista del alfa que asintió, acatando.
—¡Kai me dijo que le comprase una pizza! E-está comprando otras cosas y me dejó a cargo de la pizza, ¡y no sé cual pedir!
—Chae...
—¿Crees que le guste la Hawaiana? Supongo que si, es de Hawaii, pero, ¿sería una ofensa para él? No lo creo, pero y si...
YeonJun separó el teléfono de su oreja y le pidió al alfa que le dijera un número.
—Ocho —contestó SooBin dejando el glaseado encima del pastel.
—Chae, escoge la número ocho y deja de desvariar, ¿si? —y la omega, luego de decirle lo mucho que lo quería por ayudarle colgó.
El omega sintió un poco de ternura por la acción de la omega, se notaba que no quería hacer algo mal en esa cita.
YeonJun dejó su teléfono en la encimera y fue con el alfa que chupaba sus dedos con glaseado.
—No seas cochino —le dijo con una mueca de asco, SooBin rió y mostró el pastel con una sonrisa orgullosa.
El omega sonrió sintiendo un cosquilleo con esa acción.
¿Por qué se imaginó todos sus sábados así?
¿Por qué se imaginó al alfa haciéndole cualquier cosa de comer al llegar al trabajo y viceversa?
Avanzó y lo besó castamente antes de sacar dos platos y dos cucharas para poder comer el pastel. YeonJun fue el encargado de picarlo ya que el alfa alegó ser muy malo para picar pasteles, así que mientras YeonJun picaba el pastel en dos porciones iguales, SooBin solo lo veía.
—¿Por qué me ves? Me das miedo —comentó el omega dejando el primer pedazo en el plato un beso en su mejilla tomándolo por sorpresa, se quejó en cuanto el alfa no le dejó picar su parte de pastel por estar robándole constantes besos.
—Me gustas —le dijo el alfa con una sonrisa. YeonJun rodó los ojos divertido, esas cosas le avergonzaban pero no dejaría que el alfa lo supiera.
Al tener las dos rebanadas en los platos volvieron al sillón a comerlas empezando una conversación cualquiera en donde los dos soltaban fuertes carcajadas y aveces se ofendían por la opinión del otro.
SooBin fue el primero en terminar de comer, en medio de todo había notado que el omega no era tan amante del dulce, se estaba comiendo su rebanada, si, pero lo hacía con tal lentitud que le dejaba en claro que le empalagaba solo un poco.
¿Cómo un omega puede tener un aroma dulce y no gustarle mucho el dulce? Se preguntó antes de quitarle el plato al otro con delicadeza.
El omega se quejó.
—No te gusta —afirmó SooBin alzando el plato para que el otro entendiera a que se refería.
—Si me gusta —asintió el omega— Solo que... Uh... Tal vez no me gusten mucho las cosas dulces —aclaró ya derrotado por la mirada del alfa que dejó el plato en la mesita frente a ellos y se inclinó hacia él.
—¿Por qué accediste a hacer un pastel entonces? —ladeó su cabeza sonriendo, el omega aprovechó y tocó los hoyuelos del alfa con sus dedos.
—Porque quería verte haciéndolo —contestó simple dejando de tocar sus hoyuelos. En menos de una milésima el alfa ya estaba besándolo con pasión, no le había dado tiempo de siquiera tomar algo de aire, lo había tomado desprevenido y se lo hizo saber al separarse en medio de un jadeo.
El aroma a chocolate y café se hizo más intenso y el de vainilla no se quedaba atrás, los dos aromas estaban combinados en el aire y eso los tenía locos.
El omega fue el siguiente en empezar otro beso llevando sus manos a los hombros del alfa y dejaba que las manos del mismo se posaran nuevamente en sus muslos. Como todo un experto el omega mordió y succionó el labio inferior del alfa, sacándole un gruñido además de un escalofrío.
Ya las manos del alfa reposaban en su cintura, bajo su camisa, los dos se vieron fijamente. Pupilas dilatadas, mejillas coloradas y respiraciones agitadas.
—Vamos arriba —propuso el dueño de la casa sonriendo de medio lado, el alfa no puso objeción alguna y lo siguió hasta la habitación en el segundo piso.
Al entrar el olor a vainilla era más intenso que antes, estaba en la habitación del omega, era obvio que el aroma estuviera más fuerte además de la reciente y obvia excitación del mismo.
Nuevamente sus cuerpos se juntaron en un abrazo, más sus labios no se juntaron.
—¿Estás seguro? —preguntó el alfa en medio de un escalofrío, las manos del omega se estaban paseando por la piel expuesta de su cuello.
YeonJun rió suavemente.
—Si no hubiese estado seguro no te traigo hasta aquí, ¿no crees? —preguntó antes de retomar aquel ritmo acelerado y apasionado que impulsó al alfa a apoyarlo con delicadeza en la arreglada cama.
YeonJun no sabía que la pregunta anterior no fue dirigida hacia él, SooBin se lo había preguntado a sí mismo en voz alta pero no estaba de más que el omega le asegurase su seguridad en el asunto.
¿SooBin estaba listo?
SE VIENE, SE VIENEEEE
Ahora si, el siguiente capítulo es lemon u.u
¿No han notado que en todos mis fic de TXT coloco una escena en donde cocinen algo dulce?
Estuve pensando y podría hacer un TaeGyu/BeomHyun con esa temática de repostería (?
The_Dark_Diamond
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