Te quiero porque, a pesar de todo, tú coloreas todo mi mundo cuando está gris; porque eres quien quiero que me cuide y a quien quiero cuidar; porque quizás es una locura amarte y a la vez lo único cuerdo que hice en mi vida; porque encontré a mi otra mitad.

Me demuestras todo lo que sientes por mí aunque no sea visible ni tangible.

Pero aún así, conseguiste hacerme escribir, reír y sentir.

Conseguiste que los lunes inesperados sean mis días preferidos de la semana.

Conseguiste que volviese a creer que las cosas se pueden cambiar.

Me recordaste que hay miradas capaces de atravesar salas llenas de gente; en las plazas, en los bares y aquí dentro.

Que hay energías capaces de crear mundo paralelos en los que solo caben dos.

Como tú y yo.

Te amo, Harry.

──Por y para siempre tuyo, tu novio y pequeño Lou.