Sunoo 10 años, SooYoung 6 años, TaeHin 9 años, GyuHin 9 años y TaeYeon 6 años. 

Dos días después.

—¡SooYoung, TaeYeon y GyuHin! ¡Vengan acá! —TaeHyun persiguió a las tres niñas que corrían por toda la sala de estar con las pinturas de uñas de GyuHin abiertas, ya se habían pintado las uñas las tres pero ahora querían hacer quien sabe que con las pinturas que, gracias a que no estaban tapadas, se derramaran en sus ropas y suelo.

TaeHyun estiró sus brazos y tomó a la pequeña TaeYeon que carcajeó como si fuese lo más divertido del mundo, en eso, los dos niños salieron corriendo de las habitaciones de los mayores vistiendo los trajes que TaeHyun usaba para trabajar.

—¡TaeHin! ¿¡Qué haces sin pantalones!? —gritó arrebatándole el esmalte a TaeYeon, la niña puchereó— ¡Sunoo, te vas a caer! —advirtió mirando como el mayor de los niños tenía un par de zapatos pertenecientes a BeomGyu, obviamente los zapatos eran mucho más grandes y podía tropezar.

Kang se apresuró y sostuvo la mano de Sunoo antes de que cayera.

—¡Papá, soy un ninja! —gritó TaeHin sujetando una de las corbatas de TaeHyun en su frente. En eso, el alfa se acordó de las otras dos niñas.

Pero antes de gritar el nombre de alguna se llevó una gran sorpresa.

—¡Bomba de humo! —gritaron las dos niñas arrojando harina en la cara del alfa, Sunoo abrió su boca en una "O" mientras que TaeYeon aplaudió mirando parte de su cabello blanco por la harina.

En eso, la puerta se abrió.

BeomGyu había llegado.

—Ya llegué —avisó bajo mirando lo estáticos que se habían quedado los niños con su llegada.

¿Recuerdan que en un principio los niños no le hacían caso a BeomGyu pero si a TaeHyun?

Pues ahora, era al revés.

—Hola, niños —saludó mirando la expresión de TaeHyun, el alfa estaba molesto, irradiaba ira pero los niños estaban más al pendiente de BeomGyu— Sunoo, ve a quitarte eso, ¿si? —dijo con total calma mirando al Choi mayor irse entre tropezones a la habitación en donde había sacado todo— TaeHin, ve a dejar eso en donde lo encontraste. SooYoung, tapa el esmalte, por favor —la niña tapó el esmalte mientras que TaeHin corría hasta donde estaba Sunoo a dejar las cosas de su papá ahí— GyuHin, dame tus esmaltes, por favor —pidió el omega estirando su mano, como sabemos GyuHin tiene cierto parecido con BeomGyu, más no sólo en lo físico.

—¡No me las quites, papá! —negó empezando a correr para que BeomGyu no le quitara lo más preciado que tenía, según ella.

Cuando TaeHyun miró como BeomGyu tropezó con un auto apenas hizo ademán de correr tras la niña, ahí, explotó.

—¡Kang GyuHin! ¡Te están diciendo que le des los esmaltes, ahora! ¡Haslo y no repliques! —el grito resonó por toda la casa, TaeYeon, que seguía en los brazos de su papá empezó a llorar mientras que SooYoung desaparecía por donde estaba su hermano, GyuHin frunció el ceño.

—¡No quiero, no quiero, no quiero! —empezó a gritar una y otra vez, pataleando. TaeHyun soltó a TaeYeon que salió corriendo con sus primos y hermano.

Y eso, incrementó la molestia de Kang.

—¡Dame acá! —le gritó a la niña avanzando hasta ella, tomó las pinturas de uñas de sus manos, GyuHin se resistió así que hubo un pequeño forcejeo que hizo caer a la niña de espaldas al suelo.

BeomGyu se había quedado estático en su lugar, era ls primera vez que veía a TaeHyun tan molesto y a su hija tan... Agresiva.

GyuHin se levantó del suelo y, con toda la fuerza que pudiera tener una niña de su edad golpeó una de las piernas de Tae.

Ahora si, BeomGyu reaccionó al ver el impulso que estaba tomando TaeHyun para propinar un golpe a la niña.

Ellos habían prometido no pegarle a los niños.

—¡Vete a la habitación! ¡Ahora! —le gritó interponiéndose entre el alfa y la niña que seguía firme en su posición, sin una lágrima.

TaeHyun soltó un gruñido y avanzó a la habitación, TaeHin, SooYoung, Sunoo y TaeYeon salieron corriendo, uno tras el otro apenas vieron a TaeHyun entrar a la habitación.

BeomGyu volteó a ver su hija que estaba con el ceño fruncido y los brazos cruzados.

—Escuchame bien, GyuHin, lo que acabas de hacer es una gran falta de respeto y-...

—No me importa —contestó alzando su mentón, BeomGyu gruñó y tomó uno de los brazos de la niña, en eso sus ojos cambiaron de color, señal de dominio lobuno, el color esmeralda en los ojos de BeomGyu intimidó considerablemente a la niña. Después de todo, nunca había visto aquello en su padre.

—Entonces no te va a importar tener que recoger todo el desastre, lavar los platos, y acomodar la ropa tuya, ¿verdad? Estás castigada, GyuHin, quiero que me des todos tus esmaltes de uñas y todas tus muñecas-...

—¡Pero-...

—¡Silencio! —la niña sintió sus ojos cristalizarse con el grito de su padre, empezó a llorar bajo— Le pegaste a tu papá, nos faltaste el respeto a los dos, ahora, quiero que hagas lo que te dije. Ahora —la niña asintió y se fue cabizbaja a su habitación para sacar todos los esmaltes y muñecas— ¡TaeHin, SooYoung, Sunoo y TaeYeon! —gritó mirando a los cuatro niños llegar cabizbajos— Quiero que ordenen todo, Sunoo y SooYoung, voy a llamar a-...

—¡No llames a papá Soo, tío! No no —BeomGyu ignoró la petición de Sunoo y miró a sus hijos empezar a ordenar todo en silencio y cabizbajos. SooYoung le indicó a Sunoo que hiciera silencio. Les iría peor si hablaban.

—Les doy diez minutos, quiero todo este desastre ordenado, ¡y no quiero ver las cosas metidas bajo el sillón! —los niños asintieron y se dedicaron a ordenar en silencio, BeomGyu buscó a GyuHin y la miró sacando sus esmaltes con lentitud, estaba refunfuñando mientras evitaba a toda costa llorar.

Se parecía tanto a él.

—Tae...—entró a la habitación encontrando al alfa de brazoz cruzados sentado en el borde de la cama.

—Me pegó —dijo con el ceño fruncido— ¿Qué le pasa? ¡Y como si fuera poco! Sigue contestando y refunfuñando, no sé que hacer con ella ya —le dijo al omega que suspiró pasando sus manos por su cabello.

GyuHin era la más problemática de los tres, era la respondona, la gruñona y gritona. Ya BeomGyu y TaeHyun no sabían que hacer, no era la primera vez que la niña contestaba y refunfuñaba, pero si era la primera vez que contestaba.

—Voy a llamar a SooBin, lamento mucho interrumpirlos pero es importante —dijo tecleando en su teléfono el número de su mejor amigo.

Por otro lado, SooBin y YeonJun...

—¡Fondo! ¡Fondo! ¡Vamos, SooBin! —animó YeonJun al alfa que estaba tratando de beber de una botella de gaseosa sin detenerse, SooBin dio el último trago de la gaseosa y tosió, sonriendo por el festejo de su omega que lo abrazó, haciéndolo caer al suelo, los dos se sonrieron.

—Ya no vas a tomar más, ¿si? Eres un intenso cuando bebes mucho —se quejó el alfa frunciendo el ceño, YeonJun chasqueó la lengua.

—No te gusta porque no te dejo tocarme —se burló besando las mejillas del alfa que rió admitiendo que era así, en el silencio que se formó entre ellos dos, con YeonJun besando las mejillas de SooBin, el teléfono del alfa sonó en la caja en donde tenían dichos aparatos.

Los dos se vieron y se levantaron.

—Vas a ver quien es, si es BeomGyu o Tae contestas, puede que sea algo de los niños, si no, no contestas —dijo YeonJun abrazando a SooBin por la espalda, besando la piel cercana causando risas en él.

SooBin atendió la llamada al ver el nombre de su mejor amigo allí.

—¿Hola? —y así, lentamente se fue borrando la sonrisa de Choi, BeomGyu luego de contar todo se disculpó con sus amigos pues entre él y Kang se habían ofrecido a cuidar a los niños y que tuvieran un tiempo a solas, más lo que se había presentado no podían ni querían pasarlo por alto de los Choi.

SooBin gruñó molesto indicando que iría por sus hijos, YeonJun notó su molestia y preguntó.

Y ahora la pareja de casados estaba en el auto, con los ceños fruncidos y los aromas agrios, prueba de su molestia.

SooBin tocó el timbre de la casa Kang saludando con un afectuoso abrazo a TaeHyun y a BeomGyu quienes luego de disculparse de nuevo por interrumpirles les dejaron pasar.

—Choi Sunoo y Choi SooYoung, al auto, ahora —ordenó YeonJun con el ceño fruncido a los dos niños que estaban sentados en uno de los sillones, ya con sus mochilas en sus piernas, los dos hermanos obedecieron y salieron cabizbajos hacia el sitio sabiendo que el regaño sería grande cuando llegaran a casa.

La pareja Choi agradeció a sus amigos por cuidar a sus hijos y por darles esos consejos, que si bien no se cumplieron los días debidos, tanto SooBin como YeonJun se sentían satisfechos.

Se despidieron y volvieron con sus hijos, Kang a su vivienda y Choi a su auto, YeonJun entró en el asiento del conductor mientras que SooBin estaba en el asiento de copiloto, los niños bajaron la mirada al sentir las de su padres.

—¿Qué es eso en tu ropa, SooYoung? —preguntó SooBin intentando mantener la calma.

—U-uh... Un poquito de esmalte de uñas, papi —contestó haciendo al alfa arquear la ceja.

¿Un poquito? La niña tenía todos los pantalones llenos de ese químico.

—Y tu, Sunoo...

—Yo estoy limpio, papá Soo —dijo el niño con rapidez.

—Pero nos prometiste que serías buen niño, tú también lo prometiste SooYoung y miren, ¿qué les pasó? Tienen que respetar a sus tíos —y así fue en todo el camino, SooBin dándoles una charla a los dos niños que sólo asentían cabizbajos. Cuando llegaron a casa, YeonJun e estacionó y miró a sus hijos.

—Quiero todos sus juguetes afuera, se duchan y van a sus rincones, tendrán una semana de deberes —dijo bajando del auto.

—¡Pero papá-...

—Son dos semanas entonces —SooYoung cruzó sus brazos y caminó tras SooBin mientras que Sunoo se quejaba tras YeonJun.

Ah... Ya los niños estaban creciendo, se estaban poniendo cada vez más rebeldes, y sería un martirio lidiar con ellos.

Pero debían hacerlo, eran sus padres después de todo.

¡Holaaaa! ¿Me extrañaron? Pues yo si lo extrañé mucho y extrañé actualizar este fic, espero les guste el maratón, denle mucho amor 💜

SPAM TIME

Pues, si no se dieron cuenta acabo de publicar una nueva historia YeonBin, pueden encontrarla en mi perfil, la hice con mucho amor para ustedes 💜

Y sin más que decir...

Nos vemos 😉

©The_Dark_Diamond