Soojin

Estaba fingiendo la mejor de las sonrisas la verdad no sé cómo llegué a una tercera cita con este alfa, la primera fue agradable y en la segunda hubo incluso besos y algo más pero está ha sido terrible.

Se ha comportado como un imbécil con las personas del bar, se la ha pasado mandando mensajes y nada más tocándome sin siquiera ser agradable.

Así que le mandé un mensaje a Soyeon  diciéndole mi ubicación y  un SOS ella sabría que hacer en estos casos.

—Pero ya te digo que si vamos a la playa este fin de semana es mejor, me encantará que modeles trajes de baño para mí.

Su mano fue directo a mi muslo y yo ya había perdido la paciencia.

—¡SOOJIN ! —aun entre el ruido de la música pude escuchar su voz con un gruñido— ¿Dime qué no es verdad?

Se acercó dándole la espalda a mi pareja, se veía molesta, se cruzó de brazos y me guiñó un ojo.

—Soyeon.

—Nada de Soyeon , se que estabas enfadada pero tú berrinche llegó lejos, no puedes usar a las personas solo porque nos peleamos.

—¿Disculpa?

El sujeto se levantó de su asiento.

—Es que Soyeon .

—Hablaremos en la casa Seo.

El Alfa se puso enfrente de ella, la diferencia de estatura era demasiada, a pesar de que Soyeon es una alfa alta. Aún así  ella no se inmutó ni un segundo.

—Soojin está conmigo —quisieras —no se quién seas, pero puedes retirarte —solto sus feromonas amenazando a Soyeon.

—Si me iré, pero con mi omega —Soyeon  paso de largo a tipo y me tomo de la mano —fuiste un lindo pasatiempo para ella, pero es mía.

Y así en medio de un bar con gente que tal vez no nos prestaba atención y con una cita mal lograda, me besó sin miedo de nada, de esos besos que solo ella sabe darme, un beso caliente, varios alrededor se quedaron disfrutando del espectáculo pues en realidad era una escena candente.

—Pensé que ella prefería a los alfas masculinos — gruñó enfadado.

—¿Te jode cierto? —se rio un poco —mejor piensa en ella como una bonita omega que tuviste la oportunidad de conocer.

Paso a su lado de nuevo para tomar el vaso con Whisky que él había pedido y se lo bebió de un golpe. El tipo nada más se le quedaba viendo.

—Podríamos divertirnos los dos con ella —finalmente dijo el animal.

—¡ja! No dejaría que le pongas un mano a Soojin  encima, toma —saco cincuenta dólares y se los dio —por el trago, y para que llames un taxi así no te regresas solo.

Perfectamente me puedo defender y si no me gusta algo decirlo a la cara de ese alguien, pero en verdad disfruto que ella lo haga por mi, es divertido y me pone.

Caminamos por el bar de la mano, casi me llevaba arrastrar, vi que iba pidiendo un Uber, al final salimos del bar para esperar el auto.

—Gracias por alejarme de ese pulpo.

—Nada de gracias, voy a cobrarme el favor.

Jalo de mi mano y tomo mi rostro para volver a besarme usando su lengua de manera obscena dentro de mi boca.

—Se supone que eres mi amiga no debes cobrarme los favores —dije al recuperar el aire.

—Debo de aprovecharme cuando puedo, tengo casi un mes sin tocarte, desde que empezaste a salir con él pulpo.

—No era aún mi novio apenas estaba conociéndolo.

—De saber que podía meterme a tu cama lo hubiera hecho —luego olió mi cuello —pero tenías su aroma y me irritaba.

—No preguntaste.

Hizo una mueca y me reí, en eso llegó nuestro auto, subimos y no dejaba de besarme el cuello, su mano estaba dentro de mi falda acariciando mi muslo.

—Deja que lleguemos a casa que no quiero que el conductor nos vea —susurre ya algo excitada.

—Lo siento, pero no me puedes tener en abstinencia y decirme que me controle —su mano cada vez estaba más profundo —estoy entrando en mi celo, linda Omega.

—Pudiste ir a acostarte con cualquiera.

—Si, pero tú no eres cualquiera —se me acercó más al oído —me gusta follar contigo.

—Maldita descarada.

—Llegamos señoritas —Soyeon  le pago mientras bajábamos del coche —tengan linda noche.

—Claro que la tendré.

No me dejó pasar del umbral de la puerta cuando ya nos estábamos quitando la ropa entre besos desesperados y su cuarto era el más cercano así que entramos en ese.

Nuestros cuerpos se frotaba ya en su cama, abrió mis piernas para acomodarse en medio ya con su miembro más que listo.

—Como extrañaba esto —metió su mano para frotar un poco y luego sacarla —y veo que tú también.

—¿Por qué no te callas de una vez y comienzas a follarme?

—Eres una sucia Soojin  —Volvió a sacar la mano y para frotar su miembro en mi entrada —hoy no habrá condón, quiero sentirte.

Y así empezó a lamer mis pezones mientras se acomodo para entrar, nunca me acostumbro al tamaño cuando está en celo, se siente más grueso que en su estado normal. Entre sus gemidos y los míos me sentía cada vez más húmeda, mis manos estaban en su trasero jalándola hacia mi, para que no se separara, no deseaba que dejara de atacarme de esta manera, sin piedad, duro y salvaje

—Jinnie —canturreo en mi oído —¿Puedo joderte la noche completa?

—Es tu pago después de todo.

Sonreímos y una nueva sesión de besos inicio, las embestidas era cada vez más rápida así que no tardaríamos nada en llegar ambas, sin mencionar que estábamos demasiado excitadas como para contenernos, me separó las piernas  para  moverse con más intensidad, su rostro era un poema mientras me follaba, yo no resistí más y empecé  a sentir el delicioso hormigueo del orgasmo seguido del suyo, anudandome sabía que debería de usar los supresores mañana, pero quiero disfrutar de su miembro sin el látex de por medio, en lo que se bajaba el nudo, besaba mis labios y mejillas hasta que pudo salir y quedar a mi lado.

—Dios juro que si necesitaba esto.

Me levante y me acomode a su lado dándole un beso.

—No sé si este mal lo que voy a decir pero espero que mis próximas citas también salgan mal.

—Me deberás muchos favores de ser así.

—Por eso no te preocupes tengo con que  pagarte.

—Vale, ahora ven, quiero ese lindo trasero tuyo en mi rostro tengo algo de sed…