Pidió día libre en la cafetería, quería quedarse con sus hermanos y quedarse en casa buscando otra escuela.

Pero al día siguiente tuvo que ir a estudiar y trabajar igualmente.

La campanita de la cafetería se escuchó y YooJung vio a Jimin entrar por la puerta. Ella le sonrió y él también a ella

—¿Lo de siempre? —pregunta YooJung y Jimin asiente.

—Y lo de siempre ahora incluirá un sándwich de pollo.—dice el chico, a lo que YooJung asiente. —¿Por qué no viniste ayer?—pregunta Jimin apoyándose en el mesón, viendo los movimientos de la chica.

—Problemas personales.—responde dejando el macchiato frente a él para luego dejar el sándwich de pollo a un lado.

—Oh...—responde. Saca su billetera y le da el dinero a YooJung, quien después le entrega la boleta junto al cambio. —Espero que todo esté bien entonces.—dice sonriendo a medias. YooJung suspira y asiente.

—Todo saldrá bien.—asiente levemente y sonríe.

—Si necesitas algo, dímelo, ¿bien?—pregunta para luego tomar un sorbo del macchiato.

—Claro.—YooJung suelta una pequeña sonrisa.—Que tengas un buen día, Jimin.

—Igualmente, YooJung.—Le sonríe, provocando que sus ojos queden como un línea recta, toma su sándwich y se marcha.