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—Entonces Toya se casa con nuestra hija Kumiko y Sora con nuestro hijo Yuki...—le dijo Gojo sonriendo a Nanami quien frunció el ceño —Preciosa, pongámonos en campaña para que tengamos una hija y se case con Hikaru —agregó Gojo muy entusiasmado viendo a su esposa mientras esta última sostenía al tercer hijo recién nacido de su amiga con Nanami
—Pues...si te embarazas tú y das tú a luz yo no tengo problemas — le dijo su esposa sonriendo, Gojo iba a contestar, pero Nanami se le adelanto
—Agradecería que no trataras de unir nuestras familias a la fuerza —le dijo muy serio Nanami para luego ver a su esposa dormir rodeada de Sora y de Toya, esta vez [T/N] si se había esforzado mucho y hasta le dio una patada al médico, realmente estaba muy molesta por el dolor mientras daba a luz y el médico tampoco se lo ponía muy fácil...Nanami se dio cuenta de que la técnica del médico era molestar y hacer preguntas estúpidas para que la embarazada se molestara e hiciera menos esfuerzo en dar a luz al bebé...Nanami acarició con cuidado la cabeza de su esposa y sonrió...entonces su celular comenzó a sonar, era una video llamada de Haruki...él y Ryo viajarían de regreso a casa en dos semanas más por lo que no pudieron estar presentes para el nacimiento de Hikaru
—Hola—le dijo Nanami respondiendo rápidamente la llamada para no despertar ni al bebé recién nacido ni a los niños. Los gemelos estaban en casa de su tía por lo que Gojo y su esposa habían ido solos a la clínica
—¿Cómo está mi hermana? —le preguntó Haruki preocupado
—Está descansando...—le dijo Nanami y le mostró la camilla donde [T/N] dormía con sus dos hijos
—¿Y el bebé? —preguntó Ryo asomándose por la pantalla
—Mira, [T/N] si se esfuerza en crear bebés hermosos...—le dijo Gojo mostrándole el bebé recién nacido con el cabello de color de [T/N]—Ahora si que se lució—agregó sonriendo
—Al fin uno que se parezca a mi hermana...—comentó Haruki haciendo que la esposa de Gojo se riera divertida
Luego de la visita del matrimonio Gojo, Nanami se quedó sentado en el sillón de la habitación. Observó en silencio la escena que tenía en frente: [T/N] estaba dormida en la camilla, su hija Sora estaba acurrucada a un lado y su hijo Toya estaba acurrucado al otro lado de [T/N]. Entre la camilla y Nanami estaba la cunita de Hikaru quien dormía plácidamente...entonces Nanami sonrió feliz...había logrado lo que el Nanami adolescente jamás habría llegado a pensar: había conocido a una persona maravillosa que sabía sobre su pasado como hechicero...que le dijo que lo amaba...que a pesar de haber perdido un ojo y estar con la mitad de su cuerpo quemado y lleno de cicatrices por su trabajo como hechicero aun así ella lo amaba y lo aceptaba...se había casado con esa mujer fuerte, amable, tierna e inteligente...dios...se había casado...si pudiera hablar con ese adolescente deprimido y amargado que pensaba que jamás podría ser feliz por ser hechicero...si ese adolescente supiera que en el futuro él se convertiría en un padre de familia y que sería feliz...tal vez ese adolescente se habría tomado las cosas más a la ligera y hubiera disfrutado un poco más su adolescencia...si tan solo pudiera hablar con el Nanami de 16 años y decirle que en un futuro se saldría de hechicero, trabajaría haciendo lo que más amaba: hornear pan y pasteles en una tienda muy exitosa, tendría una familia hermosa con cinco hijos, una esposa, un cuñado, un gato y una casa de dos pisos de seguro ese chico de 16 años no le habría creído...
—Amor...¿por qué lloras?—la voz de [T/N] lo sacó de sus pensamientos, sólo entonces Nanami se dio cuenta de que estaba sollozando—¿Qué pasó?—le preguntó [T/N] preocupada viendo atentamente a Nanami
—No, no pasa nada...—le dijo Nanami sonriendo y secando sus lágrimas para ponerse de pie y caminar hasta [T/N]—¿Cómo te sientes? —le preguntó Nanami viendo a [T/N]
—Bien...creo que la anestesia ya hizo su efecto...—le dijo [T/N] con la boca seca
—Ten...bebe agua...—le dijo Nanami sirviéndole agua en un vaso—Los Gojos te vinieron a ver...—le informó Nanami indicando unos paquetes de regalo que habían dejado en una mesa
—Oh...y yo estaba dormida...—murmuró [T/N] haciendo un puchero
—Tranquila...de seguro el molesto de Gojo vendrá mañana...—le dijo Nanami y [T/N] se rio divertida—Ahora estaba diciendo que casáramos a nuestros hijos con sus gemelos...—agregó poniendo su ojo en blanco
—¿Y tú que le dijiste? —le preguntó [T/N] divertida
—Que no...claramente...¿te imaginas tenerlo de consuegro? Sería una pesadilla...—le dijo Nanami y [T/N] se rio
Luego de que el médico visitara a [T/N] para revisar de rutina Nanami con el dolor de su alma debió irse a casa con Sora y Toya dejando a [T/N] y a Hikaru a solas por la noche. Al día siguiente Nanami estaba a primera hora en la clínica y su sorpresa fue grande cuando vio que Sukuna estaba en la habitación
—Kuna—gritó feliz Sora desde los brazos de Nanami al ver a su hermano mayor con su mamá
—Hermano—sonrió Toya soltando la mano de Nanami y corriendo a abrazar las piernas de Sukuna quien lo tomó en brazos y lo levantó en el aire
—Hola hermanito—le sonrió Sukuna y luego fue donde Nanami y tomó a Sora en brazos y la levantó en el aire justo como lo había hecho con Toya—Hola hermanita—agregó sonriéndole a Sora quien se reía feliz
—Pensé que estabas en Hokkaido con Fushiguro—le dijo Nanami a modo de saludo
—Intervine para volver pronto—le dijo Sukuna mientras sentaba a los dos niños en la camilla donde estaba [T/N] con Hikaru—Quería conocer a Hikaru...—agregó acariciando con cuidado la mejilla del recién nacido que [T/N] tenía en brazos, luego caminó hasta Nanami y le susurró—Si quieres, ahora que estamos acá...Yuuji puede cuidarlos a la noche...así acompañas a [T/N] y no está sola durante la noche—le ofreció Sukuna
—¿En serio? —le preguntó Nanami y Sukuna asintió muy serio
—Lo hablamos con Yuuji y no tenemos problemas...—le dijo Sukuna
—Ok—asintió Nanami después de todo no sería la primera vez que Yuuji o Sukuna cuidarían de los niños...habían demostrado que eran dignos de confianza y muy responsables...Yuuji y Sukuna eran buenos hermanos mayores para los dos pequeños
Luego de un rato Sukuna se fue y apareció Yuuji, estuvo jugando con Toya y con Sora y cuando ambos se quedaron dormidos después de la merienda que Nanami les había llevado apareció Gojo esta vez solo y traía sandía para [T/N] y los niños. Después de comer sandía Gojo se ofreció a llevarse a Sora, Toya y a Yuuji a casa en el auto para dejar a Nanami, a [T/N] y a Hikaru a solas.
—Queremos un cuento—le pidió Toya a Yuuji mientras éste lo arropaba para dormir
—Siiiiiii—le apoyó Sora, Yuuji sonrió...los dos niños dormían en la misma habitación
—Jejeje, ok...—les sonrió Yuuji caminando hasta el estante de los cuentos—Uhmmm...veamos...—murmuró viendo los libros de cuentos que habían—¿Qué les parece uno de princesas? —les preguntó Yuuji tomando el libro de cuento que a Sora le encantaba
—Pincesas—gritó emocionada Sora
—¿Toya, quieres escucharlo? — le preguntó Yuuji viendo a Toya y este asintió—Ok...—les dijo Yuuji sentándose en un puff muy mullido que tenían en la habitación—Hoy vamos a escuchar uno que se titula... "La sirenita"—comenzó Yuuji— "En el fondo del más azul de los océanos había un maravilloso palacio en el cual habitaba el Rey del Mar, un viejo y sabio tritón que tenía una abundante barba blanca. Vivía en esta espléndida mansión de coral multicolor y de conchas preciosas, junto a sus hijas, cinco bellísimas sirenas..."—Yuuji comenzó a leer el cuento—"...y en seguida subió con las demás hijas del viento envuelta en una nube color de rosa que se elevó hasta el cielo."—luego de un rato Yuuji terminó el cuento y cuando levantó la vista los dos niños ya estaban dormidos
—Que cuento de mierda más feo...—la voz de Sukuna reclamó desde la mejilla de Yuuji
—No me culpes a mi...este libro se los regalaste tú—se defendió Yuuji mientras apagaba la luz de la habitación de los niños y caminaba en silencio a su habitación
—Mmm...pensé que era más lindo...no se parece a la película que vimos con Sora el otro día...—dijo la voz de Sukuna desde la mejilla de Yuuji
—Pues...para la próxima lee lo que les regalarás...—le dijo Yuuji bostezando mientras comenzaba a ponerse el pijama para luego recostarse en su cama
—Piri li itri lii li qui lis rigilirís—dijo Sukuna y recibió una bofetada
Después de unos días [T/N] al fin estaba de regreso en casa. Nanami, Sukuna y Yuuji estaban muy sobreprotectores con ella y Hikaru. No dejaban que [T/N] hiciera fuerzas ni que hiciera nada en casa. Cuando Nanami no estaba en casa Yuuji o Sukuna se ocupaban de hacer las cosas de la casa para que [T/N] no se esforzara a pesar de los reclamos de [T/N] que ella podía ayudar.
Cuando Ryo y Haruki volvieron ambos abrazaron a [T/N] y la felicitaron por Hikaru y entonces ambos le mostraron a [T/N] sus manos
—Oh, por dios...—sonrió [T/N] feliz al ver que ambos tenían una sortija en sus manos izquierdas—¿Se casaron?—les preguntó [T/N] y los dos asintieron sonriendo
—Pensamos que era el siguiente paso...—le explicó Haruki
—No es legal acá...pero en Francia si—le dijo feliz Ryo, entonces [T/N] los abrazó feliz por ambos
—Mis niños, estoy tan feliz por ustedes—sollozó [T/N] mientras los abrazaba por el cuello—Y pensar que al principio se odiaban a muerte—agregó
—Jajajaja, ya hermana no llores—le dijo divertido Haruki mientras él y Ryo le secaban las lágrimas
—Tenemos que celebrarlo...—les dijo entusiasmada [T/N]
—Hermana...—le dijo Haruki un poco serio—Queremos preguntarte algo...—agregó viendo a Ryo quien se puso igual de serio que él y asintió
—Ok...—murmuró [T/N]
—Queríamos saber si...nos vendes la casa antigua...—le dijo Ryo y [T/N] inclinó su cabeza a un lado y frunció el ceño
—No puedo hacer eso...—les dijo [T/N]
—¿Por qué no?—le preguntó Haruki frunciendo el ceño
—Porque esa casa está a tu nombre...¿no te acuerdas?—le preguntó [T/N], Ryo miró a Haruki y éste estaba mirando a [T/N] boquiabierto
—¿Cuándo...?—le preguntó Haruki, realmente no recordaba cuando era que él fue el dueño de la casa
—Bueno...cuando compramos esta casa...tú firmaste unos papeles...¿recuerdas?—le preguntó [T/N] y Haruki asintió—Esos papeles eran del traspaso de propiedad...la casa es tuya desde que nos mudamos a esta casa—le dijo [T/N] encogiéndose de hombros y Ryo miró a Haruki incrédulo—Además recuerda que esa vez que firmamos documentos le diste la mitad de tu parte de la tienda a Ryo y yo le di la mitad de mi parte de la tienda a Kento...los cuatro somos copropietarios de la tienda...bueno ahora las tiendas...porque abrimos otra tienda en el centro—les recordó
—¿Lo que firmé esa vez era eso? —le preguntó Ryo
—Chicos, ¿en serio firman cosas sin leer lo que firman? —les preguntó [T/N] incrédula frunciendo su ceño y Ryo se puso rojo de vergüenza—El dinero que les llega todos los meses es el dinero de las tiendas...—les explicó [T/N]—¿No habrán pensado que era una mesada o un sueldo? —agregó y ambos negaron con la cabeza
—Bueno...entonces...que-queremos vivir juntos...—le dijo Haruki retomando el tema principal
—Está bien...por mi no hay problema...después de todo esa casa es tuya...puedes hacer lo que quieras con ella—le sonrió [T/N] y los abrazó a los dos
Cuando Nanami llego en la noche supo de la noticia del matrimonio en el extranjero de Haruki y Ryo y los felicito a ambos y les ayudó a embalar algunas cosas que ellos tenían en su habitación. Al día siguiente los ayudó con la mudanza para la casa antigua y para el final de día Nanami estaba cansado recostado en la cama al lado de [T/N]
—¿Qué tal estuvo tu día?—le preguntó Nanami a [T/N] en un susurro, todos estaban dormidos en la casa incluido Sukuna
—Estuvo tranquilo...Toya está aprendiendo más palabras y Sora también...—le sonrió [T/N]—Hikaru durmió siesta de 30 minutos y sorprendentemente es muy tranquilo...¿Cómo estuvo tu día?—le preguntó [T/N] a Nanami mientras se acurrucaba a su lado
—Me cansé mucho...pero lo bueno es que los chicos pudieron instalarse sin problemas...—le sonrió Nanami mientras abrazaba a [T/N]
—¿Lo hicimos bien con ellos cierto? —le preguntó [T/N] viendo a Nanami hacia arriba
—Si, tú lo hiciste excelente...Haruki y Ryo son muy centrados y maduros...todo gracias a ti...—le dijo Nanami sonriendo para luego besarle la frente y poco a poco [T/N] y él comenzaron a dormirse
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