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El día de la boda fue uno de los días favoritos de la pareja, ¿Cómo fue?
Te lo contaré.

Eligieron casarse en vacaciones de verano, en un día no tan caluroso. La boda de llevaria a cabo al aire libre, en el mismo bosque donde sus lobos se reencontraron y dónde sus humanos se aceptaron mutuamente sin necesidad de palabras.

Había un camino de flores blancas y amarillas. Las sillas para los invitados eran de color blanco, y el altar era adornado por un arco de distintos tipos de flores.

Toda la boda fue planeada por Jisung, ya que a la pareja de comprometidos no les gustaba la idea de organizar, pero a Sung sí por lo cual de encargó de todo. Había hecho un buen trabajo.

Habían dos carpas enormes no muy lejos de donde sería la boda. En cada carpa había un novio, en una estaba Yugyeom y en la otra Jungkook.

El pelicastaño estaba en un sillón mirando sus calcetines sin saber que hacer con ellos, ¿Es necesario aclarar que tan nervioso estaba el alfa?

Pensaba en que al día siguiente estaría casado con su lindo Omega, y la idea le parecía demasiado hermosa como para llegar a ser real. Sonrió cuando sintió por medio del lazo cariño y calma por parte de su pareja, Jungkook intentaba calmar por medio de aquel lazo a su alfa. Reaccionó y se decidió por fin a poner sus calcetines y zapatos.

El alfa llevaba puesto un traje gris completo, la camisa era blanca y la corbata era del mismo color que el traje. Se paró listo para que las estilistas pudieran hacer su trabajo.

-¿Cómo va el novio?- Mark entró tomado de la mano junto con Jackson sonriente, el último mencionado sería el padrino de anillos- ¿Nervioso?

-Demasiado- pasó sus manos por el traje nervioso. Mientras las estilistas terminaban de peinar el cabello de Yugyeom- ¿Vieron como está Jungkook?

-Se ve hermoso- dijo Jackson- Y está igual de nervioso que tú, solo que lo controla mejor.

-Nunca pensé que llegaría este día- Mark se veía orgullos, siempre vio a Yugyeom como su hermano- Mañana serás un hombre casado, Kim. Disfruta tus últimos minutos de soltero- Yugyeom sonrió levemente y soltó una pequeña risa.

Una alfa pelicastaña entra a la enorme carpa donde se encontraba su hermano- Pero mira nada más, que guapo se ve mi hermanito- Jennie se acercó a su hermano menor para arreglar un poco el vuelo de la camisa. Al terminar, le dedicó una sonrisa cálida al alfa- Felicidades, Yugyeomie- el mencionado le susurró un "gracias" -Bueno, venía a decirte que ya es la hora, ¿Listos?- los presentes asintieron y se encaminaron al altar.

Por otro lado, tenemos a Jungkook, el cuál mordía de vez en cuando su labio inferior intentando controlar sus nervios.

-Esta todo listo- Félix se acercó al pelinegro con un ramo de flores que tenían colores blancos- ¿Estás listo?

Jungkook tomó el ramo con las manos temblorosas- Sí, no, no lo sé- dijo rápidamente. Si...él también estaba nervioso.

Félix le sonrió y tomó la corona de flores para ponerla en la cabeza del Omega, la acomodó bien y peino un poco el pelo de este —Tranquilo, todo saldrá bien, Kook— Jungkook asintió. Diciéndose mentalmente que todo iba a estar bien, que no había algo del que preocuparse.

Jungkook llevaba un traje gris mucho más clarito, casi parecía blanco. Iba, claramente, sin una corbata que apretara su cuello.

Para poder calmarse, busco en su cuello el collar que le había regalado el alfa cuando lo estaba cortejando. Al tomarlo con sus dedos pudo empezar a oler el aroma de Yugyeom. Ahora sí se encontraba más calmado, aunque no le duró demasiado la tranquilidad.

Changbin entró a la carpa sonriente —Ya es hora— Jungkook sentía que se iba a desmayar. Félix puso su mano en el hombro del Omega dándole ánimos.

Tomó aire y empezó a caminar hacia la entrada de la carpa. Conforme iba llegando, la música típica que ponían en las bodas se iba escuchando más fuerte, pero sin llegar a ser molesta. Sus manos temblaban, pero logro calmarlas al llegar al camino de flores que lo dirigían al altar donde se encontraba un nervioso y sonriente Yugyeom.

Los lobos de ambos se encontraban igual de emocionados que sus humanos, como la primera vez que unieron sus vidas.

Al llegar al altar, se tomaron de las manos y se sonrieron. El juez empezó la tan esperada ceremonia.

Los invitados miraban a la pareja con una mirada de ternura, incluso el hermano de Jungkook se veía feliz.

—¿Quien lo diría?— susurró Hyuna a su esposo— Jamás pensé que veríamos a Jungkook casarse— sonrió orgullosa mirando a su hijo en el altar.

—¿No que no le gustaba la bodas y decía que jamás se casaría?— Hyuna recordaba las veces que Jungkook había dicho que jamás se casaría, ni en sus peores pesadillas.

—Tu también decías lo mismo, hasta que me conociste y ahora mirando; estamos casados— Hyojong asintio dándole la razón a su esposa.

La pareja dijo sus votos cuando fue el momento, y Jackson entregó los anillos con cuidado.

La ceremonia termino cuando el juez dijo "Los declaro esposos, puede besar al novio". Luego fueron al salón donde se llevaría a cabo la fiesta de la boda.

En la fiesta bailaron, bebieron, comieron y hicieron varios brindis...bueno, el que hacía más brindis era Changbin que ya las copas de alcohol le habían hecho efecto— Q-quiero hacer un brindiiiis...— se levantó de su asiento mientras elevaba la copa con alcohol. Los amigos de los recién casados estaban sentados en la misma mesa, así que cuando vieron que Changbin iba a hacer el décimo brindis no pudieron evitar soltar leves risas— Por los recién casados. J-jamas pensé que nuestro Jungkookie llegaría a casarseeee...— cada que terminaba una frase arrastraba las palabras— Aún recuerdo cuando era un Omega que rechazaba a cada alfa...No acepto no una, pero ni una, ni una, ni una veeez...!— el mencionado negó con la cabeza mientras sonreía divertido— Pensé que moriría solo, solin, solitoo...

—Oh, gracias por tu voto de confianza. Seo— dijo con sarcasmo Jungkook.

—De nada— dijo orgulloso. Los presentes soltaron una risa— En fin, ¡Que vivan los novios!— elevó lo las posible su copa con un movimiento brusco, haciendo que salga un poco del líquido hacia el exterior.

Los demás no tuvieron más remedio que elevar sus copas y decir un "Salud" por décima vez.

Cuándo empezó el baile lento, con la canción "Fallin' All In You" de Shawn Mendes de fondo, Yugyeom tomo la mano de Jungkook y lo llevo a la pista de baile dónde había más pareja bailando. Empezaron el baile lento; Jungkook rodeando con sus brazos el cuello del alfa y Yugyeom con las manos en la cintura del Omega.

—¿Ya puedo empezar a llamarte "Kim Jungkook"?— ambos se sonrieron.

—Mientras antes mejor.

La canción iba ya por la mitad, y Jungkook decidió hablar nuevamente— Gracias— Yugyeom lo miró confundido— Por haberte equivocado de baño esa mañana— los dos rieron. ¿Como olvidar el día en que Yugyeom se había equivocado de baño por andar corriendo de esos omegas? Gracias a esto pudieron intercambiar palabras y darse cuenta de que eran predestinados.

—Te amo, Kim Yugyeom.

—Te amo, Kim Jungkook.

Antes de que terminara la canción, se besaron intentando transmitir a través de ese beso el amor que sentían por el otro, pero jamás serían suficientes besos para poder transmitirlo, de cualquier forma, tendrían varios años para intentarlo.

Fin.

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Ya está disponible la segunda parte.💗