CAPÍTULO UNO
Me muevo por la mansión con eficiencia. V ya está en su lugar, leyendo uno de esos interminables documentos que le asignaron. A diferencia de mí, V parece encontrar paz en lo repetitivo. A veces se la ve con sus gafas, los ojos fijos en la pantalla, como si lo que hace le trajera algún tipo de consuelo. Es tranquila, en su mayoría. No como N.
—V, asegúrate de que el sistema de seguridad esté actualizado antes de la tarde. Sabes cómo son los padres de Tessa con los detalles.
Ella asiente en silencio, sin siquiera apartar la mirada de su tarea. Siempre ha sido así, eficiente y reservada, casi como si prefiriera la compañía de los datos antes que la de los otros. A veces me pregunto si V está más consciente de lo que quiere admitir.
Luego está N. Simplemente tan... irritante. No es que sea malo en lo que hace, pero su personalidad me saca del quicio.
—¡Hola, J! —salta desde la esquina, como siempre haciendo demasiado ruido. Sus brazos se agitan mientras me lanza una mirada relajada. Está sonriendo, como si no tuviera idea de lo importante que es mantener el orden.
—¿Te aseguraste de que las cámaras exteriores estén operando correctamente? —pregunto sin rodeos, intentando no mostrar mi frustración. Cada vez que N aparece, algo dentro de mí hace querer arrancarle la cabeza.
—Eh... claro, claro, todo está bajo control —responde, aunque su tono no me convence del todo. N siempre está a un paso de cometer algún error, de hacer que algo no salga como debería.
No tengo tiempo para lidiar con sus tonterías. Cada tarea debe ser perfecta, especialmente hoy. Los padres de Tessa llegan esta tarde y lo último que necesitamos es que algo salga mal. Sé cómo son ellos. No miran a Tessa como su hija, sino como una herramienta, un proyecto que debe ser impecable. Si algo falla, si algún detalle no está en su lugar, Tessa será quien pague el precio.
Ella no se merece eso.
La tarde avanza y me aseguro de que todo esté perfecto. Tessa confía en mí para mantener el control, para asegurarme de que nada falle. Me esfuerzo más de lo necesario, revisando cada detalle tres veces, porque no puedo permitir que ella sufra las consecuencias de algo que yo podría haber prevenido.
Es cuando estoy revisando los sistemas de seguridad una vez más que la escucho. La voz grave de su padre. La presión en el aire cambia cada vez que ellos están presentes. Sé que Tessa no está cómoda cuando sus padres están cerca. Lo noto en su forma de hablar, en sus pequeñas pausas. Ella los quiere complacer, pero no debería tener que hacerlo a ese precio, ni soportar el abuso de su madre.
—Tessa, este proyecto debe cumplir con nuestras expectativas —dice su padre, sin molestarse en mirarla a los ojos. Su tono es afilado, cortante, como si nada de lo que haga fuera suficiente.
Siento una descarga de tensión recorrer mis circuitos. Observo desde la distancia mientras él examina cada detalle, sin decir una palabra amable, sin una muestra de afecto. Solo críticas, siempre críticas. No entiendo por qué alguien trataría así a su propia hija, pero no es mi lugar cuestionarlo. Mi tarea es asegurarme de que todo salga perfecto para ella
Por la noche, cuando todo ha terminado y los padres de Tessa se han ido, puedo finalmente relajarme. Todo salió a la perfección, como siempre. Me aseguro de que Tessa esté bien, aunque nunca lo admite. Ella intenta actuar desapercibida, pero sé que cada comentario de sus padres la afecta profundamente.
—Gracias, J —me dice con una sonrisa cansada acompañada de un abrazo cálido de ella. Esas pequeñas muestras de gratitud es todo lo que necesito.
Me retiro a mi estación para recargarme, pero algo sigue inquietándome. No se trata solo de los comentarios de los padres de Tessa. Es algo más profundo. Algo que, aunque no soy capaz de describir completamente, está ahí. Una pequeña chispa de emoción que no debería estar en mí. Me preocupa que un día falle, que un día no pueda cumplir con las expectativas. Pero por ahora, todo es perfecto.
Porque tiene que serlo.
Justo cuando creo que ya nada podría empeorar, Tessa entra de nuevo a la sala con una sonrisa un poco nerviosa, como si estuviera emocionada por algo.
—¿Pasa algo, Tessa? —pregunta N.
—J, V, N... quiero presentarles a alguien —anuncia mientras escondía algo detrás de ella.
Observo con curiosidad, ya anticipando que esto no será nada bueno. El sonido de engranajes activándose y el suave zumbido de un sistema nuevo se escuchan en la habitación. Entonces, veo cómo una figura delgada y brillante se asomó por la altura de sus piernas. Es más pequeña que yo, con movimientos suaves, casi infantiles. Sus ojos se iluminan, y de inmediato muestra una sonrisa.
—Les presento a Cyn —dice Tessa con entusiasmo—. Sé que todos han estado muy ocupados, así que pensé que necesitábamos a alguien más para ayudar. Ella será un apoyo para ustedes, y especialmente para ti, J.
Siento un pequeño golpe de frustración en mis circuitos. ¿Un apoyo para mí? No necesito ayuda. Nunca la he necesitado. Soy perfecta, apto para cualquier trabajo. Si algo saliera mal, sería mi responsabilidad arreglarlo. Pero ahora... esta niña está aquí, con su mirada inocente y su sonrisa alegre.
Cyn se acerca a mí, curiosa y llena de energía. —Caminar, caminar, ¡Hola, J! —dice con una voz demasiado alegre para mi gusto.
No respondo. Mi única reacción es una mirada severa, sin saber exactamente qué me irrita más: su presencia o el hecho de que Tessa creyera que yo necesitaba ayuda.
Y así, cuando pensé que las cosas no podían ir peor, llegó esa niña.
Primer cap publicado xd
Ojalá que pueda actualizar seguido y que mi poca luz de inspiración aun se mantenga encendida.
Algo que me olvidé de mencionar en el apartado anterior es que V va a tener una personalidad más tranquila como ha sido en la mansión y no una loquita mata drones que ha sido en la serie XD ajaj
Y también el padre de Tessa tendrá un fetiche extraño con las worker drones femeninas no sé si decir eso aqui sea un spoiler pero bueno :/
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