Jay había decidido contarle a Jungwon sobre los extraños sentimientos que había descubierto por él, pero quería esperar hasta el día lunes.

Todo cambió cuando escuchó que su amigo Heeseung le había pedido una cita a un tierno chico con un gusto particular por los suéteres. Al oír esto la curiosidad le ganó, por lo que decidió preguntar por el nombre del chico. Heeseung le había respondido un "Yang Jungwon". Jay estaba completamente sorprendido al saber esto, por lo que decidió contarle a su amigo sus dudas sobre Jungwon.

Heeseung había reaccionado de la manera más amable y le había aconsejado ser sincero con Jungwon, Jay había asentido y no había dicho más allá de eso.

Llamó a su novia para acordar una cita -Inconscientemente- el mismo día en que Heeseung y Jungwon tenían planeado salir. Había decidido contarle sobre su pequeño dilema y terminar su relación.

Aquel sábado le pidió a su novia terminar con la relación. Al inicio, Dayeon había reaccionado algo mal, pensando que el chico le había engañado. Luego de caer en cuenta que Jay se encontraba confundido respecto a lo que sentía por un hombre, no hizo nada más que acariciar su brazo y decirle que lo apoyaba, pero que le diera algo de tiempo para analizar las cosas. Ella ya deducía que Jay tenía algún tipo de atracción por los hombres, cada que miraba a algún tipo cuando caminaban por la calle. Ambos se querían, pero sabían que no debían estar juntos como una pareja porque Jay ya no la quería de esa manera.

Se habían despedido con un beso en la mejilla, tomando diferentes direcciones.

Jay estaba por salir del centro comercial, cuándo vió el rostro de Jungwon a lo lejos.

El chico estaba sonriendo a Heeseung y este le sonreía de vuelta. ¿Por qué no se había dado cuenta lo hermosa que era la sonrisa de Jungwon?

Todo este tiempo debió haber sido un idiota para no darse cuenta.

Después de esto, no pudo controlar el impulso de querer estar junto a Jungwon y luego de cruzar miradas, ya se encontraba frente al par, diciendo lo primero que le vino a la mente.

─ Jungwon... yo-yo creo que me gustas.

Luego de esta extraña confesión, Jungwon no supo qué decir. Estaba bastante seguro que era algún tipo de broma o un juego de parte de Jay, por lo que mordió su labio inferior y miró a Jay con algo de enojo.

─ No molestes, Jay. Estoy... estoy en una cita. ─ Dijo Jungwon en voz alta tomando con algo de incomodidad la mano de Heeseung, este hizo una pequeña sonrisa y Jay hizo una mueca.

─ No estoy molestando, en realidad creo que me gustas. ─ Soltó Jay con algo de descaro y Heeseung elevó una ceja, sintiéndose incómodo.

Ninguno supo qué responder ante tal declaración, por lo que Heeseung decidió romper el hielo.

─ Um, Jay ¿Quieres un helado? ─ Dijo Heeseung hacia su amigo y Jungwon abrió los ojos.

─ ¿Ustedes se conocen? ─ Preguntó Jungwon y Jay quiso responder, hasta que Heeseung le ganó.

─ Sí, somos amigos cercanos. De hecho, Jay me ha hablado de t-

─ ¡Me encantaría un helado de esos gigantes! ─ Interrumpió Park. ─ Que tenga brownie, chocolate, fresa y todos los sabores que puedes incluir. Por favor, tómate tu tiempo Hee.

Heeseung elevó una ceja y negó con la cabeza. Le habían interrumpido la cita, pero a decir verdad le daba igual.

Prefería que Jay dejará de mentir consigo mismo respecto a los sentimientos que tenía por un hombre.

Lee se levanta del asiento y se aleja, mientras que Jay se sienta frente a Jungwon.

─ ¿Por qué estás aquí?

─ ¿Por qué me dejaste de hablar?

─ Yo pregunté primero. ─ El castaño frunció el ceño y Jongseong sonrió nuevamente. El corazón de Jungwon se acelera de nuevo.

─ Está bien, es porqué me gustas. Ahora dime porque me dejaste de hablar.

─ No mientas con eso, Jay. ─ Jungwon intenta cambiar de tema, pero Jay no se lo permite.

─ No miento, es la verdad. Me gustas, me gustas mucho. ─ Park acerca su rostro al de Jungwon y este lo aleja con un sonrojo.

─ ¿No habías dicho que creías que te gustaba? ─ Alza la ceja.

─ Bueno, hace unos segundos acabo de confirmar que realmente me gustas. Ahora responde mi pregunta, por favor. ─ Dice lo último con algo de tristeza. ─ ¿Fue por la sopa de ese día?, ¿estaba tan mal?

Jungwon creyó que Jay era la persona más adorable, pero luego recordó la razón por la que decidió ignorar a Jay.

─ No, no fue por eso. ─ Jay no entendía.

─ ¿Y entonces por qué? ─ Jungwon no apartó la mirada y Jay volvió a preguntar, siendo aún más insistente. ─ ¿Por qué Jungwon?, Si hice algo para que me ignoraras, dimelo por favor.

─ ¡Porque me gustas! ─ Gritó Jungwon cerrando los ojos por completo y todos en el local, lograron escuchar aquello.

Jay abre los ojos con sorpresa al ver como Jungwon lloraba en silencio, intentando tapar sus ojos con sus pequeñas manos.

Jay se levantó del asiento para acercarse a Jungwon y besar su frente, en un intento de calmarlo, le susurró que salieran del lugar para que no vieran a Jungwon llorar.

Ambos salieron y se sentaron en unas sillas que estaban frente al local.

─ Jungwon a qué... qué te refieres con que te gusto?

─ Sabes a lo que me refiero, Jongseong. Me gustas tanto que no pude evitar ponerme mal por ese día. Donde tú novia te llamaba y tu le decías cuánto la querías, mientras le decías que irías a su casa para hacer quién sabe qué. Tú no me quieres, Jay. ─ Jungwon no sabía de dónde había llegado aquel impulso, pero decir aquello se sentía demasiado bien, que no podía parar. ─ Llevo demasiado tiempo gustando de ti, que me afecta tanto que vengas aquí y me digas que te gusto como si nada. Es injusto, ¿sabes?, es tan injusto conmigo mismo.

─ Jungwon, y-yo lo siento, dios. No sé qué decirte, lo lamento tanto. No me había dado cuenta lo que sentías por mí y siempre creí que te gustaba molestarme o algo parecido, pero ahora me doy cuenta que no era así y realmente lo siento, pero no miento cuando digo que me gustas. ─ Jay no estaba mintiendo, en verdad lamentaba no haberse dado cuenta de los sentimientos que Jungwon sentía por él.

Jungwon abrió los ojos sorprendido y frunció el ceño. ─ ¿Q-Qué tan seguro puedo estar que no me mientes?

─ ¿Quieres que te de una prueba que no miento? ─ Habló con el corazón acelerado. Jungwon asintió. ─ Cierra los ojos por favor.

Jungwon obedeció, sin preguntarse la razón de esto y Jay se acercó lentamente a sus labios.

El corazón de Jay estaba acelerado, puesto que no solía ser una persona impulsiva, pero al ver la desconfianza que le demostraba Jungwon. Recordó la película romántica que su hermana le obligó a ver y una idea vino a su mente.

Besar a Yang Jungwon.

Estaba nervioso porque no sabía cómo Jungwon iba a reaccionar, pero le daba igual. Todo le daba igual.

Al inicio el beso fue algo incómodo porque Jay era el único que hacía leves movimientos, pero cuando Jungwon cayó en cuenta que lo que sentía eran los labios de Jay, le siguió la corriente. Ambos labios se movían al compás del otro con algo de torpeza. Los dedos de Jungwon se hundieron entre la nuca de Jay para aumentar la profundidad del beso y este posó sus manos sobre la cintura de Jungwon. Antes que Jay tuviera la oportunidad de introducir la lengua en la cavidad bucal de Jungwon, Heeseung les interrumpió.

─ Wow. ─ Había dicho Heeseung y ambos se despegaron de inmediato. Estaban completamente sonrojados y Jungwon sentía que se iba a derretir de lo caliente que se sentía su rostro. Jay seguía tomando con posesividad la cintura de Jungwon.

─ ¿Qué quieres? ─ Pregunta Jay.

─ Nada, me iba a despedir. Creo que ustedes tienen muchas cosas que hablar. ─ Y hacer. Quiso decir lo último pero la expresión en el rostro de su amigo le dijo que no era el momento.

─ ¿Heeseung?, y-yo lo siento... ─ Susurró Jungwon en voz baja y el mencionado negó con una sonrisa.

─ No te preocupes, Jungwon. Nos vemos luego.

Luego que Heeseung se fuera con un enorme helado en manos, Jungwon se separó de Jay.

─ No creas que todo se soluciona por un beso. ─ Negó y Jay sonrió.

─ Entonces, permíteme conquistarte como se debe.

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¡Feliz halloween a todos!, el próximo capítulo ya va ser el último :(