~05~

(segundo fanart que me inspiró en esta historia).

~Lejos~.

Cuando vives en la oscuridad, llegas a acostumbrarte, no duele solo estas, pero cuando un rayo de luz entra e ilumina ese lugar todo cambia, deseas con toda tu fuerza que esa luz ilumene todo a tu alrededor.
Eso sentía Jeon Jungkook estaba acostumbrado al gris, al vivir sin sentido, pero llegó un pequeño Omega que tenía todo los colores y de pronto fue cubriendo con esos colores la vida de aquel alfa.
No obstante por celos y envidia alguien volvió a dejar en la oscuridad a Jungkook.

El pequeño Omega, se ahogaba es sus lágrimas, el dolor parecía calar sus huesos, no podía creer que en tan pocas horas su vida había cambiado tantas veces y tan drasticamente.

Hacia unos días era un chico solitario, enamorado en silencio de un Alfa que lo veía lejano, luego llegó a ser el amantes de aquel hombre, esas horas quedaron grabadas en su mente y cuerpo. Y por último estaba en un avión viajando a Estados Unidos, separandolo de su vida y de su gran amor.

Todo lo que conocía estaba quedando atrás, ¿Como haría para encontrar a su daddy?, se preguntó una y mil veces. La respuesta siempre era la misma, no lo sabía, si quiera si lo iba a volver a ver, quizás cuando todo pase, Jungkook ya tendría a alguien más en su vida y él solo fue algo pasajero.

Sabía que para él sería imposible olvidarlo, pero Jungkook haría lo mismo.
~Noo~ .Sonó en su cabeza.
Solo seré un recuerdo, que se esfumara con el tiempo.

Tal vez eso era lo mejor, trató de convenserse a sí mismo, tal vez ahora Jungkook podría amar a alguien más acorde a su edad.

Se martirizaba con sus propios pensamientos, por más que intentaba consolarse tratando de aliviar el dolor solo lo hacia peor.
Ahora viviría con una tía que no veía desde que tenía cinco años, ni la recordaba, no sabía si tenía primos o algo, solo sabía que a partir de ahora esa sería su nueva vida.

~ Jungkook ~

-Mudok quieres denunciarme hazlo, pero por favor trae a Tae de nuevo. -estaba desesperado.

-¿Por qué haría algo cómo eso?. - sonaba segura de cada palabra.

-Porque es a mi quien deben castigar, no a él.

-Jungkook si quieres a un Kim en tu vida, la única opción que te queda soy yo. - una sonrisa se asomó.

En ese momento el Alfa entendió todo.

Kim Mudok estaba enamorada del azabache desde el momento que lo conoció, y le ardió tanto que el Alfa se fije en su hijo y no en ella, que todo lo había hecho por despecho, más de una vez coqueteo con el azabache, pero este jamás la vio de esa manera, nada había sido por la diferencia de edad o porque el alfa estuviera casado, todo fue por simple celos y envidia hacia su hijo.

Al ver aquellas marcas en el pequeño Omega, se imagino siendo ella la follada de esa manera tal lujuriosa, brutal y sexy.

Los celos la cegaron al punto de ser irracional, sin pensar si su hijo realmente iba estar bien en aquel lugar,  y no le importo nada, solo quería deshacerse de su hijo, para dejar el camino libre para ella, sin saber que lo único que lograría era el odio de su hijo y del azabache.

-¿Qué quieres a cambio de traer de nuevo a Tae?. - preguntó sin rodeos.

-Nada Jungkook, Tae no va a volver. - apoyo su mano en el pecho del Alfa. - Si necesitas a alguien para sacarte las ganas, aquí estoy. - con una sonrisa sexy.

El estómago del Alfa se revolvió al escuchar a la mujer. No estaría con nadie más, él amaba con cada fibra de su cuerpo aquel pequeño y nadie lo reemplazaría.

Debía fingir para sacar datos de donde estaba su omega. En ese momento le pareció una buena opción.
Pero Jungkook no tenía cabeza para hacer esa estupidez.

-¿Cuánto quieres por decirme donde esta tú hijo?. - sacando la mano de la mujer de su cuerpo.

-¿De verdad Jungkook, prefieres a un niño en lugar de una verdadera mujer?. - sonaba enojada,su orgullo estaba siendo golpeado.

La anciana miraba todo en silencio,hasta que hablo.
-Me da vergüenza que seas mi hija. - soltó con enojo.

-Vete Jungkook, no volverás a ver nunca más a mi hijo o mejor dicho a tu "bebé". - burlándose.

-Te juro que lo voy a encontrar, y serás tú la que no lo volverás a ver. - quería golpearla gritarle, y llorar de la rabia, pero se tragó toda su furia.

-¿A caso te parece que me importa?. - se río fuerte. - es obvio que no.

Jungkook salió del lugar con tanta rabia quería gritarle mil cosas en la cara de la mujer, no tenía ni la mínima pista de donde estaba su bebé y eso lo hacía sentirse impotente.

-¿Dónde estás mi Sweet Baby?. - sollozo mirando al cielo.

-Me das asco Mudok, no puedo creer lo que le hiciste a mi nieto, por un hombre. - la mujer estaba indignada al saber la verdad.

-No me importa mamá, Tae sabía que me gustaba ese hombre y como un Omega regalado se metió en su cama.

-La única regalada eres tú, ahora trae a mi niño.

-No, que se pudra en Estados Unidos. - sin más dejó a la anciana triste por escuchar como se refería a su propio hijo.

~ Taehyung ~

Tae bajo del avión camino por los pasillos de aeropuerto buscando a alguien que no conocía, esperaba encontrar un cartel con su nombre, pero no había nadie esperándolo, no hablaba casi el idioma, tan solo se quedó ahí, esperando a que alguien llegará por él.
Las horas pasaban y seguia en ese lugar solo.

~Jungkook~.

Jungkook llegó a su casa, de pronto vio a su ex mujer escondida entre las plantas.

-¿Qué haces ahí Ara?. - gritó.
La mujer se asusto.

-Jungkook...yooo..-intento mentir.

-No te dije claramente, que no vuelvas.

-Mi hijo vive aquí.-intento mentir.

-Me importa una mierda. - gritó, era la oportunidad perfecta de desquitarse con alguien.

-Jungkook tú nunca me gritaste así. - forzó el llanto.

-Ara sal de mi casa ahora, o ya no me controlare más. - le advirtió.

La mujer salió espantada, por primera vez tuvo miedo de su ex esposo.

Entró a la casa, aventó la puerta al cerrarla, comenzó a llorar, tenía tanto dolor acumulado por todo lo que estaba pasando, no sabía que hacer, se sirvió un vaso de whisky, y comenzó a romper cosas sin sentido.

Jimin llegó a la casa, vio a su padre llorando, golpeando,y maldiciendo.

-¡Papá!. - grito para que este se detenga.

El azabache lo miró, corrió a abrazarlo, necesitaba llorar en el hombro de alguien.

-¿Qué pasó, por qué estas así?. - jamás había visto a su padre en un estado parecido, siempre había sido tranquilo.

-Lo llevaron lejos. - habló entre llanto.

-¿De que hablas papá, a quién?.

-A Tae, a mi bebé...a mi bebé. - tapo su rostro con sus manos.

-¿Quién se lo llevó?. - no entendía nada, hacía unas horas su padre estaba feliz y ahora estaba destruido.

-Su madre, la maldita no se donde lo llevó. - apretó su mandíbula.

-Voy a tratar de ayudarte, pero por favor no sigas actuando así, no lograrás nada.

-Gracias hijo. - murmuró.

~ Taehyung ~

La noche llegó y Tae seguía en el aeropuerto.
No tenía como comunicarse con nadie, el miedo se estaba apoderando de él. ¿Y si su madre le había mentido?. ¿si estaba solo y perdido en un país desconocido?.
Se durmió en las bancas cansado de esperar.
Al otro día una mujer se acercó a él.
-¿Taehyung?. - llamó.

-Si. - habló algo adormecido.

-Soy la señora Sun, del internado, y vine a buscarte.

-¿Qué internado?. - preguntó adormecido.

-Si oíste bien, internado niño, tu madre te envió aquí a un colegio pupilo.

-Ella me mando con mi tía. - estaba asustado y confundido.

-No niño, camina que no tengo todo el día. - tomo del brazo al Omega, dejando las valijas atrás.

-¡Mis cosas!. - gritó con sus ojos cristalizados.

-Solo toma una. - ordenó la mujer.

Tae tomó la valija donde guardaba la remera del Alfa,dejando el resto en el aeropuerto.

Llegó al lugar junto a la mujer, parecía una cárcel era gris sin color, todo oscuro.

Las habitaciones eran separadas por Alfas, Betas y Omegas. El resto del día era estudiar y luego a sus cuartos.

Pasaron dos semanas Tae no comía estaba más delgado de normal.
Si hacían algo mal eran castigados, encerrados por horas en cuartos oscuros y para su mal, a él lo castigaban seguido por no entender el idioma.

-Hola señora Kim.

-Hola Jimin, ¿a qué vienes?.-pregunto la mujer, sin prestarle atención.

-Extraño a Tae, podría hablar con él.

-Mira niño, si te mando tu padre, ve y dile que no lo volverá a ver.

-¿No se de que habla?. - finjio no saber nada. - Yo vengo por mi cuenta.

-Mientes horrible,ya vete.

Jimin salió de la casa, muy frustrado su padre no comía ni, dormía bien.

Se sentó en la vereda y comenzó a llorar, no sabía cómo ayudarlo.

-Niño. - escucho un susurro.
Se levantó buscando quien lo llamaba.
La anciana estaba a un costado de la casa escondida.

-Nona.

-Shh, ven. - El Omega se acercó a la mujer.

-Escuche a mi hija hablando por teléfono, mi nieto esta en un internado en Estados Unidos.

-¿Cómo lo sacó de ahí?.

-Necesitan la autorización de la madre.

Jimin se agarro la cabeza todo estaba jodido.
En parte sabía dónde estaba y a la vez no.

-Es todo lo que se, nose como ayudar a mi niño, se que no está bien, escuche cuando una mujer le dijo a mi hija que no comía, por favor niño que tu papá lo saque de ahí. - la anciana comenzó a llorar.

-Gracias haremos lo posible, lo prometo. - se despidieron con un abrazo.

Jimin subió al auto de su novio que lo esperaba a unos metros.

-Se donde está Tae, ahora necesito hablar con mi papá.

Llegaron a la casa del Omega.
-Gracias amor. - besando a su novio.

-Llámame si me necesitas, te amo mimi.

-Yo a ti mi gatito. - Entró a su casa.

-Papá. - grito al no verlo. - papaaaaá. - volvió a llamar.

-Acá. - aviso tirado al piso, con un brazo cruzado en sus ojos, se había quedado dormido en el suelo.

-Se donde está Tae. - soltó sin dar vueltas.

-¿Qué, donde?. - sentándose rápido.

-En un internado en Estados Unidos.

-Hija de... - se mordió el labio para no insultar a la mujer.

-Si llamamos a todos los internados de allá no creo que sean muchos. - pensó en voz alta.

-¿Quién te dijo donde estaba?.

-Su abuela, dijo... que Tae estaba muy mal que casi no comía, que lo había escuchado cuando su hija hablaba con una mujer y que solo puede salir de ahí con la autorización de su madre.

Jungkook masajeo su frente, estaba a punto de explotar como una bomba de tiempo.

De inmediato se le ocurrió llamar a su amigo.

-Nam necesito tu consejo como abogado.

-¿Qué pasó sabes donde está tu Omega?. - El hombre estaba al tanto de todo.

-Si está en internado en Estados Unidos, el problema que solo con la autorización de la madre puede salir, necesito un plan para que me firme una autorización rápido.

-Esta bien, no será ético, pero te ayudaré.

-Otra cosa, ¿como consigo la custodia de él?.

-Mmm, no lo sé, la madre podría denunciarte, sería peor, lo que puedo hacer es tratar de declarar incompetente a la madre, con la condición del que el chico la demande, lo protegería como víctima de abuso por parte de su madre.

-El tiene a su abuela, ¿podrías darle la custodia a ella?

-Si la mujer quiere, si.

-Gracias Nam, necesito que te muevas rápido.

Fin de la llamada.

~Tae~.

El rubio estaba en su cama llorando, miró sus caderas y aquellas marcas no estaban, abrazo fuerte la remera del Alfa tratando de sentir aquel aroma, pero ya no quedaba nada, pensaba si el azabache se acordaría de él, o si ya lo había olvidado.
-Daddy. - susurró al aire.

El lobo del Alfa, estaba inquieto y quería salir en busca de su Omega,como si cada día lo escuchara llamarlo.

~🌸~

Dicen que la Diosa luna une a las almas con un motivo, que cada uno complementa al otro, por eso son llamados destinados a estar juntos.

Y en esta historia la Diosa pondra a todos en su lugar...Porque el karma existe en todos lados...

🌸 Holaaa Dulces obsesionadas por el Taekook/KookV.

🌸 Quedan dos capítulos 🥰.

🌸 Se me cuidan mucho.
Los quieroooo.

🌸 Nikii.

🌸 Capítulo editado 🥰

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