"No durarán nada" decían algunos, "simplemente están ciegos, luego TaeHyung se dará cuenta de con quién está saliendo" decían otros.

A lo largo de su relación, el dulce Alfa junto con su Omega tuvieron que soportar bastantes críticas por las demás personas.

Pero a la mierda, ellos no dejarían de amarse solo porque los demás no querían o no creían que ellos dos tenían algo.

Cuatro años habían pasado desde que formalizaron su relación, demostrándole a las personas que por los gustos del Alfa no dejarían de amarse.

Claro, en su tercer año de relación JungKook no aguanto más las ganas, simplemente se arrodilló delante de TaeHyung con una pequeña cajita, la misma contenía un hermoso anillo con un diamante rosado en el centro, perfecto para Kim TaeHyung.

JungKook, delante de todas las personas en un parque, pidió la mano de TaeHyung, quien con lágrimas cristalinas aceptó la propuesta del Alfa.

Ambos habían tenido su boda de ensueños, cualquier matrimonio elegiría esos típicos colores blancos o negros para el día más importante de sus vidas.

Pero si ellos querían que su día fuera inolvidable, lo hicieron con sus gustos. Todo el salón e incluso los trajes de ambos estaban de un hermoso color rosa pastel.

Ambos amaban ese color, así como el blanco o incluso el negro, pero sin duda querían que su boda se llevará a cabo con su color favorito.

Fue una ceremonia hermosa, lágrimas por parte de TaeHyung y de JungKook, sus cabezas eran adornadas por bellas diademas de flores de varios colores, ambas tenían una pequeña diferencia, la de TaeHyung sostenía el velo que cubría transparentemente sus hermosas facciones.

Todo fue totalmente hermoso e inolvidable, sus amigos y familiares los felicitaron.

Ambos cada vez más se unían a sus vidas.

El sexo tampoco faltaba, aunque claro, JungKook usaba condón o TaeHyung tomaba pastillas para evitar el embarazo, en esos tiempos aún no se sentían preparados.

No hasta que JungKook y TaeHyung pudieron tener una buena estabilidad económica y conseguir su propio hogar.

Ambos trabajaron duro para poder conseguir sus sueños, JungKook había logrado fundar su propia empresa, al principio no fue tan reconocida, pero luego ganaría éxito.

Era una empresa dedicada al entretenimiento, actores, modelos y cantantes salían de la empresa Jeon, bien preparados y listos para seguir adelante.

Por su parte, TaeHyung logro volverse maestro de danza, muy profesional en lo que se dedicaba, aquel dulce y tierno Omega era una total bestia al momento que la música sonaba en todo el salón.

JungKook había contratado a su propio esposo, sonara raro, pero estuvieron ahí apoyándose en todos los sentidos. Así que eso era lo mínimo que podía hacer el Alfa por su Omega.

JungKook no era celoso o algo por el estilo, no le molestaba que varios Alfas y Betas mirarán a su Omega bailar y producir ese hermoso arte que hacía con su cuerpo.

Ambos habían progresado juntos en su vida, así que ya se sentían preparados para el último nivel.

Pequeños cachorros en su vida.

— Amor, sabes que yo nunca te voy a forzar a hacer nada que tú no quieras — El Alfa acaricio dulcemente la mejilla de su Omega

— Mi adorable Alfa, sabes que ambos estuvimos platicando mucho sobre tener cachorritos en nuestras vidas, sabes que yo estoy listo para eso — JungKook sintió su corazón acelerarse más y más con esas palabras

— Mi dulce y bello Omega, déjame decirte que yo, Jeon JungKook, Alfa y esposo de Kim TaeHyung, estoy listo para dejar mi semilla en tú interior — El Alfa cargo de manera nupcial a su Omega.

Previamente ambos estaban viendo películas juntos, era su costumbre, después de todo hoy tenían un día libre en sus agendas.

De la nada, ambos se habían puesto más cariñosos de lo normal, habían muchos besos tanto tiernos y dulces como necesitados y calientes.

Liberaban sus dulces feromonas, inundaron las fosas nasales del otro con ese aroma que tanto amaban.

Y entonces ambos los supieron, era el momento indicado para engendrar su primer cachorro.

No estaban en celo, pero sentían que necesitaban el uno del otro. Su conexión era demasiado fuerte, ambos sentían la necesidad del otro sin que hubieran palabras en camino.

JungKook sabía cuándo su Omega estaba mal y deprimido, TaeHyung sabía cuándo su Alfa estaba enojado y molesto. Ambos sentían lo que sentía el otro.

Aunque simplemente fuera difícil de creer, ambos estaban destinados a estar juntos, dos almas que se encontraron y unieron sus vidas de la mejor forma posible.

Respeto, amor y entre otros valores florecían en esa relación, si ambos querían respeto y amor, tenían que dárselo a su pareja.

Jeon JungKook y Kim TaeHyung estarían juntos para toda su vida, ya era hora de tener un hermoso cachorro con los mejores rasgos de ambos.

Mientras JungKook quería que su cachorro tuviera más rasgos a su Omega, TaeHyung quería que tuviera más rasgos a su Alfa.

Querían que su cachorro fuera hermoso, y que mejor que sacar los rasgos del otro.

Pero aquellos genes se verían mejor juntos, y eso era lo que iban a hacer, JungKook daría su parte y TaeHyung la suya.