Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 12. Luke.

Estoy listo.

Es todo o nada.

Mi departamento está limpio, mi auto también y no hay condones en la guantera.

—Mierda, me convertí en Christian.

Estaciono el auto frente al bar pero antes de que pueda bajar, la mujer pelirroja que vine a buscar cruza la acera hasta la calle.

—¿Becca? —No, no... ¿A dónde va? —¡Becca!

Ella me hace una seña para despedirse sin dejar de caminar y sube a un taxi que ya la está esperando.

Carajo, estaba preparado para conseguirlo hoy y ella ni siquiera me da la oportunidad de seducirla con mis encantos.

—Hmm... ¿Qué haría Ana en mi lugar?

Seguirla.

Lo pienso un solo instante mientras el auto amarillo se aleja, enciendo el motor y me incorporo a la circulación con mi jodida vista de halcón en ese auto.

Creí que se dirigiría a alguna parte cercana con edificios de departamentos, así que me sorprendo cuando se desvía a una zona residencial bastante agradable con jardín delantero y garaje.

¿Becca vive aquí?

¡Malditamente genial!

Veo el auto estacionando en una calle y me apresuro a detenerme detrás para evitar que vuelva a escapar de mi y mi maravilloso plan de conquista. Luego la acorralo cuando se aleja del taxi.

—¡Becca! —sonrio. Se detiene de pronto y gira para mirarme.

—Ay mierda, ¡No! ¿Qué haces aquí? —chilla.

—¿No estás feliz de verme?

Su cara me lo dice todo.

—¡No! —se pasa las manos por el cabello con frustración. —¿Me seguiste?

—¿No?

Carajo, no pensé que se enojaría tanto. Becca da la vuelta y sigue por el caminillo a su casa.

—Sé que es tarde y que seguramente estás ocupada, pero quiero que sepas que quiero conocerte de verdad y tal vez entonces...

—Luke... —me hace una seña para que me calle. —No es el momento, de verdad, ¿Podemos tener esta conversación otro día?

Estoy a punto de responderle cuando su puerta se abre y una chica de cabello oscuro nos mira, primero a ella y luego a mi antes de fruncir las cejas.

—Karen...

—No. —responde la chica. Se inclina junto a la puerta para sostener a una niña y la entrega a Becca.

—¡Karen! —Becca la llama de nuevo pero ella ya se aleja por el camino del frente. —Sostenla.

Mierda, tiene una hija.

La pequeña niña pelirroja me mira con detenimiento, su cabello recogido en dos coletas se balancean mientras la sostengo. No puede tener más de 5 años.

—¿Eh? Ah... Hola, nena.

Me mira casi sin pestañear.

—¿Hola? ¿Me escuchas? —Hablo lentamente. —Soy Luke, ¿Becca es tu mami?

Una figura se mueve a mi derecha, una sombra pequeña que se detiene. Doble mierda. Un escalofrío me recorre la espalda cuando la otra niña si frunce el ceño.

—¡Suelta a mi hermana! —chilla y levanta su piecito para patear mi tobillo.

—¡Ay! —chillo, bajando a la otra niña. —¡Mierda!

Niña dos toma la mano de niña uno y ambas corren dentro de la casa.

—¡Jodida mierda! —¿Hijas? ¿Y gemelas? Dios me odia. —¡No es gracioso!

Agh.

¿Qué mierdas acaba de pasar?

—Por supuesto que no es gracioso... —Becca se acerca. —Acabo de quedarme sin niñera, otra vez.

Cruza los brazos, suspirando y mirando la sala de su casa con el montón de peluches ocupando los sillones.

—Lo siento, pero no es el momento para hablar, ¿Podemos hacer esto otro día?

Mi oportunidad de huir.

—¿Son tuyas? —señalo con la cabeza a nada en particular.

—Si. —sonríe. —Sorpresa.

—Doble sorpresa, si me lo preguntas. ¿Es por eso que no quieres salir conmigo?

—Dije que después, —se queja. —Ahora que Karen renunció, necesito una niñera que pueda quedarse con ellas los días que me toca volver al bar.

—¿Trabajas doble turno? —mis cejas se alzan por la sorpresa. —Debe ser pesado.

Ella se ríe.

—Lo es.

Se abraza a si misma y por primera vez desde que la conozco luce algo perdida.

Dios, ayúdame.

—Tengo una idea. ¿Por qué no llamas a tu hermano y le dices que no puedes volver? Luego tomas un baño calientito mientras yo ordeno pizzas y dejo que tus hijas vean Frozen.

—No, no puedo...

—Si puedes, soy policía. Jamás lastimaría a tus niñas o a cualquier otro niño que conozca, ¿Está bien?

—No creo...

—Becca, —apoyo las manos en los hombros y la guío dentro de su casa. —Haz lo que dije mientras hablo con tus hijas.

—Es muy tarde para comer pizza, Luke.

—La pizza siempre es buena, así que andando... Llama a tu hermano y haz todo lo demás.

Ella vuelve a sonreír y finalmente asiente.

—Marcy y Maddie.

—¿Qué?

—Mis hijas. Son Marcy y Maddie.

Levanto el pulgar para que sepa que escuché, luego busco el móvil dentro de mi bolsillo y cierro la puerta con pasador.

—¿Niñas? —las llamo.

Vuelven a aparecer en la sala, tomadas de la mano y con un gesto serio.

—Mierda, esto parece sacado de una película terror.

Solo una frunce el ceño.

—A mamá no le gusta que digan malas palabras frente a nosotras.

—Agh, car...Bones asados. —la otra niña sonríe. —Lo siento, solo quiero saber qué tipo de pizza quieren comer.

—¿Pizza? —niña 1 gruñe.

—Si, ya sé lo que piensa tu madre de la pizza. —contesto en el mismo tono. —¿Cuál va a ser?

Niña 2 habla.

—Peperoni.

—Bien, bien... Puedo pedir eso. —luego ordeno las pizzas a mi lugar favorito sin perderlas de vista.

Ambas se sientan en la sala y encienden el televisor en las caricaturas infantiles.

Mierda.

—¿Su mamá guarda bebidas para adultos aquí? —rebusco en los estantes de la cocina por algo fuerte. —¿Cervezas, licores...? Cualquier cosa que embriague es buena.

—No. —no la veo, pero ya estoy seguro que es la niña 1 del ceño fruncido. —pero tío Brandon las esconde en su habitación.

¿Tío Brandon?

¿Su habitación?

—¿Él vive aquí? —dejo la cocina para sentarme con ellas en la sala.

—Si. —responde niña 2.

—¿Por qué?

—Porque nos cuida. ¿Quién te cuida a ti?

—Mi mamá.

Ambas niñas me miran con curiosidad, y finalmente sonríen.

—Las mamás son geniales. —agrega niña 1.

—Lo son. —y estoy de acuerdo totalmente.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro