René | la Máscara de Ébano
En un pueblo envuelto en un aura de misterio y oscuridad, vivía un solitario vendedor ambulante llamado René. Llevaba consigo un carromato lleno de objetos antiguos y extraños, y en su interior, ocultaba un tesoro siniestro: la máscara de ébano. René había tomado la responsabilidad de custodiarla, convencido de que al mantenerla alejada de los demás, podría evitar la desgracia que se decía que traía consigo.
Sin embargo, la sombra de la desgracia cayó implacablemente sobre René. Pese a su intento de proteger al mundo de los peligros de la máscara, la maldición se volvió en su contra. Una noche, mientras descansaba en su carromato, la máscara cobró vida propia y se aferró a su rostro, adhiriéndose a él como una fuerza oscura y malevolente.
René despertó con un grito ahogado, su rostro aprisionado bajo la fría y siniestra máscara de ébano. A medida que pasaban los días, su vida se volvió una pesadilla interminable. La máscara controlaba sus acciones, convirtiéndolo en un títere de la oscuridad. René, impotente ante su propio destino, fue llevado por caminos retorcidos y crímenes atroces.
La gente del pueblo pronto se percató de la metamorfosis de René y comenzó a temer su presencia. Sus ojos inyectados de malicia y la mueca malévola de la máscara eran un recordatorio constante de la tragedia que los acechaba. René se convirtió en una figura temida y odiada, un símbolo vivo de la maldición de la máscara de ébano.
En un fatídico día, la ira y el temor de la comunidad alcanzaron su punto máximo. Un grupo enfurecido rodeó el carromato de René y lo prendió fuego, buscando liberarse de la maldición que había consumido al vendedor ambulante. Mientras las llamas consumían el carromato y la vida de René, la máscara de ébano permanecía impasible, como si se regocijara con la destrucción que había causado.
Cuando las llamas finalmente se extinguieron, solo quedaron cenizas y silencio. La máscara de ébano, sin embargo, sobrevivió, resistiendo el fuego y esperando su próximo huésped.
La historia de René y su fatídico destino se convirtió en una leyenda macabra en el pueblo. La máscara de ébano, liberada de su prisión, continuó su danza perversa, esperando a que alguien más cayera en su trampa mortal. La maldición que una vez había atormentado a René se extendió a otros, dejando un rastro de destrucción y desesperación en su camino.
Y así, la historia de René y la máscara de ébano se unió a su legado oscuro, y aquellos que buscan evitar la desgracia pueden convertirse en sus víctimas más trágicas.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro