CAPÍTULO 4
12 años después...
Puta madre, estúpida vida.
Último día de clases y llegaba tarde, se hizo costumbre. Pero llegar tarde gracias a que toda la ropa que tenía estaba sucia empeoró su día. Ahora estaba reciclando ropa con mucho perfume para no oler mal y ni hablar del despertador que no sonó; por consecuencia tampoco se había bañado. Las moscas se posarían en él confundiendolo con una mierda.
Jeon Jungkook reciclando ropa, humilde.
Lo primero que hizo al llegar a la escuela fue dirigirse a su lugar, no tenía ganas se seguir ahí, era el último día de clases y lo obligan a ir. Que asco, acostó su cabeza en la mesa pensando porque no dejaba de estudiar y se hacia taquero. No sonaba mal 'Tacos Jeon' sería un éxito, lo estaba meditando seriamente pero una voz interrumpió sus pensamientos.
"Tranquilo ya es último día, después de esto incendiamos la escuela"
"No es mala idea" levantó su mirada para encontrarse con la cabellera rubia de su compañero de al lado "...si incendiamos la escuela morirían los que están aquí, eso es poco ético de tu parte ¿sabes?"
"Nadie dijo que la incendiaríamos con las personas dentro, lo haríamos en la noche Jungkook. ¿En qué estabas pensando? Demente" su amigo empezó a reírse, vaya que era la burla el día de hoy.
"Jimin, tus influencias no son las mejores no esperaría menos de tí si lo haces"
Jimin dejó de reír, estaba burlándose de él y sus fallos amorosos; a Jungkook le encanta molestarlo con eso.
"No me hables del tema Jungkook, podría destrozarte si sigues hablando del tema"
Jungkook iba a responderle pero el maestro entró al aula haciendo que todos se sentaran y estuvieran en orden.
"Bueno chicos este es su último año de preparatoria felicidades ya son todos unos adultos" la cara del maestro era de cansancio y odio a sus alumnos "No tengo algo más que enseñarles pero debo estar aquí para que me paguen, así que hablen o algo pero en voz baja porque me desconcentran" el maestro subió sus pies al escritorio y empezó a leer una revista de chismes.
Bueno, día libre. Estaba a punto de responderle a Jimin pero nuevamente fue interrumpido.
"Oye, ¿no te da olor?" Su amigo empezó a olfatear por todos lados.
"¿Olor? Que dices, yo no huelo nada"
"Huele feo"
Disimula.
"¿A qué huele? según tú"
"Huele a..." El rubio se acercó a Jungkook oliendolo "huele a mugre"
No sirvió el perfume.
"Y también a caca"
"¡Ey! ¡Eso no es cierto! te acepto la mugre pero no la caca, te juro que me limpio bien" Jimin no aguanto más y rompió a carcajadas, ese día empezó con el pie izquierdo.
"Es que te tomas todo tan enserio Kook" el pelinegro solo levantó una ceja y se acercó la sudadera a su nariz. No olía mal, olía a perfume. "Era broma, hueles bien, tal vez un poco más a perfume de lo normal pero hueles bien"
"¿Hoy andamos bromistas verdad?" Jungkook se cruzó de brazos y se puso serio de un momento a otro.
"Relájate, era broma" Jimin le dio un codazo en broma pero pareció no haber cambios. "Es broma Kookie"
Nada.
"Solo quería bromear, hueles rico"
Nada aún.
"Perdóname Jungkook, solo quería hacer una broma" la voz de Jimin se apagó por un momento al pedir disculpas.
"Bueno"
Dramático de mierda.
"¿Bueno?"
"Disculpado, pero a cambio me debes un beso" el menor se acercó peligrosamente levantando una ceja.
"Idiota" Jimin colocó su mano en la cara del menor y le desvío el rostro "Cambiando el tema ¿Qué tal el exámen de admisión?"
Jungkook había hecho el exámen de admisión a la universidad el día anterior, aunque él era la calificación más alta del curso seguía dando miedo.
"Nada mal, apliqué para contabilidad"
"Pero odias las matemáticas, gráficas y todo lo que tenga que ver con hacer cuentas largas"
"Si, pero papá me dijo que me dedicara a algo que le ayude al negocio, así que aplique ahí"
Los padres de Jungkook eran dueños de un restaurante de comida Italiana, ambos padres estuvieron ahorrando por años para poder tenerlo y ahora lo lograron, pero ninguno de los dos se dedicaba a algo que tuviera que ver con administración. Así que le pidieron a Jungkook estudiar eso para ayudarlos.
"¿A tí como te fué?"
"Terrible, me moría de miedo. No recordaba varias cosas aunque estudié mucho, si no me aceptan podría morir de un ataque"
"Todo estará bien Jimin"
"Este es mi segundo intento, si me rechazan de nuevo voy a llorar"
Jimin había aplicado hace un año a la carrera de Ingeniería Aeroespacial pero lo rechazaron por una diferencia de 30 puntos, este era su segundo intento.
Horas después inició el receso, ambos chicos estaban formados para comprar su comida cuando alguien se acercó.
"Hola Kookie, ¿cómo estás?" Una chica se acercó a él y le plantó un beso en los labios mientras se colgaba de su cuello.
"Hola Cameron, estoy bien ¿y tú? ¿quieres algo de comer? Sabes que Jimin también está ahí ¿verdad?" La fila avanzaba y ella no se despegaba.
"Estoy mejor ahora que estoy contigo Gookie, y ahora que lo preguntas, quiero una sopa de tomate y un café descafeinado sin azúcar. Hola Jimin"
"Hola" Jimin solo le rodó los ojos.
Llegando el turno de ellos Kook pidió su desayuno, pidió lo de Cameron y espero a que Jimin pidiera lo suyo. Después se fueron al comedor para desayunar, mientras que Cameron solo hablaba y hablaba.
"Entonces yo le dije a Kylie, ese no es rosa pastel es rosa palo jajajajajaja, Dios es una tonta"
"¿Cameron no te cansas de burlarte de todo mundo?" Jimin había abierto la boca, como solía pasar.
"No, ¿tú no te cansas de existir?" Y Cameron le había respondido, como solos pasar.
"Si, pero luego recuerdo que existo para joderte y se me pasa"
Jungkook estaba entre ellos dos viendo como empezaban a pelear, de nuevo.
Iban a odiarlo, pero le entretenía verlos pelear. A veces se imaginaba que estaban en un campo de batalla y él era el árbitro.
Por una esquina tenemos al chico rompecorazones, el rubio, el que hace dudar de su sexualidad a los hombres, el futuro ingeniero y emprendedor. ¡PARK JIMIN!
Y en otra esquina tenemos a la pintada, a la hija de papi, la que si quiere algo lo tiene, la futura odontóloga y novia de Jungkook. ¡CAMERON WILSON!
¿Quién ganará la batalla? Lo averiguaremos después de estos cortes comerciales.
En la mente de Jungkook era entretenido.
"¡Al menos yo soy rubia natural!" Ellos seguían peleando, cierto.
"¡Pero a mí me queda mejor!"
"¡Al menos yo tengo novio!"
"¡Al menos yo no tengo operaciones por inseguridades físicas!"
"¡Al menos yo no soy un maldito homosexual de mierda!" La cafetería se quedó en silencio.
Jimin no sabía que responder solo agachó la mirada. Mierda.
Mierda mierda, mierda.
"¡La sopa tiene una mosca!" Jungkook acercó su mano a la sopa de su novia y le dió un matonazo, haciendo que le salpicara sopa a ella.
"¡JUNGKOOK MI ROPA!¡ES CHANNEL Y MI FAVORITA!"
"Es que había una mosca, pero no te preocupes amor, ya la maté por tí"
Jimin solo estaba ahogando una risa.
Cameron se levantó molesta de la mesa y se fue caminando a paso veloz al baño, mientras maldecía a cualquiera que se le atravesara.
"¿Una mosca? ¿Enserio?"
"Lamento lo que dijo, ya sabes cómo es"
"No me molesta, tiene razón, soy un maldito homosexual de mierda"
"Jimin no..."
"Pero me gusta, sobre todo cuando los chicos me agarran y me ahorcan con sus manos mientras yo les imploro que me dejen y ellos me aprietan más fuerte. Luego me arrancan la ro-..."
"Jimin, demasiada información"
"Lo siento"
Ambos siguieron comiendo como si nada hubiera pasado mientras hablaban de lo que harían en vacaciones.
Pasó el día y cuando menos lo esperaban ya habían dado la campana del fin de la última clase así que oficialmente estaban de vacaciones y oficialmente habían acabado la preparatoria. Faltaba la universidad, pero ese era otro asunto.
Ambos salieron de la escuela casi saltando de emoción mientras pensaban que hacer el resto de las vacaciones.
"¿Qué hacemos? Podríamos ir a la pista de patinaje, o hacer una orgía, o hacer una orgía en una pista de patinaje o..."
"Paciencia Jimin" ambos caminaban hacia sus casas como era costumbre, la sensación de acabar la escuela era increíble.
"¡Ya sé! En la noche iremos a un bar gay"
"¿Ah? No soy gay"
"¿Cómo lo sabes? Nunca haz salido con un hombre, así que no lo sabes. Además también van hombres heterosexuales. Quizá te gusta"
"Jimin, literalmente es un bar gay, lo último que hay son hombres heterosexuales. Además tengo novia, no tengo algo que hacer en un lugar así"
"Le tienes miedo al éxito, ser gay es lo mejor del mundo. Tal vez en un futuro venga un chico y te haga dudar de tu sexualidad, entonces te hagas gay o bisexual y ¡POOM! Me darás la razón"
"Hasta que eso no pase no entraré en un bar gay, cuando entre a un lugar así es porque definitivamente seré gay. ¿Entendiste?"
"Si, si, lo que digas"
Los chicos seguían caminando hasta llegar a una cafetería cercana, estaban viendo el menú mientras un mesero se les acercaba para anotar su orden.
"Bienvenidos a la cafetería Miracle Grounds, ¿les puedo tomar su pedido?"
Jimin fué el primero en elegir "Si, yo quiero un café helado y unos huevos con queso, por favor"
"Y yo una limonada con un pay de...¿Yoongi?"
"¿Yoongi? ¿Dónde hay de esos?" Jimin buscaba en el menú.
"Diablos ¿eres tú?" Jungkook se puso de pie y abrazó al chico.
"¿Jungkook? ¡Hey!" Le devolvió el abrazo dándole unos golpes en la espalda. "¡Jimin!" se alejó de Jungkook para acercarse al rubio y abrazarlo también. "¿Cómo han estado? Tenía años sin verlos, Jimin te pintaste el cabello, te queda bien"
"Gracias Yoon, estamos bien. Haz ¿estado bien? Pensábamos que habías muerto en el incendio"
"Estoy bien, me adoptaron y me fuí a otra ciudad pero ahora volví y estoy independizado" el chico no había cambiado mucho, a pesar de ser mayor que ambos chicos era un poco más bajo que el menor pero de la misma estatura que Jimin, además seguía teniendo su piel blanca, cabello oscuro y en forma.
La pubertad jugó a su favor.
"Pidan lo que quieran, yo invito" Yoongi les sonrió a ambos chicos y después de tomar sus órdenes fue por sus comidas.
Era una enorme sorpresa verlos, habían pasado 10 años. Deberían celebrarlo.
Cuando todos terminaron de comer decidieron quedar ese día en la noche, debían ponerse al tanto de todo lo que había pasado. Jungkook llegó a su casa y como de costumbre no había alguien, no sabía que hacer, podría llamarle a su novia para pasar el rato pero es algo cansado, cada día le cansaba más, además estaba molesto con ella por su comportamiento en la mañana con Jimin.
Kook suspiró, se quitó la ropa y entró a la ducha haciendo que el agua fría recorriera su cuerpo relajandolo al momento.
Cerró sus ojos dejando su mente divagar, tenía casa sola y el silencio de ahí lo abrumaba. Un recuerdo se le vino a la mente, era el pequeño viendo como a lo lejos había un edificio en llamas, Kook corría hacia allí gritando el nombre de alguien, pero alguien lo detuvo.
Gritos de dolor, sufrimiento y desesperación se escuchaban en su cabeza. Gritos de gente siendo quemada viva, gritos de niños siendo quemados vivos.
Abrió sus ojos, su respiración estaba acelerada y su corazón latía con rapidez. Habían pasado años y seguía teniendo ese momento en su cabeza, aunque casi no recordaba las cosas. Casi no.
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