Todo transcurrió como comúnmente. Desde que llego del trabajo de mi tío me dirijo a ducharme rápido para ir a la Uní, el miércoles no hubo clases, pero el jueves y el viernes sí. Ese último día no hice nada interesante, como normalmente salí temprano rumbo a la tienda de mi tío y volví más temprano a las 6:20 PM para repasar el examen que me tocaba ese día, también hice una tarea que era para un par de semanas: no me gusta a cumular las tareas cuando tengo tan poco tiempo para hacerlas. Apenas estaba empezando los exámenes y repasar no me era para nada un augurio. Necesito pasar con las mejores calificaciones para conseguir trabajo, ese ha sido mi ancla desde que entré a la universidad, ella misma ofrece trabajo a sus mejores estudiantes en algunas empresas. Si consigo ahorrar con lo que me ofrezca la empresa también podré irme a vivir a algún apartamento donde pueda vivir sola.

Mi mamá me enseñó las tareas de una casa, y yo soy organizada: solo no en el dormir a veces amanezco en el suelo sobre mis sábanas, luego con mis cosas soy muy organizada: soy la que lavo la ropa de mi tío y la mía, además de limpiar la casa. Como nosotros no pasamos mucho el día en ella no tengo que limpiar tanto la casa, pasó la escoba en la semana debes en cuando y pasó el trapeador cada dos semanas, y ahí mismo limpio el baño, los trastes lo limpia mi tío ya que yo cocino, aunque a veces lo hago yo cuando esta borracho. Ah, no es de esos malos borrachos, solo se queda dormido, además de que fuma: esa es su condenada, fuma todos los días uno o dos cigarrillos en la mañana, otro en la tarde y otro en la noche. Lo bueno, que no lo hace enfrente de mí lo único que si lo hallo haciéndolo no se detiene de hacerlo, como cuando era niña y venía a verlo con mis padres.