【 C A P I T U L O  T R E I N T A  】

Las semanas pasaron con rapidez y Olive seguía sin creer que ya había transcurrido mas de un mes desde la muerte de Sam y por supuesto, desde la ultima vez que vio al cazador. Estaba vivo, al menos, o eso le había dicho Merle, la ultima vez que estuvo en el lugar, sin embargo, no le daba tranquilidad suficiente a la muchacha, Negan le estaba haciendo daño de diferentes formas.

Los salvadores frecuentaban Hilltop mas de lo que le gustaba admitir y eso ponía en riesgo tanto a la comunidad como ellos. Sin embargo, volver a Alexandria también era complicado, Olive tenia demasiados sentimientos encontrados en ese lugar.

La muchacha camina fuera de la gran mansión en la cima de la comunidad, los salvadores por fin se habían marchado, suelta un suspiro y se abraza a sí misma.

──Cada vez vienen más──dice Glenn a su lado, preocupado. Se cruzo de brazos y su vista viajo hacia los portones de Hilltop, por donde hace uno minutos se habían marchado los salvadores.

──Y más seguido── murmura esta. Su semblante estaba serio.

Olive tomo su mochila con las pocas cosas que tenía, la idea de volver a Alexandria estuvo rondando toda la mañana en su cabeza y opto por hacerle caso y volver a su hogar, quería ver a Carl y a la pequeña Judith, el chico había estado preguntando por ella y se lo debía, el la consoló en sus peores momentos y no podía ser egoísta, no solo ella lo estaba pasando mal.

──¿Estas segura? ──pregunta Maggie, por enésima vez.

──Ya te dije que si, Mags──respondió Olive, rodando los ojos. ── Iré por unos cuantos días, buscare un poco de ropa y volveré pronto──agrego. ──Ademas, llevas bien todo aquí. La gente te quiere.

Y era cierto, Maggie se había vuelto un miembro importante en la comunidad, sabia como llevar la comunidad, incluso mejor que su propio líder, Gregory. La gente confiaba en ella y en Glenn, la pareja era bien recibida y eso ponía contenta a Olive, sus amigos habían encontrado su lugar.

──Está bien── dice, resignada. Le da un corto abrazo a su amiga y una mueca se asoma en su rostro. ──Dile a Rick que se prepare. Todos.

Olive soltó un bufido, no entendía porque la castaña seguía insistiendo con eso. El día que había llegado a Hilltop, Maggie le había dicho lo mismo, que se preparen, tenían que dar la pelea, pero al parecer no lograba comprender que ya la habían perdido hace mucho.

──Solo... Háganlo, cuando sientan que estén listos──se apresura a decir. La pelinegra asintió, resignada.

La muchacha se despidió de sus amigos, sin embargo, falto uno. Jesús había salido el día anterior y aun no volvía, la olivarda supuso que debía alejarse bastante de la comunidad y que pronto llegaría, Rovia era mucho mas fuerte de lo que se veía.

Maggie la vio perderse en el camino y soltó un suspiro, dio un ultimo vistazo y su vista recayó en algo, mas bien en alguien. Una sonrisa se asomo en su rostro y deseo con todas sus ganas que Olive se hubiese quedado un par de minutos mas para ver tan sorpresa.

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La muchacha solto un suspiro al llegar hacia los portones de Alexadria, era apenas medio día. Su vista viajo hacia la torre de vigilancia donde vio a Spencer, este sonrió al verla.

──¡Que sorpresa tenerte por aquí! ──dice antes de bajar. Abrió el portón con rapidez y observo a la chica. ──veo que ya luces mejor.

──Si──dice la muchacha, tajante.

Paso de largo, no tenia intenciones de entablar una conversación con el hombre, no lo había hecho antes y menos lo haría ahora. Camino directo hacia la casa del Sheriff, en la entrada estaba Olivia, una alexandrina encargada del inventario, cargaba a la pequeña Grimes. Esta se asombro al ver a la muchacha de vuelta en la comunidad.

──¡Olive, que gusto volver a verte! ──se alegro la mujer regordeta, la muchacha asintió, seria. ──Rick no esta y Carl tampoco. Me pidieron que cuidara a la pequeña.

Olive frunció el ceño y se acerco a Judith, la pequeña soltó una risa y miro directamente a la olivarda, quien sonrió por unos segundos. ──Yo también te extrañe, pequeña patea traseros.

Estuvo un buen rato en la entrada jugando con la pequeña y hablando con Olivia, la mujer le había comentado todo lo que había sucedido el ultimo mes. Los salvadores habían arrasado con muchas cosas de la comunidad, se llevo las armas, parte de los medicamentos e inmuebles del lugar, pero al menos les había dejado la comida y con eso se habían mantenido por un tiempo, sin embargo, el numero de alexandrinos era alto, por lo tanto, la comida comenzaba a escasear y por eso la ausencia del líder, necesitaba alimentar a su gente.

Olive ingreso a la casa del Sheriff para hacerle algo de comer a la pequeña grimes y Olivia dijo que iría por unos postres que tenia guardado en la despensa. La pelinegra dejo a la pequeña en la mesa con cuidado y se giro para calentar un poco de agua en una olla, busco en uno de los muebles de la cocina algo de leche, sin embargo, no había nada.

──Olivia, ¿sabes dónde está la leche? ──pregunta esta al oír que la puerta se abrió.

──Posiblemente se la haya tomado──Olive se congelo al oir esa voz, trago duro y se volteo lentamente. Una sonrisa apareció en el rostro del hombre frente a ella. ── un placer volver a verte, preciosa.

La mirada olivarda de la chica se movió en dirección de la pequeña Grimes, la del hombre también. Carl quien estaba a su lado, miro a Olive provocado, Judith había estado oculta de negan este ultimo tiempo, él ni siquiera estaba al corriente de la existencia de la pequeña.

──¡Pero miren a este angelito! ──se maravillo el hombre e hizo el amago de acercarse. Olive reacciono y tomo con rapidez.

──Ni se te ocurra tocarla──gruño, apretando los dientes. Su respiración era irregular, su cuerpo entero temblaba de rabia.

Negan se acerco a la muchacha lentamente sin borrar su sonrisa socarrona, le tendió el bate al muchacho y miro a la chica de ojos verdes, se relamió los labios antes de hablar. ──¿Es tuya? ──pregunta. La muchacha tenía la mandíbula apretada, tanto que dolía. Su mirada estaba clavada en los ojos de Negan, llenos de cólera.

──No──murmuro con gran dificultad. Negan se la quito de los brazos con rapidez y la acerco a su regazo, la pequeña lo miraba confundida, pero ni siquiera se inmuto. ── devuélvemela, por favor.

Le asustaba lo que el hombre frente a ella pudiese hacer, la desesperación comenzó a crecer en ambas personas, tanto en el hermano mayor de la pequeña grimes y en la muchacha. El líder de los salvadores había demostrado mas una vez lo despiadado que era, había matado a un niño en hilltop, había mato a sam, ¿Qué les decía a ellos que no podía hacer lo mismo con Judith?

Olive y Carl miraban aturdidos la escena frente a ellos, Negan tenia puesto un delantal de cocina y revolvía la olla donde anteriormente había preparado spaghetti, también le había preparado un biberón a la pequeña Judith y se paseaba por la casa como si fuese suya. La situación parecía una broma de mal gusto para la muchacha, ver al asesino de su hermano paseándose libremente por todo el lugar, fingiendo que nada había pasado y ella conteniendo todas las ganas de clavarle un cuchillo.

──¡A comer! ──dijo el hombre con una sonrisa y quitándose el delantal, tomo su bate y se sento en la punta de la mesa, donde había servido los platos. Miro expectante a los demás, golpeo con el bate la mesa, sobresaltándolos. ──dije a comer.

Olive permaneció en silencio, apenas toco su almuerzo, ver a aquel hombre y el bate con el que mato a su hermano, le causaba nauseas. El hombre se encontraba jugando pool junto a Spencer, desde el pórtico de la casa de Rick podía oír lo que decía y lo mal que hablaba del líder de la comunidad, era un cobarde y hasta Negan lo sabía.

──Es bueno tenerte aquí──dice Carl a su lado. La muchacha gira su cabeza y hace una mueca, no esperaba verlo en estas circunstancias. ──Tengo muchas cosas que contarte.

──Podrías empezar explicando que hacías con él──reprocho la olivarda.

──Alguien tenía que hacer algo──espeto. Su rostro tenia un semblante triste, los ojos de Carl lucían demasiado apagados ── Nos han quitado muchas cosas, apenas tenemos para comer.

──¡Escabullirte en un furgón y disparar a diestra y siniestra, no es algo que nos beneficie, Carl! ──refunfuño Olive, en voz baja. ──No puedes... no piensas... ¡Dios, no puedo perderte a ti también!

──No fuiste la única que perdió a Sam.

La muchacha quedo estática sobre su lugar con tal confesión, era cierto después de todo y aunque el dolor en las palabras de Carl la sorprendían de algún modo, no podía negarlo. Soltó un suspiro cansado y le entrego a la pequeña, no entendía muy bien que clase de relación existía entre ambos y tampoco es que tuviera el valor de preguntar.

 Olivia había aparecido y se quedo junto al adolescente y su hermanita, Olive le agradeció con la mirada y camino hacia el resto de los alexandrinos que veían el espectáculo que deba Negan y Spencer. Vio a rosita y Eugene entre ellos y se acercó.

──No sabía que estabas aquí.

──Desearía no estarlo── murmuro molesta. Su vista viajo hacia todos los salvadores que rodeaban la comunidad, todos estaban armados hasta los dientes.

──Voy a matarlo.

Nuevo capitulooooooooooooo.

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Los leo, besitos.