50. Viaje al Gran Bosque
Se encontraban volviendo de Talos de vuelta a Branova al taller de Tony. Tardaron prácticamente lo mismo que a la ida, por lo que no perdieron mucho tiempo. Llegaron de noche tras ir, subir el rascacielos, el enfrentamiento y todo lo siguiente, habían perdido bastantes horas del día incluso habiendo salido tan pronto. Por lo que llegaron al taller de Tony y durmieron allí pero antes de eso él les enseño para que era el reactor que compró.
- Tony: chicos, aquí lo tenéis. Mi último gran trabajo.
Se trataba de la armadura que había estado construyendo durante el día anterior y que vieron sin acabar al conocerle. El reactor lo había colocado en el pecho para alimentar los circuitos de su invento.
- John: ¡es increíble! ¿Qué puede hacer?
- Tony: a parte de tener armas en ella implantadas como pequeños misiles o láseres, el mayor avance es el uso de repulsores. Le permite volar al piloto y además se puede usar también como arma.
- John: ¿cómo la usas?
- Tony: tiene un software potente y puedo ver todo lo que pasa por el casco, y para los repulsores se concentra energía en las manos y pies que me permite volar. Además se puede concentrar en el pecho y lanzar un golpe repulsor con mayor potencia de ataque. Además tiene potencia como para sujetar un gran peso con él.
- Liz: ¿cuál es su límite?
- Tony: tiene un límite de diez toneladas de peso y diez horas de vuelo. Sin peso adicional es capaz de romper la velocidad del sonido en su vuelo.
- John: eso es increíble.
- Tony: tengo ganas de probarlo, y creo que os podría venir bien.
- Liz: ¿a qué te refieres?
- Tony: quiero comprobar su potencia y ver si funciona bien. Pero no podré hacerlo si no es un gran reto. Decidme a dónde es vuestra próxima parada y os llevaré.
- Jolyne: no lo has probado nunca y además vamos en un todoterreno, ¿no sería demasiado peso?
- Tony: tranquila, un todoterreno puede pesar entre tres y cuatro toneladas, no llega ni al límite del peso que puede soportar. Sería una gran oportunidad para probar su potencia.
- John: siendo sinceros, nos ahorraría mucho tiempo de viaje. Y vamos un poco contra reloj.
- Tony: ¿lo ves? Son todo ventajas, y prometo ir a una velocidad en la que no se puedan correr ningún peligro.
- Liz: nos dirigimos al bosque antes de llegar a la capital. ¿No es demasiada distancia?
- Tony: no os preocupéis, mañana por la mañana os llevo y no creo que tarde más de medio día de camino. Comeré bien por la mañana para no tener que parar a la mitad. Y llegareis bien.
- John: a mi me parece bien, y ¿a vosotras?
- Jolyne: no me dan confianza esas cosas, pero bueno. Nos vendría de mucha ayuda.
- Liz: pues decidido, aceptamos.
- Tony: perfecto, veréis como todo sale bien. Ahora me pondré a investigar un poco el camino más corto y os llevaré hacia allá.
- Jolyne: nosotros por la mañana iremos a por nuestras cosas y el todoterreno para traerlo aquí.
- Tony: no lo traigáis aquí, hay poco espacio de maniobra. Llevadlo mejor al aeropuerto del que salimos ayer, es perfecto para despegar allí.
- Jolyne: para quedarme más tranquila, ¿cómo vas a llevarnos? A ver si me explico, ¿cómo vas a coger el coche para llevarnos hasta allí?
- Tony: supongo que cuando estéis dentro del todoterreno lo levantaré y lo colocaré a las espaldas del traje, y empezaré a volar subiendo la velocidad gradualmente. No hay otra forma de hacerlo de forma segura.
- Jolyne: perfecto.
- John: hay una pregunta muy importante que queda por hacer.
- Tony: ¿y cuál es?
- John: ¡¿quién tiene hambre?!
- Liz: ¿en serio? ¿Cuántas veces has comido ya hoy?
- John: nose, cuatro o cinco veces. Pero tantas emociones de hoy dan mucha hambre.
- Tony: yo me apunto a esa comida.
- Liz: bueno, pues vamos a comer todos juntos.
- Jolyne: por favor, otra vez bocadillos no John.
- John: tranquila se hacer más cosas de comer.
Fueron a la cocina y cada uno preparó su comida aunque luego acabaron compartiendo cada uno lo suyo, y vieron como la habilidad que tenía Tony con las máquinas no la compartía en la cocina. Pero eso dio lugar a muchas risas y cuando terminaron de todo se fueron a descansar un poco.
A la mañana siguiente cuando se despertaron avisaron a Tony para que se reunieran en el aeropuerto tras recoger el coche. Fueron a por el y se dirigieron al punto de encuentro donde le esperarían.
- John: espero que no tarde mucho.
- Jolyne: me dijo que solo debía arreglar algunos comandos del software antes de ponerlo en marcha por completo.
- Liz: entonces esperemos aquí mientras llega.
No pasaron más de un cuarto de hora hasta que Tony se presentó allí, iba dentro del traje y aterrizó poco a poco reduciendo los repulsores.
- Tony: hola chicos, parece que el vuelo regular va todo bien. Ahora debemos probarlo con peso.
- John: entonces, ¿salimos ya verdad?
- Tony: claro, cuando queráis.
- Liz: entonces todos al coche.
Se montaron a todos dentro del todoterreno, y cerraron con el seguro para que no se pudiera abrir el coche. Tony usó su armadura para levantarlo poco a poco y empezó a colocarlo a su espalda y a elevarse del suelo.
- Tony: ¿Estáis todos bien?
- Jolyne: si tranquilo, estamos bien.
- Tony: entonces que comience el viaje hacia el bosque.
Comenzó a elevar más y más el coche sobre su espalda y cuando estuvo a una altura considerable del suelo a unos cuarenta o cincuenta metros de altura. Estuvieron volando a gran velocidad y aun así tardaron cerca de diez horas sin parar, ahorrándose varios días de camino en coche. Tras todo eso, llegaron a las afueras del bosque donde Tony les bajó.
- Tony: hemos llegado, y parece que aquí nos separamos.
- John: muchas gracias por traernos, si necesitas algo alguna vez cuenta con nosotros.
- Tony: lo mismo iba a deciros a vosotros, gracias a ustedes voy a poder ir y volver a Talos siempre que necesite algo. Estoy pensando en un nuevo proyecto.
- Jolyne: ¿que proyecto?
- Tony: una armadura, más grande y con mayor fuerza y potencia, pero no se como llamarla.
- John: prueba con Hulkbuster.
- Tony: mm buen nombre, ¿cómo se te ha ocurrido?
- John: me recuerda a algo de donde yo soy. Puedes quedarte el nombre.
- Tony: gracias por esto también, algún día os lo enseñaré cuando lo tenga acabado.
- Jolyne: sería increíble.
- Tony: bueno, es hora de que vuelva o se me hará demasiado tarde.
- Liz: vuela con cuidado.
- Tony: lo haré.
Despegó y comenzó a elevarse a la misma altura que antes y uso los repulsores al máximo para salir volando de allí.
- Jolyne: según nos dijeron deberíamos hablar con el rey del bosque, debería estar en la parte central.
- Liz: pues empecemos a buscar.
Se adentraron en él para buscar al rey del gran bosque que se encuentra justo antes de llegar a la capital, además fueron a pie y dejaron el todoterreno cerrado en las afueras del bosque aparcado junto a un camino. Tras preguntar a los seres del bosque, los cuales había de varios tipos desde centauros, pixies, ents, faunos y muchos otros, encontraron al rey.
Se trataba de un hombre sentado en un árbol como si fuera un trono. Tiene cuernos largos en forma de semicircular, la parte inferior del cuerpo eran patas como las de un fauno. Tenía ropa extraña y una máscara blanca que cubría la parte superior de su cara.
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