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Prologó: Un alíen entre nosotros.

-A continuación, Lex Luthor, quien afirma tener información impactante acerca de nuestro amado héroe, Superman- 

-Gracias señorita Lang, es un placer estar aquí el día de hoy- respondió con elegancia el millonario más famoso de Metrópolis. 

-Díganos, señor Luthor, ¿Qué es eso tan importante que ha descubierto acerca de Superman?- 

-Bueno Lana, como sabrás me he responsabilizado de pagar los daños que nuestro amado héroe- aunque supiera disimularlo, el magnate dijo esas dos palabras con cierto toque de desprecio -Ha dejado atrás durante sus enfrentamientos contra criminales, o como el público ha comenzado a llamarles "villanos"- 

-Y todos se lo agradecemos señor Luthor, pero, sin ofender, ¿Eso que tiene que ver con esto?- 

-Bueno, durante las labores de limpieza que mi compañía ha realizado, hemos recolectado un poco de material biológico de Superman, cabello, piel muerta, algunas gotas de sangre que el héroe ha derramado por nosotros, y al investigarlas, por mera curiosidad científica, hemos descubierto que su ADN no es humano- 

-Bueno, señor Luthor...-

-Por favor, llámame Lex- 

-Esta bien, Lex. Creo que hablo por todos cuando digo que eso es algo obvio- el comentario causo algunas risas entre el público del programa -Siempre se ha tenido la sospecha de que Superman es algún mutante, muchos incluso piensan que es un ángel caído del cielo- 

-Bueno, tal vez tengas algo de razón. El ADN de Superman no es humano, tampoco es mutante, de hecho, no se parece al de ningún ser vivo en este planeta- todos callaron.

-¿E-esta usted suponiendo que...-

-Si, Superman, es un alienígena- 

La noticia llego a oídos de todos. Algunos creyeron que fue algún intento del empresario de manchar el nombre de Superman pues habían rumores de que el millonario había estado detrás de algunos de los incidentes en los que Superman se había visto involucrado. Pero la mayor parte del público creyó en las palabras del hombre y esto desato el caos. 

Las teorías no se hicieron esperar "Superman esta aquí para analizar las defensas de la humanidad, planeando una futura invasión", "Quiere que bajemos la guardia para poder conquistarnos", "Esta aquí para experimentar con nosotros", "Quizá, solo quiera ayudar", esa última y sus similares fueron, por desgracia, las que menos fuerza consiguieron. 

Algunas revueltas comenzaron, algunos querían respuestas de sus autoridades, saber que iban a hacer al respecto, otros solo querían prepararse, tomar sus cosas y a sus familias para alejarse lo más posible del extraterrestre. 

Fue al intervenir en un pleito y notar que todos los miraban aterrados, que Superman decidió que todo había ido demasiado lejos, debía hacer algo. 

En poco tiempo, muchas personas se acumulaban al exterior del ayuntamiento de la ciudad, donde las cámaras apuntaban al héroe, transmitiendo para un mundo expectante. Tras aclararse la garganta y probar el micrófono, Superman hablo. 

-Sabemos por que estamos aquí, así que iré directo al grano- la breve pausa que el héroe tomo antes de responder pareció eterna para todos los espectadores, pese a que no dura más de 30 segundos -Si, lo que Lex Luthor dijo es verdad, soy un alienígena- la multitud rompió su silencio, estallando en preguntas dirigidas hacía el héroe, el cual pidió silencio para seguir hablando -Llegue a la tierra cuando apenas era un bebe desde el extinto planeta Krypton. Mis padres me enviaron aquí antes de que nuestro mundo se destruyera para salvarme la vida. Tal vez no nací aquí, pero crecí y me críe en la tierra, este es el mundo al que llamo hogar, ustedes son mi gente, y todo lo que quiero es usar mis poderes para proteger al mundo que me acogió y a las personas que habitan en él- en respuesta a las palabras de Superman, la gente comenzó a aplaudir y a vitorear su nombre. 

El plan de Luthor había fracasado. El creía que al saber la verdad la gente vería a Superman de la misma forma que él, lo verían como la amenaza que representa, pero esas estúpidas masas se dejaron manipular por el alienígena. 

En otra parte del mundo, con clima tropical, un hombre grande y musculoso arrastra el cuerpo de una criatura extraña por la selva, dejando como rastro un líquido verde brillante, el cual no es otra cosa que la sangre de la criatura, escapando desde el cuerpo sin vida a través de sus múltiples heridas. Él hombre se detiene al llegar a un gran agujero en la tierra, de unos tres metros de largo, uno y medio de ancho y al menos seis de profundidad. 

El sujeto suelta las sogas con las que arrastra el cadáver, limpiándose el sudor de la frente con su brazo antes de tomar el gran contenedor rojo que llevaba atado a la espalda para vaciar el líquido en su interior dentro del pozo. Una vez esta vacío arroja el mismo al agujero para después girarse y empujar el enorme cadáver al interior del hoyo. Este sujeto contempla el interior del pozo por un momento, procediendo a tomar un cigarro de su cinturón, encendiéndolo y dándole una gran calada, suspirando con alivio al liberar el humo poco después. Sin prisa alguna se toma su tiempo para disfrutar de su cigarro y una vez este es lo bastante pequeño, lo arroja al agujero, provocando una gran llamarada ante la cual ni se inmuta. 

Después espera de pie a un lado del pozo hasta que las llamas se consumen por completo, no habiendo dejado nada más que unos huesos irreconocibles y cenizas. Es entonces que toma una pala que estaba tirada cerca para llenar con la tierra previamente removida el hoyo. Al terminar cubre con hojas y ramas la tierra removida para no dejar rastro de lo ocurrido, estaba en medio de la nada, pero no quería dejar la menor evidencia. 

Con su labor terminada regresa por donde vino, llegando al cabo de una horas a un pequeño pueblo ajetreado, pudiendo ver que junto a los vehículos, transitando por las abarrotadas calles había vacas, toros e incluso un elefante. Sin tomarle importancia camina hasta un pequeño local, entrando y sentándose en la barra donde, hablando Hindi no muy bien, pide una bebida. 

Mientras da el primer sorbo, ve la pequeña televisión en una esquina del local, donde reconoce la imagen de Superman, pero es el pequeño texto en la parte de abajo, casi imposible de leer, el que le llama la atención. A base de señas logra pedirle al cantinero que suba el volumen, escuchando una repetición del discurso dado por Superman. Al escuchar la revelación, el hombre apretó de forma inconsciente el pequeño vaso de vidrio que sostenía, rompiéndolo en consecuencia. 

-¿Conque un alienígena?- menciono en un susurro, con rencor en la voz. 

Luthor no había conseguido destruir la imagen de Superman, pero quizá, tan solo quizá, había llamado la atención de alguien capaz, no solo de destruir la imagen del kryptoniano, sino al kryptoniano mismo. 

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