Casi Reuniones

Super 8 fue tachado de la pizarra blanca con un rápido corte de marcador negro. Le siguieron rápidamente The Defenders, Super Guardians, Superwoman and Co.

"No no no." Perry White proclamó mientras tachaba cada nombre de la pizarra. "Ninguno de estos nombres está rastreando bien. Además, apestan".

El redactor jefe del Daily Planet arrojó el rotulador y se volvió hacia sus periodistas. La sala de reuniones estaba abarrotada, todos los espacios repletos de alguien que tomaba notas. Perry se cruzó de brazos mientras miraba a una multitud de personas, simplemente le devolvieron el parpadeo.

Resoplando, cruzó hacia una ventana cercana, señalando la ciudad afuera. "Se libró una batalla masiva en nuestra ciudad", dijo. La construcción que reparaba los daños en toda la ciudad era un claro testimonio de esa afirmación. "Cada uno de nosotros probablemente tenga una historia de esa noche que preferiríamos olvidar. Pero hay algo que necesita ser contado. ¡Un grupo de héroes nos salvó! ¡Y ni siquiera tienen nombre!" Hizo un gesto para tachar los nombres.

"Quiero que cada uno de ustedes salga de la calle". Perry ordenó: "Quiero saber qué piensa la gente sobre estos héroes. ¡Jacobs! ¡Quiero que hables con la policía, obtén una declaración sobre su postura sobre este supergrupo!"

Continuó caminando alrededor del grupo dando tareas. Antes de detenerse frente a Lois.

"Lane. Necesito que hables de Luthor". Perry ordenó: "Lo más probable es que él va a cambiar la factura de gran parte de la reconstrucción. Sé que no te gusta hablar con él. Pero tú eres el que tiene la historia con él".

"Claro jefe", dijo Lois con los ojos en blanco. Agarrando sus cosas y saliendo de la sala de conferencias.

"¡Kent!" De repente, Perry estaba frente a ella. Jumping Claire mirando sus notas.

"¿Sí jefe?"

"Quiero una cita de la mujer misma".

"Wo... q... mujer señor?"

"¡Supermujer!" Orden Perry. Señaló la ventana. "¡Encuéntrame Superwoman! Lois es la que tiene la conexión, pero la necesito en Luthor. ¡Así que eso te deja! ¡Consígueme una cotización! ¡Una declaración! ¡Diablos, un libro de seis partes! Solo obtén la historia de ella. La invasión, y el equipo. ¿Entendido?"

"S... s... sí señor". Respondió Claire, parpadeando detrás de Perry mientras se quedaba como la última persona en la habitación. Frunciendo los labios, puso los ojos en blanco antes de suspirar. Parecía que tenía que conseguir una entrevista de ella misma. Miró afuera hacia el brillante día soleado.

Tal vez podría conseguir un almuerzo temprano.

#CAROLINA DEL SUR#

Espalda recta y equilibrada, la postura de alguien que estaba acostumbrado a tener el control. Una postura que normalmente pertenecería a una persona que se destacó. Sin embargo, de pie allí, vestida con un traje gris de mujer, con el pelo largo y negro recogido hacia atrás en una trenza francesa. Lentes gruesos enmarcados descansando sobre su nariz. Diana se parecía menos a una guerrera amazona y más a una mujer de negocios de alto poder.

Metropolis Centennial Park estaba tranquilo. El sol que brilla sobre las personas que se arremolinan en sus pausas para el almuerzo o en los paseos por el parque. Los niños jugaban en el césped, la gente corría y andaba en bicicleta por los senderos.

Ninguno de ellos la miró.

Un grupo de personas que caminaban hacia ella se vieron obligados a reducir la velocidad cuando notaron que ella se interponía en su camino. Hizo una pausa para ser secundada antes de retroceder y dejarlos pasar. Ella los vio caminar, ninguno de ellos mirando hacia atrás.

"Esto es increíble." Dijo girándose hacia su acompañante.

Claire abrió los ojos, la luz del sol se reflejaba en sus lentes de vidrio mientras se sentaba en un banco del parque. Su cabeza se inclinó hacia atrás a la luz del sol.

"Te dije que funcionaría", le informó Claire, luciendo lo que podría haberse llamado una sonrisa de suficiencia.

"Kal...", comenzó Diana.

"Claire", corrigió antes de ponerse de pie, hizo un gesto con la cabeza hacia un camino menos transitado. "Cuando estoy vestido así. Llámame Claire".

"Gracias por invitarme a salir... Claire". Dijo Diana. Podría haber usado su nombre humano, pero Claire se dio cuenta de que realmente no entendía por qué. Hizo una nota mental para explicárselo más tarde.

"Está bien", dijo Claire con una sonrisa. "Tenía algo de tiempo en mis manos".

Era agradable estar fuera de casa con alguien de quien no tenía que guardar secretos. Además de las miradas en las caras de los 'guardias' militares de Diana cuando Superwoman apareció en las embajadas de Themyscira para preguntar si Wonder Woman quería almorzar. Era algo que la divertiría por un tiempo.

"Es agradable estar fuera de las embajadas", admitió Diana mirando a su alrededor, "Cuando mamá me envió a ser un enlace con el mundo de los hombres, no había pensado en toda la política. También se vuelve aburrido allí. Bueno, eso es..."

"¿Qué?" Claire incitó sonriendo. Con Lana a medio país de distancia, y teniendo más posibilidades de conectarse con un tiburón toro que con Lois. Claire había estado sin hablar de chicas por un tiempo.

"Steve Trevor," Diana confesó libremente, su descarada admisión sorprendió a Claire por un momento. "Él es el hombre que llegó por primera vez a Themyscira. Fue con él que vine a Estados Unidos. Ha sido de gran ayuda".

"Servicial...." Claire repitió.

"Útil y exasperante y obstinada y terca", Diana parecía haberse puesto en marcha. "Pero al mismo tiempo tan noble y tan valiente".

Claire miró hacia otro lado enfocándose en el camino. Pero en su mente, una forma sombría con orejas puntiagudas y ojos blancos danzan a través de sus pensamientos.

"Sí, conozco a ese tipo", suspiró Claire, antes de darse cuenta de su propio hilo de pensamiento y lo apartó.

"¿Has tenido noticias de alguno de los otros?" preguntó Diana cambiando de tema.

"No", respondió Claire sacudiendo la cabeza, "He oído hablar de ellos en las noticias, y de... alrededor". ella hizo un gesto hacia su oído. "Flash derribó a alguien llamado Capitán Boomarang. Batman tuvo que lidiar con un levantamiento en Arkham. Green Arrow fue visto en Star City. No he oído hablar de Aquaman o Green Lantern. Pero ambos funcionan un poco más lejos del alcance de las noticias. "

"¿Qué hay de Cyborg?", preguntó Diana.

"¿Te refieres a Víctor? ¿Es así como lo llaman?" preguntó Claire. "Él está en STAR Labs. No en el que trabaja su padre. No creo, todo se ha asimilado por completo para él todavía".

"Escuché en las noticias que nos estaban llamando grupo", dijo Diana, "un equipo".

"Nos unimos", dijo Claire, "Necesitábamos proteger la Tierra y detener a Darkseid. Necesitábamos ser un equipo para hacer eso. Pero cada uno de nosotros, tenemos nuestras propias ciudades que proteger. Nuestros propios deberes".

"Eso explica por qué todos se fueron después de la batalla", dijo Diana.

"Sin embargo, siempre estaré allí, si necesitan ayuda", admitió Claire una vez más señalando su oído, "Estoy atenta. Pero la mayoría de las veces, quieren manejar las cosas por su cuenta".

"Debería regresar", dijo finalmente Diana, cuando se detuvieron en el camino desierto. Ella se movió para seguir su propio camino.

"Lo digo por ti también, Diana", dijo Claire después de ella, "si alguna vez necesitas ayuda, solo llama".

"A ti también... Hermana", respondió Diana, comenzando a alejarse.

"Hola, Diana", la llamó Claire, señalando el traje. "No olvides cambiarte antes de regresar".

#CAROLINA DEL SUR#

Iba de regreso al Daily Planet en el momento en que la golpeó, tropezó como si hubiera recibido un golpe físico. Aferrándose las manos a la cabeza, gritó cuando un dolor punzante abrumó sus sentidos. Su visión se desvaneció a negro.

Pies con botas resonaron en un concierto oscuro

Las luces del techo se encendieron casi demasiado intensamente para mirarlas.

Una apariencia borrosa de un hombre mirándola, con la cara cubierta con una máscara quirúrgica.

Una voz apagada llamó desde la distancia. Demasiado débil para escucharlo.

"... el.....él...p...s "

La realidad volvió con un torrente de color y sonido. El dolor se desvaneció como si nunca hubiera estado allí, la presión en su cráneo desapareció.

"¿Estás bien?" Preguntó una voz cuando uno o dos transeúntes serviciales se detuvieron para ver cómo estaba. Notó que estaba medio apoyada en un edificio, agradecida de no haberse derrumbado en el centro de la acera.

"Sí", dijo tomando un respiro, se enderezó alcanzando para ajustar sus lentes. "Estoy bien, gracias." Ella les dedicó una sonrisa, una que era mucho más tranquila de lo que se sentía.

#CAROLINA DEL SUR#

El resto del día pasado con incidente. Ella evitó que un pequeño accidente automovilístico se convirtiera en una gran acumulación. Además de un puñado de robos que habían tenido lugar por personas que pensaban que podían aprovechar el estado posterior a la batalla de las ciudades. Pero no había habido otros ataques mentales, con dolor y visiones o de otra manera.

Estaba en casa cuando otro episodio la golpeó.

Agarrándose la cabeza, mientras el dolor aplastaba su mente. Ella comenzó a colapsar cuando su visión una vez más fue secuestrada.

Otras luces delanteras se encendieron cuando pasaron como un relámpago. Avanzando uno tras otro por un largo pasillo.

Imágenes borrosas de hombres con máscaras y batas, caminando entre computadoras.

Un logo en la pared.

" Ayuda.....lp....p.....s."

Jadeando, Claire se levantó de un salto y se encontró acostada sobre una pila de vasos de lo que solía ser su mesa junto a la silla. Sacudiéndose los fragmentos, se puso de pie.

No fue un ataque...

Alguien estaba pidiendo ayuda.

#CAROLINA DEL SUR#

"Ha habido una gran cantidad de estimulación mental". Emil Hamilton dijo levantando la vista de las lecturas de su computadora. "Pero sin una línea de base, no puedo decir si esto se debe a estos ataques. O si tu cerebro es generalmente así".

"Desafortunadamente, yo tampoco", admitió Superwoman quitándose el dispositivo de la cabeza. Se giró en su asiento para mirar al científico. "Pero no creo que haya sido un ataque. Creo que alguien está tratando de comunicarse conmigo".

Después del episodio en su apartamento, Superwoman se dirigió a STAR Labs. Ponerse en contacto con el científico que la había ayudado antes.

"Bueno, no sabemos si estabas tratando de comunicarte contigo directamente porque eres Superwoman". dijo Hamilton, una mano a su barbilla en pensamiento. "O que podrías estar atendiendo las llamadas porque estás más abierto a ellas".

"¿Abierto a qué exactamente?" Ella preguntó.

"Podría ser tecnología", dijo Hamilton repasando mentalmente las opiniones. "O tal vez algún tipo de ESP".

"¿ESP? ¿Telepatía?

"Todo esto es solo teoría". Hamilton se encogió de hombros.

"Realmente no importa el cómo", dijo Superwoman, "Alguien estaba pidiendo ayuda. Necesito saber dónde están".

"¿Qué puedes recordar de estas visiones?" preguntó Hamilton tomando asiento frente a ella.

"Realmente no podía concentrarme", admitió Superwoman, "Pasaron tan rápido. Además del dolor".

"Trata de recordar", animó Hamilton. "Por lo que he oído sobre ti y de. Tienes una mayor capacidad de asimilar y procesar información. Supongo que mucho más que los humanos".

Se inclinó hacia adelante en su silla e hizo un gesto. "Cierra los ojos y respira hondo. Intenta recordar algo".

Superwoman disparó con una mirada vagamente divertida, dudaba que las señales humanas le importaran mucho. Pero ella siguió sus instrucciones de todos modos.

Relámpagos llameantes, pies calzados con botas en concierto, el sonido distante de gente hablando. Demasiado débil para distinguirlo.

Hombres en batas de laboratorio, computadoras en laboratorios, un logo en una pared, el mismo logo en la etiqueta con el nombre de un hombre inclinado.

"Había un logotipo", informó Superwoman con los ojos abiertos. Se levantó de su asiento agarrando un papel y un bolígrafo del escritorio de Hamilton. Un boceto rápido de lo que vio, Superwoman lo miró de cerca. Ella no tenía idea de lo que significaba.

Hamilton se colocó a su lado y miró el logotipo.

"Nunca lo había visto antes", dijo con una ligera inclinación de cabeza.

Dos triángulos uno encima del otro, sus puntas se tocan como un reloj de arena. O una hebra de ADN aplanada. Dibujado dentro de una forma hexagonal. En sus recuerdos el color era amarillo y rojo.

"Yo tampoco."

#CAROLINA DEL SUR#

Superwoman encontró a Cyborg en el mismo edificio. El técnico que trabajaba en el laboratorio la miró con los ojos muy abiertos cuando entró en la habitación. Pero su atención estaba en la figura frente a ella. Sabía que ese cuerpo cibernético era grande, pero en esta habitación, en su posición de descanso sobre una cama casi vertical. Parecía tan pequeño.

Cruzó la habitación mirando el rostro en reposo. El lado orgánico de su cara que era. Contra el metal reluciente de su casco y placa pectoral. Parecía tan joven.

Un ojo oscuro se abrió y el otro se iluminó en rojo.

"Supermujer", saludó, un tono electrónico quebró su voz.

"Víctor", respondió ella sonriéndole suavemente. "Estaba en el edificio. Pensé en pasarme. No quise molestarte".

"Está bien", respondió Cyborg bajando de su lugar de descanso. "No puedo dormir. Esto es lo más cerca que puedo estar de eso".

No estaba segura de cómo responder a eso. Ella misma nunca necesitó dormir, pero sabía que los humanos lo necesitaban. Lo que sea en Víctor que todavía era humano debe haberlo pasado por alto. Se salvó de responder cuando Víctor cambió de tema.

"¿Qué te trae a STAR Labs?" Preguntó.

"Tuve... algo sucedió", respondió Superwoman, no estaba tratando de ser vaga. Ella realmente no sabía lo que había sucedido. "Alguien con ESP o algo basado en tecnología. Intentaron pedirme ayuda. Fue una sorpresa, necesitaba ayuda para resolverlo".

"¿Tuviste?"

"Todo lo que obtuve fue este logo", dijo Superwoman sacando la hoja de papel de su cinturón. Mostrándoselo a él.

"Puedo investigarlo por ti", se ofreció.

"No, es..." Se congeló en su negación antes de asentir. "Gracias Víctor".

"Es Cyborg", corrigió el joven volteándose para alejarse, "No sirve de nada negarlo".

Ella lo vio alejarse, con el corazón apesadumbrado por él.

#CAROLINA DEL SUR#

"¡Ayúdame!" La mujer gritó mientras huía por un callejón empapado por la lluvia. Antes de tirar de la puerta de alambre al final, cuando descubrió que bloqueaba su salida. Jadeando, se giró para mirar a sus perseguidores. "Por favor, por favor...."

Los dos malvados se rieron acercándose a ella, cuando una figura en rojo y azul cayó del cielo entre ellos.

"Eso es suficiente", ordenó Superwoman mirando a los atacantes.

"Supermujer", dijo uno de los hombres, pero el tono era diferente al que esperaba. Bajo y tranquilo, no es lo mismo que un posible atacante que enfrenta la apariencia de un héroe.

De repente, una brillante iluminación cenital iluminó el área como la luz del día.

Alambres acordonados la envolvieron cuando la mujer detrás de ella los disparó. La electricidad chisporroteó arriba y abajo de las líneas, más de lo que nunca se habría usado en un ser humano. Diseñado para ella, se dio cuenta cuando el voltaje azul se arqueó a su alrededor, construido para ser usado en ella.

Porque dolía.

Gritando, cayó sobre el húmedo concierto mientras el dolor la aturdía.

"¡Ve! Ve! Ve!" Gritó una voz masculina, mientras la alambrada se caía. Vehículos pesados ​​oscuros que se acercan. Acababa de empezar a tirar de los cables cuando lo sintió. El poder drenándose de ella, mientras un ácido como el dolor se derramaba sobre sus terminaciones nerviosas.

Kryptonita.

El dolor devoró su visión y su oído mientras el mundo a su alrededor se convertía en destellos de color y sonido. Era vagamente consciente de que la estaban moviendo. En una camilla en la parte trasera de la furgoneta.

"No pierdas el control de esa Kryptonita, de lo contrario será tu trasero". Una voz llamó en la distancia, y la oscuridad siguió al portazo.