Creado por Captain_golden [2.900 palabras]

Resumen; Lena parecía muy cerca de tirar una maceta sobre el borde del balcón. Los ojos de pánico de Lena se encontraron con los de Kara. Ella sacudió furiosamente la cabeza y se llevó el dedo a los labios. Y luego ella suspiró.

—Sí madre, alguien está aquí conmigo —Lena le indicó a Kara que se acercara—. Es mi- ah- novia. Es reportera de CatCo —Lena miró a Kara suplicante. [Citas falsas AU]

—¿Señorita Luthor?

—¿Sí? —dijo Lena, mirando desde su computadora a Jess, su asistente —. ¿Qué es?

—Unas pocas cosas —dijo Jess, caminando hacia Lena y entregándole un trozo de papel—. Tu madre llamó, otra vez —ella hizo una mueca ante la mirada de Lena—. No voy a entrar en eso, ella dejó un mensaje —Jess asintió ante el trozo de papel.

—¿Qué más? —Lena suspiró y se frotó las sienes, con un repentino dolor de cabeza.

—Bueno, hay una periodista aquí para verte —Jess dijo e hizo un gesto detrás de ella—. Ella está esperando fuera. Muy, um, excitable.

Lena suspiró.

—¿Eso es todo?

—Sí —el teléfono en la mano de Jess zumbó y ella suspiró—. No, es tu madre otra vez.

—No respondas —siseó Lena—. Solo... —resopló—. Solo deja entrar a la periodista. Acabemos con esto.

—Muy bien, señorita Luthor —Jess dijo, apuñalando el botón de finalizar llamada en el teléfono. Cuando salió, el teléfono comenzó a sonar de nuevo. Lena se frotó la frente con más fuerza.

—Ella está justo ahí — Lena escuchó a Jess decir mientras rebuscaba en sus cajones un Advil.

—Mierda... —ella susurró cuando estaba vacía. Lena logró ponerse de pie justo a tiempo para la llegada de la periodista.

—¡Hola! ¡Soy Kara Danvers de CatCo! —dijo la rubia, sonriendo alegremente a Lena. El dolor de cabeza de Lena se triplicó por el volumen de la voz de la mujer.

—Hola. Soy Lena Luthor —respondió Lena, suspirando e inclinándose sobre su escritorio para estrechar la mano de Kara. Lena hizo una mueca ante el apretón de la periodista—. Por favor, siéntese —hizo un gesto hacia el asiento frente a su escritorio. Lena esperó a que Kara se sentara antes de inclinarse suavemente en su silla, tratando cuidadosamente de no mover demasiado la cabeza.

—Es un placer conocerle —Kara dijo feliz mientras abría su bloc de notas.

—El placer es todo mío —Lena sonrió robóticamente, maldiciéndose internamente por no comprar más analgésicos—. Sin embargo, antes de comenzar, y esto es terriblemente vergonzoso de mi parte preguntar, pero ¿tiene algún medicamento para el dolor? —Lena suspiró y se frotó la frente con los dedos.

—¡Oh! Sí, en realidad —Kara sonrió, hurgando en su bolso—. Siempre llevo algunos por si acaso, aquí tienes —le entregó a Lena la botella de gran tamaño junto con pastillas. Lena alzó una ceja hacia Kara—. Es h-hábito. Mi antigua jefa tenía muchas migrañas —Kara dijo, sonrojándose.

—Su antigua jefa era Cat Grant, ¿verdad? —preguntó Lena, levantándose para servirse un vaso de agua.

—Si —Kara contestó, mirando a Lena con curiosidad—. ¿Como supiste?

Lena se encogió de hombros.

—Soy una persona curiosa... ¿Le gustaría un vaso también? —preguntó Lena mientras vertía agua en un vaso.

—No, gracias —Kara negó y observó a Lena asentir en respuesta.

Lena regresó a su asiento y se sentó. Agarró la botella, sacó dos pastillas y se las metió en la boca. Los persiguió con un trago rápido de agua.

—Está bien —dijo Lena y miró a Kara—. ¿Dónde te gustaría comenzar?

—¿Qué tal el éxito de L-Corp últimamente? ¡Todos subieron 3 puntos en los mercados de valores! —Kara comenzó, la pluma lista para escribir.

—Ah bueno. No puedo decir que fue inesperado.

—¿Puede dar más detalles, señorita Luthor?

—Aquí, en L-Corp, hemos estado trabajando incansablemente para crear nueva tecnología que pueda ayudar —Lena saltó cuando el teléfono en su escritorio comenzó a vibrar—. Disculpe, disculpe por un segundo —Lena levantó temblorosamente el teléfono en su escritorio—. Este es mi teléfono de emergencia. Es mi madre.

—Oh por supuesto. Tómese todo el tiempo que necesite —Kara dijo, sonriendo levemente.

—¿Madre? ¿Está todo bien? —Kara escuchó a Lena decir que ella asintió sombríamente y salió a su balcón. Kara se desinfló un poco y se frotó los ojos debajo de las gafas.

—Gran entrevista hasta ahora, Danvers —Kara se susurró a sí misma sarcásticamente y se cruzó de brazos. Miró hacia el balcón donde Lena parecía estar muy molesta. Kara se levantó—. Señorita Luthor, ¿está todo bien?

Lena parecía muy cerca de tirar una maceta sobre el borde del balcón. Los ojos de pánico de Lena se encontraron con los de Kara. Ella sacudió furiosamente la cabeza y se llevó el dedo a los labios. Y luego ella suspiró.

—Sí madre, alguien está aquí conmigo —Lena le indicó a Kara que se acercara—. Es mi- ah- novia. Es reportera de CatCo —Lena miró a Kara suplicante.

¿Novia?

—S-sí. Ella vendrá conmigo a la boda de Lex —Lena se frotó la cara.

¿Boda?

—Por supuesto, puedes hablar con ella, madre. Solo dame un segundo —Lena puso su mano en el teléfono—. Por favor, sigue el juego —ella siseó. Kara asintió y tomó el teléfono de la mano de Lena.

Kara se aclaró la garganta.

—¿H-hola?

—Así que tú eres la razón por la que mi hija no aceptará una cita.

La madre de Lena dijo humildemente desde el otro lado del teléfono.

—¿Supongo? —contestó Kara con otra pregunta, mirando hacia donde Lena miraba suplicante a Kara. Sus cejas estaban fruncidas y Kara vio en su boca la palabra "por favor" una y otra vez.

—¿Supones?

—No, no, quiero decir... Sí, hemos estado juntas por un par de... —Kara gritó cuando Lena le dio un codazo—. ¡Un par de meses!

—Un par de meses, ¿hum? —Kara escuchó a la madre de Lena suspirar—. ¿Eres una periodista?

—Lo soy —Kara respondió nerviosamente.

—Bueno, supongo que Lena podría hacerlo peor. Estoy deseando conocerte en la boda —la madre de Lena contestó secamente y terminó la llamada.

Kara se quitó lentamente el teléfono de la oreja y lo miró con los ojos muy abiertos.

—T-tu madre es...

—Lo sé. No, no tienes que asistir a la boda —Lena suspiró e hizo una mueca de dolor.

—Oh no —Kara sacudió la cabeza—. Después de esa conversación, creo que me lo debe.

—¿Te lo debo?

—Comida de boda —Kara sonrió, arrugando la nariz—. Me encanta el pastel.

—Ah —Lena miró a Kara, sorprendida—. ¿Tú... vas a venir?

—No me gustaría decepcionar a tu madre. Parecía muy ansiosa por conocerme, y cito expresamente "la razón por la que mi hija no aceptará una cita".

—Eso suena como ella —ella suspiró y se frotó la cara con la mano—. Te pagaré.

Kara sacudió la cabeza con furia.

—No. No necesita pagarme.

—Esta boda no va a ser divertida, para que lo sepa.

Kara suspiró y luego miró a Lena, con los ojos iluminados.

—Sé cómo podría pagarme.

—¿Cómo? —preguntó Lena con sospecha en sus ojos.

—Un acuerdo exclusivo con CatCo.

Lena miró a Kara por un segundo y luego suspiró.

—Está bien, pero para una solicitud como esa, necesitamos subir la apuesta —miró a Kara, considerando algo—. Necesito que sea la novia perfecta. Tan perfecta que mi madre nunca podría imaginarse con otro idiota.

Kara extendió la mano.

—Tenemos un trato —Lena sonrió y tomó la mano de Kara, tratando de ignorar el calor que la recorría al tocarla.

—Sí.

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—¿Cómo es tu familia tan rica? —Kara siseó a Lena mientras entraban al gran salón donde se celebraba la recepción.

Lena se encogió de hombros y apretó la mano de Kara cuando vio a su madre caminar hacia ellas.

—Dinero viejo.

—Viejo... —Kara sacudió la cabeza— Realmente eres muy rica.

Lena se rio entre dientes.

—¡Lo siento, madre! —ella sonrió ampliamente, caminando hacia adelante para saludar a su madre con un beso en cada mejilla—. Te ves maravillosa.

—Lo sé —la madre de Lena giró la cabeza para llevar a Kara con un brillo sin diversión en los ojos—. ¿Y quién podría ser?

—Kara Danvers —dijo extendiendo su mano—. Soy periodista de CatCo, pero... —ella le sonrió a Lena—. La novia de Lena y más una por esta noche.

La madre de Lena tomó la mano de Kara y sonrió con fuerza.

—Sí. Ahora recuerdo —ella suspiró, liberando su fuerte agarre en la mano de Kara—. Lillian Luthor. Puede llamarme señora Luthor.

—Señora Luthor —Kara sonrió genuinamente—. Es un placer.

Lillian entrecerró los ojos hacia Kara y se aclaró la garganta.

—Si, bien. Tengo que irme.

Lena agarró la mano de Kara con fuerza.

—Te veremos por ahí, madre.

—Eso espero —murmuró Lillian, alejándose rápidamente.

Lena dejó escapar un suspiro y se desinfló contra Kara.

—Gracias —ella susurró en voz baja. Kara tarareó y asintió.

Levantó la mano para meter un mechón de pelo detrás de la oreja de Lena. Kara se inclinó para susurrarle al oído a Lena.

—Ella nos está mirando.

Lena se estremeció ligeramente cuando el ligero aliento de Kara golpeó su oído.

—Qué debemos hacer —ella exhaló.

—Bésame. —Kara suspiró y sonrió nerviosamente, enganchando su mano en la parte posterior del cuello de Lena.

Los ojos de Lena se abrieron. Respiró hondo y se inclinó para darle a Kara un pequeño pero dulce beso en los labios. Lena sonrió levemente cuando retrocedió.

Oh no. Kara pensó con pánico, volviendo a mirar los labios de Lena. Mierda. Sus ojos se abrieron y ella hizo una mueca, mirando hacia otro lado. Ella es muy bonita.

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La mano de Lena estuvo sobre el brazo de Kara durante la recepción, lo que significaba que no podía concentrarse en nada. Los votos probablemente eran repugnantemente dulces, pero Kara ni siquiera se dio cuenta porque estaba evaluando todas las reacciones de Lena. Lena se inclinó hacia Kara.

—Buen trabajo pretendiendo parecer que estás enamorada de mí —ella susurró ligeramente, riéndose.

La cara de Kara se puso roja y se echó a reír nerviosamente

—S-sí. Parte del trabajo, ¿verdad?

Lena miró a Kara con una mirada indiscernible en los ojos. La pelinegra asintió y volvió a mirar la recepción en el frente del gran salón.

Kara dejó escapar un suspiro tembloroso y se frotó los ojos por debajo de las gafas. No hagas nada estúpido.

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Kara hizo algo estúpido.

—¿Qué quieres decir con que entraste con mi tía en el baño? —siseó Lena, mirando a Kara intensamente.

—Ella... ¡ella no cerró la puerta! —Kara hizo una mueca, apartando la mirada del sondeo de Lena.

—¿Por qué no llamaste?

—Yo... ¿No lo sé?

Kara sabía por qué no llamó. Ella simplemente no iba a decirle a Lena en ninguna circunstancia. Bueno, la razón fue la mano de Lena. Más específicamente, la mano de Lena trepando por el muslo de Kara durante la cena de recepción. El toque era lo suficientemente inocente, pero cada vez que Lena se dirigía a su madre desde el otro lado de la mesa, su mano apretaba el muslo de Kara y se movía un poco hacia arriba.

Y parecía que Lena estaba hablando exclusivamente con su madre.

Las respiraciones profundas ya no funcionaban, así que Kara se había excusado de la mesa para salpicar agua en su cara enrojecida. Kara abrió de golpe la puerta del único baño a la vuelta de la esquina, solo para horrorizarse al ver a la tía de Lena besando con entusiasmo a un joven.

Kara se dio la vuelta y cerró la puerta antes de que pudieran verla. Regresó rápidamente a la mesa y se dejó caer en su asiento.

—Ella estaba... estaba besándose...

—Kara, no quiero escuchar esto —Lena siseó con los dientes apretados. Ella miró a Kara—. ¿Ella te vio?

—No...

—Entonces no tenemos nada de qué preocuparnos —Lena suspiró y apoyó la mano en el respaldo de la silla de Kara—. Solo... —se inclinó para susurrarle al oído a Kara—. Simplemente no hagas nada más que yo no haría. Creo que al menos madre se está calentando contigo.

Kara miró hacia donde estaba sentada Lillian Luthor, conversando con, por supuesto, su hermana. La tía de Lena.

—Ella, um, ella solo me miró, Lena.

—Eso no significa nada, ella mira a todos. Si realmente no le gustaras, probablemente te derramaría su bebida sobre ti... —Lena asintió hacia donde Lillian derramó su bebida sobre su hermana—. Como así.

Kara hizo una mueca cuando vio que el rojo del vino se filtraba en la tela amarilla clara del vestido de la tía de Lena.

—Supongo que ella no me odia.

Lena retrocedió para sonreírle suavemente a Kara.

—Supongo que no.

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—¡Deberíamos bailar! —Kara exclamó, haciendo todo lo posible para ser escuchada por la música.

—¿Qué? —preguntó Lena y miró hacia donde Kara estaba haciendo pucheros.

Kara se acercó a Lena.

—Deberíamos bailar. Verse más como una pareja.

—Somos como una pareja.

—Um, ni siquiera me tomarías de la mano cuando camináramos por aquí. Me estás haciendo ver como una mala novia —Kara dijo, cruzando los brazos—. Ese tipo de allá parece que quiere bailar contigo —ella asintió con la cabeza hacia un joven rubio que las miraba desde un asiento en la esquina.

—Estoy bastante segura de que ese es el hombre que mi madre ha estado tratando de acosarme durante el último mes —Lena gimió—. Está bien, está bien, tienes razón. Deberíamos bailar.

Se acercaron a la pista de baile de la mano. Kara comenzó a saltar al ritmo de ritmo alto justo cuando la canción cambiaba.

—Oh, rayos... —Kara murmuró antes de darse cuenta de que la canción era lenta. Ella le sonrió a Lena. Ella extendió las manos dramáticamente—. ¿Te gustaría bailar a este ritmo lento conmigo?

Lena se echó a reír, tomó la mano de Kara y le puso la otra íntimamente en el cuello. La mano de Kara se movió para tocar la espalda de Lena. Lena se inclinó de cerca, tarareando la canción mientras se balanceaban suavemente. Ella pasó un dedo por el pelo en la nuca de Kara.

—Esto no es tan malo, ¿verdad? —Kara preguntó, empujando la mejilla de Lena con la suya.

Lena tarareó humildemente.

—Mi madre te quiere.

—¿Que pasa contigo?

Los ojos de Lena se abrieron de golpe y ella retrocedió para mirar a Kara.

—¿Qué quieres decir? —ella preguntó de manera uniforme.

—¿Te agrado? —Kara preguntó, con la esperanza brillando en sus ojos.

—Yo, yo, sí —Lena bajó la mirada hacia los labios de Kara y luego retrocedió rápidamente con los ojos muy abiertos—. Eres una amiga maravillosa, Kara —ella sonrió.

Amiga.

—Oh —el agarre de Kara sobre la mano de Lena se aflojó—. Si. Buenas amigas.

Lena miró a Kara con curiosidad y le dedicó una pequeña sonrisa.

—La canción está casi terminada, creo.

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Kara estaba sentada en una de las mesas vacías con vino en mano. Ella nunca bebió. No a menos que algo la llamara a beber. Y la forma en que Lena se reía con el hombre rubio hizo que Kara quisiera beber.

Ella dejó caer los hombros y arrojó el líquido restante en su vaso. Kara tomó otro vaso de la bandeja de un camarero que pasaba. Tomó un sorbo, haciendo una mueca cuando la bebida fue más fuerte de lo esperado. Kara bajó la vista hacia el cristal. "Ugh, vodka de arándano". Miró de nuevo a Lena, que le estaba sonriendo al hombre. Él agarró su mano. Kara miró hacia otro lado y ahogó la bebida.

Oyó el ruido de los tacones acercándose. Kara levantó la vista. La tía de Lena.

—Tuve que cambiar mi maldito vestido —murmuró sentada al lado de Kara. Miró a Kara sorprendida—. Oh. Eres la cita de Lena.

—Si. Kara Danvers.

—Soy Eva. Eva Luthor —ella suspiró y tomó la mano de Kara—. ¿El idiota de allá? —Eva señaló al hombre rubio que hablaba con Lena—. Era mi cita secreta.

Kara se atragantó con su bebida.

—¿Por qué secreta?

—Bueno, Lillian estaba tratando de emparejarlo con Lena. Hubiera sido un poco incómodo, ¿no te parece?

Kara soltó una carcajada.

—Definitivamente —ella jadeó—. Oh venga. Probablemente debería decirte ahora, hum, podría haber...

—¿Nos atrapaste en el apasionado abrazo del amor? Oh, lo sé.

Kara miró de reojo a Eva.

—¿Cuánto bebiste?

—¡Nunca le hagas esa pregunta a una dama! —Eva jadeó dramáticamente—. Probablemente menos que tú, sin embargo —ella murmuró.

—¡Oye! Eso es rudo —Kara se quejó.

—Solo... —Eva suspiró—. Solo busca a tu novia y deja de estar triste.

—Ella no es exactamente mi novia —Kara dijo en voz baja.

—¿Qué...?

—Nosotras, hum, ¿hicimos un trato?

—Oh, cariño —Eva hizo una mueca.

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Lena se acercó a donde estaba sentada Kara.

—¿Dónde estabas? —preguntó, dejándose caer en el asiento al lado de Kara. Se quitó los tacones y se frotó un pie—. Un idiota ha estado tratando de invitarme a salir toda la noche —ella se quejó y tomó un sorbo de la bebida de Kara.

—Oh, conocí a tu tía.

Lena tosió sobre la bebida y se atragantó.

—Le dijiste...

—Tal vez.

—Kara, por qué...

—Está bien. Ella ya lo sabía. La ayudé con algo, ella me ayudó con algo. Está todo bien.

Lena entrecerró los ojos hacia Kara.

—¿Con qué te ayudó ella?

—Oh tú sabes. Cosas —Kara dijo crípticamente.

Lena sacudió la cabeza y miró los vasos vacíos sobre la mesa.

—¿Cuánto bebiste?

—Hum, antes que nada, nunca le preguntes a una dama cuánto ha bebido —Kara levantó un dedo—. Segundo, la mitad de esos son probablemente de Eva.

—Has estado hablando con ella —Lena suspiró y se frotó la frente, volviendo a ponerse los tacones—. Levántate —ella dijo, agarrando el brazo de Kara. Kara tropezó con Lena. Lena la sostuvo en alto—. Eres ridícula —ella suspiró.

Kara arrugó la nariz.

—Sí, y tengo un estúpido y ridículo enamoramiento —Kara se tapó la boca con la mano.

—¿Un estúpido enamoramiento ridículo por quién? —preguntó Lena, mirando a Kara con atención.

—Desearía que no escucharas eso.

—Ahora tienes que decirlo —Lena se echó a reír.

—Hum, bueno, en realidad. Historia graciosa, ¿eres tú? —Kara hizo una mueca.

—Yo? —Lena exhaló.

—Si —Kara susurró.

—Oh. Oh... wow...

—Vale, dilo; déjame caer fácilmente como cuando alguien se estrella o se quema —Kara gimió, poniendo su rostro en sus manos.

—Eso no es lo que iba a hacer —Lena puso los ojos en blanco ante la reacción de Kara.

—Es... ¿no es? —Kara miró a Lena.

—No —Lena se rio—. Solo iba a decir finalmente...

—¿Finalmente? —Kara se ahogó.

Lena volvió a poner los ojos en blanco.

—¿Tal vez llevó toda la noche intentando hacer notar cuánto me gusta tenerte cerca?

—¿Tal vez? —Kara se quejó.

—Solo bésame ya. Probablemente...

Kara estaba muy por delante de ella, moviéndose rápidamente para capturar los labios de Lena en un beso apasionado. Las manos de Kara ahuecaron suavemente la cara de Lena. Lena levantó las manos para agarrar los codos de Kara. Un gemido salió de la garganta de Kara cuando Lena profundizó el beso y la atrajo hacia sí.

—¡Consigue una habitación! —Kara escuchó a Eva gritar desde la mesa de al lado. Se separó de Lena y miró para verla cogida de la mano con el hombre rubio de antes. Kara se rio y agarró la parte posterior del cuello de Lena para otro dulce beso.

—¿Quieres salir de aquí, novia falsa? —Lena susurró contra sus labios.

—Absolutamente —Kara se rio, agarrando la mano de Lena y guiándolas hacia la salida.