Creado por hedahearteyes [Más de 3.800 palabras]

Resumen; Después de la visita sorpresa de Mxyzptlk, Kara se da cuenta de algunas cosas sobre sí misma y hace lo que debería haber hecho hace meses: va a hablar con Lena.

El cielo se oscurece cuando una tormenta se aproxima. Kara siente la estática en el aire, la energía inquieta en las nubes rivalizando con la suya. Mira fijamente a National City, edificios iluminados hasta donde puede ver. Ella todavía reconoce las sutiles diferencias de antes , pero trata de ignorarlas y en cambio se siente agradecida por la segunda oportunidad que tuvo esta Tierra. Ahora es más fácil, después de todo lo que sucedió esta noche, después de todo lo que había visto y aprendido. Es más fácil apreciar realmente lo que significa tener una segunda oportunidad.

El corazón de Kara late con fuerza dentro de su pecho. No se ha detenido desde que Mxyzptlk apareció temprano esa noche. Sus respiraciones se vuelven pesadas, a pesar de que no ha estado en una pelea, no voló tan rápido como sus poderes le permitieron. Ella realmente no se ha movido por minutos. Ella está flotando en el aire, con el pelo ondeando al viento. Pero su mente está acelerada, y su cuerpo está hormigueando y su corazón... Su corazón .

Está fuera del edificio del apartamento de Lena, observa desde la distancia mientras escribe en su laptop; todavía en su traje, todavía en sus tacones, su cabello suelto y cayendo en rizos alrededor de sus hombros, aparentemente la única comodidad que se permitía. El corazón de Kara golpea, golpea, y golpea.

Ella mira a Lena, pero en realidad no ve a Lena. No es el que está justo frente a ella, porque ella realmente no reconoce a Lena. En cambio, ve a la mujer que conoció hace tres años y medio. La mujer que se puso de pie incluso debajo del escrutinio fuera de lugar de Kal-El, la mujer que sonrió a través de innumerables acusaciones basadas únicamente en su apellido, la mujer que luchó con uñas y dientes para demostrarle al mundo que ella era más que eso. Más que un nombre. Más que un apellido.

Ella mira a Lena, pero en realidad no la ve, porque jugar en un bucle en la mente de Kara es cada momento que ha compartido con Lena Luthor. Ahora tiene un color diferente debido a un Sr. Mxyzptlk y un montón de cintas malditas.

Esta noche, había recibido jugada por jugada algunos de los momentos más cruciales de su vida y su relación con Lena. Mirándose en un viejo televisor como una extraña película autobiográfica. Excepto que no había actores y obviamente ningún set falso, eran solo ella y Lena, y ella se quedó hipnotizada, cada vez más sin aliento, mientras observaba cada uno de sus encuentros; cada momento pasado en la oficina de Lena o en el departamento de Kara, cada almuerzo, cada entrevista, cada noche de cine, cada abrazo, cada mirada.

Kara conocía esos momentos; eran sus recuerdos después de todo. A menudo los repetía en su propia cabeza, especialmente en los últimos meses, pero, obviamente, nunca se había visto a sí misma ni a la expresión de su rostro cada vez que estaba en presencia de Lena. Hasta esta noche.

Se veía suavizarse cada vez que Lena entraba en una habitación; se vio atrapada en los ojos de Lena, el contorno de su rostro, la pendiente de sus labios; se vio a sí misma salir de su camino para brindarle comodidad a Lena.

"¿Para que estan los amigos?"

Años. Durante años, eso es lo que Kara se dijo a sí misma, así fue como Kara dio sentido a los rápidos latidos de su corazón. Pero esta noche, vio algo que hizo que su corazón se detuviera en su pecho. Amor .

Miró a Lena con amor. Miró a Lena de la forma en que sus padres se miraron, la forma en que Kal mira a Lois, la forma en que Alex mira a Kelly. Había siempre mirado con Lena ciencia y la piedad y el orgullo y el amor .

Y a Lena. Lena la miró como si fuera el sol. Lena miró a Kara Danvers como si fuera el principio y el final de todo. Y de repente todo tuvo sentido. La forma en que Lena reaccionó al descubrir de alguien que no sea Kara que había estado mintiendo sobre toda su amistad. El dolor, la angustia. La razón por la que Kara se niega a renunciar a Lena.

Ella ama a Lena y Lena la ama, la amaba .

Entonces, mientras Kara mira a Lena, ve a la mujer de la que se enamoró. Ella ve a la mujer que llenó su oficina de flores como agradecimiento. Ella ve a la mujer que compró una compañía y la salvó porque a Kara le encantaba. Ella ve a la mujer que siempre hace tiempo para almorzar con ella. Y el corazón de Kara vuelve a acelerar, latiendo tan rápido que puede sentirlo presionando contra su caja torácica. Algo revolotea en su estómago, desenfrenado e inocente . Y luego el sentimiento muere, su corazón se siente pesado, porque esa mujer está muy lejos de la cosa perdida que ni siquiera se relajará en su propia casa.

La Lena que ama está muy lejos de la mujer en la que Kara la convirtió.

Pero es por eso que ella está aquí. Flotando fuera del apartamento de Lena, observándola. Ella quiere arreglar lo que rompió, y con ese fin, ha estado en esta misma posición varias veces antes. Humilde, arrepentida, con el corazón en la mano y lista para hacer lo que sea necesario para hacer las paces. Pero Lena la rechazó cada vez, con la cabeza en alto y mirando a Kara con ojos duros y fríos. Y cada vez que eso pasaba, Kara se iba.

Ella no está exactamente segura de por qué. Se dice a sí misma que es porque no quería ir en contra de los deseos de Lena nunca más, ignora que en el fondo sabe que es porque nunca pudo encontrar las palabras correctas para decir. Pero ella está aquí ahora. Diferente. Esta vez ella sabe las palabras.

Esta vez aterriza en el balcón de Lena tan suavemente como puede pero con la convicción de que no se ha sentido en mucho tiempo. Y sabe que Lena la ha visto por la tensión de sus hombros, su postura rígida en medio de su sala de estar.

Lena ni siquiera le echa un vistazo; ella simplemente da la espalda hacia la ventana y Kara la oye decir "vete" a través del cristal. Pero Kara no se va esta vez, se mantiene firme.

Espera pacientemente a que Lena se dé vuelta otra vez, para verificar si todavía está allí, y cuando lo hace, Kara está preparada para la mirada dirigida hacia ella. La ceja de Lena se levanta en ese arco perfecto del que solo ella parece capaz.

Se miran el uno al otro, un silencioso con enfrentamiento para determinar el ganador de esta pelea. Pero ambos ya han perdido mucho y por una vez Kara quiere que ganen. Ella vino aquí esta noche para hablar. No sobre planes mal aconsejados o hermanos malvados, sino sobre ellas .

Eventualmente, Lena se derrumba y, con un exagerado giro de ojos, se dirige hacia el balcón y se lo abre a Kara, inmediatamente se da la vuelta otra vez y regresa a su departamento.

Kara entra, da unos pasos dentro del apartamento, con la intención de decir todo lo que pesa sobre su lengua, pero Lena está muy cerca y Kara la ve ahora con una luz tan diferente. Ella se queda sin palabras. Hay tanto que quiere decir, quiere explicar, pero no sabe por dónde empezar.

¿Cómo le dices a tu mejor amiga de casi 4 años, a quien has lastimado tanto, que estás enamorada de ella? Que después de todos estos años finalmente entiendes cuán increíblemente, irrevocablemente enamorada estás.

Lena suspira, fuerte y pesado, claramente destinado a llamar la atención de Kara y cuando Kara regresa al momento, encuentra a Lena mirándola de nuevo. Ceja perfectamente arqueada.

—¿Qué quieres, Supergirl?

Duele escuchar la forma en que Lena dice ese nombre, duele especialmente esta noche porque no está en su traje. Lleva unos sencillos pantalones y un acogedor suéter azul, y cuando se acerca para tocar nerviosamente sus gafas, se da cuenta de que no están allí. Ella es solo Kara esta noche, así que sí, duele escuchar a Lena preguntarle de nuevo, más aguda esta vez.

—¿Qué quieres , Supergirl?

Pero tal vez porque duele mucho, la respuesta llega a Kara clara como el día. 

—A ti.

Ve el momento en que una palabra se registra, observa cómo la mirada de Lena se desvanece y sus ojos se abren casi imperceptiblemente. Kara escucha su dificultad para respirar, oye que su corazón da un vuelco. No está segura de qué hacer con la reacción de Lena, no sabe lo que significa, y se queda inmóvil, temerosa de alejar a Lena si dice o hace algo incorrecto.

Pero cuando Lena se da la vuelta sacudiendo la cabeza, Kara vuelve a la acción. Ella se apresura a la forma en retirada de Lena, agarrando suavemente su muñeca. 

—No, Lena, por favor.

Lena no se da vuelta, pero tampoco hace otro movimiento para alejarse, ni siquiera le quita la mano del agarre de Kara como si el tacto la quemara. Como Kara esperaba que lo hiciera. El silencio se prolonga, ninguna de los dos se mueve, ninguna habla y Kara tarda demasiado en darse cuenta de que Lena está esperando que ella diga algo. Le está dando una oportunidad, o al menos algo que se le parece mucho.

Kara escoge sus palabras con cuidado. 

—No te dejaré caminar de nuevo. No me voy a ir de nuevo. Estoy aquí, Lena, solo dime lo que quieres.

Lena se da la vuelta ahora, reclamando su brazo, burlándose. 

—¿Lo que quiero? ¿Lo que quiero?

Ella se ríe sin alegría y Kara observa que su mirada vuelve a ser de acero.

—Quería que mi amiga, mi mejor amiga, confiara en mí.

—Confío en ti, Lena. Siempre he confiado en ti.

—Claramente no lo suficiente.

—Nunca se trató de la confianza. Tú lo sabes. ¡Te lo dije!

El tono de Kara es más áspero de lo que pretendía, pero están bailando en círculos alrededor del mismo estúpido malentendido y ella está tan cansada de eso. Sin embargo, la fuerza detrás de su voz apaga a Lena y Kara se da la vuelta con un largo suspiro, pasando su mano por su cabello.

—Puedo decir que lo siento nuevamente. Puedo decir que lo siento por el resto de mi vida si eso es lo que quieres. Porque yo lo haré . Lamento haber mentido, lamento que hayas tenido que descubrir cómo lo hiciste, lamento haberte hecho sentir como una tonta y como si no confiara en ti, lamento que hayas tenido que matar a tu propio hermano solo para despertarte en un mundo donde está vivo y no ves otra opción que trabajar con él. Así que lo siento, lo siento tanto... Pero Lena...

Con la respiración agitada, y de repente, acelerada y aún más intensa por ello, Kara ve las realidades en las que le contó a Lena. Las realidades que Mxy le mostró esta noche. Y por todos sus errores en este, por todas sus deficiencias, se alegra de que este sea el que está atrapada. Porque está viva y Lena está viva, y Alex, Winn y J'onn, todos los que ama están vivos. Por una vez, ella quiere concentrarse en eso. No en el pasado, no en los tal vez y los que tal sí, ciertamente no en la próxima crisis, quiere alegrarse de estar viva.

—No puedo cambiar el pasado, Lena. Créeme, lo intenté y cada vez que lo empeoré.

—¿De qué diablos estás hablando?

El instinto de Kara es ignorarlo, decir que es una historia larga y dejarlo así, pero luego recuerda por qué vino aquí esta noche. A hablar. Y se da cuenta, con sorprendente claridad, de que todos sus problemas se originaron en primer lugar por el hecho de que Kara no le contó todo a Lena. Que Lena se haya mantenido a oscuras acerca de tantas cosas, durante tanto tiempo e incluso en algunas de las realidades que Kara vio desarrollarse, eso fue lo que más le dolió a Lena. No necesariamente la mentira o el momento, sino el no saber. Porque cuando Lena lo sabía, incluso cuando estaba enojada, siempre terminaba haciendo lo correcto.

Y Kara de repente se da cuenta de que Lena Luthor necesita conocer todas las variables para poder entender .

—Hay un ser de la Quinta Dimensión llamado Sr. Mxyzptlk —y todo suena loco incluso para sus propios oídos, pero ella le cuenta la historia a Lena.

El final deja a Lena desenredada, respirando agitadamente, con los labios separados y los ojos muy abiertos, llenos de lágrimas mientras Kara la mira para intentar entender.

—Entonces, ya ves, no podemos cambiar el pasado y no podemos crear una nueva realidad mágica en la que todo esté bien. Esta es la realidad con la que estamos atrapados y está bien. Porque este es el que yo conozco, este es el yo que conozco, y este es el que quiero arreglar.

—No queda nada por arreglar.

La voz de Lena es suave y quebrada y Kara sabe que está tratando de mantenerse fuerte, deseando no romperse. Ella recuerda cuánto tiempo le tomó a Lena dejarla entrar lo suficiente como para ver su lado vulnerable y odia que haya perdido eso, pero aún reconoce cuando todo lo que Lena necesita es un hombro para llorar, un simple abrazo.

Kara suspira, porque todos estos meses supo que Lena estaba enojada y sabía que Lena estaba sufriendo; recuerda la última vez que vio a Lena llorar con perfecta claridad. En la fortaleza, cuando tomó a Myriad, cuando reveló que lo sabía todo el tiempo y gritó su corazón roto a la intemperie después de meses de mantenerlo dentro. Y Kara estaba tan sorprendida, tan desconcertada y Lena la atacó tan rápido; la vulnerabilidad desapareció y fue reemplazada por una ira que Kara nunca antes había visto en los ojos de Lena. Kara no lo vio entonces, no lo reconoció entonces, tan atónita por su propio dolor, pero tal vez todo lo que necesitó fue una conversación, una explicación de todas las cosas que Lena aún no entendía, y tal vez todo lo que necesitó fue Un simple abrazo .

Pero ella no puede cambiar el pasado.

Eso es lo que sabe ahora, eso es lo que tiene que aceptar ahora. Todo lo que puede hacer es avanzar y cambiar el futuro y demostrar que Lena está equivocada.

—Claro que sí, porque hay algo que entiendo ahora.

—¿Qué quieres decir?

Lena parece cautelosa, los hombros se tensan de nuevo y Kara se acerca por instinto, no queriendo que Lena se cierre de nuevo.

—Pregúntame de nuevo lo que quiero.

—¿Qué?

—Pregúntame qué quiero.

Kara no puede evitar que sus labios se tornen en una pequeña sonrisa. Se siente casi mareada, aunque una parte de ella se da cuenta de que este puede no ser el mejor momento para esas emociones, pero tiene algo que decir y está ansiosa por decirlo. Su ritmo cardíaco se acelera nuevamente y ese aleteo en su estómago regresa.

—Realmente no me siento bi...

—Pregúntame —Kara la corta, da un paso más cerca—, lo que quiero.

Está lo suficientemente cerca como para sentir el aliento de Lena en su piel, y siente una oleada de logros por el hecho de que Lena no ha retrocedido. En cambio, está mirando a Kara, desviada pero sin aliento, como si supiera lo que viene.

Bueno, Kara piensa, de alguna manera lo hace, porque esto es lo que Kara lideró. Cuando aterrizó en el balcón de Lena, cuando Lena le preguntó qué quería la primera vez. La simple y honesta verdad de por qué está aquí, por qué sigue , después de todo, aquí .

Durante un largo momento solo se miraron la una a la otra. Los labios de Kara todavía se alzaron, intentando con todas sus fuerzas transmitir todo lo que estaba sintiendo con sus ojos, para hacerle entender a Lena que todo lo que estaba a punto de decir es real y verdadero. Y Lena trabaja su mandíbula, tragando saliva.

Kara piensa que este es el punto sin retorno. Ella los imagina de pie en un precipicio, sin regreso y solo a millas y millas de desconocido debajo de ellos. Piensa en una película que Alex le había pedido que mirara, en los primeros días de su salida, cuando todavía estaba descubriendo quién era y qué significaba todo, y Kara recuerda una frase en esa película.

Ella no sabe lo que vendrá después de esto, no puede estar segura de nada, pero está lista para saltar de ese precipicio hacia lo desconocido. Ella está lista para dar el paso.

—¿Qué quieres...? —Lena pregunta entonces, el borde se ha ido como si estuviera allí en ese precipicio con Kara.

—Te quiero a ti. Estoy enamorada de ti y creo que siempre he estado enamorada de ti, simplemente no lo supe ... No lo entendí, no lo reconocí. Pero lo vi esta noche. Vi mi vida destellar ante mis ojos, sin la parte moribunda, así que eso es bastante bueno, supongo, pero vi cada momento que pasé contigo y ahora lo veo todo tan claramente. Estoy enamorada de ti, Lena. Siempre he estado enamorada de ti. Lamento que me haya tomado tanto tiempo ponerme al día.

—¿Porqué me estas diciendo esto?

—Porque probé todo lo demás y nada funcionó. No escucharás la razón y no podría entender por qué, pero creo que... —Kara se corta para respirar hondo y prepararse para lo que va a decir a continuación—, ahora creo que es porque tú también estás enamorada de mí.

Su voz se eleva al final, casi expresándola como una pregunta y se da cuenta de que está moviendo los dedos en ese tic nervioso de ella.

Lena no dice nada y Kara no puede soportar el silencio. Entonces, ella se apresura a agregar: 

—Y porque es la verdad. Porque después de todo, no puedo darte nada más que la verdad. Sobre mí. Sobre quién soy y cómo me siento.

—Llegas un poco tarde —dice Lena, suave. Lo más suave que ha estado toda la noche.

—Lo sé.

—No te odio por ser Supergirl. Te odio por no decírmelo.

—Lo sé.

—Te odio por mentirme en la cara, durante años.

—Lo sé.

—Odio... —Lena casi se ahoga en un sollozo—. Nunca quise ser tu amiga, pero te dejé entrar y te deslizaste entre las grietas y luego un día me desperté y de repente no podía mirarte sin perder el aliento. Y luego me rompiste el corazón. ¡Hubiera estado bien! Podría haber manejado esto si no lo hubiera hecho... Si no lo hubieras hecho... Me rompiste el corazón, Kara.

—Lo sé.

—Y la peor parte es —se ríe Lena, esa cosa cruel y sin alegría de nuevo y, aunque esta vez es más suave, Kara todavía lo odia, apartar la mirada mientras se limpia los ojos—, la peor parte es que todo dolió mucho al principio y ahora apenas puedo recordar por qué te odié para empezar.

—Quiero decir, eso es algo bueno, ¿verdad? —Kara pregunta, con suerte, acercándose aún más, sus dedos ansiosos por alcanzar y tocar a Lena.

Lena se ríe, corta y claramente espontánea si su propia sorpresa es una indicación. Lena todavía no la está mirando, pero Kara puede ver que se está poniendo las mangas de la blusa y la chaqueta, como si tratara de enterrarse en la tela y lejos del dolor, por lo que Kara hace lo que quería hacer todo noche. Extiende la mano y agarra las manos de Lena, deteniéndola.

Lena mira sus manos unidas y Kara ve que sus labios comienzan a temblar, por lo que aprieta con tranquilidad, porque aquí es donde saltan, aquí es donde se lanzan. Juntas.

—No decirte antes mi secreto es mi mayor arrepentimiento y te prometo en este momento que haré cualquier cosa para compensarte, incluso si me toma el resto de mi vida. Quiero ganar tu confianza nuevamente y quiero ganar tu perdón, porque te quiero, Lena, y solo puedo esperar que algún día me vuelvas a amar.

—Todavía no lo entiendes, ¿verdad?

Lena murmura entre sus manos, pero Kara lo escucha fuerte y claro. Antes de que pueda responder, Lena levanta la vista y se prepara para respirar hondo. Pero sus ojos permanecen suaves: por primera vez en meses, cuando Lena mira a Kara, sus ojos brillan más que las estrellas y Kara no puede ver nada más que Lena, no puede oír nada más que la respiración de Lena, el latido del corazón de Lena. 

—Nunca paré de...

Kara no tiene palabras, no le queda nada que decir y ni siquiera sabría qué decir si las hubiera. Su mente se queda en blanco, su corazón se detiene y luego se acelera a un ritmo que no podría haber sido saludable si hubiera sido humana, y por una fracción de segundo estalla en la sonrisa más grande y cegadora antes de soltar las manos de Lena y ella extiende la mano hacia las mejillas de Lena, atrayéndola hacia ella, moviéndose hacia ella y finalmente, finalmente , besándola.

Lena jadea contra sus labios, luego se derrite contra ella y Kara intenta verter cada emoción que ha reprimido durante los últimos tres años en la presión de sus labios contra los de Lena. Está hormigueando por todas partes, cada sentido se intensifica: puede sentir las mejillas de Lena debajo de las yemas de sus dedos, oler su perfume, saborear los restos de alcohol en sus labios, escuchar los latidos de su corazón al ritmo de la suya, y nunca supo que un beso podía sentir esto.

Y luego surge la duda. Porque ella solo besó a Lena, ni siquiera preguntó, solo la agarró de la cara y la besó . Y claro, Lena podría haber dicho que nunca dejó de amar a Kara, pero quién puede decir que en realidad todavía no odia a Kara, aunque sea un poco, y ahora Kara podría estar agregando combustible al fuego.

En pánico, ella comienza a alejarse, el nombre de Lena ya se forma en sus labios en una disculpa. Pero Lena toma su suéter con ambas manos, gruñe un "no" apenas audible y tira de Kara nuevamente.

Sus labios se juntan de nuevo en un beso más frenético que el primero y Kara puede sentir el agarre de Lena sobre su suéter, está bastante segura de que sus nudillos se vuelven blancos con la fuerza, como si tuviera miedo de que cuando Kara deje su espacio podría nunca volver. Pero Kara solo sostiene las mejillas de Lena, acaricia sus pulgares sobre la piel suave y no retrocede cuando comienza a sentir las lágrimas. En cambio, mueve una mano desde la mejilla de Lena hasta la parte baja de su espalda y la acerca más, su otra mano se enreda en rizos sueltos, sosteniendo la parte posterior de su cabeza, para mantener a Lena exactamente donde Kara la quiere.

Se besan hasta que Lena se queda sin aliento y luego apoya la cabeza en el hombro de Kara y Kara la abraza. Ella no habla, no se mueve, solo abraza a Lena hasta que sus dedos se abren alrededor del material del suéter de Kara y sus manos se mueven hacia la espalda de Kara y Lena la rodea, cómoda, como si perteneciera allí.

Y Kara sabe que esto no arregla todo. Un abrazo y un beso no borran el dolor que se han causado, pero cuando Lena levanta la cabeza del hombro de Kara y en realidad se toma el tiempo para mirarla , antes de sonreír suavemente y regresar para otro beso, Kara sabe aterrizaron a salvo.