-Flashback-

—¡Protejan a Eren hasta la puerta aunque le cueste la vida!

—¡No dejen que se le acerque ni un titán!

En un tejado vemos a dos chicos que estarían conversando sobre lo que estaba sucediendo.

—Tapar el agujero con eso es una locura, podrían devorar a Eren y si eso sucede, no sabremos nada. —Diría Bertolt.

—Sí, en el peor de los casos, me tendré que transformar en Titan. —Diría Reiner quién al igual que el pelinegro observaban a Eren titán llevar la piedra.

—Pero si su plan funciona, taparán el agujero que abrimos. —Diría el pelinegro.

—No importa. Llevamos cinco años buscando una pista y por fin la encontramos.

Justo en ese momento hablaría Marco quien había escuchado la conversación de ambos.

—Oigan muchachos, ¿de que están hablando? —Preguntaría Marco.

—¿Transformarte en titan? ¿Qué significa eso, Reiner? ¿Dijiste "el agujero que abrimos" Bertolt?

Reiner y Bertold se encontraban paralizados, Marco los había escuchado, había escuchado toda su conversación.

—Marco... Era una broma. —Diría Reiner aún en shock.

—¿Qué acaso estas loco? Esto no es propio de ti, no deberías hacer bromas de ese estilo. —Diría Marco con un poco de nerviosismo.

—¡Tienen que concentrarse en la misión! Se acercan unos Titanes, ¡vamos! —Diría este retirándose de aquel techo no sin antes darles un último vistazo.

Marco estaría recordando las palabras que habían dicho en su mente, estaba comparando ésa información con lo que habían dicho de que Eren podía transformarse en Titan.

Pero entonces Reiner aparecería y rápidamente lo detendría tumbándolo en el tejado de una casa de por ahí.

—R-Reiner... ¿Qué haces, Reiner? —Diría Marco con una mueca de dolor intentando zafarse del agarre del pelirubio.

—Reiner... Es otra broma, ¿no? —Preguntaría Marco con una sonrisa nerviosa.

—No, Marco, eres demasiado perceptivo. —Diría Reiner con seriedad.

Marco intentaría gritar, pero al ver sus intenciones, Reiner le taparía la boca.

En ese momento llegaría Annie quién miraba la escena con sorpesa y shock.

—¿Qu-Qué están haciendo? —Preguntaría Annie anonadada.

Marco trataría de hablar pero no podría gracias a la mano de Reiner.

—Annie, el nos oyó hablando. No puede seguir con vida. —Diría el pelirubio dejando sorprendido a Marco.

—Esto no tiene gracia, imbécil. —Mencionaría la Leonhart.

—Annie, tenemos que matarlo, ¡ahora! —Diría Reiner dejando callado y aún más aterrado al pobre de Marco.

—¡Quítale su equipo tridimensional!

—No, no... ¡No lo hare! —Diría Annie con una mirada sombría y un tanto asustadiza.

Reiner se quedaría sorprendido al escuchar que Annie se negó a hacerlo.

—¡Que demonios dices! ¡Marco sabe demasiado! ¡Tenemos que deshacernos de el! —Diría Reiner con seriedad.

—¡No! —Dijo. —Ya no seguiré con todo esta estupidez... hablare con el gobierno y le diré toda la verdad le daré toda la información acerca de Marley y así con suerte me dejaran vivir... —Diría está en voz baja.

—¡De que estas hablando Annie! ¡Nosotros somos guerreros! ¡Venimos aquí para cumplir una misión para luego regresar a casa! —Diría Reiner con clara furia.

—Yo jamás quise esto, yo no quería continuar con la misión, pero tu me obligaste Reiner. —Contestaría Annie con molestia. —Ahora decidiré por mi misma, viviré una vida tranqui...-

—Es por Goku, ¿verdad? Crees que el te va a ayudar, ¿cierto? —Dijo mirando a la chica. —Oh, ya veo, ¡Es porque el te gusta! —Exclamaría Reiner tomando por sorpresa a Bertolt.

Annie al escuchar esas palabras se quedaría en shock por unos segundos. Reiner aprovechando está situación y le ordenaría lo siguiente al pelinegro.

—¡¡Ahora Bertold!! —Diría Reiner volteando a verlo.

Bertold entendería aprovechando que la Leonhart estaba distraída y rápidamente le daría fuerte codazo en la cabeza a Annie para desmayarla.

Annie caería al suelo y en sus últimos segundos de estar consiente verían como se llevaban a Marco quien lloraba por el terror.

—Escúchame, Annie. Si les dices la verdad a alguien más... Te mataremos al igual que a tú padre... —Esas serían las últimas palabras que escucharía Annie antes de caer completamente inconsciente.

"Tss"

Tiempo después encontrarían el cuerpo de "Marco" sin vida, se encontraba intacto por lo que dedujeron que se había suicidado por el miedo, pero aún habían dudas pues nunca se encontró su equipo tridimensional.

-Fin de flashback-

...

-En el presente-

Goku y Krista se estarían separando lentamente de aquel beso. Los presentes se encontraban sorprendidos.

Sin dejar que alguien dijera algo, el Son pondría sus dedos en su frente confundiendo a Krista, con rapidez tomaría a Mikasa y en menos de un segundo desaparecerían de ahí.

Los demás solo quedaron exaltados por aquella acción, todos estaban confundidos, ¿qué carajos acaba de pasar?

...

Los pelinegros y la rubia aparecerían en una cabaña que para las chicas era desconocida pero eso no era el problema principal aquí. Mikasa rápidamente se acercaría al saiyajin con una mirada de muerte y entonces.

La pelinegra rápidamente se acercaría a la rubia con no buenas intenciones obviamente Goku se pondría adelante de Krista para impedirlo.

—Mikasa tranquilízat-...

"¡SLAP!"

La Ackerman sorprendentemente le había dado una gran cachetada al saiyajin, Krista estaba asombrada por eso.

—Me lo merezco —dijo el Son con la mejilla enrojecida. —Ha~, muy bien por donde empiezo. —Diría el pelinegro mientras caminaba hacia la cocina con tranquilidad.

Ambas chicas se observarían con una gota de sudor por aquello, unos segundos después el Son volvería con tres vasos con bebidas en ellos.

—Bueno, siéntense para hablar más cómodamente. —Diría Goku con serenidad llevándola a la sala.

—Goku, ¿por qué Krista te beso...? —Preguntó Mikasa con seriedad y furia mientras se sentaba. Goku estaría apunto de abrir la boca cuando Krista se le adelantó.

—Goku, déjame decírselo. —Dijo la Lenz con seriedad. El azabache solo daría un asentamiento.

—Iré a preparar algo. —Diría el Son dejando que las chicas hablen.

—Mikasa, perdóneme por no habértelo dicho antes. Te lo íbamos a contar todo cuando termináramos con los Titanes. Pero entonces, sucedieron muchas cosas en tan poco tiempo. —Declaró la pelirubia mirando a la pelinegra quien mantenía su rostro de ira.

—Cuando le confesé lo que sentía por el. El estaba dudoso de aceptar mis sentimientos, eso me dolió un poco. La razón del porque, eras tú, Mikasa.

—Goku estaba conciente de tus sentimientos, pero no solo los tuyos, también los míos y los de otras chicas.

—Yo fuí quién le dijo que le propondría a ellas compartirlo, siempre y cuando el nos ame por igual todo el tiempo. —Diría está mirando con una pequeña sonrisa a la Ackerman.

—¿Acaso no te molesta tener que compartirlo? —Preguntó Mikasa con una mirada neutral tratando de ocultar su furia.

—La verdad no, yo más que nadie se porque aman a Goku, yo igualmente lo amo mucho. —Contestaría Krista con una sonrisa. —Entonces, dime Mikasa, ¿Aceptarías compartirlo?

—Tsk... —La Ackerman estaba dudosa de aceptar. Por una parte, si aceptaba tendría que compartir a su interés amoroso, pero si se negaba posiblemente Goku ya no la amaría.

—Mikasa, no tienes que aceptar si no estás a gusto con esto. —Diría Goku con serenidad mientras la vería.

—Antes de que responder, respóndeme tu primero una pregunta. ¿Quién fue la primera que amaste? —Preguntó observando al pelinegro.

—Tú. —Respondería Goku.

—Oye. —Diría la Lenz con pequeña molestia cómica.

—Con eso me basta. —Dijo la azabache para seguido besar al saiyajin en frente de la pelirubia quien hizo un pequeño puchero al ver con que intención hacía todo Mikasa.

—Está bien, acepto. —Diría Mikasa con un leve rubor, aún seguía molesta, necesitaría un poco de tiempo para que aceptará su nueva relación con el saiyajin pero no dejaría de amarlo por eso.

-Minutos más tarde-

Los compañeros y amigos de Eren se encontraban hablando aún de lo que había sucedido.

"Tss"

Un pequeño zumbido llamaría la atención de los novatos, voltearían hacia una dirección y ahí estarían el saiyajin junto a las dos chicas. El rostro de la pelirubia mostraba un poco de pena, mientras que el de la pelinegra se mostraba levemente molesta.

Lo que más llamo la atención fue que en el rostro del saiyajin, quién tenía una gota de sudor en la nuca, era una pequeña mancha roja en su mejilla.

Antes de que pudieran preguntar que eso que había pasado llegaría un soldado para avisarles a los presentes algo importante.

—¡Oigan, novatos, reúnanse! ¡Los uniformes llegaron!

Unos minutos después, todos se habrían puesto sus uniformes, incluso el propio Goku se lo habría puesto.

Varios de los compañeros como Connie, Eren o Ymir tratarían de hacer a hablar a los tres pero ninguno decía algo.

Goku tratando de cambiar de tema habría preguntado sobre que le habría pasado a Marco, así enterándose de que se había suicidado, poniéndose "triste" y notando una mirada extraña en el rostro de cierta pelirubia.

-Un rato después-

—Así que ustedes también participarán en el próximo plan. —Diría Goku recibiendo un "sí" por parte de sus demás compañeros.

—Oye, Eren. —Habló Jean recibiendo la mirada de Eren y sus amigos. —Cuando te transformarte en Titan, parece que trataste de matar a Goku. ¿Cómo contradices eso?

—No, Eren solo reaccionó mal. —Diría Mikasa intentando defender al castaño pero sería interrumpida por el saiyajin.

—No es así Mikasa, Eren en ese momento no tuvo el completo control sobre su titán, es por eso que lo tuve que golpear. —Diría un Goku rascándose su mejilla, quien se encontraba al lado de Krista y Annie.

—Si dices eso... pues parece que es verdad. Cuando me convertí en Titan... ataque a Goku. —Dijo Eren agachando levemente la mirada.

—¿"Parece"? Quieres decir de que no lo recuerdas. En resumen, solo contamos con Goku. —Diría Jean volteando a verlo, recibiendo una mirada de resignación por parte del azabache.

—Hasta ahora ni siquiera tienes conocimiento sobre tus poderes de titán. Por otra parte, es otra prueba de que no sabes controlarlo. —Diría el cara de caballo volteando a ver de nuevo a Eren.

—Sí. Exactamente. —Respondería Eren.

—¿Han escuchado?, esa es la verdad. Nosotros al igual que Marco, moriremos sin que Eren lo sepa. —Les diría este a los demás.

—Jean, ¿cuál es el punto en presionar a Eren aquí? —Preguntaría una Mikasa quien parecía estar aún molesta.

—No es como si a todo el mundo le importase morir por Eren como a ti, o Armin o Goku, ¡Solo estaba aclarando!

—Nosotros decidiremos por lo que daremos nuestras vidas. O no, dudo que podamos actuar sin dudar en un momento como este.

—No siempre podremos contar con Goku para todo, lo dejaremos tomar nuestras vidas. La vida no es algo tan trivial. —Diría el castaño claro.

—En resumen, no siempre podrán contar conmigo, quieren decir que también te necesitamos a ti... Eren. —Diría Goku viéndolo con una sonrisa.

—¡Exacto! ¡Por eso, Eren! ¡Nosotros... también contamos contigo! —Diría Jean con cierto temor mientras tomaba de los hombros al Jeager.

—Sí... —Diría Eren anonadado.

...

Un rato después, en la entrada de la puerta de la muralla.

—Puede ser que nos encontramos con los titanes durante el inicio. La puerta se abre en 30 segundos.

Mientras esperaban a qué se abriera la puerta Eren escucharía las voces de unos niños, su mirada se dirigiría a la ventana de una casa de por ahí donde observaría a dos niños.

—¡Son las tropas de exploración! ¡Dicen que las alas en la espalda, son las alas de la libertad! —Diría un niño a su hermana pequeña.

—¡Que genial! —Aquellas sacarían una sonrisa de nostalgia al Jeager.

—¡Es el momento! ¡A partir de ahora, la humanidad avanzara un paso mas! ¡Muestren sus voluntades! —Diría un soldado, así todos alzarían sus espadas excepto Goku.

—¡Expedición iniciada! —Diría el hombre, eh inmediatamente las puertas del muro se abrirían.

—¡Partamos! —Gritaría el capitán Erwin, para seguido todos salir de la muralla. —¡Ahora comienza la expedición de recuperación número 58ª! ¡Todas las unidades, avancen!

...

Mientras salían de la muralla y cruzaban el pueblo destruido se encontrarían con un titán excéntrico el cual sería neutralizado por unos soldados.

Sin más inconvenientes el capitán Erwin daría la orden de ejecutar la formación de exploración a larga distancia. Todos empezarían a tomar sus lugares correspondientes logrando hacer la formación con exito, todo seguía normal de momento.

—El frente esta un poco lejos, pero lo suficientemente lejos para ver la señal del otro extremo. Es necesario amplificar lo más posible el alcance de las comunicaciones.

Armin quien se encontraba en el flanco derecho de la formación, estaba observando a todos los lugares con precaución. El sonido del disparo de la señal llamaría su atención al cielo donde miraría el humo de color rojo, eso haría que recordará la explicación de la formación.

—Los que observarán a los titanes serán los soldados de la primera fila. Cuando ellos vean un titán, van a disparar una señal de color rojo.

—Cuando se confirme la señal, los otros soldados la repetirán. Así que cuando el capitán determine la posición del titán, el disparará una señal verde apuntando la dirección que la formación debe seguir. —Tal y como lo dijo el soldado el capitán Erwin dispararía la bengala al flanco izquierdo.

—De esta forma, toda la formación podrá llegar a su destino sin tener que pelear con los Titanes.

—Sin embargo, hay casos en los que la observación puede demorar por culpa del terreno y los obstáculos, y los titanes podrán entrar en la formación.

Sasha se encontraba cabalgando cerca de unas casas destruidas, por el rabillo de su ojo observaría a un titán excéntrico el cual la empezaría a seguir.

Con gran temor evitaría una embestida del gigante, sacaría su pistola para lanzar la señal pero se encontraba muy nerviosa y asustada.

—La señal roja... —Diría Sasha tratando de insertar la cápsula pero para su desgracia se le resbalaría de su mano.

Para la suerte de la pelicastaña dos soldados que se encontraban serca de su posición dispararían la señal.

—¡Dispara! ¡Por aquí! —Diría el soldado que parecía ser un poco más mayor.

—¡Maldita sea, uno escapó!

—¡Atraelo por acá! —ordenó el soldado mayor. —¡Sasha! ¡Ven aquí!

Sasha lograría salir de la mira del titán pero ahora eran los soldados quienes eran seguidos por el gigante.

—Yo me ocuparé de el. Ve a la izquierda. —Nuevamente ordenó a su compañero.

El soldado obedecería sin rechistar, yendo a la derecha observaría unas estructuras destruídas. Con gran rapidez se pasaría por ahí y haría que el titán se golpeara con un árbol deteniéndolo momentáneamente.

—¡Capitán! —Exclamaría Sasha.

—¡Vuelve a tu posición! ¡Él se quedó sin gas! —Diría el soldado mayor.

-Volviendo con Armin-

—Esto es extraño, lanzaron la señal roja, pero la formación continua desestructurada... —Diría el pelirubio con la pistola en mano. Entonces volvería a recordar las palabras.

—Sin embargo, esta estrategia solo funciona con Titanes comunes, cuyos movimientos son fáciles de predecir. —El sonido de un disparo lo sacaría de sus pensamientos.

—¿Una señal negra? —Se preguntó en su cabeza mientras miraba la señal del lado derecho.

—Él está ignorando a los que lo rodean. Y se acerca al centro. —Diría mientras preparaba la carga. —No hay duda, es un excéntrico. —Sin más lanzó la señal.

—Solo contra tipos raros, que tienen un comportamiento impredecible, es necesario combatir.

—¡Maldita sea! No tenemos otra opción. —Diría el soldado el cual tenía un pañuelo de color blanco en su cabeza, el era quien había dado las indicaciones antes.

—Siz, has lo de siempre. ¡Lo detendré!

—¡Entendido!

—(Estoy en completa desventaja en este territorio. Las posibilidades de éxito son bajas, pero no puedo permitir que él rompa la formación.) —Diría en sus pensamientos mientras sacaba sus espadas.

—(Arlett se encuentra en el otro lado. Tengo que dar un buen ejemplo para los principiantes. ¡Voy a acabarlo ya!) —Con ese último pensamiento lanzaría su gancho al tobillo del titán.

Tomando un poco de impulso de su caballo se lanzaría y le daría una buen corte ocasionando que el titán cayera.

—¡Ahora, Siz! —Dicho eso, el soldado saltaría de su caballo y le daría un gran tajo en el cuello acabando con el titán.

—¡Tuvieron éxito! —Diría Armin con alegría pero entonces su mirada se centraría en algo, una gran sorpresa lo invadió.

—Lo logramos... —Susurró el soldado soltando un leve suspiro. —¿Así que viniste? ¡Ese es mi caballo favorito! ¡Te quiero, Charet! —Diría montando al caballo.

El sonido de unas pisadas fuertes atraerían la miradas de ambos soldados, desde atrás se acercaba una titán, ¿corriendo?

—¿Otra? ¿Qué demonios están haciendo los de la retaguardia? —Cuestionó el soldado del pañuelo.

—Si los ignoro y viene hacia acá debe significar que es un excéntrico. —Diría su compañero.

—No tenemos otra opción. Siz, hagámoslo de nuevo. —Dijo con seriedad.

—¡Sí!

—Si que no tenemos suerte, ya van dos seguidos. —Diría. — Y parece ser uno de 14 metros. ¡Va hacer duro! —Dijo con seriedad pero entonces miraría cómo la titán se acercaba demasiado rápido.

Gracias a sus reflejos pudieron evitar ser aplastados. Armin daría la señal negra con rapidez.

—¿Qué es eso? ¡Es demasiado rápido! —Diría Armin con la mirada levemente ensombrecida.

—¡No dejes que vaya hacia Arlett! ¡Ve!

Ambos soldados pondrían en marcha su estrategia, lanzarían sus ganchos al cuerpo de la titán para impulsarse y cortarle la nunca.

Pasa su sorpesa está tomaría las cuerdas para matarlos, de pronto lo que parecía ser una gran bala se estrello contra la cara de la extraña titan lo que no solo provocó que esta soltara a los soldados sino que salió disparada a unos metros de la posición en la que se encontraba.

Aquella bala tan extraña resultaría ser Goku el cual descendería cerca de Armin con los soldados de antes en sus brazos, se encontraban en shock.

-Momentos antes-

El saiyajin había acabado con algunos Titanes que no pudieron vencer los soldados, después de agradecerle a Goku este volvería al centro de la formación junto a Erwin.

—Bien, todo está en orden. —Diría el Saiyajin con una pequeña sonrisa.

—Sí, eso veo. —Dijo el pelirubio para seguidamente dar una señal.

Antes de Goku montará a su caballo sentiría un ki de alguien que conocía muy bien alterándose.

—Ustedes sigan, yo iré a la retaguardia. —Diría el Saiyajin con leve seriedad, los demás al ver eso sabrían que algo estaba pasando haya atrás.

—Esta bien, nos vemos después. —Diría Erwin para seguido ver cómo el Son desaparecía en un parpadeo.

...

Goku aparecería cerca de unos árboles que estaban en el prado solo para presenciar la transformación de la titán hembra.

Varios soldado saldrían volando por la explosión, los caballos saldrían asustados pero no habían ido muy lejos.

La titán estaba lista para matar a los soldados quienes se encontraban desconcertados pero, para su sorpesa, estos desaparecerían de su vista.

-

Goku aparecería cerca de donde habían parado a descansar los caballos que habían salido corriendo, al notar la presencia de los presentes se acercarían un poco.

—¿Se encuentran bien? —Preguntó el saiyajin con serenidad mientras los veía.

—S-Sí... —Responderían algunos, realmente estaban confundidos.

—Ustedes sigan con la formación en la retaguardia, yo me encargaré de la titán.

—Espera... ¿Dónde está Leonhart? —Preguntó uno soldado mayor mientras buscaba a la rubia con la mirada. Goku fingiría sorpresa por la respuesta.

—Tengo que darme prisa. —Diría el pelinegro con seriedad y nuevamente desaparecería dejando a los soldados anonadados.

-Momento actual-

—Ups, lo siento, me pase un poquito con el golpe. —Diría un poco avergonzado mientras veía a la titan. Armin al ver a su amigo solo se alegraría.

—¡Goku! Que bueno que llegaste en el momento mas oportuno. —Diría el Arlett aliviado.

—En realidad ya había llegado hace un rato, si no hubiera sido así la mayoría de la retaguardia hubieran sido ejecutados. —Respondió el saiyajin con una pequeña sonrisa.

Armin solo tendría una pequeña gota de sudor al ver la forma relajada en que decía todo el saiyajin, aunque bueno, así era el.

Goku pondría su vista en la titan que se recomponía y observaba al saiyajin. Goku al ver eso regresaría la mirada al pelirubio.

—Armin, ve con los demas en la formación, yo me encargo de la situación aquí. —Dijo Goku volviendo mirar a la titán.

—Esta bien. —Diría el pelirubio para ensillar su caballo y partir para reunirse con los demás.

—Vamos Annie, te daré la revancha de aquel combate. —Comentó el saiyajin con una pequeña sonrisa retadora y burlona.

La titan se sorprendería por lo dicho por Goku y seguidamente correría en su dirección para propinarle un golpe. El puño de la titán se detendría en seco a unos centímetros cerca del rostro del pelinegro.

—Sin duda eres mejor controlando a tu titán que Eren. Ciertamente me gustaría ver como terminaría un combate amistoso entre tú y Mikasa. —Dijo el azabache con una sonrisa serena.

La titán hembra volvería a atacar a un Goku, quién ahora levitaba a unos metros del suelo, con varios golpes mientras sus puños eran reforzados con una especie de cristal.

Goku se notaría un poco sorprendido por esto, pero de igual forma los golpes se detendrían en seco sin más.

—Vaya, Eren no puede hacer eso —dijo con cierta sorpresa —al menos no por el momento. —Esto último lo diría en un susurro.

—¿Qué más tienes, Annie? —Preguntó el saiyajin observando a la hermo- a la titán rubia.

Annie le respondío con una rafaga de puñetazos y patadas mientras una pequeña seña de molestia y frustración se hacía presente en su rostro.

La titán atacaba sin cesar mientras que Goku no se movía ni un centímetro de su lugar, todos los ataques no hacían efecto, era como golear a una pared de un material bastante duro.

El Son dispuesto a terminar eso detendría los movimientos de Annie inmovilizándola con la mirada para que está no se moviera, era algo similar a lo que había hecho contra Broly.

—Eso estuvo bien. —Dijo Goku con una ligera sonrisa.

Annie podría mirar al saiyajin con una mirada de leve frustración al igual que gran asombro y sorpresa. El Son dejaría de retenerla y la dejaría fuera de su control. Para su sorpresa el cuerpo caería de rodillas e inclinaría su cabeza mientras vapor salía desde su nuca dejando ver a la pelrubia.

—Al fin sales. —Diría el Son tranquilamente con la sonrisa que le caracterisa.

—Son Goku... ¿Qué es lo qué quieres? —Preguntaría la rubia de manera seria y un poco cortante. Goku aterrizaría enfrente de ella y le respondería.

—¿Son Goku? —Preguntó con extrañeza. —Pensé que ya éramos amigos... —Diría este fingiendo tristeza y dolor molestando un poco a la pelirubia.

—Solamente quiero hablar contigo. —Dijo con un poco más de seriedad al notar la molestia en el rostro de la chica. La Leonhart solo se quedaría callada teniendo la mirada agachada al suelo.

—Vamos Annie, puedes confiar en mi. —Diría el Son mirando a la chica.

—Tú no lo entiendes. —Diría la chica empezando a perder la calma.

—Annie, solo tienes que decírmelo, yo solo quiero ayudarte. —Dijo Goku con serenidad.

—Si es así, entonces apartate de mi camino y no interfieras. —Dijo esta a la defensiva.

—No puedo hacer eso, Eren es como un hermano para mí, Annie. —Respondería el azabache cruzándose de brazos.

—Entonces no puedes ayudarme. —Diría la chica con neutralidad.

—Claro que puedo ayudarte pero, solo sí me das la oportunidad. Solo dímelo. —Diría el saiyajin extendiendole la mano a la chica.

—¿Por qué...? ¿Por qué insistes tanto, Goku? —Preguntaría un poco incrédula con la mirada levemente oscurecida.

—¿Por qué no ayudaría a una amiga? —Le preguntó el saiyajin con su típica sonrisa mientras a su ves transmitía un aura de paz a su alrededor.

Annie se quedaría hipnotizada e incrédula mientras observaba a Goku. Por alguna extraña razón sus mejilla comenzaron a calentarse poco a poco.

La chica seguiría observando al saiyajin mientras que su corazón se aceleraba, no sabía que le estaba pasando pero le estaba gustando esa sensacíon.

—Puedes confiar en mí. —Diría suavemente el saiyajin.

—Goku... —Diría Annie mientras comenzaba a estirar la mano para tocar la de Goku, desconocía el porque pero la mirada del saiyajin le decía que todo estaría bien.

...

Podemos ver a una Annie en su forma titán la cual se retiraba del campo de batalla. Ella estaría pensando en Goku y lo que le había dicho.

Ella se destransformaría y se pondría a salvo en un gran árbol. Al llegar a la sima se recostaría en una base de las gigantescas ramas, tenía que reconocer que los árboles de esta isla eran muy grandes.

Soltando un leve suspiro varios pensamientos sobre el pelinegro pasarían por su cabeza. Sus mejillas comenzaron a calentarse y un leve rubor se hizo presente en ellas.

—Esto es tan confuso... —Se dijo para si misma la chica guerrera. Su rubor todavía estaba presente.

—Así que ha eso te referías aquella vez, siempre lo supiste... —Dijo en voz baja mientras recordaba la charla que había tenido con el saiyan tiempo atrás.

-Flashback-

Podemos ver a Annie quien se encontraba entrenando muy temprano, los demás se encontraban aún durmiendo, claro, con la excepción de alguien.

Habían pasado ya serca de un mes desde que Goku había combatido contra la pelirubia. En ese corto tiempo el azabache se había ganado algo de confianza por parte de la Leonhart aunque claro, esta sabía cual era su misión en ese lugar.

—Hola, Annie. —El saludo de una voz conocida haría que dejara lo que estaba haciendo.

Era Goku quién parecía un poco agitado, tal vez había ido a correr un poco, este llevaba puesta una camiseta de color marrón claro.

—¿Te molesta si entreno contigo? —Preguntaría el Son recibiendo una negación por parte de la chica.

El Son daría una pequeña sonrisa y empezaría a estirarse un poco, después de unos segundos empezaría a hacer unas cuantas flexiones. Mientras hacia su ejercicio notaría coma la chica practicaba algunos golpes con su estilo de pelea característico.

—Tú estilo realmente es genial, esas patadas son muy fuertes. —Dijo Goku con su típica sonrisa.

—¿Fue tu padre quien te lo enseño? —Aquella pregunta dejaría sorprendida a la pelirubia, ella nunca había mencionado a su padre antes, de hecho nunca desde que llegó ahí.

Disimularía su sorpresa y trataría de calmarse pensando que el pelinegro lo dijo con inocencia, puesto que el no sabía la verdad, ¿cierto?

—Sí. —Contestaría Annie con cierta nostalgia, puede que Goku "no" lo supiera pero había acertado.

—Él fue quien me enseñó este estilo de lucha... antes de morir. —Mintió para que no sonará sospechosa.

—Ya veo. Realmente lo siento. —

—No te preocupes, no suelo hablar de ello. —Diría Annie con la mirada levemente agachada.

—Annie, si necesitas hablar con alguien puedes confiar en mí —diría el pelinegro con una sonrisa. —Después de todo somos amigos, ¿no?

La Leonhart miraría al saiyajin con cierto asombro, no podía negar que este chico le causaba curiosidad e interés.

Después de eso Goku le pediría un combate amistoso, el cual terminaría en Annie dándole finalmente un golpe al azabache. Mientras volvían con los demás hablarían de cosas triviales y de como podría mejorar su estilo.

-Fin del flashback-

—(Goku...) —Pensaría la chica en el chico que le hacía sentir estraña.

—Hm... —Annie estaba intentando pensar en una solución. Un suspiro salió de sus hermosos labios, había ya tomado una decisión...