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Día en la ciudad

Lana regresó al castillo de Star Road y fue directo al sótano del mismo, en donde Dimentio la esperaba.

-"Dime Lana ¿salió todo de acuerdo al plan?"

-"Así es, un enorme ejército koopa esta siendo entrenado en la isla Yoshi, además de el ensamble de las viejas y nuevas tecnologías de guerra de dicho reino."

-"¿Y Mario?"

-"Él confía en Kamek, dudo que haga algo más."

-"¿Y los isleños?"

-"Hice que Kamek diera la orden de matar a todo el que se acerque al campamento. La verdad, siento que le estaría haciendo un favor al mundo al librarlo de una especie tan tonta e inútil como la que vive en esa isla."

-"Vamos Lana, no seas tan ruda. Los yoshis pueden ser bastante útiles ... como animales de carga."

Lana sonrio ante la idea...

Mientras, Mario habia regresado a su casa completamente exhausto. Consiguio que tanto Yoshi como Toad no le dijeran una palabra de eso a nadie. Aunque Kamek le habia dicho que se iba a hacer cargo, a Mario no lo dejaba en paz la idea. Esto solo podía ser obra del clan sombra, solo ellos podrían querer un ejército tan grande y tan bien armado. Pero no estaba seguro de que hacer, así que antes de hacer algo estúpido decidió que lo mejor sería consultarlo con Polari.

Estaba apunto de dormir cuando recibió un mensaje de un número desconocido. Tomo su teléfono y vio el mensaje:

"No le digas a nadie más del ejército. Las sombras se agitan, vidas en peligro. Confío en ti.
K."

Mario borró el mensaje de su teléfono. Así que el clan sombra estaba realmente detras de todo. Pero ¿vidas en peligro? Seguramente era parte del plan del clan sombra, así que lo más probable es que Kamek tenga las manos atadas. Decirle a alguien solo empeoraría las cosas. Mario seguia sin saber como actuar, pero ahora al menos sabía que debia hacerlo solo, sin ayuda de nadie.

Al día siguiente:

Mario despertó temprano en la mañana y bajó a toda prisa a la cocina. Se preparó su desayuno, comio a toda prisa y subio al cuarto de sus papás, quienes aún estaban dormidos. Entro despacio y de puntitas, dejó una nota en la mesa de noche, y salió del cuarto. Revisó su reloj: 8 de la mañana. Salió de su casa y comenzó a caminar por la ciudad. Repentinamente sonó su teléfono, y se alegró de ver el número.

-Contestando "Hola Lina."

-"Hola Mario, ¿donde estas?"

-"Vagando por la ciudad."

-"¿En serio? Juraría que mi llamada te iba a despertar."

-"Oye, no soy tan vago ¿esta bien?"

-Rie "Bien, te creo. Ya estoy en el lugar que acordamos."

Mario colgó el teléfono y siguió su camino hasta el parque central de Nueva Donk. La calle estaba algo vacía, y sentada en una de las banquetas estaba Rosalina, quien lo esperaba. Mario llegó caminando y se sentó a la par de ella.

-"¿Sabes? Esta cuidad es bonita. Casi no hecho de menos mi antiguo vecindario."

-"Se nota. ¿Listo?"

-"Siempre lo estoy."

Rosalina extendió su mano tomando la de Mario, y en cuestión de segundos el parque habia desaparecido y ahora estaban sentados en la sala del observatorio.

-"Genial." Dijo Mario.

-"Gracias por acceder a usar este método. En verdad necesitaba esa práctica para mi habilidad de transportarme junto a otros seres vivos."

-"Cuando quieras Lina."

Rosalina se levantó del sillón.

-"Bien, ire por mis cosas y empezaremos, ya vuelvo."

Ella salió de la sala, dejando a Mario solo. Los destellos ya estaban despiertos y desayunados, por lo que andaban regados por todos lados haciendo sus cosas. Polari estaba ocupado leyendo algunas cosas en la biblioteca y Dark ... seguia dormida. Rosalina entró a su habitación, tomo sus cosas y salió. Al pasar cerca de la habitación de Dark, entro en la misma y sacudio a Dark.

-Despertando "¿Que ... que pasa?"

-"Mario esta aquí."

-"Ah ... ¿¡Que?!"

Dark se sentó en su cama.

-"¿Porque?"

-"¿En verdad no me pones atención? Es sábado, te habia dicho que él vendría a estudiar, desde la mañana."

-"Em ... bueno yo ... creo que ire a comer algo entonces ¿donde esta?"

-"En la sala, pero aún así cambiate ¿quieres?"

Dark se vio a si misma. Su pijama consistía en una blusa larga de color verde claro que le llegaba a las rodillas y nada más. Debajo del mismo no llevaba nada, ya que así dormía más cómoda.

-"Lo pensaré."

-"En verdad eres un desastre."

Rosalina salió de la habitación y se dirigió a la sala.

-"Bien Mario ya ... ¿Mario?"

Mario ya no estaba en la sala, pues habia ido a la cocina por algo de comer. Llegó a la misma y se dirigió a la refrigeradora. Estaba sorprendido de no ver a ningun otro destello, por lo que supuso que todos ya habian comido. También estaba sorprendido de no ver a Dark por ningun lado, a lo mejor seguia dormida. Abrió la refri, sacó unas rodajas de queso y unos embutidos, la cerró y ... vio a Dark parada cerca de la refri. Mario botó lo que llevaba en las manos, poniendose rojo como un tomate.

-"Yo ... em ... em ... ah ... ho ... hola Dark."

Dark se agachó para recoger lo que Mario habia botado, causando que usara toda su fuerza de voluntad para voltear hacia otro lado.

-Con los ojos cerrados "¿Ya ... ya pu ... puedo ver?"

Dark colocó todas las cosas sobre la mesa y enrolló su brazos alrededor del cuello de Mario.

-"Yo nunca te dije que cerraras los ojos."

Mario fue abriendo los ojos poco a poco, encontrandose con la profunda mirada de Dark. Ahora que la tenía tan cerca, no podía evitar notar más aún el parecido con Rosalina.

-"¿Sabes? Estuve pensando en todo lo que ha pasado y ... creo que sí quiero intentarlo."

-Nervioso "¿E ... en serio?"

-"Sí, creo ... que vale la pena."

-"Bueno yo ... yo no ... no se que decir."

-"Simple ... no digas nada."

Ambos juntaron sus labios para un profundo beso, del cual Dark se separó rápidamente luego de unos segundos.

-"Solo permite que me vaya a poner algo más de ropa o esto va a terminar muy mal."

Dark salio de la cocina al mismo tiempo que Rosalina entraba.

-Fingiendo sorpresa "¿Puedo saber que acaba de pasar?"

-Nervioso "Ah bueno yo ... yo vine por algo de ... comida. Y ... estaba entrando cuando ... cuando ella iba saliendo y ... y ya."

-"Mmmm ... a la próxima solo avísame ¿esta bien? No tengo problema en hacerte algo de comer."

-"Es que no quería fastidiarte."

-"Mario ... nada que me pidas va a molestarme. Ahora vamonos ¿quieres? Aún tenemos que estudiar."

-"Claro."

Ambos fueron a la sala, donde pasaron el resto de la mañan estudiando historia.

-"Así que dime Mario ... fecha de la gran guerra de unificación del reino koopa."

-"Haber ... 10 de octubre de 1859."

-"Casi ... en realidad era el 9."

Mario dejó caer su cabeza sobre la mesa, soltando un quejido.

-"¡Ahhhhh! ... alguien mateme por favor..."

-Riendo "Bien ... creo que fue suficiente por hoy."

-"Gracias ... ya no soporto más esto."

Un destello entró a la sala y le habló a Rosalina, tras lo que ella se levantó.

-"¿Que pasa?" Preguntó Mario.

-"Debo ir a preparar el almuerzo, la última vez que deje a Dark hacerlo tardamos dos días en reparar la cocina."

-"Oh."

Mario se levantó para acompañar a Rosalina cuando alguien lo tomó del brazo y lo volvio a meter a la sala. Era DarkStar.

-"¡Hey! ¿Que pasa?" Preguntó Mario.

-"Solo quería saber si Rosa ya sabe de nosotros."

-"No ... ¿porque la pregunta?"

-"Porque ... preferiría que esto fuera nuestro pequeño secreto."

-"¿Porque?"

-"Porque ... mientras menos lo sepan, es menos probable que el clan sombra tambien lo sepa."

-"Tiene sentido."

-"Entonces ... ¿mantendras el secreto?"

-"Lo hare, pero solo por que es tu idea ¿esta bien?"

-"Esta bien."

Dark comenzó a avanzar, causando que Mario retrocediera hasta que calló sobre el sillón. Dark se subió ensima de él.

-"Em ... ¿que ... que haces?"

-"Felicitarte por hacerme caso."

-Ríe nerviosamente"Jeje ... veras, yo ... yo debo ir a comer."

-"Creeme ... esto te abrira el apetito."

-"Mama-mia."

Al cabo de unos minutos, Dark salio de la sala y se dirigió a la cocina. Mario salió unos segundos después, con el pelo desordenado, el corazón acelerado y aún con un toque carmesí en sus mejillas.

-En su mente 'Esa chica si que es salvaje
...'

Una vez en la cocina, Mario saludo a Polari y se sentó en su asiento, aún procesando lo que habia pasado. Dark estaba cerca de Rosalina, quien veía de reojo a Mario.

-"¿Que le hiciste?" Le preguntó a Dark en voz baja.

-"Solo unos cuantos besos apasionados y ya esta ... deberias haberlo visto tan nervioso, me pareció hasta tierno."

-"Ya me imagino. Se le nota en la cara que aún no lo supera."

-"Ya lo hara, digo, tarde o temprano se va a acostumbrar ¿no crees?"

Rosalina le pasó unos cuantos platos a Dark y ella los repartió con el resto de destellos. Cuando le dio el suyo a Mario, le susurró algo al oído.

-"Arreglate el pelo."

Mario llevó sus manos a su cabeza y se movió un poco el pelo, aplanando las partes que estaban paradas. El almuerzo pasó con normalidad, y después del mismo Mario se dirigió a la sala, pero fue interceptado por Rosalina.

-"Oye Mario, creo que ya repasamos bastante ... ¿que te parece si vamos a Nueva Donk a ver la ciudad?"

-"Bueno, creo que me vendría bien un descanso. ¿Usamos anillo estelar o transportación?"

-"Anillo estelar."

Rosalina levantó su varita y un anillo estelar apareció frente a los dos, tras lo que se subieron en él. Dark los miraba desde lejos.

-En su mente 'Suerte.'

Ambos aterrizaron cerca del parque central.

-"Y ¿a donde quieres ir?" Preguntó Mario.

-"A todos lados."

Ambos comenzaron a caminar hacia el parque, donde estuvieron un buen tiempo caminando por el mismo, observando los árboles y los pájaros que volaban entre los mismos. En una ocasión, Rosalina consiguió que un pequeño pájaro azul se posara en su mano, para después salir volando. Después del parque, camianaron por la ciudad, admirando los edificios y entrando en las tiendas a ojear los productos. Dentro de Mario iba creciendo una extraña sensación, se sentía feliz y realizado, como si muy dentro de él quisiera que todos los días fueran así, solo él y ella. Cada vez que oía su dulce risa sentía que nada podría arrebatarle la felicidad que la misma le hacia sentir. El verla sonreír era lo único que le bastaba para seguir adelante, a pesar de que ya hubieran caminado por un largo tiempo y él comenzara a aburrirse. Acaso ... ¿acaso es esto lo que se siente cuando se esta enamorado...?

Pasaron cerca de un pequeño parque, y vieron a una persona que tomaba fotos.

-"Oye Mario ¿nos tomamos una?"

-Saliendo de sus pensamientos "¿Eh? ... claro ... creo." En su mente '¿Que me preguntó...?'

Rosalina lo tomó de la mano y lo guió hasta donde estaba la persona que tomaba las fotos. Luego de darle una moneda, los dos se colocaron frente a un árbol y al lado de un estanque. Rosalina seguia sosteniendo la mano de Mario, y aprovechó que él estaba aún algo desconcentrado para acercarse aún más, prenzandose de su brazo y apoyando su cabeza en su hombro. Para cuando Mario reaccionó, no quiso pedirle que por favor le diera más espacio, sino que solo se limitó a sonreír para la foto. Les dieron una copia de la misma a cada uno.

El día ya iba de caída, y era hora de que cada uno comenzara a regresar a su casa. Los dos comenzaron a caminar hacia la casa de Mario. Una vez que llegaron, Mario se despidió de Rosalina, pero al momento de separarse del abrazo de despedida, sus miradas se cruzaron. A diferencia de la mirada de Dark, la de Rosalina era suave y acogedora, llenando el corazón de Mario de paz. Ambos se quedaron viendose un buen tiempo, sin moverse. Mario fue el primero en separarse, caminando hacia atras y alejandose de ella lo más que pudo.

-"Te ... te vere el lunes."

Mario entró a su casa bastante confundido, e incapaz de decir que le estaba pasando. Subió a su cuarto y se encerró en el mismo. Sacó la foto que se habia hecho con Rosalina y la observó con detenimiento, en definitiva la tenia que enmarcar y colocarla en algún lugar de su cuarto donde siempre pueda verla y ... y ... no, no iba a hacer eso. Rápidamente guardó la foto en su mesa de noche y cerró la gabeta con llave. Si era amor lo que sentía por ella, se iba a segurar de sepultar esos sentimientos en lo más profundo de su corazón ... por el bien de ella.

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