Capítulo XXXV: El Orgullo de un Príncipe Imperial

Luz Noceda, Anne, Marcy, Sasha, Natasha Jr, Liena, Willow, Hunter, Gus, entre muertos y heridos que yacían de aquí para allá, al igual que Hilda y sus amigos, sin olvidarse de Sprig y el Capitán Grime, los cuales fueron retirados del campo de batalla, a pesar de que estaban presentando un grado mucho más complicado en sus heridas, ninguno de los dos querían dejar a las chicas solas. Saturnino había caído en el llanto, quebrado como una rama en medio de un temporal de viento, lluvia y granizo que azotaba una ciudad, sin dejar de abrazar a las dos hermanas caídas en combate. Rob, por su parte, envuelto en furia, no dejaba de golpear y darle la paliza de su vida a Lincoln Silva Hound, el cual le había impedido ir en ayuda de sus amigos. Recordaba, con cada puñetazo que le daba al rival, las palabras que Cristian le dijo, antes de morir, en la Batalla de la Mansión, de que él iba a ser testigo de las muertes de sus amigos por su osadía.

¿Acaso eran verdad esas palabras? ¿Valía la pena lo que decía un infeliz como Cristian, el responsable de haberle arruinado la vida al "Príncipe del Desmadre"?. Miró a su rival, éste le mostró, a pesar de tener su rostro empapado por la sangre, esa cruel y burlona sonrisa que traía consigo, llevando a que Rob le temblara el pulso, dejando su puño a escasos metros de la cara de su rival.

- ¿Qué...Qué pasó, "Principito"? ¿Eh? ¿Te quedaste sin amigos? ¿Sin Waifus?. Tú no tienes nada, ahora, porque Cristian te lo dijo. ¿Crees que yo no lo sabía?. Jajajaja y lo que hice, la traición, tanto a ti como a Alexander, fue lo mejor que se pudo haber ocurrido. El haber visto a sus hijos sufrir y llorar al verlo caído y atravesado por una "Flecha Dorada", ¡fue la mejor puta decisión que tomé en mi vida!.- Exclamó pero cometió el peor error de todo el Mundo: El haberse metido con las personas cercanas a Rob.

- ¿Y vos?. Vos no tenes nada qué decir, hijo de re mil puta. Vos sos un forro, sin nadie a tu alrededor, que te vas a quedar solo. Que tengas a Lucy como tu pareja no significa nada. ¿Y sabes por qué?. Porque la diferencia entre vos y yo es que no vivo enojado, amargado porque te usaron como "Objeto de la Buena Suerte". Debiste haberlos perdonado, después obtener Justicia pero quisiste más y ahora mírate: Un putito que se cree "Dios" pero sos un poronga muerta.- Un puñetazo.- ¡No sos nada!.- Segundo puñetazo.- ¡Y ESTO ES POR ALEXANDER, SU FAMILIA Y MIS AMIGOS!.- Bramó y el tercer puñetazo lo dejó mareado, perdido y con la vista nublada.- ¡¿Qué pasó?! ¡¿Ya no sos tan valiente?! ¡Ahora veo a un perro cagón y molido a palos!.- Exclamó el peli negro y de ahí, ante la mirada de miedo que sintió Silva Hound, recibió una patada que lo dejó inconsciente y cubierto de sangre.- Por El Bosnio, la puta que te re mil parió.-

El cuerpo del rival golpeó el suelo, levantando una columna de polvo ante el Gigante que lo había abatido. Rob se hizo crujir los nudillos, mirando al oponente con asco. Quería darle una nueva paliza pero se contuvo cuando oyó el grito desgarrador de Saturnino, por lo que corrió hacia el Frente de las Playas, hallando a su amigo peli naranja abrazado a los cuerpos sin vida de Natasha Jr y Liena, llorando a más no poder, quebrado y cuando llegaron hasta él Lutza, Nathaniel, Molly, Libby, Andrea, Scratch y los Hermanos Chen junto a los Green, Gloria, Remy y Vázquez, ninguno pudo dar crédito a lo ocurrido. Hailey se tapó la boca con horror al presenciar esa escena, los cuerpos sin vida de las dos "Princesas Imperiales", Anne, Sasha, Marcy, Sprig y Luz así como también estaban inconscientes Willow, Hunter y Gus. Amity yacía herida, al igual que Hilda, mientras que Lúckacs y Liale seguían combatiendo a "Los Plagados" que seguían subiendo por las colinas hasta donde estaba esa máquina que el peli blanco-plateado trataba de destruir con su "Magia Elemental".

- ¡Satu!.- Corrió el peli negro hasta él y lo encontró todo debilitado, pálido y los ojos empapados por las lágrimas ante la tragedia ocurrida. Le costaba moverse y por eso Rob, se agachó y su amigo lo abrazó con todas sus fuerzas en ese momento tan duro, aferrándose a su remera celeste, humedeciendo la misma.

- ¡Y...Yo...Yo...Yo las maté, Rob, yo las maté...Yo las maté al practicar "Pereza"! ¡Puse mi corazón y mi vida en peligro y ellas se sacrificaron por mí! ¡Soy un maldito asesino! ¡Lo soy! ¡No sé cómo me van a mirar a la cara Lúckacs, Liale, Leni y Alexander, en especial ellos dos, cuando se enteren que sus dos hijas fallecieron por mi culpa!.- Rompió aún más en llanto, cosa que destrozó a Rob para sus adentros aún más.- ¡Yo las maté, yo las maté! ¡YO LAS MATÉ!.- Exclamó y eso llevó a que su amigo lo mirara, le diera una bofetada, también con los ojos humedecidos y loa agarrara de los hombros con fuerza.

- ¡No seas boludo! ¡No te digas eso! ¡JAMÁS! ¡¿ME OÍSTE?!.- Le ordenó y luego lanzó esas palabras, abrazándolo.- ¡No te quiero volver a oír decir esos desprecios hacia ti! ¡No fue tu culpa, sino de estos hijos de re mil puta, malparidos y cagados por un elefante los que hicieron esta atrocidad! ¡Naty y Liena dieron todo por protegerte porque te amaban!.- Continuó y de ahí lo supo todo.- ¡Sí, siempre lo supe que ellas estaban enamoradas de vos! ¡Hasta Lúckacs lo sabía pero no se metía porque es tu vida!.- Siguió y de ahí ambos se miraron a los ojos.- Ahora escuchame bien: Vamos a hallar la forma de traer a todos los caídos a la vida, ¿sí?. No pierdas la Fe. Te lo pido, Satu, no pierdas el camino.- Rogó y su amigo asintió, todavía con los ojos humedecidos, con la cabeza.

Justo en aquel momento de liberación y expiación, el sonido de una feroz batalla se estaba dando allí cuando Lúckacs fue golpeado por UnLuckacs, derribado contra el piso. La "Sierra" que había formado en su brazo, con el "Fuego Vil", había terminado y ahora yacía tirado, mirando a su adversario que iba hacia él.

- No sabes la bronca que les tengo a las dos putas de tus hermanas por haber matado a las mías pero, jajajaja, de seguro las traeremos a la vida cuando el "Ídolo" reviva.- Dijo a modo de burla contra su oponente.

- Tu "Ídolo", ese "Nega", como dicen los argentinos, se puede ir bien a la recalcada concha puta de su hermana.- Mostró Lúckacs esa sonrisa de desafío, a pesar de estar herido.

- ¡Blasfemo!.- Bramó el rival, mientras que cargaba contra él.- ¡"PLAGADOS", SÚMENSE AL FESTÍN DE SANGRE QUE HABRÁ!.- Llamó a aquellas aberraciones, quienes estaban subiendo por las colinas. Liale estaba solo y sin poder emplear mucho su poder, ya que, apenas, podía utilizarlo en momentos de máxima tensión y peligro, no cuando estaba concentrado en una labor importante.

- ¡LIALE!.- Alertó Lúckacs a su hermano menor. Éste se volteó y vio que un "Plagado" iba a ensartarlo con un arpón pero el joven "Príncipe Imperial" se defendió, empleando las "Hojas de Guerra Aldrachi", aquellas que venía desde Azeroth y pertenecían a los "Elfos de la Noche". Con un rápido movimiento, el muchacho degolló al enemigo, quien cayó al suelo, estrepitosamente y soltando el arpón que traía consigo, mientras que los otros "Plagados" lo veían e iniciaban su ataque.

- Cobardes, infieles y blasfemos...¡MUERAN! ¡"ASPIRANTE DE ORGRIMMAR"! ¡PREPARA TU LANZA, MISERABLE!.- Invocó su defensa, la cual permitía aumentar el poder de sus Espadas Élficas, trazando varios arcos que partían a la mitad a los adversarios, regando el suelo con su sangre, cosa que tomó por desapercibido a UnLuckacs, mientras que UnLiale, llevando los cuerpos sin vida de sus hermanas caídas, miraba todo con asombro.

- ¡Te voy a hacer mierda, infeliz!.- Juró UnLuckacs pero, al momento de querer atacar a Liale, éste recibió una patada de su adversario, quien impidió que su hermano menor resultara herido.

- Pelea conmigo si tienes huevos. Con mis hermanos no te metas, ¿oíste?. Dale, vamos, pelea contra mí.- Le exhortó y amenazó, blandiendo a la "Agonía de Escarcha".- 

- Ya que lo insistes.- Dedujo UnLuckacs y a las espaldas del otro, los "Plagados" también emergieron, por lo que el joven se dio la vuelta y comenzó a masacrarlos, dando la oportunidad para escapar al otro.

- ¡Tú no te me escapas, rata!.- Bramó el "Príncipe Imperial", disparando un rayo de "Energía Vil" que impactó contra el hombro del alterno, quien cayó y rodó contra el piso.- Jajajaja, gracias, Megatron de "Transformes G1", por ser el mejor personaje de todos y en especial al doblaje latino.

Rob los veía combatir a ambos hermanos, hombro con hombro, admirable, igual que sus hermanas caídas en batalla. A pesar de tener, todavía, fresco el recuerdo de sus muertes, los dos no pensaban permitir que el enemigo consiguiera abrir una brecha y llegar hasta donde estaban los otros, quienes, también, tenían a sus heridos. Sin embargo, en medio de la batalla que se registraba, UnLuckacs emergió, desde las profundidades del Fuego Corrupto que emanaba, atacando a ambos chicos, separándolos. Lúckacs se interpuso, recibiendo un golpe en el hombro, causando que gritara del dolor y viera su hombro traspasado por la espada enemiga.

- ¡Lúckacs!.- Oyó el grito de Hilda, herida, intentando ponerse de pie pero Kaisa y Frida la detuvieron, recostándola en el suelo, debido a la magnitud de las mismas que tenía y encima le costaba enfrentarse a un enemigo así como hacer Magia contra UnLuckacs con el fin de salvar a su amigo. 

Éste cayó al piso, de rodillas, sintiendo ese dolor punzante, apretó los dientes con fuerza y miró al rival con odio en sus ojos pero, cuando éste iba a mostrar su lado más sádico, el cual era decapitarlo, el rubio sonrío, mostrando aquella misma que tenía su "Diosa" Tanya Von Degurechaff, cerró los ojos y de ahí concentró su "Magia Elemental" en el suelo, uniéndola con la de su hermano, Liale.

- ¡"GEISER FLAMÍGERO"!.- Invocó una poderosa corriente que vino desde abajo, haciendo explotar el suelo y mandando a volar al enemigo así como también incineró a unos cuantos "Plagados" y "Cultistas".

Todo aquello fue atestiguado por Roy y sus amigos, quienes se dieron la vuelta, replegándose para el Santuario, al igual que Scoot Denoga, quien le dedicó una mirada de frialdad a Hailey antes de irse para allá.

UnLuckacs miró a su rival, saliendo y recuperando el control de la situación, cargando contra éste, quien se defendió con su Espada Imperial, la "Agonía de Escarcha/Frostmourne", la cual lanzaba poderosos ataques de su Elemento, reduciendo a cenizas a todo aquel que se interpusiera en su camino, así como también protegía a Liale, el cual seguía en su afán por destruir la máquina de UnLiale pero que le costaba hallar la respuesta a ese "Puzzle".

- "A este paso nos sobrepasarán. Tengo que destruirla cuanto antes pero...".- Cerró los ojos, pensativo. Veía a su hermano mayor combatir sin parar, matando, reduciendo a los enemigos a meros cadáveres por el camino, incluso llegó a despeñar a unos cuantos, lanzando imprecaciones y gritos de batalla para animar la contienda. Agarró a uno de los "Plagados" y le cercenó la garganta, a otro lo incendió junto a sus compañeros, quienes corrieron, envueltos en llamas, hacia donde estaban los tanques y camiones, ocasionando explosiones por doquier. En un momento dado, Liale tuvo una idea, una imagen que cruzó por su cabeza.- Será peligrosa, lo sé pero no hay otra opción más que ésta.- Sostuvo con determinación.- ¡LÚCKACS!.- Llamó el peli blanco-plateado al rubio, quien se volteó para verlo.- ¡Tengo una idea para destruir esta máquina pero necesito tu ayuda: Contenlos, no dejes que se acerquen a mí, evita a toda costa su infiltración y así podré eliminar esta porquería!.- Le encargó como misión a su hermano. Éste asintió, en silencio, blandiendo su Espada Imperial, mientras que trazaba una serie de arcos y atacaba a todo aquel que se interpusiera en su camino.

Eliminó a un "Plagado", luego a otro, tres, cuatro, cinco, seis, siete, ocho. Las cabezas volaban por los aires, al igual que las sangre, muchos acababan con el vientre abierto, con sus tripas afuera, golpeando el piso en un desagradable "espectáculo". Liale también combatía con dureza, matando a todos aquellos que se interpusiera en su camino, así como también mataba a los "Cultistas" que trataban de quitarles sus posiciones ganadas. 

Bajo el Sol gélido que se hallaba en esas colinas, con el Cielo cubierto por los mantos de nubes grises y plateados, con la nieve que caía y el aire que se congelaba, incluso con el Mar, ambos hermanos parecían ser "Uno Solo" los que combatían contra el enemigo. Por sus ojos veían a sus Ancestros, desde León Basileus y el Emperador Constantino XII Paleólogo, durante el "Asedio a Constantinopla", a Aleksandr y Boris Ivanisevic de la "Primera Generación" en el Siglo XVII, Ditar y Mitar Ivanisevic de la "Generación de los Años Gélidos", como se la conoció al evento ocurrido de la "Ruptura Tito-Stalin" incluso a Yuri y Oleg, aquellos que hubieran sido el abuelo y tío de ellos pero que, lamentablemente, al igual que todos los Ivanisevic y sus Aliados, habían caído en la "Masacre de Febrero de 1996".

Liale le enterró las "Hojas de Guerra Aldrachi" en el vientre a una enemiga, giró las mismas en su interior y las sacó con fuerza, ocasionando que las tripas salieran "licuadas", mientras que ésta se desplomaba contra el piso. Rob y Saturnino los observaban, al igual que los otros, combatiendo sin parar, por lo que el peli negro, al ver que los demás podían seguir peleando, se sumó a la pelea, blandiendo su "Martillo de Guerra" y de ahí atacaba a los "Plagados" que seguían subiendo por las laderas de las colinas. 

- ¡Por nuestros caídos!.- Animó Grillo Green.- ¡No les perdonaré a estos "Herejes" por lo que les hicieron a mis amigas, lo pagarán caro! ¡Lo juro! ¡Despertaron la Ira de la Familia Green!.- Juró el chico del campo, lanzándose al combate junto a Tilly, sus padres, su abuela, Gloria, Vázquez y Remy.

- ¡AHHHHHHHHHH! ¡Mataron a mi nieto, malnacidos, no importa que sea un anciano, voy a hacerles pagar por lo que me hicieron! ¡Se metieron con mi familia, ahora sufran las consecuencias!.- Bramó Hopediah Plantar, ayudado por el Capitán Grime, el cual estaba herido pero, todavía, resistía a los embates enemigos.

- ¡Tú lo has dicho, AbuHop!.- Se sumó Polly Plantar, lanzando sus "Bombas-Ñones" y con lágrimas en los ojos.- ¡Mataron a Anne, Sasha, Marcy y a mi hermano, Sprig, al igual que a Luz, Naty y Liena! ¡No voy a tenerles piedad por lo que hicieron!.- Juró la pequeña renacuajo, desde su cubeta con agua, bombardeando a los enemigos sin cesar.

En medio de los combates desatados, con "Los Plagados" atacando a Liale y Lúckacs, ambos hermanos no cejaron, por ningún momento, en abandonar sus posiciones, sabiendo muy bien el objetivo que tenía el "Príncipe Imperial" de cabello blanco-plateado.

- ¡MUERAN, INFELICES!.- Exclamó Liale, mientras que lanzaba su ofensiva.- ¡"APLASTADOR  DE ASTEROIDES"!. ¡LARGO DE MI ROCA!.- Invocó su Elemento de la Tierra, mientras que comenzaban a caer esos "Cuerpos Celestes" contra los enemigos pero, a pesar de sus constantes bombardeos, el chico veía que éstos no paraban de venir.- "Maldición, a este paso no tendré más oportunidades de destruir la máquina. Si...Si tan solo pudiera utilizar las habilidades del Tiempo que papá me enseñó cuando desperté mi Elemento de la Tierra...pero también hay un riesgo del 70% de que pueda ocurrirme alguna desgracia. Aún así...".- Pensó, decidido, sabiendo lo que tenía que hacer, cerrando los ojos.

En un momento dado, un "Plagado" lo atacó por sorpresa, arrojando a Lúckacs hacia atrás. Éste corrió para ayudar a su hermano menor pero éste, viendo que aquel enemigo había conseguido lo que buscaba, ahora solo le quedaba, como última medida, destruir la máquina cuanto antes. Mientras que el rubio corría en su auxilio, comenzó a sentir que el Tiempo, alrededor de Liale, iba más lento, los "Plagados" quedaban congelados, detenidos, mientras que un poderoso terremoto iba azotando la tierra, resquebrajando las montañas, creando gargantas que alcanzaron el "Mar Helado" donde Natasha Jr y Liena habían caído, volcando sus aguas gélidas en su interior. El azote también afecto las inmediaciones del Santuario, poniendo en peligro a Nega, así como también llevando a que los "Cultistas" imploraran por su ayuda.

Liale estaba concentrado en su labor, aferrándose a la máquina, impregnando sus Energías Elementales Mágicas en su interior pero, también, siendo atacado por los "Plagados", los cuales no cedían, en lo absoluto, con su misión. Lúckacs llegó hasta él y cargó contra varios de ellos, asestando golpes, lanzando gritos e imprecaciones hacia los adversarios, mientras que la sangre y las cabezas rodaban por doquier. 

En un momento dado, un profundo "Vacío" se conformó e iluminó el lugar bajo un resplandor dorado, uno que tanto Liale como Lúckacs y Lutza pudieron ver, asombrados, sin tener la oportunidad de emplear alguna palabra que les permitiera decir algo al respecto. Solo sentían asombro, confusión, parecía como si estuvieran viendo hacia otros Mundos. Los enemigos se detuvieron pero, al intentar huir, muchos juraron haber visto a un Dragón Dorado que batía sus alas y lanzaba poderosas "Tormentas de Arena" que los atrapaban y enviaban a otros lugares donde nunca podrían volver. Fue entonces que, de golpe, la máquina se sobrecargó de Energías Elementales y explotó, arrasando con todos los que estaban a su alrededor: "Plagados" y "Cultistas" cayeron ante esa fuerza arrolladora, mientras que Lúckacs había atrapado a Liale en sus brazos pero, cuando sintió el calor de su cuerpo, lo notó frío.

Después de aquella deflagración y con el fuego por doquier, así como los cuerpos envueltos en llamas de los enemigos, el chico peli blanco-plateado abrió los ojos con dificultad, yaciendo en los brazos de su hermano, respirando profundamente y los ojos que iban perdiendo su color.

https://youtu.be/ejuODDOga10

- L...Lúckacs...- Habló Liale con dificultad al respirar.

- Estoy aquí, Liale.- Dijo el rubio, tomando sus manos con fuerza.

- Jamás pensé que podría usar todo mi poder Elemental y desatar un auténtico terremoto...uniéndolo al Tiempo que papá me enseñó...Sabía bien que eso podía acarrearme problemas pero...- Tosió con dificultad, mientras que su corazón se iba deteniendo, poco a poco.- 

- No tienes por qué ofrecer disculpas: Eres mi hermano, desde que nacimos, los cuatro nunca nos separamos.- Le animó el "Príncipe Imperial".

- Me estoy...muriendo...- El chico sentía que sus fuerzas flaqueaban.

- ¡No digas eso, sobrevivirás!.- Intentaba el joven en que continuara adelante, dando pelea.

- Escúchame, Lúckacs, he visto, a través de la Luz que lancé...un abanico de Mundos que no deben caer...Esta guerra...es...solo es el principio...Y más por lo que Liena le dijo a Saturnino- Apretó los dientes y tosió de nuevo.- Pero estoy contento...Lúckacs...Estoy contento de haberlo vivido...Estoy contento de...haber luchado por papá...y demostrado mi poder. Que nuestra hermandad pudiera existir en este "Multiverso" de terror y traiciones como la Luz del Alba...ya es algo...

- ¡Ya no hables más, tienes que reservar tus Energías! ¡Te pondrás bien!.- Rogaba el rubio, sosteniendo a su hermano entre sus brazos.

- Ya no me quedan fuerzas...He...He cumplido...con mi deber...y estoy tranquilo conmigo mismo...- Alzó vista agotada hacia los Cielos, mientras que las Arenas de sus Relojes se habían disipando, apareciendo una imagen de Alexander y Leni.- Salve a los "Emperadores del Este", queridos por todos nuestros pueblos y hermanos...Que su sueño se salve, aunque nosotros no podamos...- En aquel momento, el "Príncipe Imperial" Liale Ivanisevic-Loud cerró sus ojos, el último hálito de vida desapareció de sí, muriendo en los brazos de su hermano.

- L...¡Liale...! ¡LIALE, HERMANO!.- Los ojos del joven se inundaron de lágrimas, las cuales cayeron contra el suelo y el rostro del peli blanco-plateado, al cual abrazó con todas sus fuerzas.

El viento gélido volvió a soplar, el polvo se levantó en finas columnas que desaparecieron de su vista. Todas esas veces que lo veía cuando Natasha Jr probaba su Magia Elemental y en sus sueños: Uno en donde se hallaba ante un enemigo y hacía frío. Luego terminaba en otro lugar, rodeado de gente que desconocía por completo, salvo por otros. 

¿Acaso era una premonición?.

Sintió que alguien iba hacía, acompañado por sus "Plagados".

- Vaya, qué tragedia.- Habló UnLuckacs al lado de los suyos.- El ataque de tu hermano destruyó la máquina del mío y casi pone en peligro al Santuario con nuestro "Ídolo". ¿Crees que eso te lo va a traer de regreso?. Menudo imbécil que resultaste ser.- Apuntó con un movimiento de cabeza hacia atrás, mirándolo por encima del hombro y con asco. Lúckacs lo escuchó hablar, sintiendo que su sangre hervía a más no poder, sosteniendo el cuerpo sin vida de su hermano, al tener presente a ese desagradable bastardo, deseaba acabar con él.- Tanto me dijeron que acabaste con la vida de Stephen "Kilgrave" Stoch pero no puedes pelear contra mí. Vamos, ¿qué esperas?. ¡Atácame o es que no tienes huevos!.- Le desafiaba pero no había una respuesta.- ¿Lo ves?. Tal y como lo presentí: No eres nada. Solo un bonito uniforme y nada más. No eres nada. ¡NADA!.- Exclamó y señaló con su mano hacia el "Príncipe Imperial".- ¡"PLAGADOS", ACABEN CON ESE BASTARDO! ¡HÁGANLO MIERDA!.- Ordenó, mientras que éstos se lanzaron hacia él pero, en aquellos momentos, Lúckacs se puso de pie, los miró a aquellos enemigos y con la sangre de varios enemigos caídos, trazó un "Sello de Magia Vil" en el suelo.

https://youtu.be/MqrTHd49aJ0

El viento comenzó a aumentar su intensidad, los cabellos de Lúckacs se movían al compás del Elemento, mientras que sus Llamas iban brotando desde los pies hasta cubrir sus puños, sintiendo el cambio de sus ojos hacia un color dorado y luego verde vil. Tomó una posición de defensa, protegiendo el cuerpo sin vida de Lúckacs y cuando el primer "Plagado" se acercó hasta su "Rango", el muchacho le atravesó el pecho, haciéndole explotar en miles de pedazos que diseminaron por todas partes. Los compañeros se quedaron horrorizados, mientras que un segundo lo trató de abatir con su rifle de francotirador pero el chico respondió, girándose y "transformando" su brazo izquierdo en una especie de Cañón Láser.

- ¡"ARTIFICIERO MO'ARG"! ¡DISPÁRALES A TODOS...CON TODO!.- Bramó y empezó a bombardear al responsable hasta matarlo. Luego de eso, disparando hacia los otros, fue regando el suelo con su sangre. 

Rob y Saturnino estaban impresionados cuando lo vieron abrirse camino, llevando el cuerpo sin vida de Liale en sus brazos, llevándolo hacia la seguridad, sin embargo, con la ofensiva enemiga reanudada, lo que habían conseguido ganar, se fue perdiendo ante el arrollado avance de "Los Plagados", los cuales fueron poniéndoles un cerco. Muchos estaban heridos, Willow y Hunter permanecían inconscientes, Kaisa había usado gran parte de su Magia para sanar las heridas de los otros pero se hallaba agotada y lo mismo pasó con el "Príncipe del Desmadre", quien solo podía observar el desastre que se dirigía hacia ellos. Lúckacs, por su parte, estaba envuelto en una feroz "Ira Berseker", asesinando a todo aquel que se interpusiera en su camino, protegiendo a Hilda, quien se retiraba con sus amigos, acompañados por Lutza y Nathaniel Jr.

En un momento dado, el "Príncipe Imperial" agarró el rifle de su padre, anteriormente portado por Liena y comenzó a disparar contra todo aquel que se interpusiera en su camino e intentara alcanzar sus posiciones.

- ¡Lúckacs, repliegue! ¡Repliegue, Lúckacs, es una orden!.- Corrió Saturnino hacia él junto a Rob pero el chico seguía preso de una Ira incontenible, eliminando a todos los "Plagados" que se interpusieran en su camino, cambiando de posiciones cada 2x3 hasta que, en un momento dado, al quedarse sin municiones, le entregó el rifle "Mauser" a Rob, desenvainó su Espada Imperial y casi como una "Carga de Bayoneta", se puso de pie para ir al enfrentamiento contra su enemigo.-

- ¡Lúckacs! ¡Lúckacs: Repliegue! ¡Repliegue! ¡¿Qué haces?!.- Bramó Rob pero el joven "Príncipe Imperial" partió al ataque.

- ¡Llévate a todos de aquí, Rob! ¡Tengo un asunto que atender con mi "Yo Alterno"!.- Le ordenó Lúckacs, tomando por sorpresa al otro, quien se quedó sin palabras.- ¡No voy a dejar de combatir, eso me lo enseñó mi padre: Hasta que el enemigo no se haya rendido o sea exterminado, continuaré dando combate hasta mi último aliento y de mi sangre!.- Señaló hacia donde le esperaba su adversario.- 

- Yo entiendo lo que significa para vos el pelear hasta el final, lo llevas en la sangre pero no tenes que escuchar lo que ese hijo de puta te dijo: Vos sos Lúckacs Ivanisevic-Loud, el "Demonio del Danubio", el "Terror de los SWJ", el General de mayor respeto en todo el "Imperio del Este", no un pelele cualquiera.- Le dijo Rob, poniendo una mano en sus hombros.- Pero ¿por qué? ¿Por qué queres poner tu vida inmortal en riesgo?.

Él no sabía que responder en aquel momento, solo sentía el peso de su corazón contra el pecho, las manos contra esa zona y la mirada aguileña pero con las palabras de ese desgraciado que se burlaba de él y la muerte de su hermano.

- Porque no pienso permitir que nadie vuelva a pisotear el "Legado de la Familia Ivanisevic". Desde que era un niño, crecí cultivado por las hazañas de mis Ancestros, al igual que Liale, Liena y Natasha Jr, siempre oía los relatos de papá sobre sus campañas durante la "Guerra Nacionalista" y ahí fue surgiendo la idea, ese proyecto, de volverme un Oficial Imperial para seguir su camino. Desde que él y mamá nos vieron ser entrenados, yo siempre quise ser como él. Pero también, en el camino, comencé a sentir los mismos efectos cuando conocí a Lyra, aún siendo mi prima, aunque no de sangre, la amé y sigo amándola. Cuando ella vino a Sarajevo, por primera vez, me enamoré de ella, de su forma de ser, de esos ojos, su cabello y su personalidad, aún siendo una fanática religiosa. Y sé que ella me espera pero no puedo...¡no puedo permitir que ellos se salgan con la suya! ¡NO PUEDO DEJAR QUE LAS MUERTES DE MIS HERMANOS Y AMIGOS SEAN EN VANO!.- Exclamó con lágrimas en los ojos.- ¡NI TAMPOCO PERMITIRÉ QUE ELLOS LE PONGAN UNA MANO ENCIMA A MI "BRUJITA", JURÉ QUE MATARÍA A CUALQUIERA QUE LES HICIERA DAÑO A LOS MÍOS, COMO HICE CON ADÁN!.- Continuó y eso tomó por sorpresa a Rob y Saturnino al oír ese secreto profundo que tenía Lúckacs con el Pasado.

- Lúckacs.- Oyó la voz de Hilda, quien venía agarrada a los hombros de David y Frida, mientras que Twig le acompañaba.- 

- Hilda...- Él caminó hasta ella y la abrazó con fuerza.- Prométeme que seguirás volviéndote alguien que peleará por sus Causas y Motivos. Que nunca te rendirás por nada del Mundo, sin importar qué tan peligroso sea el enemigo y las adversidades, siempre te mantendrás al frente del combate: Protege a Trollberg, a tu madre y amigos. Yo me sentiré orgulloso de ti, por siempre.- Le dejó esa misión a ella, tomándola por sorpresa.

- Lo prometo pero ¿por qué dices, Lúckacs? ¿Por qué...?.- Quiso saber ella, mientras que el muchacho conjuraba un Hechizo.

- "¡YSERA LA SOÑADORA"!.- Exclamó, dejando dormida a Hilda, Twig, David y Frida, mientras que Kaisa y Jaeden se los llevaban de allí.- Yo combatiré contra ellos, les daré tiempo para que puedan reagruparse y traer a los que cayeron en la batalla, ¿sí?.- Pidió él, mirando a Rob a los ojos.-

- Yo voy con vos.- Dio Saturnino un paso al frente, tomando por sorpresa a su amigo.- Se los debo a las chicas.

Rob solo asintió con la cabeza, sabiendo muy bien la decisión tomada por su amigo. Puso una mano en sus hombros, mientras que el chico pelinaranja y el rubio partían hacia el frente, siendo observados por Kaisa, Molly, Libby, Andrea, Scratch, los Green, Gloria, Remy y Vázquez.

- Espere...¿A...Adónde van ellos? ¿Adónde va Lúckacs?.- Preguntó la chica de Tailandia, Irlanda y EEUU.- ¿Scratch?.

Su amigo fantasma bajó la cabeza, notándose serio.

- Lúckacs está peleando por alguien en especial, no solo por sus hermanos y...y es algo que me hace sentir orgulloso de él.- Apuntó con seriedad.- Vamos, niñas, tenemos que seguir. Esta no es nuestra parte.- Indicó el fantasma gruñón, mientras que partían de allí pero tanto Molly como Libby y Andrea miraron hacia atrás, teniendo los ojos empapados por las lágrimas y más al ver los cuerpos sin vida de los caídos.

Ambos fueron bajando por el sendero principal hacia el frente donde UnLuckacs los esperaba. El viento gélido aullaba con todas sus fuerzas, mientras que movía sus cabellos de ambos, causando que el amigo de Rob se diera la vuelta, dando un paso al frente.

https://youtu.be/vTgV2OswTlk

- Hazme un favor, Lúckacs.- Pidió Saturnino al rubio.- Solo dile a Naty y Liena que yo estaré con ellas. ¿Podes hacerlo?.- Preguntó, dando ese recado al "Príncipe Imperial", quien le estaba dando la espalda, dejando que él caminara.

- Sí...Claro, amigo.- Respondió y sin darle tiempo al amigo de Rob, le aplicó un Hechizo de "Magia de las Sombras", sacándole el aire de los pulmones, sacándose el Crucifijo que Lyra le había dado antes de partir.

- ¡"ASFIXIAR"!.- Dio el nombre de su ofensiva y le tendió el Crucifijo al chico.- ¡Dale esto a Lyra: Asegúrate de que lo reciba! ¡Entra a la "Defensa", rápido!.- Pidió y le empujó, haciéndole caer donde había viento para que pudiera respirar.- Ahora es mi turno.- Le anunció, mientras que el peli naranja se ponía de pie.

- ¡Lúckacs! ¡No puedes hacerme esto: Es mi trabajo!.- Exclamó con desesperación y lágrimas en los ojos.

- Tienes que revivir a mis hermanas y a los caídos.- Le explicó el joven con calma pero siempre reflejando esa mirada de orgullo que traía consigo.- Siempre creí en ti como un hermano más y estaré muy orgulloso de que seas el novio de Natasha Jr y Liena.- 

- Lúckacs...- Quedó Saturnino sin palabras, mientras que los Vientos gélidos se lo llevaban de allí hacia donde estaban los otros.

- Suerte. Cuídate. Te quiero, Hermano.- Se despidió el rubio, haciéndole la venia militar y el "Ave César".-

- Lúckacs...¡No...¡NO LO HAGAS, LÚCKACS! ¡POR FAVOR, LÚCKACS! ¡LÚCKACS!.- Rogaba el chico, mientras que él marchaba hacia el frente, solo, para enfrentarse al enemigo.

En aquel momento, mientras que evacuaban las colinas y montañas, Kaisa, Rob, Vázquez y los demás vieron llegar a Saturnino, solo.

- ¿Qué pasó?.- Preguntó Tilly, sorprendida.

- Ese maldito Orgulloso.- Dijo Kaisa, casi apretando los dientes, sabiendo muy bien cuál había sido la decisión de Lúckacs.

Rob corrió y se halló a su amigo quebrado, emocionalmente, ayudándole a ponerse de pie.

- Buena suerte, rubio.- Le deseó el peli negro con lágrimas en los ojos.- Hay que replegarnos. 

Al decir aquello, sintieron una punzada, como si algo fuera a consumarse en aquel instante, por lo que emprendieron una rápida retirada.

Lúckacs llegó hasta las Playas, encontrándose con su rival, quien lo esperaba y de ahí le dirigió un primer ataque, golpeándolo y tirándolo contra el aire y luego estrellándolo contra la superficie. No parecía haber forma alguna de controlar su Ira de aquel Alterno pero, ahora, parecía que estaba poseído por los golpes pero, al momento de haber atacado al "Príncipe Imperial"; el citado se puso de pie, mirando hacia los Cielos.

En Sarajevo, Lyra se hallaba en la Catedral Ortodoxa de San Cirilo, arrodillada ante el Altar que tenía la Cruz, orando por Lúckacs.

- Santa María, Madre de Dios, ruega por todos nosotros, los Pecadores, a la hora y a la hora de nuestra muerte. Amén.- Empezaba ella con los rezos, aferrando sus manos, juntándolas con fuerza, mientras que las lágrimas caían por sus ojos, empapando el suelo.

https://youtu.be/3amD3gDQKWc

- Tus Dioses ni Dios pueden salvarte de la paliza que te daré.- Sentenció UnLuckacs, atacándolo, repetidas veces, alzando la vista a los Cielos su rival.

- La oigo...La oiga...Oigo su voz.- Dijo, cerrando los ojos y "siguiendo" sus rezos.

- "Vi un Cielo nuevo y una nueva tierra, porque el primer Cielo y la primera tierra pasaron y el Mar ya no existía más. Y yo Juan vi la Santa Ciudad, la Nueva Jerusalén, descender del Cielo, de Dios dispuesta como una esposa ataviada para su marido".- Rezaba ella, llegando su voz hasta el "Multiverso Olvidado", mientras que Lúckacs se ponía de pie, sintiendo que su Fuego iba creciendo en su cuerpo y alma.

- "Y oí una gran voz del Cielo que decía: He aquí el Tabernáculo de Dios con los hombres...".- Lúckacs, el "Príncipe Imperial" más temido, gélido, severo y autoritario, estaba derramando lágrimas contra el suelo al recitar el "Apocalipsis 21" de la "Sagrada Biblia".

- "Y Él morará con ellos y ellos serán su pueblo".- Las lágrimas de Lyra cubrían el suelo, permaneciendo arrodillada ante la Cruz.

- "Y Dios mismo estará con ellos como su Dios. Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos, y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor, porque las primeras cosas pasaron".- Al terminar aquella cita, desde Sarajevo, Lyra se quedó callada, orando en silencio, aferrada a su otro Crucifijo y de ahí se quedó, a la espera de que Lúckacs volviera.

Mientras tanto, UnLuckacs sintió que su rival "no daba una buena pelea", por lo que lo golpeó con fuerza contra el rostro, tirándolo contra el piso.

- ¡Me hiciste enojar!.- Exclamó con rabia.

- Jejejejeje.- Sonrió el rubio de puro desprecio hacia el oponente.- ¿Qué pasa? ¿Te da miedo usar todo tu poder?. Te lo demostraré.- Prometió, haciendo encender su Fuego Elemental, cubriendo todo el páramo con una poderosa ráfaga que alcanzó hasta las orillas.

- Jajajajaja, ¿en serio? ¿Solo eso?. Parece un truco sacado por Vegeta.- Se burló UnLuckacs.

- Vaya que sí eres tonto: Vegeta sí sabe pelear por los que ama, aún siendo frío.- Se cruzó de brazos y de ahí el rival notó que el rubio estaba posicionado bajo el Sol.

- ¿Qué pasa? ¿Acaso dependes del Astro Rey para pelear? ¿No sabes que aquí, hasta el Sol mismo ha perdido su fuerza?.- Le cuestionó el rival, pero desconocía la verdadera motivación de Lúckacs.

- Jajajajaja, hay algo que deberías saber, copia barata.- Le espetó el "Príncipe Imperial".- Cada 11 años, el Sol entra en su "Ciclo Anual" donde tiene mayor actividad y la expulsión de material conocido como "Llamaradas Solares"; por lo que he descubierto, gracias a tus golpes, que la única manera de acabar contigo es...¡LLEVARTE CONMIGO HACIA TU MUERTE!.- Exclamó y de ahí invocó su Armadura Elemental, anteriormente portada por DeathWing El Destructor.

 - ¡¿Qué?! ¡No osarás hacerlo...!.- No tuvo tiempo, el joven, ayudado por Arnes, lo agarraron con fuerza, desplegando sus Alas de Fuego, haciendo crecer su Magia a más no poder.- ¡¿Qué?! ¡ESTO...¿ESTO ES LO QUE TIENEN LOS ELEMENTALES?!.- Se preguntó, horrorizado.- ¡BASTA, SUÉLTAME, ¿QUÉ HACES?!.- Ordenó pero no hubo forma.

- Te llevaré conmigo, tal y como prometí.- Juró Lúckacs y de ahí se levantó un poderoso tornado de fuego, alzándolos hacia los Cielos.- ¡Arnes, sal de aquí, busca a otro Portador!.- Le pidió a la Súcubo Creyente de la Diosa Wolbach.

- Ni hablar, estamos juntos en esto para siempre. Si tú vas, yo voy.- Se negó ella con determinación, quedándose en el cuerpo del joven, quien asintió con la cabeza.

https://youtu.be/d9WP1SUsp0Y

- ¡DETENTE, LÚCKACS, AHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!.- Gritaba el rival del terror que le inundaba en su ser, produciéndose un poderoso resplandor con la imagen del Fénix y el Dragón Negro que volaban hacia los Cielos, llamando la atención de los que estaban escapando de las colinas.

- ¡Lúckacs!.- Se despertó Hilda, corriendo y viendo aquella escena, cayendo de rodillas al suelo, llorando al ver el sacrificio de su amigo y "Hermano Mayor".

Desde los Cielos:

- Adiós, Sarajevo, Mi Amada Patria.- Se despidió el rubio de su hogar, mientras que iba encendiendo su Elemento aún más.- 

https://youtu.be/JJIlVnzYcPU

- ¡¿QUÉ HACES, IDIOTA?! ¡MORIREMOS LOS DOS SI SEGUIMOS SUBIENDO! ¡TODO LO TUYO SERÁ EN VANO!.- Bramaba UnLuckacs, al ver que el otro no se detenía.

- ¡Jajajajaja, estoy consciente de ello! ¡Mi misión está cumplida, hijo de puta, porque pude proteger a mis amigos para que se replegaran y puedan llegar hasta el maldito de Nega! ¡El resto ya no está más en mis manos y puedo sentirme seguro de mí mismo! ¡LLEGÓ LA HORA! ¡RECIBE EL VERDADERO PODER DE UN "PRÍNCIPE IMPERIAL": MIS "LLAMAS INFERNALES", NO SEREMOS MÁS QUE POLVO DE ESTRELLAS, UNLUCKACS!.- Se burló el rubio.- "Adiós, mamá. Adiós, papá. Adiós, Hilda. Adiós, Mayor Tanya Von Degurechaff, Mi Diosa. Adiós, hermanos. Adiós, Lyra. Adiós, Lemmy, Lina y también...Saturnino".- Se despidió de todos ellos, mientras que Lutza, estando volando en los Cielos, lo observó y de ahí, al estar en el Centro del Sol, soltó su última carta.- ¡"LLAMAS INFERNALES"!.- Exclamó y con ello se produjo una feroz explosión que se hizo sentir por los alrededores, haciendo caer enormes secciones de las montañas, arrasando con el suelo, dejando un extenso cráter, mientras que UnLuckacs UnIvanisevic-Loud gritaba del terror al ser evaporado, por completo, por aquel ataque.- 

Hacia el Sur, por donde el grupo había conseguido ponerse a salvo, allí lo pudieron: Un gran resplandor brillaba desde lejos, donde la figura de un gran Guerrero caía con honores al dar su vida por los que amaba: 

Su nombre era Lúckacs Ivanisevic-Loud, el "Príncipe Imperial", quien era sumamente orgulloso.

[Les traigo este nuevo capítulo y con, lamentablemente, dos nuevas bajas. Las cosas se han puesto muy emotivas desde hace varios capítulos y con este en homenaje a "Saint Seiya: Saga de Asgard", "Contraatacan", "Saga de Hades" con el sacrificio de Kanon de Géminis, "Armagedón" y "Warhammer 40K".

Pero, nos encontramos en la recta final: ¿Qué sucederá de ahora en adelante? ¿Lo lograrán? ¿Podrán alcanzar el Santuario?. Estará muy vigilado y lleno de enemigos para ya veremos más adelante.

Mando saludos y agradecimientos para MoisesMorocoima, eltíorob95, MrR199,shadowbellatrix y los demás seguidores.

Cuídense y buen inicio de día Martes, Camaradas.].