Capítulo II:

La vida y actividad en la Ciudad de Bonesborough no parecía verse perjudicada con la decisión que el Emperador Belos había decretado. Los civiles, aquellas criaturas mágicas deambulaban por sus calles, los comercios estaban abiertos, en los parques y plazas se hallaban las familias junto a sus hijos y todo estaba calmado. Pero eso era el "Preludio" a la "tormenta" que se estaba por desatar en esos momentos sobre la localidad. Sobre las colinas que daban una esplendorosa vista sobre toda la Ciudad, uno de esos monstruos se quedó pasmado al ver marchar a los Ejércitos del Emperador Belos, entre ellos a la "Guardia Imperial" y el "Aquelarre" del mismo personaje. Se puso de pie, miró ante esa "masa" que iba hacia ellos y fue para ver qué pasaba. 

No tuvo tiempo, uno de los "Guardias Imperiales" le dio un golpe muy fuerte en el abdomen a aquel monstruo, el cual cayó al piso sin aire en sus pulmones, agarrándose aquella zona lastimada y soportando el ardor de aquella lanza que casi lo atravesaba. 

- Llévenlo a la prisión.- Ordenó el Comandante de aquel Ejército, uno de los tantos que había allí y de ahí lo apresaron como si fuera un criminal.

https://youtu.be/rQRCYR-HCTA

En un abrir y cerrar de ojos, las tropas del Emperador Belos descendieron sobre la Ciudad de Bonesborough, tomando por sorpresa a los desprevenidos civiles, quienes, al principio, creyeron que se trataba de un desfile, que el propio Mandatario se encontraría allí para saludarlos y ver las "Escuelas de Magia", pero todo eso cambió cuando el Comandante Supremo de los Ejércitos se subió arriba de una pequeña tarima, mientras que sus efectivos agarraban a todos los que estuvieran allí fuera, muchos huían hacia sus hogares, quedándose allí encerrados. Los que permanecían en las calles eran detenidos, puestos contra la pared, intentando defender sus derechos pero la fuerza de esas tropas era indescriptible, parecían movidos por el odio y otros deseos. 

Fue entonces que el Comandante Supremo de los Ejércitos comenzó a hablar, desenrollando un "Pergamino" con unas cintas doradas y en donde podía verse el símbolo imperial en su sello. 

- ¡Por órdenes del Emperador Belos, se ha declarado el "Estado de Excepción" y el "Toque de Queda" para todos aquellos rebeldes implicados en el ataque contra Su Excelencia meses atrás. Los civiles solo podrán salir de sus casas para ir y venir dentro de la Ciudad, nadie podrá salir ni tampoco entrar. Los pueblos y aldeas también quedan bajo la vigilancia de los Ejércitos y las "Escuelas de Magia" intervenidas por su complicidad hacia los que practican "Magia Salvaje". Todo aquel que lleve a cabo este vil y desobediente acto contra las órdenes del Emperador, será detenido y condenado a muerte por traición a la Corona Imperial.- Anunciaba aquel sujeto, mientras que los carretas eran llenadas hasta el tope con cientos de prisioneros, las paredes eran cubiertas por cárteles de "Se busca" para ciertos "traidores" y otros Batallones se dirigían hacia las "Escuelas de Magia" con el objetivo de detener a alumnos y Directores.

Dentro de aquellos institutos educativos, las tropas de Belos revolvían las aulas, lanzaban los escritorios por las ventanas y los incendiaban, así como también confiscaban los libros y estandartes de los "Aquelarres". El propio Director Bump veía el daño que su Escuela estaba sufriendo ante sus propios ojos y más cuando oyó gritos que venían desde el interior de las aulas, por lo que fue corriendo para cerciorarse de que todo estuviera bien. Llegó hasta allí y con horror contempló como sus estudiantes estaban siendo apresados, aunque no todos, ya que varios estaban ejerciendo una feroz resistencia.

- ¡¿Se puede saber qué están haciendo?!.- Preguntó el Director, quien caminó hacia un grupo de "Guardias Imperiales".

- No es de su incumbencia, ahora retírese, Señor Bump, ya mismo.- Le ordenó uno de los Capitanes, mientras que apresaban a una de las estudiantes pero el hombre no lo iba a tolerar.

- Están en mi Escuela, no tienen derecho ni tampoco una orden para venir y arrasar con todo lo que el Emperador Belos nos ha dado.- Les advirtió con severidad.- Ahora, se me retiran o ya mismo hablaré con Su Excelencia.

- El Emperador Belos ha dado la orden de intervenir en esta y todas las Escuelas de Magia que puedan resultar ser traidoras y rebeldes a la causa de Su Excelencia.- Habló una voz gélida y detrás suyo emergió el Guardián Wrath, aquel enorme y terrible personaje que encerraba a todos aquellos diferentes, caminó hacia el propio Bump y éste quedó pequeño ante su tamaño.- ¿Acaso oculta algo, Director?.- Preguntó y con esos ojos tan fríos se le quedó mirando.

- Yo no oculto nada, pero están destruyendo propiedad escolar y suelten a mis estudiantes. No tienen ningún derecho aquí.- Les advirtió pero fue puesto bajo custodia junto a todos los demás.

- Ya veremos quién termina cediendo cuando comiencen los interrogatorios, ahora, llévense a esta porquería de aquí.- Ordenó Wrath a los Soldados y éstos respondieron al pie de la letra.

Persecuciones, detenciones, no parecía haber un orden fijo, todo era un caos, la gente de las "Islas Hirvientes" se encerraban en sus casas, otros huían, como podían, de las zonas urbanas hasta los Bosques y otros lograban irse en botes hacia el Mar. Un verdadero éxodo se estaba viviendo en aquellas tierras, todo ante la fría mirada de indiferencia de Belos hacia sus Súbditos. No le importaba que estuvieran sufriendo, que gritaran y patalearan mientras que sus tropas se los llevaban hacia las cárceles para que empezaran a hablar. Él tenía el poder, nadie se lo podía destruir ni arrebatar, sus Aliados estaban en lo cierto con respecto a que tenía que dar un buen "castigo" hacia todos aquellos que estaban unidos y trabajaban "secretamente" para la Bruja Clawthorne...Clawthorne, ese apellido, esa mujer, las veces que intentó, por medio de sus Agentes, para que cediera y se uniera al "Aquelarre del Emperador" pero ésta lograba escaparse y encima burlarse de él en su cara. Ahora no iba a tener ninguna oportunidad para escapar de allí.

En medio de las calles, los "Guardias Imperiales" colocaban carteles de "Se busca" por todas las paredes de los edificios, cerrando las plazas y el Mercado para todos aquellos que estuvieran desobedeciendo el "Toque de Queda". Una figura encapuchada se movía por allí, silenciosa, ágil, sin ningún problema hasta que se ocultó en un callejón, uno de los tantos que había por allí. Oscuridad, protección, una buena forma de esquivar a aquellos enemigos, aún empleando su Magia, pero si lo hacía, ésta podía quedar atrapada por los rivales que patrullaban el lugar. Estaba por estirar un poco más su mano hacia uno de los carteles de "Se busca" pero tuvo que retroceder al ver que un grupo de enemigos marchaba por allí. Una vez que se fueron, pudo arrebatar aquel papel, llamando la atención de uno de los Soldados pero éste no tuvo tiempo para ver lo que ocurría del todo, ya que sus compañeros lo llamaron para que volviera a la formación.

Un pequeño "Haz de Luz" apareció flotando ante su rostro, revelando a una chica de piel morena y ojos marrones, la cual observó lo que el cartel decía: "Se buscan. Vivas o muertas a las Brujas Salvajes Luz Noceda y Eda Clawthorne por insurrección y uso irresponsable de la Magia. Todo aquel que las haya visto, informe de inmediato al "Aquelarre del Emperador" inmediatamente". Se quedó sin palabras ante aquel momento de tensión, sentía una gran combinación de emociones: Miedo, angustia y furia, ¿cómo podían hacerle esto?. De golpe, una explosión mágica tomó por sorpresa a la chica, quien se giró y a una reconocida joven de cabello verde y ojos dorados. Un par de "Guardias Imperiales" salieron volando y se estrellaron contra la pared de unos edificios, las cuales se resquebrajaron y cayeron nubes de polvo desde su interior. Otro intentó ponerle las manos encima a la muchacha, pero ésta se defendió e invocó un grupo de "Abominables" que comenzaron a atacar a los enemigos, dándoles una buena paliza.

La morena se acercó un poco y la reconoció en el acto.

- Amity...- Dijo al verla y estaba a punto de ir a auxiliarla pero, repentinamente, una fuerza mucha más siniestra la detuvo, poniéndola de rodillas, a pesar de la feroz resistencia que estaba ofreciendo.- ¡No!.- Pegó un grito, uno que intentó mantener por lo bajo de los decibeles para no ser escuchada. Un grupo de miembros del "Aquelarre del Emperador" la tenía contra el piso, la chica alzó una mano y uno de ellos salió volando por los aires, otros dos se quedaron inconscientes por el fuego golpe que recibieron al estrellarse los unos contra los otros pero más vinieron en auxilio de sus Camaradas, inmovilizando a la Bruja al 100%. Con sus últimas fuerzas, la peli verde giró sus ojos hacia el callejón y sus labios emitieron un "mensaje silencioso", uno que solo la propia morena pudo descifrar, con lágrimas en los ojos.

No pudo hacer nada, aquellos miembros de Élite la tenían atrapada, se había defendido como una verdadera Bruja, pero éstos habían logrado superar aquellas defensas infranqueables y de ahí proceder con tomarla prisionera. Uno de ellos la alzó con fuerza, llevando a que apretara los dientes pero no pensaba en gritar o pedir clemencia, ella era una Blight y no se iba a dejar humillar por esa gente. Otro de los integrantes se le acercó y extrajo un pergamino que tenía las imágenes de las fugitivas impresas.

- Al parecer es mi día de suerte: Tenemos a una de las cómplices de las "Brujas Salvajes". Así que, Mi Estimada Amity Blight, dinos en dónde se ocultan y tienes mi palabra, junto a la del Emperador Belos, que te dejaremos ir sin ningún problema.- Le ofreció aquel carcelero la oportunidad de delatar a esas personas pero ella le escupió en la cara.

- Púdrete y aunque me lo ofrecieran, jamás lo haría.- Se negó ella, cosa que llevó a que el otro se quitara aquel escupitajo de su rostro con un pañuelo y tomara una postura mucho más fría.- 

- Estás condenando los logros y el legado de tu familia, Señorita Blight, ¿por qué lo haces?.- Quiso saber el sujeto pero ella no respondió.- Muy bien, si así lo quieres: Llévenla para los calabozos en la "Escuela Hexside" junto a los demás, allí tendrá todo el tiempo que necesite para pensarlo y tal vez ver qué clase de Futuro puede tener ella. Se lo informaré a sus padres de inmediato.- Ordenó el carcelero, sus hombres obedecieron y se la llevaron de allí con rumbo hacia ese lugar.

Luz Noceda, la Humana, aquella que fue la primer persona de su Mundo en cruzar hacia ese Universo donde existía la Magia, la que había vivido una gran cantidad de aventuras, hizo grandes amigos como Willow y Gus, entrenada por la Bruja Eda Clawthorne y que había que enfrentar la hostilidad de Amity junto a su pelea contra el Emperador Belos, ahora estaba corriendo con rumbo hacia los Bosques donde la "Casa Búho" se encontraba para informarle a la Bruja sobre lo ocurrido allí en la Ciudad.

Allí la fue a recibir aquella peli gris, quien notó que la chica estaba agitada tras haber corrido sin parar, llegando hasta la "Casa Búho". Caminó hasta quedar cara a cara con la Bruja y ésta no tuvo tiempo para hablar, ya que Luz la abrazó con fuerza, hundiendo su cabeza contra el pecho de ésta, dándole aquella "noticia" de lo que había ocurrido allí y mostrando el cartel que había logrado conseguir en las calles de la Ciudad. Mientras que ella continuaba derramando lágrimas por sus amigos capturados, Eda lo miró y adoptó un gesto serio.

- Ven, Luz, vamos adentro. Ya se nos ocurrirá un plan para salvarlos.- Le prometió la Bruja y tras ello, fueron ingresando al lugar.- Hooty, vigila la zona, si pasa algo, no dudes en dar la voz de alarma.- Le encargó a aquel Guardián de la Casa.

- Puedes confiar en mí, Eda.- Dio su palabra y éste comenzó su labor.

El plazo había terminado, los Hermanos Ivanisevic-Loud habían terminado de preparar sus cosas. En la habitación que compartían Liena y Liale, la joven rubia blanquecina se encontraba viendo qué clase de abrigos se llevaría consigo, además de su gabardina de Oficial, cosa que le costaba decidirse por cuál. Tomó dos y las examinó una por una, Liale ya estaba listo, cada quien llevaba consigo sus cosas junto la comida y agua. 

- Mmmm.- Intentaba Liena en decirse por cuál abrigo llevar consigo.

- Vamos, Hermana, no tenemos todo el día, de prisa.- Le pedía su hermano menor peli blanco-plateado a la chica, cosa que llevó a que éste hiciera el Tiempo un poco más lento con su poder, aunque fuera por unos segundos.

- Es que no sé por cuál llevar: ¿Tú qué opinas?.- Preguntó la chica, mostrándole varios de esos atuendos en sus manos.

- Llévate ambos.- Le aconsejó Liale, no sabemos qué clase de climas puede haber en esos Mundos.- Sostuvo el joven.

- ¡Buena idea!.- Aceptó ella con ternura y se los guardó.

- Chicos, ¿vieron a Lúckacs?.- Preguntó Rob, viendo que uno de los "Príncipes Imperiales" no estaba allí.

- Está afuera, fue al Cementerio para hacer un homenaje.- Respondió Natasha en esos momentos, quien ya estaba lista.- Y se llevó su valija consigo.- Añadió y de ahí se vio un cambio de escenas.

En el "Cementerio Imperial", el cual se hallaba ubicado en el Casco Antiguo de la Capital, el joven peli rubio moteado se encontraba caminando hasta llegar a un Mausoleo, en el cual se encontraban las puertas abiertas, pasando sus manos por las mismas y de ahí quedarse de pie frente a una de las tumbas que estaban al aire libre. En ella se podía verse la foto de una chica rubia con tonos plateados, sonrisa cálida y con aquellas ropas de la época junto a su fecha de nacimiento y muerte a ambos lados. Frente a la misma habían otras tumbas con velas encendidas y que estaban protegidas del viento helado que soplaba allí, por lo que llevó a que el muchacho se detuviera e hiciera la venia militar ante ese lugar, quitando un poco la nieve que había caído y depositando unas flores junto a unos pequeños inciensos que dispuso de izquierda a derecha de las mismas.

- Feliz cumpleaños, prima querida.- Dijo Lúckacs a esa persona que ya no estaba, mientras que unas lágrimas bajaban por sus ojos, cerrando los ojos y dejando pasar ese momento.- Me hubiera gustado conocerte a ti junto a Anastasia, Katyusha y Boris, lo mismo a mis abuelos y bisabuelos. Alexander, papa, está bien y no sabes cómo van las cosas aquí en Sarajevo con el "Imperio del Este", ya cumplimos nuestro primer aniversario como Gobierno y vamos avanzando, poco a poco. Él y mama siempre me contaron sobre ti y de los demás, cosa que me hace sentir orgulloso de ser un Ivanisevic.- Dijo y de ahí se quedó en silencio por unos segundos.- 

 Se quitó su gorra de plato Oficial, el viento movía sus cabellos y de ahí quedó con los ojos cerrados un buen rato.

https://youtu.be/FCCSr-_PNaE

- "Yo tenía un camarada,

no encontrarás uno mejor.

El tambor llamaba a la batalla,  él caminaba a mi lado siguiendo mi mismo paso.

Una bala vino volando:

¿es para mí o es para ti? Se lo llevó por delante.

Yace a mis pies como si fuese una parte de mí.

Quiere alcanzarme su mano

mientras estoy recargando. "No te puedo dar la mano,

¡descansa en la vida eterna, mi buen camarada!".-

Cantaba el joven ante aquella persona que ya no estaba, a viva voz como lo había hecho cuando se recibió de Teniente Primero junto a sus hermanos, en la "Academia Militar Imperial de Sarajevo". Cada palabra que salía de sus labios en recuerdo de ella y los que ya no se encontraban. Luego de terminar con su homenaje, se arrodilló y le dio un beso a una de las Rosas Escarlata, dejándola junto al ramo sobre la tumba.- Gracias por estar siempre con nosotros, Mi Querida Prima Natasha. Bautizamos a una de mis hermanas en tu honor, a pedido de papa y mama, incluso nos hemos recibido de Oficiales.- De ahí, abrió sus ojos y éstos parecían haber cambiado, por un espacio de breves segundos, a un color dorado.- Gloria y Honor para ti y todos los que protegen a este Imperio y a nuestros seres queridos.- Finalizó y tras ello, se puso de pie, al ver que sus hermanos, Rob, Saturnino, Alexander y Leni iban hacia allí.- Bueno, ya debo irme, el frente está llamando. Adiós y descansa en la Vida Eterna, Mi Querida Prima.- Se despidió Lúckacs, tomando su gorra de plato Oficial y yendo hacia donde estaban los demás.

Llegó caminando hasta se hallaban éstos, quienes lo miraron y de ahí Alexander puso sus manos en los hombros de su hijo mayor.

- Cuídate, Lúckacs y protege a tus hermanas y hermano.- Le deseó el Bosnio al muchacho rubio moteado.

- Lo haré, no nos separaremos por nada.- Dio su palabra, mientras que su padre le daba un fuerte y se unía Leni.

- Esto mismo va para ustedes, no se separen y cuídense muy bien. No sabemos qué peligros puede haber en esos Mundos.- Añadió la rubia, quien les deseó lo mejor a sus hijos.

- No te preocupes, estaremos bien. Además, los Ancestros nos protegen, lo mismo los Dioses.- Auguró Natasha Jr, la cual tomó su gorra de plato Oficial y de ahí le entregó la valija a Lúckacs, llevando a que se cayera una figura al piso.

- ¿Y esto?.- Preguntó Saturnino.- ¡Ahhhh, el Mal Encarnado!.- Gritó aterrorizado y lanzando al aire la figura, la cual fue atrapada por Lúckacs justo a tiempo

- Vuelves a tocar a una de mis "Diosas" y te reduzco a cenizas, colorado.- Le advirtió el rubio moteado con seriedad, mostrando su puño derecho resplandeciente.- Esta figura de Tanya Von Degurechaff junto a las otras las llevo conmigo a todas partes. Menos mal que no le pasó nada, fue un regalo que me hicieron mis padrinos Dimitri y Luna desde Tokyo, Japón, por mi cumpleaños y por recibirme en la "Academia Militar".- Finalizó y guardó aquel objeto en su valija.- Veamos: Están Aqua, Tanya, Rem, Ram, Raphtalia, Albedo, Shalltear Bloodfallen, Viktoriya Ivanovna Serebryakov, entre otras junto a los demás personajes. Bien, muy bien.-    

- Che, para, todavía no anotaste a Viktoriya.- Le detuvo Rob, cosa que dejó a Liena con dudas.- Y ahí está.- Apuntó hacia Natasha Jr y de ahí estalló en carcajadas, cosa que le hizo eco en Leni pero no en Alexander, quien se quedó serio y callado.- Uhhh, Bosnio, dale, reíte, no seas amargado que tienen todos ustedes una tremenda vida eterna. Dale, sonreí.- Pidió el peli negro, agarrando el rostro del peli blanco-plateado y de ahí haciendo que se le dibujara una "sonrisa", la cual volvió a postura de antes.

- Esto va a tomar un tiempo.- Dijo Saturnino, quien sacó una barra de chocolate, la cual comenzó a abrirla y de ahí no vio que cierta rubia y ojos azules se le quedaba viendo con la boca abierta, casi babeando por lo que tenía cerca. Justo cuando estaba por comerse la barra, ésta desapareció en un parpadeo.- ¿Eh?. Muy gracioso, Rob.- Murmuró el peli naranja y abrió otra pero pasó lo mismo.- ¿Qué?.-

Cuatro, cinco veces fueron sus intentos y todos terminaron en desaparición misteriosa. Fue entonces que se le ocurrió una idea: Fue abriendo poco a poco la nueva barra de chocolate, haciendo que el sonido del papel metálico que se separaba de su unión fue todo como una música lenta. Oyó pasos, se volteó y no vio a nadie. De nuevo y nada, siguió repitiendo ese mismo "procedimiento" hasta que sintió una respiración cerca suyo.

- Rob, si estás detrás de esto, más te vale que prepares el orto, porque te voy a dar una patada tan fuerte que las vas a sentir hasta dentro de tres millones de años.- Advirtió el peli naranja y de ahí vio, con horror, que su amigo no estaba haciéndole esa broma, sino de que era otra persona.

- Emmmm, Saturnino.- Se le acercó Leni al joven.- Me olvidé decirte que a ella le encantan los chocolates a más no poder y no deberías haberlos abierto cerca de ella.- Mencionó la Emperatriz rubia y frente a él, el muchacho vio que cierta se le quedaba viendo con esa mirada clavada en el envoltorio.

- Uhhh, la puta madre: La Viktoriya Serebryakov rubia y Banshee.- Dio un lamento al aire el amigo de Rob.

- ¡CHOCOLATE!.- Gritó Natasha, lanzándose encima de Saturnino, mientras que éste hacía un gran esfuerzo por proteger su preciado "tesoro".

Unos minutos después, con Saturnino todo mareado por el forcejo que tuvo que hacer para defender sus chocolates, aunque perdió unos cuantos por Natasha, quien se los estaba comiendo, Rob se estaba despidiendo de Alexander y Leni, quienes habían venido junto a una escolta de la "Caballería Imperial".

- Adiós, Rob, Saturnino, mucha suerte en su misión junto a nuestros hijos. Por favor, cuídenlos bien.- Les deseó Leni, la cual les dio un tierno abrazo.

- Tranqui, Leni, tranqui, que si yo soy buenísimo en esto.- Le tranquilizó el peli negro.

- "¿Como cuando te quisiste hacer el piola con Lola y te cagó a bifes?".- Pensó Saturnino, rodando los ojos ante ese momento.- "Bueno, perdí mis chocolates, pero tengo una "Reserva Secreta" y pensar que estaba por decirle gorda a Natasha...menos mal que no lo dije o terminaba poseído".- 

- Adiós, amigo y espero que nos volvamos a ver nuevamente. Tal y como mi querida Leni ha dicho, cuiden bien a nuestros hijos.- Dijo Alexander, dándole la mano a éste y también un abrazo.

- Igual que le dije a Leni, Bosnio, vos quedate tranquilo que estarán bien. No les pasará nada.- Juró el peli negro con tranquilidad.

- Está bien, les creo.- Depositó el peli blanco-plateado sus esperanzas.

- Lúckacs, ¿te despediste de Lyra?.- Preguntó Liale a su hermano.

- Sí, ya le envíe un regalo, prometiéndole que volveré.- Respondió el muchacho.

Y en Tokyo Japón:

- "Mi Querida y Bella Lyra: En estos momentos debo partir al frente de batalla junto a mis hermanos y unos amigos, en defensa de la libertad, la Patria y del Futuro que todos necesitamos. Juro que volveré a verte y te prometo que te llevaré a Azeroth. Cuídate, Mi Hermosa Emperatriz de cabellos castaños.

P.S: Que la idiota de Lina se quite ese estúpido mechón rebelde, solo uno puede tenerlo y ella se está burlando de mi Diosa Tanya Von Degurechaff.

P.S 1: Le he enviado unos regalos para todos ustedes".- Leía aquella chica una carta enviada por su primo desde Sarajevo y al ver la primera posdata hizo rodar los ojos ante las amenazas que siempre les hacía éste a sus hermanos. Repentinamente, una explosión se hizo sentir afuera de la casa que tenían Dimitri y Luna, llevando a que la pareja junto a sus hijos, Lewin y Leticia, sumando a Lyra, fueran a ver qué había pasado, encontrándose con Lemmy y Lina cubiertos de un color negro y humo. 

- Qué raro, eso no estaba en los regalos que envío Lúckacs.- Quedó Dimitri confundido.

Lyra alzó la carta y la leyó.

- "P.S 2: Para los dos tarados de Lemmy y Lina les he enviado unos chocolates pero estaban cubiertos con la "Muerte desde el Cielo". Espero que les haya gustado, porque son la bomba, jajajajaja. Bueno ahora sí, nos vemos y cuídate. Les envío saludos a ti, Dimitri, Luna, Lewin y Letizia. Y para tus dos hermanos, más les vale haberse conseguido, por lo menos, una carrera militar o yo mismo les sacaré lo hippie a patadas y a base de fuego".- Terminó de leer aquellas palabras y de ahí Lemmy veía que sus cejas y la bandana azul se le habían quemado.

- ¡LÚCKACS, LA PUTA QUE TE PARIÓ!.- Gritó el castaño pálido.

Volviendo a Sarajevo:

- ¡Jajajajajajajaja!.- Río el "Príncipe Imperial" por el éxito de su broma.

- Muy bien, chicos, ya es hora. Prepárense.- Pidió Rob, mientras que iba comenzando a abrir un "Portal". Éste iba desgarrando el Tejido Espacio-Tiempo, una serie de rayos emergía desde el mismo "Vacío" que succionaba el aire y llegaba a provocar todo ese desvío de poder. El peli negro no estaba sudando, se lo veía tan tranquilo, mientras que Alexander y Leni veían como aquella "Entrada" surgía y cobraba forma.- ¡Listo, andando!.- Ordenó el joven y tras ello dieron por comenzado el salto hacia los Universos.

- Cuídense, chicos.- Les desearon sus padres y con ello, el "Portal" se fue cerrando poco a poco.

Un viaje había comenzado, el momento de la verdad, por así decirlo, había dado inicio. En aquel "Túnel" Dimensional, los presentes se estaban moviendo a una gran velocidad y solo esperaban por poder hallar el momento en el que llegarían. Pronto, un "camino" se abrió ante ellos, terminando en un Mundo totalmente devastado y desconocido para gran parte de los presentes.

- ¿En dónde estamos, Rob?.- Preguntó Saturnino en esos momentos.

- Ni idea. Chicos.- Se giró hacia los hijos de Alexander y Leni.

Lúckacs observaba el Cielo y notó aquellas energías de Magia Vil que relampagueaba por los Cielos. Fue entonces que dieron una recorrida por el lugar para saber qué clase de peligros había allí, sin embargo, cuando entraron en lo que parecía ser un rascacielos de metal destruido por la lluvia ácida, no notaron que había unas extrañas criaturas de piel roja, muy hermosas pero vestidas con trajes negros y látigos, cosa que clavaron su mirada en Saturnino, al cual agarraron con fuerza.

- Ohhh, ya lo reconocí.- Dijo Lúckacs en esos momentos.

- ¡BOLUDOS, AYÚDENME!.- Rogó el amigo de Rob, mientras que era atado a una silla y comenzaban a interrogarlo a base de romance pero mostrando su cara oculta.

Unos minutos después:

- ¡AHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!.- Gritaba Saturnino, mientras que iban saliendo de aquel edificio junto a los demás hasta detenerse en una zona segura.- ¡Ah! ¡¿Pero qué mierda fue eso?!.- Preguntó, mientras que Lúckacs estaba tranquilo y mirándolo neutralmente.

- Esas eran las Súcubos, Agentes de Sargeras El Titán Caído, Líder de la "Legión Ardiente". Muy hermosas pero se encargan de interrogar a sus víctimas descubriendo sus temores ocultos para así alimentarse de sus miedos y darles un amor siniestro.- Respondió con calma el muchacho.

- ¡Se debería llamarlas acosadoras sexuales de porquería: Me ataron a una silla y me dieron unos arrimones bien golosos!.- Exclamó el peli naranja, revelando aquella información.

- Ah, ya cálmate muy deseado, ¿no?. Ya vámonos.- Pidió el "Príncipe Imperial" sin darle importancia al asunto.

- ¡No me jodas, Lúckacs, me violaron!.- Se mostró indignado el amigo de Rob.

Una vez que volvieron al "Portal", dieron por comenzado el viaje de regreso. Tal vez les llevaría su tiempo en llegar hasta su destino, evitando no terminar en otro de esos Mundos arrasados por la "Legión Ardiente", desde ese Universo. El viaje se redobló y no pararon, tenían que llegar al primer Mundo que necesitaba su ayuda, aunque el tema iba a ser cómo estaría. En un momento dado, cuando salieron del "Túnel", éstos terminaron en un sitio donde había una extensa playa de arenas blancas, un bello océano pero lo raro era que no había mucha presencia de civiles por los alrededores.

- Chicos, ¿en dónde estamos?.- Preguntó Liena.

- Uhh, otra vez me equivoqué, perdón, estamos en...- Iba a decir Rob cuando una misteriosa sombra con una guadaña iba hacia ellos, listo para atacar. 

- ¡Enemigo a las 11! ¡Al ataque, Hermanos!.- Llamó Natasha Jr a las armas y se lanzaron sobre el enemigo.

- ¡Hola, bienvenidos a "Ciudad..."!.- Dijo aquella Gema, la cual fue atacada repetidas veces.

- ¡MIS GRITOS LLEVAN A LA MUERTE AL ENEMIGO!.- Exclamó Natasha Jr, provocando que la "rival" perdiera su equilibrio.

- ¡Al ataque, Mis Mareas!.- Atacó Liena.

- ¡El Tiempo no es nuestro enemigo, solo debes tenerlo ordenado!.- Bramó Liale y paralizó a la rival.

- ¡"MUERTE DESDE EL CIELO"!.- Fue el ataque Lúckacs envío y cayeron sobre la Gema, quien terminó viendo como le alcanzaba.

Hubo  una explosión y allí vieron llegar a cierto joven peli negro, quien se arrodilló ante la que acababa de perder su forma física y solo quedaba su Gema sobre el piso.

- ¡¿Por qué lo hicieron?!.- Preguntó llorando.- ¡¿Acaso no sabían de que ella era amistosa?!.-

- Así es la guerra.- Respondió Lúckacs.- Si un enemigo viene y te ataca, no te quedas sentado y esperas con resolverlo hablando. Un grave error que lleva a la caída y destrucción del Futuro. Perdonar a los enemigos, a los genocidas, eso es algo que papa nos enseñó.- Le espetó con frialdad.

- No, no existen motivos para pelear, está mal. Las causas por las que ustedes pelean son erradas, no saben lo que hacen. Entiendan, están sufriendo, no tienen por qué hacerlo.- Intentó Steven en convencerlos; cosa que terminó provocando que Lúckacs sintiera como un tic nervioso se apoderaba de su ojo derecho, dirigiendo su mirada hacia el joven y sus amigas.-

- ¿En serio?.- Preguntó el rubio moteado con una sonrisa un tanto sádica en su rostro.- Ya sacaste boleto.- Sentenció, haciéndose sonar los nudillos.

https://youtu.be/Fr93X8856Vg

- Uhhh, esto se va a poner feo y mucho.- Dijo Rob, sacando una silla de playa y unas cervezas junto a los "Doritos".

En aquel momento, el "Príncipe Imperial" agarró a Steven y comenzó a darle repetidas bofetadas en el rostro, haciendo que se comenzara a poner rojo, mientras que éste intentaba detenerlo.

- ¡¿A quién mierda le dices de que no hay motivos para pelear?! ¡Por supuesto que sí existen las causas para combatir y no, no es querer dominar países y robarles sus recursos. Las verdaderas causas son defender a la Patria, la familia, los amigos, las personas que amas, los enfermos, débiles, huérfanos, pobres, enseñarles de que hay un Futuro. La "Doctrina Escarlata"!.- Bramaba el joven rubio moteado, dándole su merecido.

- ¡Lúckacs, lo vas a matar!.- Intentó Rob en frenarlo pero el otro no iba a detenerse.- ¡Para, solo tiene 16 años!.

- ¡Yo a los 16 años ya estaba recibido en la "Academia Militar Imperial" y con el rango de Teniente Primero!.- Respondió el "Príncipe Imperial" y lo tiró al piso, dándole una patada en el estómago.- Qué patético que eres, este alterno sí que da vergüenza. No eres como el verdadero Steven Universe que mi padre conoce, aquel chico SÍ lucha junto a sus amigas por la Tierra, a pesar de que tiene aires de paz como su madre, sabe de que para preservarla hay que estar dispuesto a luchar.- Le dijo el joven con frialdad y tras terminar con su trabajo, les dirigió una mirada a todos ellos.- Llorón y la próxima vez que digas que no existen motivos para pelear, volveré para hacerte pedazos.- Finalizó y se retiró del lugar, escupiéndole al peli negro.- Gordo mamón. Eres una vergüenza, igual que los progres que se aprovechan de los que, supuestamente, dicen proteger y los usan como si fueran marionetas. Si mueren o les pasa algo, los dejan allí tirados porque "cumplieron su papel". Y pelear por la Justicia no es Pecado, porque habrán enemigos que no entenderán las palabras. Y otra cosa: El amor también duele y no puedes convencer a alguien que, primero, desea también tener su vida en el Futuro.

Una vez cumplida su "labor", se retiró de allí.

- Lúckacs, a este Universo no vas a poder volver.- Le dijo Rob tras haber sido testigo de eso.

- Las cosas son como son, Rob: En la vida no te podrás llevar bien con todo el Mundo, siempre habrá gente que te va a querer y otras buscarán hacerte pedazos. Las luchas tampoco pueden desaparecer, porque si un enemigo viene y te quiere expulsar de tu casa, ¿tú lo dejarías?. No, yo no. No existen las soluciones con palabras todo el tiempo y cuando los recursos diplomáticos se agoten, se tendrá que ir a la guerra.- Dejó aquel reflejo filosófico suyo y de ahí se metieron al "Portal".-

- Bueno, sigamos, porque parece que quedó medio muerto.- Pidió Liena con temor.

- Nah, solo le di unas cuantas patadas en el estómago. Se recuperará pronto.- Le tranquilizó su hermano y partieron de allí, mientras que Steven alterno era tratado por las heridas recibidas.- Tiene que aprender que, no todo el tiempo, se podrá solucionar los problemas con pedir perdón y dulces palabras, un día, esa misma gente que tanto dice que "entendió", lo apuñalará por la espalda.- Sentenció fríamente.- 

- Todo en esta vida debe tener un orden, tal y como papa dijo. Si la postura de esa postura es que no existe el Mal, está muy equivocado: Éste mismo existe, no importa cuán grande sea tu "Utopía", la misma no existirá realmente, nunca fueron verdaderas. No existiría el Bien si no hubiera Mal, no existiría la Paz si no hubiera Guerra, la Oscuridad no estaría sin la Luz. Es así como el Mundo funciona, los errores se seguirán cometiendo, somos Humanos, incluso los mismos Dioses lo han hecho, igual que cuando Zeus expulsó al Hombre del Olimpo, enviando a Pandora y la "Caja" que trajo dolor, pestes, guerras y enfermedades, poniendo fin a la "Edad de Oro" que tenían en la Mitología Griega y que luego Prometeo robó el "Fuego Sagrado" para que el Hombre pudiera cocinar sus alimentos, siendo castigado por esa blasfemia.- Añadió Natasha, la cual estaba en lo correcto sobre sus palabras.- 

- Bueno, chicos.- les anunció Rob a los presentes, indicando de que estaban llegando al final del camino. Sobre aquel "Túnel", una serie de líneas violeta aparecieron y una densa nube de color lila los envolvió, terminando por aparecer fuera del "Portal", emergiendo en una Ciudad cuyos Cielos, que antes estaban despejados, ahora se hallaban cubiertos por una densa capa de nubes grises y plomo, un frío muy denso, uno que calaba hondo en los huesos, se hizo presente, llevando a que se pusieran en alerta ante lo que pudiera ocurrir. Los edificios, muchos de ellos estaban empapelados con carteles de "Se busca", las calles desiertas, ni una sola alma, todo se encontraba tan estático, quieto.

Liena se acercó hacia Rob y Saturnino, quienes asentían con la cabeza.

- ¿En dónde estamos?.- Preguntó la rubia blanquecina.

- Esto, chicos, es la Ciudad de Bonesborough, las "Islas Hirvientes"...Solo espero que no hayamos llegado tarde.- Respondió Rob ante esa pregunta y comenzaron a avanzar por la desértica urbe.

[Antes que nada, sobre la parte de "Steven Universe: Future", es solo una broma, un poco de comedia, soy fan de la serie pero con la última temporada ("Future") no me dejó muy convencido, sobre todo cómo flanderizaron, en mi opinión, a Steven (y que muchos ya deben saber de los memes del año pasado de "Gordo Mamón"). Pero esto, vuelvo a decir, son momentos de comedia, nada más.

Por otro lado, el grupo ha llegado a la Ciudad de Bonesborough pero no se encuentra nadie por las calles. ¿Qué pasará? ¿Habrán llegado tarde?. No se lo vayan a perder.

Mando saludos y agradecimientos para eltíorob95 y los demás seguidores. Cuídense y nos estamos viendo en el próximo capítulo. 

Buen fin de semana de mi parte

P.S: La referencia a la escena de Natasha Jr y Saturnino por los chocolates:]

https://youtu.be/XuBV0dlQmig