La advertencia de Vegeta
Zaiko había pasado varios días pensando en el por qué de su reacción extraña. La banda del conejo parlante se había ido sin más que decir y la gente del pueblo le dio las gracias pero la coincidencia de que todos conocían a su padre le estaba generando bastantes dudas. La mujer Suno, sin embargo, se le hacía familiar por lo que no dudó de sus intenciones en ningún momento con respecto a darle las gracias. Era raro, pero por primera vez en muchos años sentía que estaba siendo agradecido de corazón, con sinceridad.
Ahora mismo Zaiko se encontraba en una casa en el bosque cercano a esa aldea. ¿Como la había conseguido? Más allá de ser un guerrero en extremo poderoso el era también un semidiós hijo de la Kaioshin más poderosa (gracias a su longevidad y los años de entrenamiento con él) por lo que crear una casa de para el no fue difícil. Era un diseño sencillo de madera pero estaba decorado muy finamente, viejas mañanas divinas tal vez. La casa estaba ubicada en lo profundo del bosque; sea por ser quisquilloso o detallista, Zaiko tenía un camino de tierra con decoración de piedra a los costados que guiaban a su hogar.
La casa no era grande precisamente, pero sí era muy elegante; al llegar se podía subir por unas escalera a una gran puerta doble de madera, con un unas sillas en la entrada para sentarse y disfrutar la vista del bosque.
Por dentro se entraba a primero a una sala con una mesa para máximo 4 personas para poder sentarse, cerca a su derecha habían unas escaleras que subían y daban un giro pegándose a la pared para seguir subiendo y justo debajo de esa parte de la escalera estaba la cocina. Del otro lado había un refrigerador, una mesa con cajones y sobre dicha mesa había una lámpara (cabe aclarar otra vez que la casa parecía adornada para un rey, por más que su tamaño no lo fuera). El baño estaba justo al lado de la concina pero se entraba por una puerta a la derecha apenas se entraba a la casa.
Siguiendo a la mesa había un arco para cambiar de sala, una donde había una chimenea en la esquina y sobre ellas dos fotos, pero las dos estaban boca abajo.
Junto a la chimenea había una ventana muy grande justo por encima de un sofá, en frente de dicho sofá había otro más y ambos estaban apuntando a otra pequeña televisión; la otra parte de la sala tenía una repisa llena de objetos extraños probablemente de procedencia divina (lo más destacado eran unos conjuntos de color rojo de los Pothara) y junto a estas había un traje de Kaioshin colgado con una palabra escrita en rojo pero en un lenguaje distinto. Por último, el cuarto de arriba de la sala de la cocina era la habitación de Zaiko, tenía una cama doble muy grande con mesas a sus lados y un ventanal detrás y a los costados también. Apenas se subía, a la derecha de la escalera había una puerta con un baño y justo al frente a la izquierda había un armario.
El hijo de Goku estaba en su casa en este momento, más concretamente en una silla al lado de la chimenea mientras tomaba una taza de té. La nieve caía suavemente en las ventanas de la casa, haciendo que el fuego resalte en esa mañana de invierno.
Zaiko apoyó su taza de té en una mesa de vidrio que había entre los dos sofás.
Zaiko: .... Mi cabeza... sigue dando vueltas...- dijo mientras miraba el fuego.
El semidiós levantó su vista hacia la ventana, donde su cara se reflejó mezclando la nieve con su cabello blanco.
Algo le estaba pasando desde hace días. Cada vez que miraba su reflejo siempre veía la misma cara...la de su padre, pero la suya también.... su padre transformado en super saiyajin 9 tal vez.
Zaiko: Solo fuimos parecidos hasta que te convertiste en un monstruo... ¿Por qué veo tu reflejo, eh, papá?
Zaiko siguió mirando la cara de su padre. Sentía algo extraño cuando veía eso; no era una sensación de rabia, ira o enojo si no más bien una sensación que le provocaba molestias en el pecho, algo que le pasaba solo cuando veía el reflejo de su padre o escuchaba hablar de él.
Esa sensación fue la misma que hizo desaparecer sus instintos de lucha cuando salvó a la gente de esa aldea.
Zaiko: Es raro pero... por más que solo nos hayamos visto en dos ocasiones... te... ¿extraño? ¿Esa es la palabra?.... No sé que es lo que me pasa pero...... - Zaiko dejó su reflexión de lado cuando se percató de algo, o de alguien. -Cht.... estaba teniendo un buen día...
Zaiko pudo ver a través de las ventanas, de las capas de nieve y de la sombra de los árboles en aquella mañana nevada a quien debía vigilarlo, Alí estaba de vuelta y se percató de que Zaiko la notó.
La mujer de la dimensión Amazon se pegó a la ventana de Zaiko y "tocó para que la dejara pasar". El saiyajin no quería saber nada de ella, pero tenía que dejarla pasar de un modo u otro porque estaba bajo el efecto de su magia.
Alí: Vaya casa que tienes ¿Eh?- comentó mientras entraba sacudiendo la nieve de su ropa.
Zaiko: ..... ¿Por qué estás aquí?
Alí: .... Que manera de ser maleducado, aprende a tratar a las damas con más delicadez.
Zaiko: En este momento no estoy de ánimo para juegos de educación. ¿Por qué viniste a buscarme Alí?
Alí sólo suspiró con frustración y resignación al ver que ese chico nunca la iba a tratar de forma educada. Zaiko solo estaba esperando una respuesta impacientemente y era mejor que le dieran una buena razón para molestarlo.
Alí: Tenemos un... digamosole inconveniente.
Zaiko: ¿Inconveniente?
Alí: Recuerdas que te hablé de lo que estuvo pasando estos últimos tres años ¿no? Perfecto. Resulta que ahora hemos vuelto a encontrar actividad de magia oscura antigua alrededor de la tierra.
Zaiko: ¿Detectaste magia oscura alrededor de la tierra? ¿Qué significa?
Alí: Que ya hay amenazas cerca, y están tratando de entrar al planeta.
Zaiko: ¿Si son tan poderosos, por qué no han entrado ya?
Alí: .... Ven. Debemos hablar con Vegeta, una vez ahí podremos explicarte todo.
Zaiko estuvo a punto de protestar pero cuando quiso hacerlo Alí ya había desaparecido usando una especie de teletransportación mágica. No era que le molestara pelear con los idiotas que se atrevieran a molestarlo, pero no le hacía nada de gracia hablar con Vegeta.
Zaiko: Tsk. No tengo ganas de nada, mucho menos de hablar con Vegeta.
El hijo de Goku estuvo a punto de irse a la cocina para cocinar algo y pasar el resto del día sin que lo molesten, pero recordó que Alí le había puesto una maldición encima con la cual podían extorsionarlo, una situación que no le preocupaba, pero sí le molestaba la idea de tener que enfrentar una conversación tan fastidiosa.
Zaiko: Grr... que fastidiosa es.
Minutos después:
Zaiko estaba volando en dirección a la corporación cápsula guiándose por el ki de Alí y el de Vegeta; el ki de Trunks, Goten y la hija de Vegeta también andaban rondando por ahí. Cuando se fue acercando a la ciudad tuvo un Deja-Bu.... pudo ver claramente la imagen de su padre cuando era un niño mientras andaba buscando a Bulma hace ya décadas.
Zaiko: .... La corporación cápsula... así que la mejor amiga de papá vive aquí. Ja.. y pensar que en otros universos estuvieron casados... es un palacio.
Zaiko bajó hasta el balcón de la casa, donde ya lo esperaban Alí junto a una mujer se cabello azul y con un traje muy ajustado que se veía caro, tenía un aire de superada pero el hijo de Goku se dio cuenta de inmediato de quien era.
Alí: Al fin llegas.- dijo al verlo llegar.
Zaiko: No estoy emocionado por esto, quiero que lo tengas claro.- contestó.
Zaiko luego se volvió hacia la acompañante de Alí, quien lo miraba con unos ojos de sospecha y lo analizaba de pies a cabeza sin la más mínima discreción.
Alí: Ah, cierto. Zaiko, ella es Bulma, es la esposa de Vegeta.
Bulma: Hum....
Zaiko: .... Un placer...- saludó, pretendiendo que no la conocía.
Bulma: ..... Así que tu eres ese tal "Zaiko" ¿Eh?- preguntó con poca amabilidad.
Zaiko: ... Así es.. Son Zaiko
Bulma: -Hmph- No olvidé los problemas que causaste... en lo que que a mi respecta, no eres más que otro villano del montón, así que no te atrevas a llamarte "Son" en frente de mí, tu no tienes nada que ver con Goku. En mi opinión, creo que habría sido mejor si te quedabas muerto.
Alí se quedó con la boca abierta al ver como Bulma se le plantó así de cara a Zaiko. El hijo de Goku sabía de Bulma y esperaba algún comentario similar de la esposa de Vegeta, por más que le diera gracia o no. En circunstancias normales le habría hecho saber lo aterrador que podía ser... pero era la mejor amiga de su padre... algo le decía que no.
Zaiko: .....
El semidiós comenzó a recordar el infierno. En ese entonces no lo recordaba o veía como algo aterrador o tan horripilante.. pero ahora era más consciente del dolor que experimentó en aquel lugar.
Zaiko: ....... Créeme... yo también.
Bulma no se esperó esa respuesta, evidenciado en su cara de consternación. Eso fue suficiente para el saiyajin. Alí se adelantó para evitar que Zaiko se mandara una de las suyas y matara a alguna persona.
Alí: Bueno... mejor te llevo con Vegeta.- dijo tomándolo del hombro para guiarlo.
Zaiko: Cht, que fastidio.
Bulma le echó una última mirada sospechosa y enojada al hijo de Goku, quien se percató de dicha cara, pero ni siquiera se dignó en darse la vuelta a devolverla.
Una vez lejos de Bulma, Alí lo encaró.
Alí: Vaya.. sí que sabes.. controlar tus impulsos.
Zaiko: -Hmph- Lo único que me sorprende es que se ve muy joven para tener más de 60 años.
Alí: ¿Como sabes eso?.... Bueno bueno, no me mires así, es mera curiosidad. *suspira* Verás: Bulma usó las esferas del dragón para rejuvenecer, ella y todas las personas que conocieran a un saiyajin, dijo que era porque todos los humanos debían tenerles envidia.
Zaiko: .... Que tontería de excusa.
Alí: Jaja. Sí.. tal vez lo sea.
Ambos fueron caminando hasta una parte subterránea del edificio. Todos en la corporación cápsula lo miraban raro por obvios motivos, pero no como el resto de los humanos, seguramente porque ese lugar solía funcionar como "sede" o lo más cercano a una para los guerreros Z.
Zaiko: Entonces ¿Me dirán por qué demonios estoy aquí?
Alí: Ya te lo dije, Vegeta quiere hablar contigo. Pero viendo que no estás deseoso de conversar, te lo voy a resumir: Varios enemigos potenciados por magia oscura y antigua intentan penetrar la tierra.
Zaiko: ¿Intentan? ¿No pueden entrar? Ni que la tierra fuera tan difícil de invadir.
Alí: Mejor que te lo explique Vegeta.
Alí y Zaiko llegaron a una especie de "sala de guerra". No era muy grande, pero tenía un mapa de todo el espacio cercano a la tierra. Vegeta estaba ahí, monitoreando el aparato, mirando el mapa de brazos cruzados, únicamente moviendo su cola de saiyajin.
Vegeta: ... Al fin llegan, la próxima apurense, detesto esperar tanto para una tontería como esta.
El príncipe saiyajin dio media vuelta y se quedó mirando a los dos invitados de la corporación cápsula.
Zaiko: -Hmph- Tu esposa nos detuvo para sermonearme, mejor quéjate con ella.
Vegeta: -Hmph- Insecto.
Alí: -EJEM- Vegeta.. a lo que veníamos.
Vegeta: Sí... mejor termino con esto ahora. Verás chico.. como sabes, te permitimos vivir aquí.
Zaiko: Me tienen encarcelado.- interrumpió.
Vegeta: ¿Prefieres que te mate? Por mi no hay problema.- contestó con arrogancia. -La única razón por la que sigues vivo es porque eres el hijo de Kakarotto y el te habría dado otra chance, no pases de listo.
Alí: -EJEM- Vegeta, termina con esto y ya podremos seguir nuestros caminos por ahora.
Vegeta: Muy bien. Como verás chico, hay un par de idiotas tratando de entrar en la tierra.
Zaiko: ¿Por qué no entran y ya?
Vegeta: Porque Kakarotto volvió la tierra casi indestructible y le puso protección. Aún no sabemos por qué es que tu si pudiste entrar.
Zaiko: ¡¿La volvió indestructible?!
Alí: ¿Hay algo malo?
Vegeta: Es precisamente por eso que te llamé. Tu madre era una Kaioshin, ¿Sabes si habrá consecuencias para el universo con este escudo?
Zaiko cambio su semblante totalmente cuando escuchó que hablaron de su madre. Vegeta y Alí percibieron una alteración en su ki, una de ira.
El semidiós respiró profundo y trató de conservar la calma, por difícil que fuera.
Zaiko: No muchas.. pero eso vuelve a la Tierra un blanco más llamativo. ¿Solo me llamaste para esto?
Vegeta: No. Por más que me pese, debo advertirte de esto: Los sujetos que están atacando la tierra son enemigos del pasado, pero sus poderes aumentaron drásticamente. Que Kakarotto te hubiese dado una oportunidad no significa que yo o los demás lo hicimos, pero Alí me convenció de advertirte de esto... si uno de estos insectos te mata, no hay vuelta atrás, no hay infierno, paraíso, mundo vacío o cualquier cosa, desaparecerás como lo hizo tu padre.
Zaiko se volvió hacia Alí, quien sólo levantó los hombros. Le extrañó ese gesto de la guardiana de la dimensión Amazon, principalmente porque el siempre la trataba como una mujer molesta e insoportable. Miró una última vez a Vegeta para decirle lo siguiente:
Zaiko: .... ¿Qué te hace creer que no los ayudaré a ellos a matarlos a ustedes?
Vegeta: Alí me contó sobre lo que hicieron en el nido del tiempo, sea lo que sea que haya pasado, ella cree que algo te tocó la fibra sensible. Pero también sabemos que entre los dos o incluso solo yo podríamos derrotarte fácilmente.
Zaiko: ¿Tan seguro estás?
Vegeta: Estoy conectado a ti por el super saiyajin 9, se mucho más de lo que crees... se mucho de tu historia... pero tener lástima no es lo mío...
Zaiko guardó silencio. Era cierto, desde que Goku y Vegeta habían tomado su poder y potencial también podía sentir una conexión poderosa entre sus mentes. Sabía que Vegeta podría saber todo lo que planeaba.
Zaiko: Ja. Parece que traicionarlos ni siquiera es una idea que se me pueda cruzar.
Vegeta: Je. Quiero ver que lo intentes insecto.
Alí notó algo de tensión entre ambos, era obvio que no se agradaban pero era mejor terminar la discusión cuanto antes, y más cuando el ki de ambos comenzó a generar distorsiones pequeñas de realidad contenidas.
Para su suerte, se se le podía llamar así.... UNA ALARMA SONÓ POR TODA LA SALA.
Alí: ¡¿Qué?! ¿Qué está pasando?- gritó. Vegeta se volteó a ver la pantalla del mapa de la tierra.
Vegeta: Jeje... ¿Quieres que te deje en paz chico?- preguntó con soberbia. Zaiko solo apretó un poco los dientes.
Zaiko: ¿Qué quieres?
Vegeta: Juju... acaban de entrar dos presencias a la tierra... están consumidas por la energía oscura que estuvimos viendo estos últimos años....
VE A DETENERLOS... Y VERÉ SI TE DEJÓ EN PAZO
Zaiko se quedó callado. El tono y la forma de hablar de Vegeta siempre le irritaron, el sujeto se creía mejor que él, mejor que su padre, mejor que la familia más poderosa del universo..NO.. de la realidad; aún así, no tenía más opciones que obedecer.
Zaiko: Jeje... Da las gracias a la magia de Alí.. porque ya me estoy hartando de tu manera de hablarme, príncipe.
Vegeta: No quiero oír tus lloriqueos, solo ve y has algo útil.
Zaiko: .... Muy bien... pero solo quiero que recuerdes una cosa: .... El guerrero número 1 del universo sigue siendo el mismo.. si no fuera por la maguita Amazon, ya habría destrozado cada hueso de tu cuerpo... YO SOY EL GUERRERO DEFINITIVO.
EL SEMIDIÓS ELEVÓ SU KI Y SALIÓ VOLANDO DEL LABORATORIO, DEJANDO UN AGUJERO EN TODO EL EDIFICIO.
Zaiko: ¡NUNCA OLVIDES ESO, VEGETA!- Gritó para luego volar lejos de ahí.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro