Cuenta la leyenda que la Diosa Luna, a quien se le puede ser conocida bajo los nombres de Diana en la cultura griega, Artemisa en la cultura romana, pero en la cultura surcoreana a la Diosa Luna se le dio el nombre de Myeongwol, sin embargo, la leyenda de la Diosa Luna quedara para otra ocasión.

La ciencia dice que los lobos buscan un compañero para su vida una pareja para aparearse y compartir, que suelen ser monógamos, pero que a la muerte de su compañero se buscan otra pareja.

Pero al contrario de estas la leyenda cuenta que los licántropos tienen solo una pareja posible en la vida, esta, recibe el nombre de mate, que quiere decir compañero.

Esto viene acompañando a la sociedad licántropo desde el principio de los tiempos, cuando por obra de la luna reciben de ella la mitad del alma de un lobo a falta de su mitad humana, ya que, el mismo trabajo hace la luna con hombre y mujer, completando dos medias almas humanas con media alma lobuna.

A pesar de que ahora los licántropos son seres completos, se ven sumamente atraídos a buscar la otra mitad de sus almas, llegando a ser una necesidad al cumplir la mayoría de edad e impulsando a algunos a abandonar a sus familias y buscar a su mate en todos los rincones de la tierra.

Sin embargo, esta búsqueda no es fácil, algunos pueden pasar años o si son los favoritos de la Diosa al momento de nacer conocerán a su Mate, por lo que la Diosa Luna mostro piedad y les dio una pista.

Dividió a sus hijos por jerarquías, Alfas, Betas y Omegas, de esta forma seria más fácil buscar a su pareja destinada, los Omegas no pueden estar con Omegas y los Alfas no pueden estar con otro Alfas, los Betas era los favoritos ya que podían estar con otro Beta o con un Alfa o un Omega.

Pero al ver las disputas que el mundo tenia por querer tener la misma pareja que otros, la Diosa Luna buscando corregir su error concedió otro favor, para detectar a tu pareja predestinada se deben de detectar en ese ser tres aromas, los dos primeros son de conocimiento general, para poder detectar tu jerarquía, pero el tercero era única y exclusivamente para la pareja predestinada.

Pero en ese favor no fue dado para los Betas, ya que estos fueron codiciosos al no tener una sola pareja, por lo que la Diosa los "castigo" pero también los "recompenso". A diferencia de los Omegas y Alfas sean del sexo que sea, no tendría Celos, podría vivir como un "ser humano normal" pero no podría detectar ninguno de los tres aromas, pasaría desapercibido. Pero sobre todo podría tener a cualquier jerarquía de pareja.

Esa es la leyenda de la Diosa Luna y sus hijos los Licántropos, los cuales para no estar solos el resto de su vida se les concedió el regalo del alma gemela, de la persona predestinada, del Mate.

Niki estaba caminando hacia su clase de pintura, cuando un aroma que el aroma del lindo Omega del que gustaba llego a sus fosas nasales, pero antes de buscarlo con la mirada un pequeño cuerpo choco contra el suyo y junto a este unos bracitos rodearon su torso.

-Niki hyung, te atrape

Pero lo que Sunoo no supo que provoco fue que el rostro de Niki se volviera rojo y no solo el de él, sino también el de todos los estudiantes que pasaban por ese pasillo.

Porque desde que Sunoo empezó a ser notado, toda la escuela lo conocía como "OmegAegyo" o "Ddeonu", pero solo los pocos que lo conocían y había sido espectadores de su aegyo eran los que morían de ternura.

-Hola Sunoo ¿Cómo estas lindo?

-bien ahora que estoy contigo hyung

Niki se tapó el rostro e intento controlar el latir de su corazón, no podía morir tan pronto, pero Sunoo no se la dejaba tan fácil. Al final el Alfa se pudo calmar y se dio la vuelta para abrazar al Omega quien feliz lo apretó un poco más y sin poder evitarlo empezó a soltar feromonas de pura alegría, provocando que los estudiantes se contagiaran de estas y las sonrisas abundaran en ese pasillo.

-vamos a seguir con el retrato

-vamos Niki Hyung

EL japonés se separó del Omega y tomándolo de la mano empezó a caminar hacia el salón de artes, mientras que Sunoo, Sunoo no dejaba de sonreír y de dar uno que otro salto.

Sunghoon llego a su casa, había pedido permiso para faltar al club, abrió la puerta de su casa y el aroma de Jake llego a sus fosas nasales, calabaza, castañas calientes y almendras, por lo que, conteniéndose, cerró la puerta de su casa y se dirigió a la cocina de donde sirvió un vaso de agua y tomo el botiquín para sacar un paquete de supresores de doce horas, primero calmaría a Jake y cuando llegara Sunoo le daría un supresor para no incomodar a su amigo.

Dirigió sus pasos hacia el cuarto que él y su omega compartían, abrió la puerta y lo primero que vio fue a Jake rodeado aun de las sabanas, almohadas y peluches que tenían, mientras que su lindo Omega solo tenía puesta su ropa interior y una camisa suya mientras abrazaba un peluche con forma de pingüino que él había bañado con su aroma en la mañana.

Dejo el vaso y el supresor en la mesita de noche y con cuidado regreso a la cocina de donde saco un bote de helado de "Mamá es una extraterrestre" *, tomo una cuchara y regreso a donde su Omega el cual ya estaba sentado con el peluche aun entre sus brazos.

-buenos días Jake

-hola, ¿apenas llegaste?

-sí, le pedí al entrenador que no podía ir, porque el amor de mi vida se enfermo

-solo me llego el celo

-lo sé, pero sé que no te gusta estar solo, así que vine lo más rápido que pude

Jake le sonrió al menor y se hizo a un lado invitando a Sunghoon a subir a la cama, por lo que el Alfa se quitó el saco y los zapatos, se aflojo la corbata y finalmente se subió a la cama, se sentó dejando su espalda en la cabecera y con cuidado le dio el bote de helado a su Omega para después tomarlo de le cintura y colocarlo entre sus piernas.

Jake no era el típico Omega que quería sexo día y noche, si le gustaba cuando su Alfa lo tomaba, porque era lindo y delicado con él, lo apreciaba y se aseguraba de que lo disfrutara, aunque durante el celo si llegaban a tener run que otro encuentro sexual, Jake prefería ser mimado. Y lo mejor de todo era que Sunghoon respetaba y cumplía sus caprichos.

Jake y Sunghoon era la primera pareja oficial del contrario, Jake jamás se preocupó sobre tener pareja por el simple hecho de que su padre había maltratado tanto a su madre y a él junto a sus hermanos por el simple hecho de ser Omegas y Betas, por lo que el Omega tenía una imagen negativa sobre todos los Omegas.

En cambio, Sunghoon jamás busco tener pareja, su familia lo amaba y apoyaba en todos sus sueños, por lo que buscar el amor no era la meta o prioridad en su vida, pero cuando lo inscribieron a las competencias internacionales con Australia todo, literalmente todo cambio.

Jake fue a apoyar a su hermana en la competencia de patinaje, Sunghoon fue como representante juvenil de Corea del Sur, ambos se habían topado al momento de que Sunghoon iba a presentarse, aquello provoco que Sunghoon se sintiera más liviano y realizara la coreografía más perfecta que los jueces de aquel entonces pudo presenciar. En cambio, Jake sintió como el hielo de su corazón era moldeado y en vez de dañar su corazón lo protegía e incluso lo calentaba, todo eso mientras admiraba al Alfa patinar.

Después de eso, aunque Sunghoon gano la competencia decidió quedarse y aunque sus padres al principio no entendían, pero al final aceptaron, iniciando así la maravillosa historia de amor entre aquel alfa y Omega.

-te amo Sunghoon

-y yo a ti Jake... y yo a ti.

-MARATÓN 5/?-

*Helado de Baskin Robbins de leche, chocolate amargo, blanco y chocolate normal.