Summer Promises
Do Kyungsoo un niño de seis años estaba muy feliz jugando con su cubetita y pala de juguete intentando construir un castillo de arena, que ante sus ojos soñadores realmente era una gran fortaleza, pero lo cierto era que solo eran dos montoncitos de arena que tenían la forma de su cubetita y unos más pequeños que había hecho con un vasito pero era algo que lo hacía inmensamente feliz y no solo era el hecho de estar disfrutando de la playa.
Y ese no era solo el motivo de su felicidad, era el hecho de estar de vacaciones con sus padres que regularmente siempre se ocupaban de trabajo y sus vacaciones no eran divertidas porque nunca iban juntos, pero en esta ocasión fue diferente Kyungsoo había terminado el Jardín de Niños y era uno de los niños más destacados, ya podía leer cuentos y con un poco de trabajo algunos historias largas, conocía todos los números y podía hacer sumas y restas, era algo que a sus padres los ponía feliz sabían que su pequeño era inteligente y muy dedicado por lo que consideraban que en un futuro no tendrían problemas con el menor.
Las playas de Busan eran perfectas según Do Yunho y Boa su esposa ya que querían de verdad disfrutar de su tiempo juntos como pareja y con su hijo y sabían que ir a un lugar más concurrido sería difícil además que para la señora Do le traía recuerdos de su infancia y quería crear hermosos recuerdos en la infancia de su pequeño Kyungsoo.
Lo señores Do disfrutaban ver a su bebé, reían de verlo escavar un hueco al frente de su "castillo" que para Kyungsoo funcionaria como una lago que tendría cocodrilos cuidando aquel lugar de los invasores, al terminarlo tomo su cubetita para caminar a la orilla del mar, llenar su cubetita y vaciarla en el hueco que había hecho, la señora Do reía al ver a su hijo caminar apresurado con un poco de dificultad en la arena, pero aun así Kyungsoo no le molestaba al contrario se reía de aquello y en su imaginación eran sus enemigos que quería detenerlo para que no pudiera lograr su cometido y resguardar su castillos.
Al llegar a la orilla Kyungsoo sentía su corazoncito agitado de las emociones que sentía en ese momento el mar era inmenso y la espuma que se hacía al llegar el agua a la orilla mojaba sus pies provocándole cosquillas por la arena que traía, Kyungsoo se puso en cuclillas para llegar su cubetita con el agua que llegaba, sabía que no debía ir mas allá sin que alguno de sus padres estuviera a su lado.
Un sollozo saco de sus pensamientos a Kyungsoo, miro a su alrededor tratando de oír de quien veía y observo aun pequeño niño a unos cuentos centímetros de él, sentado en la arena abrazando sus piernitas, el sollozo de aquel niño se hacía más fuerte lo que hizo fruncir el entrecejo al pequeño mirando si alguien iba en busca de aquel pequeño, al notar que nadie se acercaba a él Kyungsoo miraba su cubetita y miraba al niño soltó un suspiro dejando su cubetita para acercarse al pequeño que lloraba.
- ¿te alejaste de tus papis? - Kyungsoo dijo con su voz suave y sus bracitos cruzados por detrás
El niño con cuidado levando su mirada para ver aquel pequeño frente a él que lo miraba curioso.
- ¿alguien te hizo daño? - Kyungsoo miraba atento aquel niño de piel morena, con sus naricita roja y ojos llorosos
El niño negó con su cabeza sorbiendo sus moquitos por la nariz, detalle que hizo que Kyungsoo le sonriera cálidamente.
- ¿tus papis te abandonaron porque te portaste mal? -decía Kyungsoo abriendo sus ojos exageradamente mientras se agachaba para estar frente a frente ante aquel pequeño.
El ceño de pequeño se frunció ante aquellas palabras -Mis papis me aman mucho- dijo el niño haciendo un pucherito en sus labios y voz temblorosa aun por sus llanto que se iba desvaneciendo
-entonces porque llorabas- Kyungsoo le decía mientras inconscientemente una de sus manitas limpiaba los rastros de las lágrimas del morenito
-Mis hermanas no quieren jugar conmigo-dijo agachando su mirada ante el toque que tenía aquel niño con él
Kyungsoo no lo pensó mucho, para él era divertido jugar solo pero no estaba de más tener compañía, además que quería hacer sentí bien aquel niño, que aun que se limpiaron los mocos con su bracito embarrándose más a Kyungsoo se le hizo lindo.
- ¿te gustaría jugar conmigo? - Kyungsoo dijo con una bonita sonrisa en sus labios mirando con algo de timidez
El niño dejo atrás todo rastro de llanto al escuchar aquellas palabras, asintiendo rápidamente y sonriendo ampliamente aquel niño de voz bonita y ojitos grandes que brillaban.
-Vamos, me ayudaras a terminar de construir el lago de mis castillo, meteremos cocodrilos para que nadie lo invada- decía Kyungsoo tendiéndole la mano al niño para que se levantara.
Kyungsoo no soltó no la mano del niño jalándolo detrás de él, aquel niño era unos centímetros más bajitos que él, para Kyungsoo dos o tres centímetros menos lo hacía sentir más alto. Kyungsoo fue feliz de ver que nadie había robado su cubetita durante el tiempo que había estado con aquel niño la tomo entre su manita libre. Caminaron hasta donde estaban los padres de Kyungsoo sin soltarse de la mano, cuando de repente Kyungsoo se paró haciendo que el niño chocara contra su espalda.
-Soy un mal educado- Kyungsoo dijo volteándose para quedar frente al niño que lo miraba sin entender -No presente- decía con esa sonrisa que a su mami le gustaba.
-Yo también lo soy - el niño dijo apenas audible bajando su mirada a sus pies que jugueteaban con la arena
-Me llamo Do Kyungsoo-dijo con una con un tono feliz y amable
-soy Jongin... Kim Jongin-decía el morenito levantado su mirada regalando una gran sonrisa a su nuevo amigo
-Mucho gusto Jongin-Kyungsoo dijo apretando su agarre viendo aquella sonrisa que hacía ver más lindo a Jongin.
Jongin sin previo aviso dejo un pequeño beso en la mejilla gordita de Kyungsoo haciéndolo sonroja ante la acción del pequeño.
Sin más siguieron su camino hasta donde estaba el castillo que Kyungsoo había construido, los ojos de Jongin se abrieron al ver aquel majestuoso castillo.
- ¡Wow! -Jongin miraba con ojos brillantes lo que las manos de su nuevo amigo habían hecho - Lo has hecho tu solo- decía con asombro mirando a Kyungsoo
Kyungsoo le sonrió asintiendo con su cabeza, le dio a Jongin algunos de sus juguetes que sus papis le habían comprado especialmente para que jugara en la arena.
Los padres de Kyungsoo se acercaron a donde los pequeños jugaban, ellos sabían que Kyungsoo era poco de hacer amigos sobre todo con niños que no conocía, pero les agradaba que su hijo encontrara a alguien con quien jugar.
-Mi niño, ¿nos presentas a tu amiguito? - la señora Do dijo con esa calidez con la que siempre le hablaba a su hijo
Jongin se intimido un poco al ver a los padres de su amigo, el señor Do era muy alto y eso le hacía sentir aún más pequeño, la señora Do era mucho más bajita que su esposo pero aun así para Jongin era alta, Kyungsoo se levantó rápidamente para tirarse a los brazos de su mamá quien felizmente lo capturo mientras le llenaba sus cachetitos de besitos logrando que su pequeño riera ante aquello, Jongin lo miro con ojitos brillantes la risa de Kyungsoo era muy bonita.
-Y bien jovencito, quien es tu nuevo amigo- el señor Do dijo pellizcando una de las mejillas de su hijo
- ¡Papi! No hagas eso- Kyungsoo dijo avergonzado tratando que su mami lo bajara
Boa bajo a su hijo quien camino a donde estaba Jongin, lo tomo de la mano casi lo arrastro hasta donde estaban sus padres.
-Papi, mami... él es Jongin - Kyungsoo dijo entusiasmado dándole paso al niño que estaba prácticamente escondido detrás de él.
-Mucho gusto Jongin, yo soy el Do Yunho y ella es mi esposa Do Boa- el papá de Kyungsoo decía con tono amable extendido su mano para que el pequeño la tomara.
Los ojos de Jongin se abrieron al ver la diferencia de su pequeña mano con la del papá de su amigo.
-Mucho gusto señor Do-dijo tímidamente Jongin
- ¿Cuántos años tienes jovencito? - Boa pregunto con amabilidad al pequeño niño
-cinco años señora Do-Jongin dijo con timidez
- ¡Jonginie! -Kyungsoo lo abrazo entusiasmado -de ahora en adelante cuidare de ti -decía feliz
-Eres un niño muy educado para tu edad Jongin- el señor Do decía con una gran sonrisa al ver la reacción de su pequeño.
Jongin se había puesto rojo ante la reacción de su amigo y las palabras del papá de este, y no había duda los padres de Jongin eran personas que lo habían educado bien a su pequeño. Ambos adultos dejaron a los niños seguir jugando, aquel niño les había caído muy bien y advirtieron a Kyungsoo que al ser un año más chico que él cuidara a Jongin y no dejara que le pasara nada a lo que Kyungsoo aceptó gustoso.
-Kyungsoo...-Jongin dijo tímidamente capturando la atención del niño - ya que ahora somos amigos... puedo llamarte Hyung- el moreno miraba atentamente la reacción del otro pequeño
Kyungsoo lo abrazo de nuevo con más entusiasmo -Jonginie... puedes decirme como tú quieras, ahora somos los mejores amigos-Kyungsoo dijo felizmente.
Las horas jugando habían pasado que no se habían dado cuenta hasta que el estómago de Jongin empezó hacer ruiditos y avergonzado cubrió su pancita para evitar que se escuchara más, pero termino riendo fuerte cuando el estómago de Kyungsoo también empezó hacer ruidos, Kyungsoo lo tomo de la mano para ir a donde estaban sus padres y les dieran algo de comer.
La señora Do había puesto una manta que habían usado escasamente en algunos picnic improvisados que hacían algunos fines de semana cuando lograban escaparse de su trabajo, había puesto tazones de frutas, sándwiches y leche de sabor para los niños.
Los niños comían, mientras escuchaban a los señores Do platicaban cosas de adultos según palabras de Kyungsoo, Jongin se sentía feliz de haber conocido aquel niño de piel blanca, mejillas gorditas y unos ojos un poquito más grandes que los suyos, sentía que Kyungsoo era como su salvador, ya que otros niños que lo habían visto llorar solo se habían burlado de él, en cambio Kyungsoo había sido amable y lo había invitado a jugar, lo que hizo que su corazón se sintiera feliz dentro de su pechito.
Una voz llamando a Jongin a lo lejos hizo que los señores Do y los niños miraran por dónde venían aquellos gritos, cuando Jongin vio que era su Madre se levantó para gritarle de vuelta y viera donde estaba, cuando su madre logro escucharlo y verlo camino hasta donde se encontraba su pequeño, cuando Jongin la vio más cerca corrió para ser atrapado en sus brazos.
-Mi amor, donde estabas tu padre está muy asustado cuando tus hermanas llegaron sin ti- la señora Kim abrazaba y llenaba de besos la carita del morenito
-Mami... basta- Jongin decía tratando de evitar el excesivo cariño de su madre
Su madre lo miro desconcertada, su pequeño bebé nunca se quejaba cuando lo mimaba.
-mami, Soosie Hyung nos está mirando-decía revolviéndose en los brazos de su madre para que lo bajara.
- ¿Soosie? - la señora Kim miraba a donde los ojitos de su pequeño observaban, lo bajo con curiosidad.
-ven mami, tengo que presentarse a Soosie Hyung y a sus papis- Jongin había tomado la mano de su madre y empezó a jalarla para que caminara y pudiera conocer a su nuevo amigo.
-Bebé espera tenemos que avisarle a tu padre que estas bien- la señora Kim miraba atrás buscando a su esposo, logrando verlo agito su mano para que la viera y fuera a donde estaban
- ¡Mami! Apúrate tienes que conocerlo, él es muy amable y tiene unos ojitos muy bonito, grandes pero son muy brillantes- Jongin habla mientras llevaba casi arrastras a su madre quien no pudo evitar reír ante las palabras de su pequeño.
Al llegar hasta donde se encontraba aquellas personas que su hijo quería que conociera los ojos de la señora Kim se abrieron con gran sorpresa.
- ¿Boa? -dijo la señora Kim sin poder creerlo
- ¿Yoona?... No puedo creerlo - Boa a corto la distancia abrazando emotiva a su vieja amiga.
-Boa no puedo creerlo, cuantos años sin verte -Yoona decía entusiasmada abrazando a la que había sido su mejor amiga desde la infancia hasta que terminaron sus estudios y Boda tuvo que irse a Seúl dejando atrás Busan y a sus viejos amigos.
Habían pasado muchos años desde que se vieron por última vez en la boda de Yoona y desde entonces habían perdido comunicación.
-Así que este pequeño caballerito es tu hijo - Boa dijo mientras soltaba a su amiga y miraba al pequeño que las miraba con confusión.
-Él es mi pequeño príncipe, el menor y único niño de los tres-Yoona dijo orgullosa de sus hijos.
-y supongo ese preciso es Soosie- Yoona dijo agachándose a la altura de Kyungsoo para acariciar su mejilla.
Jongin enrojeció al escuchar a su madre decir el nombre cariñoso que él había pensado para su hyung, Jongin iba a esconderse detrás su madre cuando Kyungsoo lo tomó se la mano con una gran sonrisa.
-vamos a seguir jugando Jonginie-Kyungsoo hizo caminar de nuevo al morenito detrás de él.
Yoona y Boa rieron de ver la interacción de sus hijos. Chanming Kim había llegado con sus hijas a donde estaba su esposa, la sorpresa de ver a Yunho y Boa había sido grata, se pusieron al corriente de lo que fue de sus vidas, sus logros, su vida como padres, de cómo Kyungsoo fue un regalo al tener Boa dificultades para tener hijos, siendo su pequeño un milagro después de algunos años de tratamientos, la platicaba fue tan amena que llegó el momento de despedirse, los señores Kim habían invitado a cenar a su casa a la familia Do, incluso les habían ofrecido quedarse en su casa y dejar el hotel en el que se hospedaban, para que pasarán las últimas dos semanas que le quedaban de vacaciones.
-¡Jongin! Bebé es hora de irnos - Yoona grito para que su hijo la escuchara.
Jongin miró instantáneamente a Kyungsoo cuando escucho a su madre, sus ojitos soñadores se habían entristecido.
-Hyung, ven a casa conmigo podemos jugar a todo lo que quieras -Jongin decía con anhelo en sus ojitos
Kyungsoo lo miro con ojitos triste y apenas un asomo de sonrisa.
-Jonginie, yo vivo muy lejos, no puedo quedarme a jugar contigo -Kyungsoo decía con tono triste.
Jongin corrió a los brazos de su madre después de oír las palabras de su hyung, su madre preocupada se puso en cuclillas para abrazar a su pequeño. Mientras Boa asustada miraba venir a su hijo con la cabeza gacha y sus manitas detrás de su espalda, Boa imagino que su pequeño había hecho algo al hijo de su amiga y se sintió apenada al ver como Jongin lloraba con sentimiento.
-Do Kyungsoo que le has hecho a Jongin -Boa dijo sería a su pequeño el cual levantó la mirada con sus ojitos aguados a punto de llorar.
-No lo regañes, es pelea de niños -Yoona sonrió cálidamente a su amiga y dándole una sonrisa al pequeño Do.
Al escuchar las palabras de su madre Jongin apartó su rostro del hueco del cuello de su madre limpiando sus lágrimas
-Soosie hyung -Jongin decía entre lágrimas - ¡vive lejos mami! No puede ir a jugar a la casa-y el llanto se volvió apoderar de él.
Kyungsoo al ver al morenito llorar ya no pudo aguantar y sus lágrimas se apoderaron de él también, Yunho tomo en brazos a su hijo acariciando su espaldita para que se calmara.
-papito, si quería jugar con Jonginie-Kyungsoo decía hipando abrazándose fuertemente del cuello de su papá -pero nosotros no vivimos aquí -el llanto del pequeño hizo que su padre le diera muchos besitos para que se calmara.
Yoona y Boa sintieron su corazón oprimirse al ver la reacción de sus hijos ante la situación; para Yunho y Chanming fue de cierta forma divertido ver como sus pequeños apenas se habían conocido y se mostraban tal afecto, pareciera que la amistad de sus esposas había reencarno en sus hijos.
-Bebé no llores, te contare un secretito- Yunho decía capturando la atención de su hijo quien ahora lo miraba a los ojos -la mamá de Jongin y tu madre son amigas desde hace muchos años- el llanto de Kyungsoo se fue calmando
-mi niño no llores, los papis de Jongin nos han invitado a cenar- Boa se había acercado a su esposo y a su hijo logrando que dejara de llorar por completo y un brillo ahora se reflejara en sus ojitos
-Además también nos invitaron a pasar estos últimos días en su casa, claro si tú quieres mi amor podemos quedarnos antes de volver a casa- Yunho decía acariciando la nariz de su hizo con la suya.
Kyungsoo sintió como su pequeño corazón volvía acelerarse de felicidad, le pidió a su padre que lo bajara y fue hasta donde estaba Yoona con un Jongin aferrado a sus piernas.
-Jonginie ya no llores, si podre jugar contigo- Kyungsoo jalaba feliz a su amiguito el cual al oírlo se soltó para abrazar a Kyungsoo.
-Soosie vendrás a mi casa- Jongin dijo limpiando sus moquitos con el dorso de su mano
-si Jonginie vamos a pasar más tiempo juntos -Kyungsoo abrazo feliz al morenito.
Los adultos veían alegres aquella escena con dos pequeños que en un solo día se habían entregado el corazón.
****
La casa de los Kim era grande, con un gran jardín acomodaron a los Do en la habitación de huéspedes que tenían, la noche fue divertida para todos las ocurrencias de sus pequeños los hacía reír, ambos eran niños tan puros e inocentes que sus juegos eran muy soñadores e imaginativos, se crearon mundos mágicos donde ellos luchaban contra monstruos y dragones; las veces que iban a la playa se volvían piratas en busca de tesoros perdidos. Boa se sentía nostálgica con forme pasaban los días su pequeño se había hecho muy apegado al niño de su amiga, que temía la reacción que ambos tendrían cuando ellos tuvieran que volver a Seúl los niños terminarían llorando y tristes, no sabía si eso afectaría a su bebé.
Jongin era feliz con Kyungsoo a su corta edad Jongin podría asegurar que su Hyung era muy bonito y tierno, que ninguna niña podría igual la belleza de su Hyung, sus hermanas eran feas delante de su Soosie porque ciertamente en ese poco tiempo Jongin ya había dicho a todos que su hyung solo era suyo y de nadie más, claro también de sus papis pero solo lo compartiría con ellos, Kyungsoo se sonrojo aquella tarde cuando Jongin lo proclamo suyo y que solo el seria su mejor amigo para siempre y cuando fueran mayores él se casaría con su hyung, los padres de ambos niños soltaron carcajadas antes las ocurrencias del pequeño lo que hizo que el morenito frunciera su frente y tomara de la mano su Hyung y se lo llevo de la sala.
-Soosie Hyung, la gente grande no entiende- decía Jongin mientras era el ahora quien arrastraba de la mano a su hyung
-Jonginie, los niños no pueden casarse entre ellos -Kyungsoo dijo apenas audible logrando que el niño se detuviera
-Hyung tu eres bonito, más bonito que todas las niñas feas de mi escuela-Jongin decía decidido -y Soosie no se burló de mí cuando me vio llorando en la playa, Soosie fue bueno conmigo- Jongin dijo mientras tomaba entre sus manita la cara de su hyung dándole un beso en su naricita
-Jonginie tú también eres muy bonito, el más bonito del mundo- Kyungsoo dijo tomando entre sus manitas la de pequeño haciendo que riera.
Después de ese momento ambos subieron a la habitación de Jongin para jugar lejos de los adultos que no eran divertidos.
-Parece que tú y yo terminaremos siendo familia - Yoona dijo con una ligera sonrisa en sus labios mirando apena a su amiga
-quita esa cara mujer, son niños sus sentimientos son puros e inocentes- Boa decía tranquila animando a su amiga
- ¿no te molesta? - Yoona dijo nerviosa mordiendo su labio inferior
-te lo repito son niños, lo que ellos sienten ahora no tiene nada de malo, y aun que en algún futuro mi hijo me dijera que está enamorado de un chico, me gustaría que fuera Jonginie-Boa dijo tratando de dejarle ver a su amiga su postura
-Creo que pienso lo mismo, no tendría ninguna problema y si es Soosie sería maravilloso- Yoona abrazo a su amiga con tranquilidad en su corazón.
-No volvamos a distanciarnos más, hagamos que la amistad de nuestros hijos crezca, la nuestra retome su camino como debido haber sido siempre- Boa decía mirando a su amiga.
-Mi casa es tu casa Boa, es más deberían venir todos los veranos y así los niños sigan creciendo de cierta forma juntos. -Yoona decía muy alegre a su amiga.
***
El día de partir había llegado, ambas familias habían intercambiado números de teléfono, celular, correos, habían prometido que el siguiente verano volvería a reunirse y algunos días festivos que pudieran viajar los Kim tratarían de ir a Seúl. Como habían temido los pequeños lloraban a moco tendido por la separación, Jonginie quería que su hyung se quedara con él para siempre y Kyungsoo quería llevarse a su morenito con él.
Los pequeños niños juraban que los adultos eran aquellos villanos de sus juegos, que los separaban para que no fueran felices, Jongin estaba aferrado al cuerpecito de Kyungsoo el cual también estaba aferrado al contrario, se prometieron que el próximo verano sería mucho mejor porque ahora Kyungsoo estaría todo el tiempo completo con Jongin y no solo dos semanas, prometieron que harían que sus madres se llamaran diario para poder hablar entre ellos, el padre de Kyungsoo le dijo que era momento de irse que soltara al pobre Jongin que parecía que entre más lo abrazaba más lloraba.
Jongin a regañadientes soltó a su Hyung no sin antes tomarlo de su carita y posar sus labios abultaditos sobre aquellos acorazonados de su Kyungsoo.
Kyungsoo se ruborizo pero sonrió ante lo que su amiguito había hecho le hacía brincar su pequeño corazón.
-tus labios son un corazoncito muy bonitos Hyung- Jongin dijo entre sollozos limpiando con sus deditos las lágrimas de Kyungsoo.
-Tus ojitos son de osito dormilón Jonginie- Kyungsoo dijo con una deje de sonrisa entre sus lágrimas repitiendo la acción del pequeño.
Ambos niños se fundieron en un último abrazo para volver a su vida cotidiana.
****
Como habían prometido y sus madres por su lado se llamaban diario para que los pequeño se pusieran al día, había días que no podían llamar por cosas del trabajo de Boa o porque Kyungsoo tenía que terminar sus tareas o tenía alguna actividad, el año pasaba lento para ambos pequeños, pero se divertían mucho cuando hacían videos llamadas y eso era hasta que sus madres los mandaban a dormir.
Casi un año había pasado desde aquel verano que se reencontraron Kyungsoo ya tenía 7 años y estaba a punto de culminar su primer año de primaria y Jongin estaba por terminar el Jardín de niños.
La relación entre Yoona y Boa se fue haciendo más fuerte de nuevo ya casi estaban a unos cuentos meses del verano y habían planeado aquellas vacaciones para pasarlas en Busan.
Todo fue de maravilla el tan ansiado verano había llegado, Kyungsoo quería ver a Jongin y que viera que ya había crecido y ahora podría cuidarlo mejor que el verano pasado, los padres de ambos querían ver como tomarían su nuevo encuentro después de tantos tiempo sin verse, pero todo quedó fuera de dudas cuando los niños corrieron hasta fundirse en un abrazo.
Un pucherito se formó en los labios de Kyungsoo Jongin estaba de su tamaño y eso no era justo porque él quería ser un buen hyung fuerte y grande que pudiera defender a su Jongin de quien lo molestara, pero dejo sus pensamientos de lado cuando Jongin beso su mejilla sin ninguna problema. Aquel verano fue incluso mucho mejor de lo que esperaban ambos, pudieron jugar en la playa cuantas veces quisieran, hacían pijamadas casi todas la noches, o noches de cine con sus padres; todo era perfecto cada momento vivido hacia que ambos niños sintieran su corazón vibrar de felicidad al estar juntos, Jongin seguía siendo posesivo con Kyungsoo como aquella tarde que la vecina le pidió a su madre si podía cuidar por unos días a su pequeño, ya que su esposo había sido operado ella tenía que cuidarlo.
Para Jongin tener a ese niño Sehun en su casa era lo peor que le había pasado ese verano, porque ese pequeño llorón solo quería a su Hyung y eso no lo iba a permitir, Sehun se le colgaba a Kyungsoo como si fuera un Koala porque su Hyung no lloraba como el niño Kim, Sehun hacia que Jongin llorara cada que no estaba alguno de sus padres presentes con alguna travesura que terminara culpando a Jongin, Kyungsoo no quería ver llorar a su amigo pero su mami le había ensañado que tenía convivir con los demás, hasta aquella tarde que Sehun le había arrebatado el osito de peluche que Kyungsoo le había regalado a Jongin cuando llego porque le recordaba a su pequeño morenito.
Sehun había arrebatado de las manos a Jongin de mala gana su osito que tanto adoraba porque era algo que su Hyung le había dado, Sehun empujo al pequeño diciéndole que parecía niña llorona, Kyungsoo no pudo controlar su enojo caminando hasta donde esta aquel niño flacucho y pálido empujándolo con fuerza haciendo que cayera sentado sobre algunos carritos de juguetes que tenían en el suelo, lo que hizo que el niño llorara.
-No vuelvas a tocar Jonginie, niño feo- Kyungsoo decía enojado retando con la mirada a Sehun - si vuelves a molestarlo voy golpearte hasta que llores- dijo mirándolo de mala gana, camino hasta donde estaba Jongin lo ayudo a levantarse y le entrego el osito ambos se fueron tomados de la mano lejos de aquel niño que solo molestaba a su Jongin.
Ese verano fueron castigados por haber hecho llorar a Sehun el cual no había dicho la verdad, Jongin y Kyungsoo prefirieron aceptar su castigo que volver a jugar con aquel niño malo. Hasta que sus madres escucharon su versión y sabían que sus hijos nunca les mentirían les levantaron el castigo.
Al terminar ese verano ya no hubo lágrimas pero si promesas que ambos niños se hicieron y que volverían a cumplir.
******
Cada verano fue mejor que el anterior los años pasaban y ambos crecían Jongin iba ganando un poquito más de altura que su hyung cosa que a Kyungsoo dejo de molestarle cuando cumplió once y Jongin diez, a esa edad Kyungsoo estaba seguro que lo que sentía por Jongin era diferente al de una amistad, en Seúl tenía muchos amigos pero ninguno lo hacía sentir de la forma que Jongin lo lograba, él no sabía si era malo o no pero el sentía amor por su amigo, tenía miedo a su corta edad que Jongin le dejara de hablar o si sus padres se enteraban de sus emociones no lo dejaran volver a nunca a Busan.
Jongin no se sentía diferente a Kyungsoo, él tenía claro lo que su Hyung le hacía sentir hace cinco años que lo conoció y aunque fuera un bebé él sabía que Kyungsoo era su primer amor, el sentía que Kyungsoo le correspondía porque nunca rechazaba sus besitos en la mejilla, ni nunca lo soltaba cuando iban tomados de la manos, siempre lo protegía, siempre habían sonrisas acorazonadas solo para él, su hyung nunca sonreía de esa forma para nadie que no fuera él, ese verano comenzaba hacer diferente cada que hablaba por teléfono con su hyung sentía maripositas en su estómago, cada video llamada podía ver aquellos labios que tanto le gustaban, su Hyung estaba volviéndose cada año más guapo y eso le hacía sentir a veces molesto porque las niñas y niños querrían robarle a su Hyung, le enojaba vivir tan lejos uno del otro, Jongin suspiraba todos los días por tener pronto a su Hyung ese que ocupaba su mente y sueños.
**
Aquel verano todo cambio para ambos Jongin le confeso sus sentimientos a Kyungsoo porque no quería que nadie lo robara cuando no estaban juntos, había sudado y casi lloraba de los nervios al decirle a Kyungsoo que se había enamorado de él que quería que fuera su novio para siempre hasta que fueran adultos y pudieran casarse y vivir juntos, Kyungsoo no podía creer lo que escuchaba aquel niño de diez años le había pedido ser novios y le había dicho que lo quería, al principio no pudo decir nada porque él quería tener el valor de ser el primero en confesar sus sentimientos.
Jongin quería echarse a correr y llorar en su habitación al no tener respuestas de Kyungsoo, pero sus pies lo traicionaban en ese momento y no querían moverse y aquellas lagrimas traicioneras comenzaban a salir de sus ojos, apretó sus manos en puño para tener la fuerza de correr, sus pies apenas querían obedecerle cuando sintió la mano de Kyungsoo sujetar la suya.
-Siempre arruinas mis planes Jonginie- Kyungsoo dijo con una leve sonrisa levantando el rostro del moreno -Yo también siento lo mismo, mi corazón es un loco cuando está contigo, también te quiero y tampoco quiero que nadie más te robe de mi lado- decía limpiando las lágrimas de Jongin con su pulgar.
-entonces, serás mi novio Hyung-Jongin decía mordiendo suavemente su labio inferior dejando atrás las lágrimas.
-claro que si Jonginie- Kyungsoo le dijo entusiasmado abrazando al niño que ahora era un poquito más alto que él.
Aquel verano era el mejor de sus vidas, experimentaron tiernos besos que apenas probaban sus labios, recuerdos que quedarían grabados para siempre porque Jongin sabía que nunca dejaría de amar a Kyungsoo que era su amor destinado y eso nunca cambiaria, quería crecer más rápido e ir a estudiar la Universidad a Seúl como sus padres le habían prometido, por eso se esforzaría en todos sus estudios, porque los veranos ya no serían suficientes para ver a Kyungsoo.
*****
Trece años y Kyungsoo era el más feliz del mundo sus padres le habían prometido llevarlo un fin de semana a Busan aprovechando que tenían algunos negocios que resolver, dejarían que Kyungsoo pasara el fin de semana con los Kim. Kyungsoo le había pedido a sus padres que no le avisaran a Jongin quería sorprenderlo por primera vez, quería ver los ojos soñadores de su novio y ver aquella sonrisa que tanto le gustaba.
Kyungsoo se había cerciorado de que Jongin el fin de semana no tuviera ningún compromiso, prometiéndole que harían un video llamada hasta altas horas de la noche ya que su madre le había dado permiso de desvelarse para que platicara con su mejor amigo como su madre lo llamada.
**
El fin de semana había llegado y Kyungsoo estaba emocionado por ver la sorpresa que se llevaría Jongin, sus padres le habían dicho que lo llevarían antes de que fueran a su cena de negocios así podría pasar toda la tarde con Jongin y quedarse a dormir e ir por el al día siguiente.
Jongin estaba jugando con su perrito aquel que había sido su regalo de cumple años número doce, estaba harto del ruido de sus hermanas y las amigas de estas que habían llegado a jugar con ellas, lo tenían fastidiado que mejor había salido al patio para alejarse del ruido, esperando la llamada de su Soosie que le había prometido, Jongin estaba tan distraído en sus pensamientos que no se había dado cuenta que alguien se había parado frente a él.
-Jongin, puedo jugar con tu mascota-la voz chillona de aquella niña llego a los oídos del moreno
La miro con el entrecejo fruncido, ignorándola volvió a jugar con su perrito.
-Jongin no seas así, dime si puedo jugar con el- la niña no dejaba de insistirle
-porque no vas a jugar con mis hermanas y las tuyas, déjame en paz- Jongin le dijo molesto
La niña molesta tomo al perrito de Jongin de mala gana entre sus brazos zarandeándolo entre sus manos logrando el que cachorro llorara
-no seas estúpida suéltalo, vas a lastimarlo-Jongin decía enojado tratando de quitarle a su cachorro
-te lo doy con una condición -aquella niña con su voz chillona le decía a Jongin - me gustas Jongin, eres un niño muy guapo si me dejas ser tu novia te devuelvo a tu perro- dijo con la sonrisa más fea que Jongin había visto en toda su vida.
-estas locas, tu a mí no me gustas, ni quiero ser tu novio nunca, dame a mi perrito- Jongin decía irritado pero la niña apretaba más entre sus brazos al cachorro lastimándolo
Jongin estaba enojado y asustado no quería que dañaran a su cachorro, no la golpeaba porque sus padres le enseñaron a no pegarle a las niñas.
-Dame un beso Jongin y te devuelvo tu perro feo- decía con una gran sonrisa tonta en su cara
Jongin sintió ganas de vomitar, aquellos labios resecos y sin forma no le apetecía probarlos, el solo amaba los labios acorazonados de su Hyung, Jongin salió de sus pensamientos cuando su perrito lloro fuerte.
-está bien, pero después de esto nunca vuelvas a molestarme, y ten en tu mente tonta, que no me gustas, que eres fea, tan fea como la bruja de blanca nieves- Jongin le dijo indignado porque lo que iba hacer para salvar a su cachorrito.
A la niña no le importo nada de lo que Jongin le dijo, había apostado con las hermanas de este que lograría que el niño la besara sí o sí.
Jongin suspiró profundo y se acercó con la cara de asco hasta rozar los labios horribles de aquella niña.
Kyungsoo había llegado al portón de los Kim apresurado en los que sus papis bajaban del auto y sus ojos se abrieron al ver aquella escena, su Jonginie, su novio aquel que había robado su pequeño corazón estaba besando a una niña y una fea, los ojitos de Kyungsoo se aguaron, su corazón latía muy fuerte, se sentía herido como cuando su mamá lo dejaba sin cenar, no se sentía peor que eso, peor que cuando lo castigo y no lo dejo hablar con Jongin por un dos semanas, Kyungsoo corrió de nuevo chocando con su mamá en el camino quien lo abrazo fuerte al verlo llorara de esa manera.
-Mamá vámonos, no quiero quedarme- Kyungsoo lloraba aferrado a la cintura de Boa.
Sus padres no entendían que pasaba Yunho camino hasta la entrada de los Kim, ahí vio a Jongin frente a una niña que le entregaba a Jongin un perrito, no sabía que había pasado o porque Kyungsoo había corrido.
-Mi amor vamos, llevaremos a Kyung al hotel y luego hablare con Yoona-Boa le decía con tristeza.
Yunho se alejó, subiendo de nuevo al automóvil, viendo a su hijo llorar por el retrovisor a ambos les dolía ver a su hijo en ese estado siendo aún un niño.
Kyungsoo le había platicado a sus padres lo que había pasado, lo que había hecho que le confesara sus sentimientos por Jongin y que desde el verano pasado se habían hecho novios, a los señores Do no les tomó por sorpresa era algo que esperaban, lo que no entendían era porque Jongin había besado a una niña si ellos creían que aquel niño se había enamorado de su hijo desde que lo conoció. Esa noche Boa le llamo a su amiga explicándole lo que había pasado, Yoona se había sentido mal por las acciones de su hijo, ella también aseguraba que Jongin estaba enamorado de Kyungsoo no se explicaba que había pasado con aquella niña, Boa le había pedido que no le recriminara nada a Jongin al final eran niños y su hijo quizás estaba experimentando atracción por los niñas.
Jongin había estado deprimido después de que Kyungsoo no le llamara como había prometido, ni le respondió ninguna llamada, mensaje o correo, Jongin había llorado una noche tanto que sus padres se asustaron, entraron a su habitación preocupados que algo le hubiera pasado, entonces Jongin les confesó todo lo que había pasado, su amor por Kyungsoo, que ellos se habían hecho novios desde hacía un año y que ahora Kyungsoo lo estaba ignorando.
Yoona lloro al ver a su hijo a tan corta edad sufrir por amor, pero ella ahora no entendía porque su hijo había besado aquella niña si él gustaba de Kyungsoo, entonces su madre le platico lo que la madre de Kyungsoo le había dicho y eso hizo que Jongin llorara aún más sentía que odiaba aquella horrible mocosa que había hecho que su Hyung lo dejara de querer y pensara lo peor de él.
Yoona le había dicho que se tranquilizara y dejara que el tiempo pasara para que pudiera hablar con Kyungsoo cuando ambos estuvieran más tranquilos Jongin obedeció a su madre, esperaba que para el verano las cosas se arreglaran y Kyungsoo volviera quererlo como antes.
***
El peor verano para Jongin fue aquel en el que Kyungsoo no fue con sus padres a Busan, ese verano había ido a un campamento al cual Kyungsoo había insistido en ir porque sus amigos irían, Jongin sufrió mucho ese verano y le explicó a los padres de Kyungsoo lo que había pasado aquella vez, como buen caballero que era quería disculparse con los padres del que aún consideraba su novio aunque este no le hablara más.
Aquel verano fue eterno para Kyungsoo por más que quería divertirse con sus amigos no lo disfruto, todo le recordaba a Jongin; para Kyungsoo Jongin era como un pequeño osito perezoso y estar en el campamento aquel verano todo tenia Kim Jongin grabado en todos lados, era algo seguro ese fue el peor verano que había vivido.
***
Aunque sus padres le habían dicho a Kyungsoo lo que había pasado con aquella niña, el sentimiento de culpa lo abrumaba, porque no había tenido el valor de aclarar las cosas con Jongin en aquel momento.
Kyungsoo se había vuelto más ocupado la secundaria había absorbido todo tiempo, tareas, trabajos, exámenes, él se esforzaba mucho por ser un alumno ejemplar y tener las mejores notas por lo que los amigos que tenían eran escasos y era raro que saliera con ellos, se había enfocado tantos en sus estudios y clases de piano que casi no tenía tiempo más que para dormir.
Para Jongin no iban mejor las cosas, se había vuelto cerrado ante los demás niños, no le gustaba hablar con nadie solo se dedicaba a estudiar, él quería ser el mejor para cuando volviera a ver a su Hyung sabía por su madre que Kyungsoo estudiaba mucho y apenas estaba en casa, él trabajaría duro para que su Hyung estuviera orgulloso de él.
******
Tres años habían pasado desde aquella última vez que Kyungsoo vio a Jongin, ahora era un adolescente de 16 años estudiante de preparatoria, su vida era así de simple, ese verano regreso a Busan con sus padres porque los señores Kim los habían invitado a pasar el verano, al principio se había negado porque aun sentía vergüenza de ver a Jongin y no haber arreglado las cosas en su momento, Kyungsoo quería arreglar todo pero primero quería estar seguro que Jongin no lo odiaba por más que sus padres le dijeran lo contrario, él sabía que había lastimado a su pequeño Jonginie al ignorarlo. Pero tenía que tomar el toro por los cuernos y volver a ver aquel chico que le había robado el corazón a tan corta edad.
Kyungsoo estaba nervioso como si fuera aun aquel niño que sentía mariposas cuando iba a ver a su morenito, pero sus nervios eran porque no sabía que esperar, a lo mejor Jongin ya tenía novio o novia y eso terminara destrozándolo pero todo sería su culpa, por haber huido aquel día y no responder las llamadas de Jongin.
****
Jongin daba vueltas por su habitación poniéndose camisas y quitándoselas porque no le gustaba como le quedaba, si no le quedaba grande, le quedaba fea, se le arrugaba de un lado, Yoona lo veía con una gran sonrisa y feliz como hacía tiempo no lo veía.
-mami como me veo -Jongin le dijo con un puchero en sus labios
-te vez súper guapo bebé- Yoona decía con tono suave
-mami, por favor cuando Soosie llegue con los señores Do no me llames así- Jongin le dijo con ojitos de cachorro
-Jongin por favor, nunca te avergonzaría delante de tu novio-su madre le dijo mientras se levantaba de la cama para ir a ver que todo estuviera listo para la cena. Ya que los Do llegarían de noche
Jongin ensanchó su sonrisa al escuchar aquellas palabras su Novio, su Soosie era su novio, nunca había dejado de serlo porque ellos nunca habían terminado, ese era el motivo por el que Jongin nunca busco conocer a nadie más, tenía chicos y chicas detrás de él pero ninguna era tan hermoso como su Hyung, nadie podía comprarse con él, Jongin había visto fotos de Kyungsoo y se había puesto mucho más guapo que antes y lo había visto a lejos aquella vez que fue por un día con su padre a Seúl, pero no se atrevió a hablarle porque pensaba que Kyungsoo lo haría algún desplante.
La noche había llegado y Jongin caminaba de un lado para otro esperando que los Do tocaran a su puerta, sus hermanas se reían de su hermano ante aquella situación, ellas lo adoraban y se sintieron culpables por haber hecho aquella puesta con la niña que había roto el corazón de su hermanito y su futuro cuñado.
Jongin se quedó en seco cuando el timbre de su casa sonó, no podía ni moverse sentía que se había congelado en su lugar, su padre se colocó a su lado abrazándolo por los hombros para darle apoyo.
Los Do entraron aquella casa que era familiar, Kyungsoo se había escondido detrás de su padre estaba nervioso y no sabía cómo lo recibirá Jongin.
El moreno había fruncido el entrecejo lo habían timado su Soosie no había ido, solo eran los señores Do, los apreciaba pero él quería ver a su Soosie.
-Kyungsoo cariño, no seas mal educado y saluda a los señores Kim- Yunho le decía mientras le daba paso a su hijo
Jongin se quedó petrificado al ver a Kyungsoo frente a frente, no había duda las fotos no le hacían justicia a su Hyung estaba guapísimo, no había estirado mucho pero ese le gustaba, Kyungsoo había heredado la baja estatura de su madre pero eso lo hacía un más precioso.
Kyungsoo alzó su mirada poco a poco hasta verlo a él, su boca se abrió de manera natural al ver aquel moreno, Jongin había estirado en estos años, era obvio a simple vista que era más alto que el, también se había puesto muy guapo, su tez morena se veía demasiado Sexy para los ojos de Kyungsoo, su corazón estaba golpeteando su pecho.
Jongin no pudo evitarlo por instinto sus pies lo llevaron hasta donde estaba Kyungsoo y sin pensarlo lo abrazo, lo estrecho entre sus brazos oliendo el cabello del bajito que lo hacía sentir sobre nubes.
-Me da mucho gusto volver a verte Hyung-Jongin dijo al oído de Kyungsoo
Kyungsoo se estremeció al sentir el cálido aliento de Jongin, sin pensarlo rodeo con sus brazos la cintura del moreno apoyando su cabeza en el pecho de este, inundando sus fosas nasales con el perfume de Jongin.
-a mí también me da mucho gusto verte Jonginie- Kyungsoo dijo sin poder evitar decir de la forma cariñosa con la que siempre le había llamado.
-Bueno jovencitos creo que ustedes tiene mucho de qué hablar, así que deberían salir al patio y respirar aire fresco- Yoona les dijo invitándolos a salir.
Sin más Jongin tomó de la mano de la Kyungsoo y no sin antes a saludar debidamente a los Do y salir al jardín para estar a solas con su hyung.
***
-Jongin...yo quería decirte que...-las palabras de Kyungsoo no salieron de sus labios por que fueron sellados por unos labios cálidos que nunca había olvidado
-Soosie no digas nada quieres, hemos pasado tres años alejados, como para perder el tiempo en cosas inútiles- Jongin decía dándole otro suave beso al chico bajito
-Necesito oír que me perdonas Jonginie, fui un tonto- Kyungsoo dijo abultando sus labios acorazonados.
-no tengo nada que perdonar Kyungsoo, ya es cosa del pasado- Jongin le decía de forma tranquila
-Jonginie, sé que no lo merezco y que tienes todo el derecho a rechazarme, pero quiero que sepas, que nunca dejaste de gustarme y nunca deje de quererte, mi amor por ti Jongin nunca dejó de existir, cuando mis padres me dijeron tenía miedo que me odiaras por hacerte daño, y tenía miedo de volver y verte con alguien más, pero ahora quiero que sepas que te amo Jonginie te amo y quiero que seas mi novio- Kyungsoo había dicho torpemente aquel mal discurso que le había dicho a Jongin.
-Hyung yo ya tengo novio- Jongin le dijo de forma tímida, viendo como los ojos de su hyung se volvían aguados
-Jongin yo... lo siento- Kyungsoo dijo tratando de no llorar y queriendo huir de ahí.
Jongin se dio cuenta que Kyungsoo no entendí sus palabras y lo detuvo antes de que huyera de él jalándolo para que chocara contra su pecho.
-Soosie piensas demás las cosas, yo ya tengo un novio...ese novio eres tu Hyung- Jongin le decía mientras levantaba el rostro del chico para mirarlo a los ojos -nunca terminamos tontito, para mí siempre has sido mi novio aunque tú rechazaste mi llamadas y no regresaras a casa, Kyungsoo yo te amo te he amado desde que te vi aquel verano con tus ojos saltones mirándome con calidez. - dijo mientras le daba un beso en la frente
-Jonginie yo nunca deje de amarte, cumplí todas las promesas que nos hicimos aquellos veranos- decía Kyungsoo dejando un besito en los labios del moreno.
-Yo también cumplí mis promesas Kyungsoo, solo he sido tuyo y siempre lo seré-Jongin regreso aquel beso suave
-Te amo Jonginie- Kyungsoo dijo con toda la devoción que sus palabras podían expresar
-Te amo Soosie- Jongin dijo besando por primera vez de manera diferente a su Hyung.
Ese primer beso que ya no estaba lleno de inocencia ni torpeza, era la primera vez que Kyungsoo sentía invadir su boca por la Jongin de esa manera, y sabía que estaba perdidamente enamorado de aquel moreno que le hacía soñar mucho más desde que aquellos veranos que empezaron a mostrarse su afecto.
Jongin pudo sentir aquel cuerpo cálido entre sus brazos, aquella boca que le recibía de esa forma, Jongin sabía desde aquel momento que quería vivir con Kyungsoo todo lo que tenía que conocer y vivir seria junto aquel chico de labios acorazonados que le había robado el corazón desde que tenía cinco años.
Kyungsoo y Jongin se habían encontrado aquel verano en la playa, habían sentido esa conexión a tan corta edad, el amor no tiene edad, y el amor verdadero rompe todas las barreras, Jongin y Kyungsoo había sido un amor que estaba destino a ser para toda la vida.
Disculpas si ven alguna falla ortográfica, pero esto fue hecho contra reloj , en verdad lo hice con mucho cariño y espero que le guste.
las quiere mucho muchote
*GABI
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro