—La verdad, la playa está divina—afirme llevando comida a mi boca

—Yo solo quiero irme a casa—musito Mina cruzada de brazos

—En mi opinión, necesitabas cambiar de aire y no estar tanto tiempo con tu "noviecito"—dije haciendo una mueca

Mina dejo de comer, tomo agua y mientras los demás en la mesa nos observaron se levantó y dirigió su mirada a mi.

—Escuchame bien, Sunji, tienes un carácter horrible y tú manera de pensar lo es aun. Siempre estás criticando lo todo y nunca estás arreglada ni te preocupas por nada. Por eso...NO tienes novIO—dijo lo último casi gritando.

—¿Pueden calmarse?—pregunto mi abuela-vivieron aquí a divertirse y pasar sus vacaciones, no a discutir, este es un lugar de paz—comento—quiero que se lleven bien.

*********

—Yo...ya me voy a mi habitación a dormir—dije y mis abuelos asintieron

—Ten cuidado por ahí—dijo Seokjin y yo asentí—te puede pasar algo, aún quedan muchos años para molestarte—empezo a reír y yo hice una mueca

—Si como digas

Me despedí de mis abuelos y de los odiosos de mis hermanos. Camine con mi linterna hacia la habitación, era solo por el suelo, porque habían muchas luces por la playa y los lugares cerca.

Entre, había un absoluto silencio, muy bueno para dormir.

Me cepillé los dientes y termine de colocarme mi pijama. Vi mi pamela colgada que aún estaba algo mojada y recordé lo que sucedió hoy.

Ese idiota, ojalá no lo vuelva a ver.

****

He intentado dormir, pero no puedo conciliar el sueño y adivinen ¿Por qué?

Pues si, una fuerte y aturdida música me está matando mis pobres oídos y nadie puede dormir así.

Me levanté a ver, porque claramente estaba muy cerca de mi.

Cuando estuve a fuera, en el pequeño portal, pude observar que la fuerte música provenía de la habitación de al lado, que pertenecía al ruisort.

¿Quien rayos se cree que es?

Me pare frente a su puerta y lo pensé dos veces antes de hacerlo pero...

Si, toque, yo tenía derecho a descansar, no?

Dos toques cada 10 segundo, 2 toques , dos toques, y nada. ¡Rayos!

Bien....iré con la que va de verdad.

Toque mucho más fuerte y finalmente pude ver cómo el marco de la puerta se iba abriendo. Entonces salió un chico frotándose los ojos, como si estuviera intentando ver en la oscuridad.

—Oye! Esa música está muy fuerte!!—le grité y este quito sus manos de su rostro.

No joder! Por qué el de nuevo?

—Ah?—me miró fijamente y luego soltó una sonrisa—Wow! No pensé verte de nuevo—hizo un gesto de asombro al mismo tiempo que reía

—Yo tampoco— me crucé de brazos—Por lo visto no es mi día de suerte—suspire

—Y que se supone que estás haciendo aquí entonces?—¿Es estupido, o yo estoy loca?

—Oye, oye...¡Te dije que me molesta la música!

—Que no tengas buenos gustos no es mi problema—se encogió de hombros

—Pero no son mis putos gustos, es que quiero dormir!—le reproche gritándole

—¿Dormir? Por qué no duermes? Vete a dónde sea que estás alojada! No tengo que ver si te molesta mi música

—Estoy al lado tuyo! No lo ves?

—¿Ah, estás al lado mío?—me miró incredulo—Bueno...tu...

—Sunji, me llamo Sunji

—Bueno...Sunji, yo soy Jungkook, y como mismo la señorita está en esa habitación yo estoy en la mía y deseo poner música, porque estoy en un espacio recomendable—sonrio y se marchó

—Idiota!—le grite molesta para luego marcharme a mi habitación.

*********

—¿Un pueblo que hay cerca de aquí?—los mire confundida

—Si, allí venden comida, ropa, accesorios, artículos y cosas que valen la pena—dijo Seokjin

—Algo bueno tenía que tener este lugar inmundo—Mina todo los ojos

—¿Bueno, que esperan para irnos?—pregunte colocándome mis gafas.

La verdad me gustaba pasear y conocer lugares, a pesar de que los abuelos estaban enfermos, ellos necesitaban energía y querían llevarnos a conocer todo por allá. Era bueno para mí, ya que me había librado del imbécil que tiene como nombre Jungkook

¿Y por qué nombramos a semejante persona en estos momentos?

Pues porque el ser gigante, me molesto hasta no dar más. ¿Pueden creer que tuvo la música durante un buen rato y cuando se me quitó el sueño la apago?

¿Por qué me usa para divertirse?

******

—¿A dónde van?—le pregunté confundida

Ya habíamos hecho algunas compras en la tienda, se supone que almorzaremos juntos, pero por alguna razón, que aún no descubro el motivo, ellos me odian y supongo que no tengo que ver con eso, no? Pero son mis hermanos y ¿me van a dejar sola aquí en este lugar?

—Sunji, nosotros regresaremos a casa—Seokjin recogió sus cosas junto a Mina

—Que mierda...? ¿Me pretenden dejar sola o que?

—Tu eres la única que quiere recorrer este pueblo inmundo, Sunji—Mina se dedicó a detallar sus uñas.

Los mire indignada. ¿En serio pretendían hacerme esto?

—¿Por que quieren regresar a casa?—les pregunté—este lugar está bonito

—No somos como tú—comentaron

—De lo contrario tendre que irme con los dos—dije algo molesta y a la vez decepcionada

—No! Te quedas aquí, no queremos regresar contigo

—Acaso ustedes me odian?

—Sunji, no te odiamos, solo eres menos y demasiado diferente, entiende eso—Mina se puso sus gafas.

—Nos vamos—Fue lo último que se escucho de Seokjin antes de que empezarán a caminar y me dejarán sola y abandonada.

Genial! Esto cada vez es más infierno.

Me senté en una banca a pensar y quién diría que terminaría llorando.

Tal vez tengo una maldición. Todos me odian y no creo que sea algo en específico.

—¿Soy yo o estás llorando?—senti una voz detrás de mi y levanté la cabeza.

Era Jungkook

—Eres tu—le dije sin más y algo seca.

—No seas tan pesada—se sentó junto a mi—ya dime qué tienes—pregunto comiendo una manzana

—¿Y tu desde cuándo quieres agarrar esa confianza conmigo?—seque mis lágrimas

—Estoy aburrido, no seas así—suspiro—sigi esperando tu respuesta.

—No tengo nada—dije sería—te puedes ir.

—¿Estas molesta por esas cosas?—esta vez me miró  a los ojos

Pude detallar mejor su rostro, sus ojos eran realmente muy bonitos y tenía un rostro tan delicado, como si fuera de un ángel. Debo admitir que es hermoso.

—¿Molesta yo?—rei—digamos que estoy acostumbrada

—¿Estas acostumbrada a que te hagan enojar y que te molesten?—su expresión cambio a una sorprendida

—El mundo me odia, es solo eso—respondi

—No creo que el mundo odie a nadie—dijo—y si te odiara, te hubiera hecho una persona fea

—¿Me estás diciendo que no soy fea?—Esto es raro.

—Te estoy diciendo que eres linda—sonrio

¿Y si le digo que el también es lindo? No, más bien es hermoso.

—Gracias—sonrei débilmente—N-nunca nadie me había dicho eso.

—Lo se—rio—Te has sonrojado

Y fue entonces que no me había dado cuenta de ello, toque mis mejillas y las sentí arder.

No! Por qué me delatan

—Que vergüenza—oculte mi rostro entre mis manos

—Oye...perdón por eso, si?—dijo—Es que he estado algo estresado en estos días—hizo una mueca—cada vez que te veo, estás sola

—Basicamente—suspire—Tengi familia aquí, pero para dejarme siempre abandonada, se puede definir el concepto de soledad conmigo

—Ya somos dos— dijo y lo mire extrañada

—¿Que?

—Yo también estoy solo, así que dos solitarios, no le haría mal al cuerpo, no crees?

¿A dónde pretende llegar?

—¿Y que se supone que quieres decir con eso?—alce mi ceja

— Bien, andas algo perdida en el mundo, es normal—se levantó de la banca

—Hey, espera! Que haces?—pregunte sorprendida cuando ví que tomo mis manos

—Vamos a dejar de estar aburridos—sonrio

—Pero...¿A dónde se supone que me llevaras?

—¿Tu confía en mí?

Este chico, tiene algo extraño. Pero ya me estoy dando cuenta que pasaré mis vacaciones con el.