—¿será que ya perdí el toque?, tal vez ya soy más viejo.— Min conducía sin una dirección específica y con la vista perdida.

—Vamos yoongi solo olvídalo y porfavor no nos mates.— Pidió el menor abrochando su cinturón al ver tan perdido a su amigo.

—No Namjoon.— El auto frenó en seco haciéndolos saltar.

—¡Maldita sea Min!— gritó de inmediato el castaño aferrándose a su lugar.
—Yo si tengo planes para mi futuro, idiota.— Regañó recuperando la postura.

—Namjoon, no puedo solo olvidarlo.— el semáforo cambió a verde y el peliplata continuó a una velocidad menor.
—¿Cómo pudo decirme "no gracias" e irse como sí yo fuera un vendedor ambulante?— Suspiró y tocó su pecho.
—Yo soy un humano y tengo sentimientos.— el contrario no pudo evitar reír ante el comportamiento de su compañero lo cual le hizo enojar.
—Y él destrozó mi frágil corazón.— Namjoon seguía riendo cada vez más fuerte.
—Tal vez debería morir.— El chico de tez canela seguía riendo a carcajadas ignorando el comentario.
—La vida ya no tiene sentido.— el joven paró su risa al ver al menor acelerar de golpe.

—¡MIN YOONGI!— Suplicó el hombre con una cara de terror.

—¿Quién es el que se ríe ahora?— El auto poco a poco disminuía su velocidad y Namjoon iba recuperando el aire.
—Estoy bien, es solo que, no tengo idea de que fue eso.

El contrario ya con más calma comentó
—"eso"— hizo unas comillas con sus dedos.
—Fue solo un "No gracias", lo cual quiere decir que NO, GRACIAS, ¿tan difícil es para ti entenderlo?— Min no respondió y continuaron su camino por la carretera.

La verdad es que si lo era, en toda su vida no había recibido muchos "No" por respuesta, tanto académicamente, laboralmente o sentimentalmente, y sí en su momento recibió esa respuesta no fue acompañada por un "Gracias", el que ni siquiera entendía lo que pasaba por la mente de ese joven le gritaba cada vez más fuerte que tenía que dejarlo en paz, que nunca funcionaría, de hecho, ni Yoongi tenía idea de que es lo que buscaba o quería lograr con eso, pero existía ese sentimiento de intriga, de necesidad, de tenerlo.

—¿Crees que Seokjin haya hablado con él?— El peliplata cortó el silencio sin dejar de mirar hacia enfrente.

pasaron unos segundos de silencio hasta que el menor contestó.
—Podría ser, y sí fue así, tanto tú como yo deberíamos dejar a ese chico en paz.

Min bajó los hombros y respiró profundo, no le gustaba darse por vencido, pero tenía una imagen tanto en la vida cotidiana como dentro del mundo de ese contrato y quien lo viera comportándose de esa forma le perdería totalmente el respeto.

—¿de verdad me creíste capaz de matarnos?

hubo un pequeño silencio hasta que obtuvo una respuesta.
—mmmm, maybe.— dijo esto para no gritarle que por un segundo vio su vida pasar frente a sus ojos.

El contrario volvió a acelerar de golpe.

—¡¡¡AAAA, MIN YOONGI TE VOY A MATAR!!!— amenazaba mientras más rápido iban.

—JAJA, no sí yo lo hago primero.— Dijo esté en burla antes de frenar de golpe.

Min podría poner en riesgo su vida en muchas ocasiones pero nunca pensaría en llegar al borde de la muerte.

—Namjoon... ¿estás llorando?.

🧸

La jornada en la cafetería no debía de ser tan cansada ni molesta a como la estaba pasando Jimin, a decir verdad él nunca había trabajado antes, no se veía en la necesidad de hacerlo, las actividades del joven iban de todo menos servir todo tipo de bebidas o postres a terceros, entonces si le era un poco difícil e incómodo, Hoseok es verdaderamente paciente con él y lo menos que podría hacer para compensar los platos rotos y las órdenes confundidas era trabajar horas extras.

—Jimin, Jeamin, Yiemin, Cheamin...— Cantó una voz detrás suya.

Él no se consideraba una persona sociable, no esperaba tener algún vínculo con ninguno de sus compañeros de trabajo, se atrevería a decir que Taehyung únicamente era su amigo porque era de los pocos con los que podía convivir por mucho tiempo sin terminar siendo pedante y molesto para ambos.

—¿Entonces si me lo vas a presentar mejor?— El castaño no había parado de hablar durante la mayor parte del día sobre aquel hombre que había visitado el lugar anteriormente, no es que a Jimin le causara conflicto, es solo que tanta insistencia le ponía los nervios de punta.

—Ya te dicho que tampoco lo conozco bien.— Se limitó a dar una respuesta rápida, aunque por una parte la platica le podría ayudar a que el tiempo pasara más rápido.

—Oh, es que parecía que él te conocía bien, como que te quería preguntar algo o que esperaba algo de ti.— El joven quien era mayor que Jimin tanto de edad como de estatura se colocó a su lado recargandose en la barra.

—Si, quería ofrecerme un contrato.— Explicó como sí nada mientras tomaba una franela, la mojaba un poco y caminaba hasta a la barra para limpiarla.

—¿contrato?— La curiosidad por ese hombre era cada vez más grande.
—¿De que tipo?

Jimin volteó a mirarlo tratando de recordar, pero su hermano tampoco le había respondido aquella pregunta así que se limitó a levantar sus hombros y dejarlo pasar.

—¿Qué tipo de contratos hay?— El rubio terminó de limpiar y dejó la franela en el fregadero, ya todo estaba listo para cerrar.

—Bueno.— El mayor llevó una de sus manos hasta su barbilla y miró al techo organizando sus ideas.
—Hay contratos para vender pertenencias, ya sabes, como un terreno o un auto.— No sabía realmente sí sus respuestas venían al caso pero aún así continuó.
—También hay por prueba de algún servicio, ya sabes, probar algo por un determinado tiempo y aceptar los términos y condiciones.— Jimin escuchaba atento intentando dar con uno que quedara con el perfil de Min Yoongi.
—Aunque también hay otros que...— el chico se lo pensó mucho para dar una respuesta ya que no sabía como explicarlo sin sonar como un pervertido, no era algo que había descubierto por cuenta suya pero lo había escuchado en algunas ocasiones y realmente tenía sentido viendo el como se comportaba y veía el mayor, pero al ver a su contrario, un joven menor de edad que no tenía ni idea inmediatamente lo descartó.
—Son de trabajo, tal vez como secretario, aprendiz, eso.

Esta respuesta tuvo mucho sentido para el rubio, anteriormente le había mencionado al mayor que necesitaba dinero, tal vez este le quería ofrecer trabajo o algo por el estilo.

—¿En que trabaja?— Algo que tenían permitido en la cafetería era que podían comer y llevarse a casa algunos postres al cerrar para que estos no se echaran a perder y el castaño tomó un chocolatin y comenzó a comerlo mientras esperaba una respuesta.

—Es abogado.— La respuesta asombro al contrario, si bien se sabía que era un trabajo de tiempo completo, muy bien pagado y con jornadas largas, no pudo evitar sorprenderse por la elección de candidato para trabajar.
—Pero a mi no me interesa esa carrera.— Hizo un pequeño puchero y el contrario lo tomo de los hombros de golpe.

—¿Eres tonto?

—Tienes chocolate en la-

—¿Te das cuenta de que ahí hay mucho dinero en juego?— interrumpió sacudiendo al joven dándole nada de importancia a su apariencia.
—Tal vez solo quiere que lo ayudes con algunos papeles o a servirle café, no muy diferente a lo que haces aquí.

—si, pero tienes chocolate en la-

—¡SI, YA SE QUE TENGO CHOCOLATE EN LA BOCA!— Ambos se miraron a los ojos, no tenían vínculos o amistad pero al parecer el mayor aún sin conocerlo bien no permitiría que dejara ir esta oportunidad, además de que así podría dejar de estar rompiendo cosas y dándole más trabajo.

—Entonces, ¿Debería aceptar el contrato?— habló en un tono bajo con cara seria.

—Por supuesto que si Park, ¿Eres tonto?— Ambos se separaron y se sonrieron.

Se le hacía raro que su hermano le haya dicho que pasara lo que pasara no aceptará ningún contrato de ese hombre, le dijo que él nunca llegaba a nada bueno y todo siempre terminaba mal, y sí solo era trabajo ¿porqué Seokjin estaba tan preocupado y molesto al decírselo? ¿había algo más?

Ambos jóvenes se miraron con una gran sonrisa.

—Aún tienes chocolate en la-

—¡¡¡YA SE!!!

🖇

Creo que e vuelto 🥺 espero que por mucho tiempo 💕 gracias por las vistas, comentarios, compartidos y votos en esta historia, lo aprecio mucho mucho, los quiero mucho, gracias por leer, tenerme paciencia y esperarme tanto 🤍

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