2° CAPÍTULO
El doctor salió, con un semblante muy serio, Constantino noto que algo iba mal.
--La menor podrá salir en unos días, pero la madre me temo decirles que estará en U.C.I. por varios días, su situación actual, es muy crítica.
Constantino al escucharla noticia, se desplomo no podría creer que otra vez podría perder a alguien que amaba. Pensó que era algún castigo o el destino no quería que sea feliz.
--Puedo verla un momento, por favor _ Lo dijo todo triste.
--Si.
No le importaba nada ni nadie, solamente ella, la mujer que amaba con toda su alma, y no evitaba sentirse culpable de lo que le había pasado.
Todos estaban asustados por la situación de Anjhaly, todos pensaban en ese instante en ella, hasta que Lucios intervino y pregunto por el futuro incierto de la bebe, Victorius al notar un sospechoso interés de parte de su hijo hacia su nieta, pensó por unos momentos que tal vez Lucios tendría la culpa del accidente, pero luego desecho la idea, ya que su hijo podría ser muchas cosas, pero jamás un asesino.
--Señora Geeta, Señor Raj; lo mejor para la nueva heredera y futura cabeza de la familia Cross, es que se valla con ustedes. Son un matrimonio sólido, amoroso y desde luego ustedes conocen mejor a su hija _ En tono decidido Victorius, hablo a los padres de Anjhaly.
Todos al escuchar las palabras de Victorius, se sorprendieron, porque pensaban que reclamaría a la pequeña, para que la pueda educar.
--Pues, nosotros le queríamos pedir lo mismo _ Geeta le respondió.
Paso el tiempo y Anjhaly se recuperaba lentamente, su esposo la visitaba diariamente, y en una de esas tantas visitas de Constantino se entera que su amada esposa era estéril, producto de la caída y que ahora había desarrollado Hemofobia.
Ella lloraba amargamente por su situación actual y culpaba a su pequeña Alexandra de su situación. El no poder tener más hijos y no ser Medico.
Constantino permanecía callado, ya que se sentía culpable por la situación de su esposa, en el fondo sabía que él era el único responsable.
Y en otra parte de la ciudad una pequeña niña, crecía rodeada de todo el amor y cuidados de sus abuelos. Ellos se habían vuelto su mundo y ella la de ellos.
Pero con el nacimiento del hijo de Lucios, las cosas se pusieron más tensas, el reclamaba el poder y la herencia para su hijo Dan, simplemente porque nació varón, pero Victoruis no daba indicios de querer hacerlo. Debido a que él prefería a su nieta Alexandra.
Era un día tranquilo y alegre como los últimos días, la pequeña heredera jugaba feliz, pero su vista y sonrisa fue reemplazada por una mirada de curiosidad hacia unas personas que se acercaban a ella, llamando así su atención, en la que vio entrar a 2 varones y a una mujer. Su mirada refleja miedo, pero aun así no se dio el lujo de llorar.
Victorius la miro fijamente y pensó.
--Sera una buena líder, no se acobarda ante nada y nadie, y sobretodo es fuerte.
Mientras la pequeña los siguió con la mirada.
--Familia llegamos, ven Alexandra, mi pequeña heredera, saluda a tus padres y a tu adorado abuelo Victorius _ Mientras hablaba una sonrisa se dibujó en su rostro del mayor.
Anjhaly que no quería ni ver a su hija, solo la cargo por compromiso, pero no mostro ni una sola señal de alegría, detalle que todos notaron, hasta las personas que ayudaban en casa; Constantino se le acercó y le dio pequeños cariños a su hija.
Victorius al ver como su nuera y su hijo se comportaron con su nieta, no se mostró muy a gusto. Se llenó de ira, frustración e impotencia y tomo una drástica decisión.
--Mi nieta vivirá con los señores Kapoor hasta que tenga 5 años, luego vivirá conmigo hasta que tenga 11 años, para poder enseñarle sus deberes, funciones y responsabilidades como la futura cabeza de la Familia Cross y Heredera Absoluta, luego de ese lapso vivirá con sus padres, pero cuando viva con sus padres los visitaremos o ella nos visitara a nosotros, donde se quedara largas temporadas. _ Con voz firme hablo. Sabía que sus abuelos maternos la criarían mejor sus primeros años de vida.
--¡Es mi hija, no puedes hacerle eso, tú no puedes decir sobre su vida, no puedes pasar sobre nosotros! _ Al escuchar aquello, Constantino le grito por primera vez en su vida a su padre. No estaba de acuerdo en que lo separaran de su hija.
--¡Tú no la amas!, ¡Su madre no la soporta!, ¿O acaso me dirás lo contrario?, ¡Que mi nieta es su vida y la aman!, .... ¡Malditos sean Constantino, Anjhaly!, .... Alexandra tiene 7 meses, de los cuales dime ¿Cuántas veces la viniste a visitar?, ¿Cuantas veces la cargaste y pasaste una mala noche porque estaba mal?, ¿Cuántas veces dormiste a su lado?, ¿Cuántas veces la llamaste o preguntaste como esta ella? Ni una sola vez, maldición Constantino se supone que es tu hija, porque no te preocupaste antes, .... ¡Porque ahora te haces del papel de padre responsable!, .... Porque hasta tu hermano fue mejor padre que tú, intento varias veces comunicarse con ella, hasta quería venir a visitarla según el trayendo regalos, y porque somos familia; pero no se lo permití sé muy bien como son mis hijos, .... ¡Y tú y tu esposa me han decepcionado! _ En cada una de sus palabras se notaba la gran ira y rencor que sentía por su hijo mayor y su nuera.
Constantino al escuchar los reclamos no dijo nada.
--Maldición Constantino, se supone que eres la cabeza de la Familia Cross, actúa como tal, sabes que ella es la siguiente y tú no tienes ni el menor respeto _ Por un momento Victorius sintió que había fallado como padre.
Anjhaly y Constantino bajaron la cabeza, sabían que Victorius tenía toda la razón.
Pasó el tiempo y sucedió tal como dijo Victorius, la pequeña Alexandra vivió más tiempo con sus abuelos que con sus padres; ella sabía que tenía que ser fuerte y tenía una gran responsabilidad con su familia.
Por su parte Victorius, dejo en claro que solo Constantino, Anjhaly y Alexandra podían vivir en la Mansión Cross, por lo que Lucios, Cordelia y Dan, tuvieron que abandonar la Mansión de mala gana, Victorius no iba a permitir que su hijo menor tenga contacto con su nieta, sabía que su hijo podía aprovecharse de la niña.
Durante el año Alexandra vivía en la Mansión Cross, prácticamente sola. Sus padres solo convivían con ella 1 semana cada 3 meses, claro si tenía suerte o tenía que esperar 4 meses.
Su madre estaba ocupada en su mundo de pasarelas y desfiles de moda, su padre por su parte estaba concentrado en su trabajo de asesoramiento al líder nacional, en dirigir a la Familia Cross, los negocios familiares y su esposa.
En las vacaciones se iba a casa de sus abuelos maternos, ya que ahí, ella era amada y feliz, sus abuelos la engreían mucho y por supuesto la complacían en todo lo que deseaba.
Su abuelo Victorius la visitaba cada mes, y se quedaba con ella 5 días, en ese tiempo trataban temas de la familia, negocios, bienes y claro cómo seguir manteniendo el buen nombre de la familia.
Victorius, decía que su nieta debía de prepararse desde ahora con respecto a esos temas, aunque el siempre intuyo que ella sería la mejor líder de la familia, ya que se dio cuenta de ello en el tiempo que convivio con la pequeña, en la cual demostró ser: fuerte, decidida, aguerrida, optimista, responsable, inteligente, valiente, orgullosa, astuta y que tenía corazón. Esas cualidades agradaban mucho a su abuelo, y por eso se convirtió en su orgullo.
Y claro aquella situación no le agradaba mucho a Lucios, ya que Dan su hijo era totalmente opuesto a su prima, Era miedoso, cobarde, mimado, irresponsable, mentiroso y vanidoso. Por ello Victorius no lo toleraba más de 1 día, decía que era igual de inútil que su padre.
TIEMPO ACTUAL
-- Señorita Alexandra su carro ya está listo para ir a la escuela y su amiga la Srta. Rocio está ya en el auto, apresúrese en tomar su desayuno _ Gritaba toda angustiada Ely, desde la puerta de la Mansión.
-- Hay cuantas veces tengo que decirte que me digas AS, y ya escuché no soy una sorda y gracias, .... Y Ely no me digas más Srta. Alexandra, dime AS mis amigos lo hacen _ Dijo en un tono de reproche a Ely, mientras se dirigía a la puerta.
Ely al ver que se iba para el colegio, sonrió y la despidió desde la puerta como siempre, observo como el chofer le abría la puerta del moderno deportivo negro.
-- No entiendo cómo pueden abandonarte, si eres una niña dulce, alegre, buena e inteligente. .... ¿Hay AS acaso cometiste un pecado muy grande en tu vida anterior, para que tus padres no te quieran? _ Se para sí misma en un tono triste Ely, ya que ella era una de las pocas personas que conocía el dolor de AS.
Ely era una vecina de Roció, la única amiga de AS, ella la contrato porque vio cómo su padrastro la boto de su casa. Ely estaba totalmente golpeada, semidesnuda, su mirada solo se reflejaba miedo y mucho dolor.
Desde ese día Ely ve a la pequeña AS como su salvadora, porque la salvo de una vida llena de dolor, lágrimas y sobretodo de humillaciones. Pues el padrastro de Ely la golpeaba cada vez que se embriagaba. Hasta el punto de marcar su piel blanca o causarle heridas, no le importaba si era su cuerpo o rostro. Sólo lo hacía.
Cada vez que la agredía, Ely gritaba pidiendo auxilio con el rostro bañado de lágrimas, pero nadie acudía a su rescate, porque todos temían a su padrastro.
Su vida cambio gracias a la pequeña, que la salvo de ese infierno.
Mientras tanto en el interior del auto 2 niñas se encontraban platicando y estaban muy bien vestidas con su uniforme: una falda negra plisada, una blusa blanca manga larga, un saco negro de corte princesa con el cuello recto y con bolsillos en la parte inferior.
-- Chio miga, .... ¿Estas estudiando para el examen de Geometría?
-- Hola AS, yo estoy bien gracias por preguntar, sabes pase un fin de semana regular, porque no me dejaron ir de rumba con los chicos, .... ¡Sabes niña se saluda primero!, .... ¡Y se supone que eres la siguiente en liderar a tu familia, por Dios! _ Le reprocho un poco ofendida su amiga.
AS solo rodo los ojos.
-- AS el examen que recuerde es la próxima semana. Aún hay tiempo niña, déjame disfrutar mi vida _ Respondió inquieta.
-- Sabes bien que estas un poco mal en ese curso, tienes que preocuparte más en tus estudios, que en los chicos _ AS le contesto reprochando su actitud.
Chio le miro apenada.
-- ¡Y disculpa por lo del saludo, me deje llevar, es que no quiero que mi mejor amiga jale cursos!, .... Si Chio, me disculpas _ AS le respondió apenada a su amiga.
-- Ok. Pero que no vuelva a pasar y te prometo que no pasará, porque estudiare más.
AS sonrió con el último comentario, pero no duro mucho porque había algo que la inquietaba y se reflejó en su rostro. Algo que Chio noto rápidamente, ya que conocía muy bien a su amiga.
--¿Qué te sucede?, ¿Tus padres te volvieron a plantar?, ¿O acaso tu primo intento perjudicarte otra vez? _ En un tono serio Chio comenzó su interrogatorio. Ella sabía la historia de su amiga y por eso ella siempre estaba a su lado.
AS al escuchar las preguntas de Chio solo negó con la cabeza, sabía que su amiga era una de las pocas personas que se interesaban por ella, así que decidió contarle lo que le pasaba.
-- Sabes otra vez tuve ese sueño, donde estaba vestida con esa ropa egipcia, ese pasillo lleno de grabados, aquel joven y obvio que también ese abrazo; ..... Siento como que hay algo importante que me quiere decir ese sueño...... Y claro él, Pues él, .... Él es alguien muy importante para mí o para mi vida, lo siento, ¡¡Pero no sé quién es!!, Solo Sé que me espera, me abraza y me regala una linda sonrisa _ Mientras hablaba, se podía percibir en su voz y rostro confusión.
-- Hm.... También es guapo por lo que me lo describiste, hay AS no será tu chico ideal, ..... ¡¡O ya se!!, Te afectó mucho leer tantos libros para tu exposición sobre el Antiguo Egipto y modo de vida, que ahora sueñas con eso ja, ja, ja _ Le dijo en un tono de burla mientras se reía.
-- Como se te ocurre decir eso, sabes que esa exposición fue hace 2 semanas atrás y....... Y ..... Y esos sueños raros los tengo desde hace 2 meses, ¿Explícame como pueden estar relacionados? _ Respondió de manera sería y temerosa.
-- Hmm, buen punto.... Pero seguro que no es nada importante y ya no pienses en eso AS. Mejor dime iremos a la fiesta del colegio, mira que Steve te invito...... Y él es súper popular y súper guapo.
-- Hmm... Lo estoy pensando y sabes no sé si asistiré y además falta como 4 meses para la fiesta, no sé porque tanta adrenalina. Si deseas puedes ir con él, por lo que note en tu tono, se nota que te gusta y te mueres por él. .... Y si me invito es sólo para alardear y obviamente quedar bien conmigo, todo porque soy la líder y organizadora de Los Juegos Olímpicos Escolares _ Le respondió totalmente sería.
Luego de unos minutos el chofer bajo del auto para abrir la puerta. Ambas amigas bajaron y en el acto el conductor cerró la puerta y subió al mismo, para marcharse.
Cuando bajaron, notaron que una gran masa de alumnos, sobretodo mujeres, estaban reunidas en un círculo, eso les llamo su curiosidad y se acercaron a ver qué pasaba. Donde vieron a un joven de 13 años, que miraba a todos de una manera inquieta.
De pronto As, dirigió su mirada hacia el menor, y al momento de hacerlo sintió como una pequeña corriente en su cuerpo y a su vez, sentía que no era la primera vez que lo veía.
Por su parte, él también la vio, sintiendo que la conocía y que necesitaba estar a su lado.
De pronto para sorpresa de su amiga, AS comenzó a obsérvalo de pies a cabeza. Noto que tenía el uniforme.
Tendría unos 13 años, media 1.65 aproximadamente. Su cabello casi pegado de color negro azulado, ojos grandes y de color negro, la nariz casi aguileña, labios carnosos y de piel blanca.
Ambos se perdieron en un cruce de miradas, que obviamente no pasó desapercibido por los espectadores.
--¿Quién es él?, ¿Porque me observa de esa manera?, .... Vaya es guapo y.... ¿Porque quiero estar a su lado? _ AS comenzó a preguntarse mientras miraba al chico.
Y sin darse cuenta, ambos se estaban acercando poco a poco, hasta quedar en medio de todos; frente a frente.
-- Bueno que sucede aquí...Tierra llamando AS.... ¿Lo conoces o me perdí? _ Rocío, trataba de hacer salir del shock a AS, pasando delante de su rostro su mano.
-- Mucho gusto señoritas, mi nombre es Emanuel Nilson Black Pave, soy nuevo _ Con una pequeña reverencia se presentó, para luego mirar fijamente a AS.
-- De igual manera, un placer conocerlo; soy Alexandra Sanjana Cross Kapoor. Pero puedes decirme AS _ Le respondió mientras una pequeña sonrisa se dibujó en su rostro.
-- Hola yo soy Rocio Salvatierra Ulloa, puedes decirme Chio, soy la amiga se AS _ En un tono pícaro se presentó.
-- Lindos nombres, pero díganme bellas señoritas, ¿Dónde se encuentra el aula se la Srta. Marietta? _ En tono casi seductor pidió aquel favor.
-- ¡Claro!; sabes nosotras estamos en su aula, ven con nosotras, así no te pierdes _ Chio, noto rápidamente el tono del joven, y ella le respondió en un tono más pícaro.
Comenzaron a llevarse bien, y esto no pasó desapercibido por sus compañeros y demás alumnos.
Pero el que más se sorprendía de ello era Steve, que lo miraba receloso porque en menos de un día de conocerla se volvió amigo de AS. Y el que tenía años de conocerla, no pasaba de un simple saludo.
Llego la hora de salida, Emanuel se ofreció en llevar a su casa a sus nuevas amigas.
Pero ambas se miraron y comenzaron a reír, para luego negarse, ya que AS tenía su propia movilidad y llevaba a su amiga a su casa. Emanuel, tenía curiosidad del auto de AS, salió a verlo; y se sorprendió al verlo.
Ya que el auto de AS era mejor que el suyo.
Emanuel les pidió si podía ir con ellas a casa, AS aceptó y se fueron los 3, la primera en llegar a su casa fue Chio, luego cuando llegaron a casa de Emanuel, ambos se sorprendieron al darse cuenta que vivían lado a lado.
Una vez ya en su Mansión AS, solo se limitó a almorzar, hacer sus deberes del colegio, ducharse, y prepararse para dormir.
Ely le llevo la cena a su habitación, pero ella no aceptó.
Ely se retiró con la bandeja hacia la cocina, para luego ponerse a limpiar e irse a dormir cuando termine.
--¿Quién eres Emanuel?, Dime quién eres y porque tuve aquel sentimiento de ir corriendo hacia ti y abrazarte _ AS, se preguntaba mientras estaba recostada debajo de los edredones de su cama.
Y en la casa de casa de Emanuel, mas específico su habitación.
-- Esos ojos, Porque siento que ya los he visto antes...... Y porque me dio mucha felicidad verla y estar a su lado....... Y cuando me despedí de ella, porque sentí un dolor tan fuerte en mi corazón, .... ¿Qué me pasa?, ¿Quién eres y que me has hecho bella princesa? _ Estaba tan confundido Emanuel, porque era la primera vez que le sucedía.
Ya durmiendo, ambos tuvieron casi el mismo sueño.
-- Ya se acabó el descansó, ¡Ah sus espadas! _ Salió de mi un tono autoritario, hacia los demás.
-- Príncipe, aún estamos cansados, tenga piedad de nosotros.
-- No podemos perder el tiempo, además tengo algo muy importante que hacer, .... ¡Así que ya a levantarse y a sus armas!
-- Oh vamos su alteza, suplicamos su piedad _ Se pudo oír un pequeño susurro.
-- Todos en guardia Oh acaso quieren que el ejército enemigo diga que nuestras tropas son débiles?, .... Somos el poderoso ejército egipcio, que nunca se les olvidé _ Les respondí a los soldados, mientras tomaba mi espada.
Yo era así, impulsivo, arriesgado, fuerte y muy sobreprotector. Tenía puesto mi uniforme de combate del ejército, mi coraza era de 2 halcones con las alas extendidas, que se entrelazaban en el medio, todo de oro.
Todos mis músculos estaban muy bien trabajados, ya que era producto del arduo entrenamiento que yo mismo me sometía diariamente.
Estaba en pleno entrenamiento; y podía observar como las damas de la corte me observaban, cuando comencé a blandir mi espada hacia mis oponentes.
Ya una vez acabada la práctica, se podía observar mi magnífico y bien trabajado cuerpo, cubierto por hilos de sudor.
Mi voz entrecortada y respiración agitada, no me restaba atractivo, al contrario, me hacía ver más varonil.
Me dirigí a la salida del área de entrenamiento, que era un salón sin techo, con una superficie de área fina, a un costado estaban las armas y al otro extremo unos muñecos de madera.
No me importaba estar sudoroso y todo desaliñado, solo quería ir pronto a verla, no aguantaba más tiempo el no verla. Ya que no la había visto por mucho tiempo; la sola idea de tenerla cerca y en mis brazos me causaba una gran alegría.
La amaba y mucho, ella siempre fue todo lo que le importaba; aunque yo se lo decía muchas veces, ella a veces dudaba y sentía que le mentía.
Una vez ya en el pasillo fui directo donde el joyero real, para recoger un pequeño regalo que había mandado hacer para ella, ya que la volvería a ver después de tiempo, porque se encontraba lejos.
Ya en la entrada del taller, observo que el joyero tenía todos sus herramientas y materiales de trabajo encima de la mesa de labores y también observó muchas pulseras, collares, etc. Todas eran verdaderas piezas de oro y muy hermosas.
-- ¿Dime ya está mi pedido?, .... Ella ya llegó y no puedo ir a verla sin darle un regalo _ El tono de mi voz era una mezcla de; alegría y dulzura.
-- Su alteza, le aseguro que la princesa Isis estará encantada con estas pulseras _ Me dijo el joyero real, mientras las colocaba en un cofre.
Las pulseras eran lisas de Oro, pero en el medio de ellas en la circunferencia de estas, tenía una línea gruesa de polvo brillante color rosado.
-- Le gustará mucho, es un excelente trabajo, pero sabes también necesitaré unos pendientes _ Una sonrisa de pronto se apoderó de mi rostro; al contemplar las pulseras dentro del cofre.
-- Así lo haré, Príncipe Amón _ Con una reverencia despidió al príncipe, mientras yo salía del taller con dirección al punto de encuentro, con la princesa.
Una vez que salí por el corredor que unía el jardín con el taller del joyero real, pude observar que las paredes estaban con pinturas y varios gráficos de los Dioses; sin más, solo seguí mi camino y no le preste atención.
-- Parece que hoy será un buen día, es espléndido para ir a caminar con mi princesa _ Lo dije en un tono muy alto, acompañado con una sonrisa en mis labios, mientras daba unas vueltas por el jardín, y de rato en rato mirando el hermoso cielo despejado.
Cuando llego se dispuso a esperar.
-- ¡Rayos! .... Porque se demora tanto, ¡¿Acaso no se acuerda de nuestra promesa?!, Sabía que yo la esperaría aquí, ..... ¡Ella sabe lo mucho que la necesitó, es mi vida! _ Me comencé a preocupar, porque no llegaba. Pensé que no se acordaba de la promesa que ambos nos hicimos antes que partiera.
Así pasaron unos minutos, yo completamente desaliñado, pero muy impaciente a que llegará mi amada y bella princesa, mientras estaba parado en el centro del jardín, el cual estaba rodeado de bellas flores y unas hermosas piletas de mármol.
De pronto sentí los pasos de alguien, esos sonidos provenían del interior de uno de los pasillos que unía el jardín con el palacio; giré mi cuerpo hacía el pasillo dónde provenía aquel sonido, y ver de quien se trataba.
Y la vi. Era ella mi dulce princesa. Estaba saliendo del pasadizo y cuando se encontraba en la puerta, noto como uno de los rayos del sol se posa en su hermoso rostro.
Ella solo subió una de sus manos hacia la altura de su frente, como defensa ante el sol, y de inmediato note que traía puesto un hermoso vestido, que le favorecía en su totalidad. Ya que resaltaba su hermosa figura.
Al verla ahí, en la puerta de ese pasadizo. Mi corazón empezó a latir cada vez más rápido, y sin más comencé a ir donde se encontraba mi hermosa princesa.
-- ¡Al fin te apareces!, .... Creí por un instante que no vendrías _ Mi alegría no podía ser mayor la tenía ahí cerca de mí.
Y vi como una sonrisa se asomaba a sus hermosos labios.
-- Sabes princesa, te esperé por mucho tiempo, pero valió la pena _ Se lo dije y noto como su mirada comienza a recorrer mi cuerpo, me avergüenza mi actual estado, pero después de que recorre mi cuerpo con sus bellos ojos, nuestras miradas se cruzan.
-- Pues por un momento pensé que te habías olvidado, como ahora tienes que entrenar más _ Me sorprende su respuesta, ella sabe muy bien lo mucho que me importa y también notó un tono triste en su voz, mientras se dirigía a mí.
-- ¿Pero porqué piensas eso?, .... ¡Tú eres lo más importante para mí, siempre te lo he dicho! _ Dicho eso, me acerqué más hacia ella, y la abracé muy fuerte, temiendo que este momento fuera un sueño y no realidad.
Ella levantó su hermoso rostro y pude observarla mejor.
Vaya que se puso más hermosa desde la última vez que nos vimos. Su hermosa sonrisa, me cautivo y ahora entiendo porque tiene a todos los de palacio a sus pies, y claro a mí también.
Al tenerla cerca, pude contemplar su hermosa sonrisa, y también pude observar detenidamente su rostro, vaya parecía una delicada y fina obra creada por los mismos dioses.
Sus ojos, esos maravillosos, grandes y perfectos ojos, que son de color marrón; que desde que tengo memoria me roban el sueño, ese delineado negro hace que su mirada sea más impactante, su nariz pequeña y claro sus labios carnosos que ahora están de cubiertos de color dorado y no me dejan ver el verdadero color de sus labios, que es rosado.
Todo en mi princesa es perfecto.
Me separe un poco del abrazo y me apodere de sus manos, saque el cofre donde estaban las pulseras y se la puse en sus delicadas manos.
-- Ábrela y quiero que te las pongas, lo mande hacer especialmente para ti mi princesa, .... ¡Mi amada Isis! _ No puedo creerlo, mientras le entregó el regalo, ella me regalo una sonrisa y yo por un instante creí que no le gustaría.
Me acercó para tomar sus manos, para luego besar el dorso de ambas y proseguí a ponérselas. Eran un complemento perfecto para sus manos. Luego de ponerle las pulseras, levante mi vista para observar su rostro y observe que estaba sonriendo, eso me motivo mucho; y así que sin esperar más puse mis manos en sus mejillas y lo ..........
-- Ring, Ring, Ring, Ring _ Suena el celular.
Graxxx x haber dedicado un poco de su tiempo en leer este capítulo.
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Exitossss y muxas vibrasss postivassss.
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