Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Segundo Sueño: La Cita con el Diablo


Suena un poco trillado ¿No? Pero esta fue una experiencia real y realmente curiosa para una niña de quince años.

-------------------------------------------------

Me encontraba en el restaurante más lujoso del mismisimo París, apreciando la maravillosa vista de noche de la gran ciudad. Esperando a mi cita que prometio no ser romántica aún viniendo al lugar más romántico y elegante que encontro.

Era un espacio bastante lindo, luces amarillas y rojas, y corazones por todo el lugar. Es el lugar perfecto para negociar con el diablo. Miraba para todos lados sin idea de que hacer durante la espera. Jugueteaba con el mantel rojizo que sostenia los platos listos para recibir la comida. Observaba la carta finjiendo pensar qué escoger cuando enrealidad no dejaba de pensar en qué acordariamos el diablo y yo. Hasta que al fin, llegó.

-- Buenas tardes, señorita. Me presento ante usted, soy... Michael, esta noche. ¿Le gustaría un vaso... De leche? -- Lo miré asqueada. El diablo era rojo, musculoso, gigante, cornudo, con los ojos amarillos, una sonrisa maligna, una barba muy pequeña, un pantalon bien corto y destrozado, y unos... ¿Tacones? Rojo fuerte. Se expresaba usando metaforas y me miraba insinuando algo que en el fondo... No me parecia tan mala idea. ¡Pero no! Estamos aquí para hablar de negocios y cenar, nada más.

-- Sientate y deja de decir estupideces. Soy intolerante a la lactosa y no me interesa tu oferta, eh... "Michael" -- Su nombre me parecia curioso, ¿Por qué lo habra elegido esta noche?

-- Solo bromeaba un poco, preciosa -- Se rió bajo -- Pásame la carta porfavor -- se la pasé con algo de vergüenza -- ¿Qué pedir para mi niña gordita hoy?

-- ¿¡Niña gordita!? Ahora mismo me dices cuál es tu plan.

-- Mi plan, mi plan, amm... ¡Ah, si! Escuchame bien -- Lo mire bien atenta. -- Yo puedo cumplir cualquier deseo que se me pida con amor y cariño, por supuesto, pero... Siempre necesitare algo a cambio. ¿Un alma tal vez? -- pregunto con cautela.

-- Ya, hablamos de eso despues, ahora tú escuchame a mi -- Alzé la voz -- ¡Deshazte de mi hermana!

-- ¿Cuál de todas?

-- La que tú encerraste en mi cabeza para joderme la vida. -- respire hondo -- Te dare lo que quieras, pero ya nadie la soporta, yo... La quiero mucho, si pero así como la quiero, la quiero lejos y quiero que sea feliz sin estar encerrada en un mundo donde nadie nos cree y nadie la quiere... -- bajé mi tono de voz, en modo de suplica. -- ¿Por favor?...

-- Me das tanta... Tanta ternura, preciosa. -- Me miró con sus ojos profundos, se acercó a mi, sosteniendo su cabeza con su mano derecha y me miro con mucho cariño y suavidad. -- Por supuesto que te ayudare, pero necesitare algo muy importante...

-- Te escucho, fuerte y claro -- mire con seriedad a mi negociador favorito.

-- Primero, -- Suspenso, maldito suspenso. -- Necesito lo simple.

-- ¿Lo... Simple?

-- Tu virginidad. Te hare virgen nuevamente para que puedas entregarte a mi. -- ...esto no es lo que esperaba.

-- ...yo ya tengo mi pareja, al amor de mi vida, puedo darte muchas cosas pero ¿Eso? No-- me interrumpió

-- Me daras eso, -- lo dijo como si no me hubiera escuchado -- junto con el libre derecho de manejar tu alma el día que mueras... Te tendré con mucho cariño en mi colección.

¿Qué podía hacer? Vender mi alma al diablo, por... Deshacerme de mi hermana. Pero... ¿Qué más ganare? Es tan imposible para mi corazon decidir ahora que... Volví a escucharla a ella.

"¡No lo hagas! ¡No vale la pena! ¡Prefiero sufrir aquí contigo! ¡Porfavor, perdón, porfavor, perdón!" Dijo mi hermana dentro de mi cabeza.

Nunca la escuche tan indefensa, tan debil, me dio tanta pena que...

-- No.

-- ¿No qué, preciosa? -- dijo él.

-- No acepto el trato.

-- ¿Entonces para qué estamos aquí? Vamos niña, no es nada tan dificil, te tratare con amor y cariño como siempre has deseado ¿No te excita la idea? -- Me dio tanto asco que no lo soporte.

-- Mira, yo... Me amo, y amo a mi hermana, amo a mi novio, amo mi vida y mi muerte sera amada cuando pase. Sea lo que sea que eso signifique. Y no, no acepto, sé que yo te convoque pero... Miranos -- Ambos miramos a nuestro alrededor -- En este restaurante... De este lugar... Una cita... ¿Una cita?... ¡Una cita!

-- Una cita. -- Penoso fue como sonó, penoso fue como se vió el diablo.

-- ¡Una cita! Y no me digas nada más, porque no te escuchare, pides demasiado, en serio. Me has dado muchas lecciones toda mi vida, es como si fueras uno de mis padres y yo.. no puedo aceptar esto, me voy. -- Terminé de hablar, tire la carta, y me fuí sin más.

El diablo quedo perplejo, sin palabras. Decidio quedarse a comer para gastar sus penas, y pensar con detenimiento cada palabra que salio de su pequeña. ¿Una cita? ¿En qué estaba pensando?

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro