(la letra de la canción no tiene nada que ver con el capitulo salvo la parte inicial, si quiere saber que parte de la canción es cantada por los personajes, vayan al tiempo 0:56 )

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- ¡I'm your filter!

- ¡ne mame ssuiwojwo!

- ¡Tomas!

- Okay- susurra él- eottae jogeum neukkimi wa? ajik mojara?, (Yes) girl, you have your chance

No puedo contener la risa

Estaba con Luna y Tomas cantando a todo pulmón una de las canciones favoritas de Luna, la canción era coreana y después de que ella la escuchara casi todo el tiempo, la habíamos terminado aprendiendo, aunque no quisiéramos, no negaría que también era pegadiza

- No puedo creer que me haya aprendido esa canción- decía avergonzado Tomas

- Vamos, saber bien que mis chinos cantan hermoso- Luna estaba orgullosa

- No lo puedo aceptar

- Vamos, sabes que te gusta, ¿O no Sara?

- Luna, has ganado, él ya cayo con tus chinos- la apoyo, aparte, sabía que si le daba la contraía, no habría momento en el que parara.

Estábamos en la camioneta del padre de Tomas, íbamos a nuestro lugar secreto, aunque dudaba mucho de que fuera secreto, después de todo era un lago descubierto por Tomas y su padre en una de sus muchas excursiones. Cada que nosotros estábamos hartos de todo lo que nos pasaba simplemente nos escapábamos, nos saltábamos la escuela y pasábamos todo el día en ese lugar, preparábamos comida, ya sean simples snacks, sándwich y bebidas, era nuestro día de campo, lo pasábamos genial, éramos el trio perfecto.

Pasamos todo el camino cantando, creábamos nuestro playlist con las canciones que a cada uno le gustaba, por suerte nuestros gustos no eran muy distintos y lográbamos pasarla muy bien, aunque Tomas negara que le gustaba el K-pop.

-Bueno señoritas, hemos llegado

Tomas detiene la camioneta, nosotras bajamos de inmediato, y como si fuera algún día de playa, comenzábamos a bajar las cosas de detrás de la camioneta y en poco tiempo ya habíamos formado nuestro pequeño fuerte, porque si señores, Luna y yo teníamos esa manía, nada de carpas, todo era sábanas anudadas en arboles con unas que otras ramas largas, dentro de esta poníamos algunas almohadas traídas, la comida y bebida y uno que otro juego de mesa. A veces me ponía a pensar y me daba cuenta que estas escapadas parecían más pi jamadas matutinas.

Tomas me estaba ayudando con las ultimas cosas cuando Luna nos tira agua y grita

- Vamos chicos, el agua esta vez está muy fresca ¿Qué esperan?

Si, ya se había metido al lago

- Espérame loca, ¡Haya voy!

- ¡Espera!

No debía haberlo incentivado, Tomas se quita el polo, corre y se lanza, Luna se había asustado por la dirección cercana que él había tomado, pero al final nadie salió herido

- De esta no te libras ¡Por poco me matas! – grita Luna exaltada

- Sabes que no es verdad, me meterían a la cárcel si así fuera

- ¿Así que si no fuera por eso si lo harías? – Luna fingía estar ofendida

- Obvio – responde el sin vergüenza alguna, poco después ellos dos ya estaban metidos en una persecución sin fin, yo solo miraba de lejos ya que esto era algo de todos los días

Como podrán darse cuenta, yo era la tranquila y mediadora del grupo, muchos dirían que tímida, aunque no lo era en verdad. Aun me sorprende el seguir siendo amiga de ellos, Luna era la fiestera y Tomas el popular, ellos tenían varias personas detrás de ellos por su forma de ser mientras que yo apenas y tenía amigos contándolos a ellos también. Lo bueno era que, a pesar de todo, ellos no cambiaban su forma de ser, eran buenos con todos, amigables también.

-Sara ¡Ven! - ellos me llamaban

Sin darme cuenta me había quedado viéndolos feliz como muchas otras veces, mi vida no era buena, pero cuando estaba con ellos todo lo malo desaparecía, siempre estaría agradecida por tener tan buenos amigos.

Sin desperdiciar un segundo más, me quito me ropa lo más rápido que puedo quedándome solo con mi traje de baño y al igual que Tomas, doy un gran chapuzón.

***

Era mediodía, las horas habían pasado volando, ahora estábamos dentro de nuestro fuerte, el hambre comenzó a atacarnos después jugar y nadar en el lago por horas

- ¡Aquí esta! ¡Los deliciosos sándwiches de la famosa Sara! No cualquiera es digno de probar esta delicia - Luna hacia un show

- He esperado probar esta delicia por días – comenta Tomas

- ¿Alguna delicia sorpresa que haya traído chef Sara?

- Chicos ya...- dije apenada

- Vamos, no seas así, tu comida es deliciosa, todo el mundo debería saber eso

- Chicos, en serio me halagan, pero no creo que sea la mejor

- Cuando seas chef, yo te apoyare y si alguien viene a insultar la comida de Sara lo callare a golpes – si, así era Tomas

- Ni siquiera sé si podre convertirme en chef..., espero que lo que ahorre este año me alcance para entra a la escuela de gastronomía – digo apenada – saben cómo es mi situación, solo espero poder lograrlo

- Sara, tu siempre contaras con nosotros

- Lo sé, por eso mismo quiero lograrlo yo

Esto es lo que pasaba, mi situación económica no era la mejor, era pobre en pocas palabras, aunque nunca me avergoncé de ello, nunca me falto nada, las cosas eran difícil de conseguir, pero no imposibles, había aprendido que con esfuerzo podía conseguir lo que quisiera.

En comparación con ellos, mi futuro era el mas incierto, este año terminaríamos secundaria, esperaba ahorrar lo suficiente para ingresar a la escuela de gastronomía, pero también tenía que ayudar a mi mamá y a mi pequeña hermana, era difícil saber hacia dónde terminaría en verdad el dinero que ahorraría, no podría predecir los gastos o deudas futuras, lo único que le rogaba a dios era que mi madre ya no gastara tanto en la maldita bebida y así evitar costos adicionales. Por otro lado, quería conseguir las cosas por mí misma, Tomas venia de una familia con una economía estable y hasta elevada diría yo y él nunca había dudado en apoyarnos a alguna de las dos cuando teníamos problemas económicos, mas no quería depender de él, sabia el mensaje de su oración, el no dudaría en pagarme la universidad, sus padres me conocían y sin duda estarían de acuerdo, mas no quería eso, solo si ellos eran mi última opción, lo aceptaría, pero sin duda en algún futuro le regresaría todo lo que ellos habrían invertido.

Les parecerá apresurado todo esto, pero no era la primera vez que este tema llegaba a nosotros, Tomas muchas veces me lo había ofrecido, hasta sus padres me habían dicho que, con cualquier problema, ellos me apoyarían, eran una gran familia, buenas personas, pero no quería depender de ellos.

De pronto un fuerte aire nos azota y las toallas que habían estado colgadas en las ramas salen volando, la de Tomas y Luna caen en la tierra, mi suerte no fue la misma, voló un poco más hasta llegar al lago.

Decido alejar estos pensamientos, no era el momento ni el lugar de pensar así, se suponía que debía ser un día feliz, yo no malograría el día.

- ¡No! – exclamo – tendré que ir a verla

- ¿Una carrera? – propone Tomas

- Una carrera ¿Eh?- se emociona Luna

- ¿Carrera? ¿Por ir a ver mi toalla? Mmm... Trato – ni bien acepto salgo corriendo obteniendo ventaja por sobre ellos ya que yo me había parado desde antes mientras que ellos seguían sentados

- ¡Tramposa! – grita Tomas

Para ese tiempo ya la mitad de mi cuerpo estaba sumergido.

Comienzo a nadar, de forma rápida, mi toalla había volado hasta el centro del lago, para suerte nuestra el lago no era tan profundo. Solo nado tratando de ganar

Para cuando llego al centro, no veo mi toalla flotar, comienzo a bucear tratando de encontrarla en el fondo, pero no aparece por ningun lado ¿Dónde estará?

- ¿La ves? – me pregunta Tomas desde lejos

- ¡No! – grito por la lejanía- Tal vez este mas haya, nadare un poco mas

- Ok

- ¡Chicos espérenme! – nos llama Luna

- El ganador es quien consiga la toalla primero

Sigo nadando alejándome mas de ellos ¿Por qué no la encuentro? Es roja, debería verla, pero no aparece en ningun lugar. Nado y buceo comenzando a sentir cierto dolor en el hombro izquierdo, asumo que es por el cansancio y sigo buscando, pero pronto el dolor incrementa y considero que es mejor regresar

- ¡Mierda! - ¿Por qué me dolía tanto? Conforme pasaban los segundos el dolor incrementaba, el miedo y nerviosismo se apodera de mí y pronto me fallan las piernas ¡No podía nadar!

- ¡Chicos! ¡Ayuda! ¡Ayu- me comenzaba a ahogar ¿Por qué? Debía mantener la calma, lo sabía bien, pero el dolor era ahora insoportable ¿Qué está pasándome?

- ¡Sara!

- ¡Aquí! – Alzo mi otro brazo ya que el izquierdo me era imposible mover, comienzo a sentir un martillazo en mi cabeza, era como si alguien me golpeara, aunque sabía que no había nadie a mi alrededor.

No sabía diferenciar cual parte dolía mas, ya no podía pensar o si quiera gritar, mi único pensamiento era sobrevivir, movía mis piernas tratando de no hundirme más pero pronto el cansancio me alcanzo

- ¡Sara! ¿Dónde estás?

- ¡SARA!

No podía rendirme aquí, necesitaba que ellos me encontraran, no moriría aquí, tenía un futuro, tenía metas por cumplir.

-¡ Chi-Chicos! – fue lo último que logre decir