Capítulo 17
¿Los delató o siguió ocultando su secreto?
***********************************************************************************************
Alec se tensó. Oh Dios, ¿qué había hecho? Su mente estaba llenando los espacios en blanco, con lo que Catarina le había dicho hasta ahora y lo que Clary le había contado antes. Él casi no quería escuchar, aunque sabía que debía hacerlo.
-"No hay excusa para lo que hice a continuación y hasta el día en que deje esta tierra lo lamentaré. Estaba tan dolida, tan enojada y sólo quería quitarle algo que sabía significaba mucho para él. Salí de la casa a toda prisa, subí al auto, fui a la casa de sus padres y les dije lo que había interrumpido. Por supuesto, estaban echando humo. Especialmente su padre. Salí de esa casa y fui a la de mis padres para quedarme allí"
-"Más tarde descubrí que el padre de Magnus y el mío habían formado una especie de grupo y fueron a la casa, agarraron al pobre Elías, lo sacaron a rastras afuera y le dieron una paliza antes de ponerlo en la parte trasera de un automóvil, y sacarlo de la ciudad. Por qué se había quedado y no había tratado de irse, no lo sé. Tal vez Magnus pensó que iría a algún lado a tranquilizarme y tendría tiempo de enviar lejos a Elías. Mi padre quería darle el mismo trato a Magnus y lo habría hecho, excepto que su padre le dijo que el mejor castigo era abandonarlo por completo. No más dinero, no más familia. Nada. Sin embargo, le dio una buena paliza"
-"Terminé volviendo por ahí un par de días después, cuando me calmé un poco, para sacar algunas de mis cosas. Magnus se veía terrible. Tenía un ojo medio cerrado y amoratado donde su padre lo había golpeado, y tampoco creo que haya comido en todo ese tiempo. Todavía estaba tan enojada y herida por todo, que no me importaba que estuviera sufriendo. Pero todavía debió existir una pequeña chispa de preocupación porque no pude abandonarlo. Tal vez fue la culpa que sentí por haberlo entregado a sus padres, no lo sé, pero regresé"
-"Estaba tan débil y tan enfermo que casi me muero cuando lo vi. Yo quería que lo revisara un médico, pero él se negó. Pensaba que habían matado a Elías y pensaba que, si él también se iba, podrían estar juntos en un lugar donde ya nadie pudiera lastimarlos. No tenía idea de si él tenía razón o no, pero estaba tan herido y menospreciado como yo me sentía, y odiaba verlo así. Añorando al amor de su vida. Era una pesadilla. Me quedé con él, sabiendo que no tardaría mucho en este mundo y no quería verlo morir solo. Me sentí tan atormentada por la culpa, todo lo que deseaba era haber podido retractarme. Pero, por supuesto, era demasiado tarde para eso, así que hice lo único que podía pensar, tratar de resarcir el daño"
-"Resulta que mi familia provenía de una larga línea de descendientes asociados con la brujería. Oh, sé que suena loco y siempre lo mantuvimos en secreto, pero había una persona en cada generación que parecía portar ese gen. En el momento en que nací, se convirtió más en el cuento vejas que en cualquier otra cosa. Mi abuela por parte de mi madre había sido la última que se suponía tuvo el poder, a falta de una mejor palabra. Recuerdo que, cuando era muy pequeña, una vez me dijo que yo era el siguiente, que ella podía sentirlo en mí. Mamá siempre dijo que solo estaba inventando historias para divertirme, así que nunca le presté atención"
-"Recuerdo haber encontrado un gran libro viejo en su casa, con todas estas páginas de hechizos escritas a mano. Pensé que todo era fascinante, como un cuento de hadas o algo así. Cuando ella murió, ella me dejó ese libro en su testamento. Todavía estaba en la casa y corrí a buscarlo, revisando cada página tratando de encontrar algo que pudiera usar para ayudar a Magnus. Encontré un hechizo que pensé ayudaría, pero la redacción era incorrecta. Entonces, lo cambié. Arranqué un pedazo de papel del libro y lo escribí"
Tu mundo se convertirá en su noche,
En su corazón encontrarás tu luz.
Desbloquea su alma y dale paz,
Su salvación será tu liberación.
-"Un tanto poético, lo sé, pero cuando estás sentado junto a alguien que a punto de respirar su último aliento, fue lo mejor que se me ocurrió"
Alec sintió una sola lágrima correr por su mejilla. La idea de que Magnus terminara así le pegó más fuerte de lo que pensaba. Jesús, qué horrible manera de morir. Él sabía que literalmente alguien no podía morir de un corazón roto. ¿O sí podían? Pero sonaba como lo más cercano que podría haber a eso. El hechizo. Era el mismo que encontró enrollado en la caja del dormitorio. Quería descifrar las palabras y su significado, pero estaba tan abrumado ahora que era difícil precisar un solo pensamiento.
Catarina soltó una risita profunda.
-"Tu mente suena tan ocupada como una caja de abejas en este momento. Es mucho para asimilar, lo sé, pero creo que necesitabas escucharlo. Espero que no me odies demasiado por mi parte en todo esto. No podría culparte si lo hicieras. Me odio por lo que hice. Sin embargo, el hechizo era lo único que podía hacer para expiar mis pecados. He vivido demasiado tiempo para seguir torturándome sobre todo lo que ocurrió, aunque siempre lamentaré la forma en que manejé las cosas. Yo era joven, ingenua, inexperta en el mundo. Nada lo justificará jamás, pero finalmente puedo tener un poco de paz ahora que estás aquí"
Alec la miró, sorprendido.
-"Verás, nunca creí realmente que tenía la habilidades que mi abuela siempre dijo que poseía. Y mi madre ciertamente nunca me animó a eso, diciéndome que todo era solo un cuento y tonterías. Cuando dije esas palabras sobre Magnus esa noche, fue la única vez que intenté acceder a esa habilidad. La primero y última. Nunca lo intenté de nuevo y nunca lo haré. Parte del regalo familiar, si se puede llamar así, era poder comunicarse con personas del otro lado. Así que, naturalmente, después de que Magnus falleció, tenía curiosidad acerca de si mi hechizo realmente había tenido lugar"
-"Y uf ¡Vaya día que fue ese! Regresé a la casa unos días después del funeral. La casa y todo lo que había en ella me pertenecía, aunque no quería nada de eso. No podía vivir en la casa donde él había muerto y, además, tenía demasiados malos recuerdos para mí. Tenía toda la intención de venderla, así que volví para comenzar a empacar las cosas. Apenas llegué a la puerta cuando las cosas comenzaron a volar hacia mí. Tazas, adornos, jarrones, cualquier cosa que no haya estado clavada. Era como estar en una zona de guerra. No podía ver a Magnus, pero podía sentirlo allí. Y muchacho, el hombre estaba enojado. No puedo decir que lo culpe"
-"Después de que él se calmó y hablamos, bueno, hablé y luego él de alguna manera me respondió en mi cabeza, me di cuenta de que no podía vender la casa. Nunca sería de nadie en realidad, excepto suya. Estaba atado a ella y sus terrenos, hasta que esa persona especial finalmente apareciera. Y ese alguien eras tú, querido muchacho. Así que ahora, después de todos estos años, sé que mi último esfuerzo por reparar el daño funcionó"- Catarina se inclinó y le dio unas palmaditas en la mano.
Los vellos de los brazos de Alec se erizaron. ¿Él también era parte de todo esto? Su subconsciente estaba parado allí, con los brazos cruzados, el pie dando golpecitos en el suelo y con el ceño fruncido.
Bueno, dah, Genio, ¿no has estado escuchando nada? Eres el elegido. Lidia con ello.
Menos mal que deseaba una vida tranquila. ¿Qué pasó con el concepto de la pequeña y tranquila ciudad donde nunca pasa nada emocionante? Alec no estaba seguro de cómo se sentía con respecto a su nuevo título. Parecía llevar mucha presión sobre una persona, especialmente una que nunca antes había tenido una relación. ¿Qué pasaría si él no fuera quien pensaban? No era nadie especial después de todo, bueno, no desde su punto de vista. Se frotó el rostro con las manos, tenía tanto en que pensar ¿Y cómo iba a decirle a Magnus que sabía todo esto? ¿Se enojaría con él? No tenía idea. Entonces algo se le ocurrió.
-"Catarina, hay una cosa que necesito saber. Sé que todo esto sucedió hace más de cien años, no quiero entrometerme, ni sonar grosero, pero ¿cómo es que sigues aquí? Ese hechizo no reboto contra ti y tú también eres un fantasma, ¿verdad?"- casi se retractó de las palabras, sonaban tan tontas para sus oídos, pero Catarina simplemente lanzó otra profunda risa.
-"Oh, muchacho, solo dilo como es ¿Por qué no estás muerto y ya? Es posible que hayas respondido tu propia pregunta. La verdad es que no tengo ni idea de por qué todavía sigo aquí, podría darte la misma versión que le doy a la gente de la ciudad cuando aparezca el tema, y decir que es porque tengo buenos genes, pero creo que la verdad está más relacionada con lo que acabas de decir"
-"Cuando lancé ese hechizo esa noche, no tenía ni idea de qué diablos estaba haciendo. Me sorprende que no haya estallado en llamas, desaparecido o como eso. El hecho de que funcionara tan bien como lo hice lo atribuí a pura y mera suerte. Sin embargo, creo que algo de eso, sea lo que haya sido, me afectó. Huh, probablemente el universo me castiga por causar todo el alboroto en primer lugar. Magnus falleció cuando yo tenía veinticinco años, eso fue hace ciento diez años, así que supongo que eso me deja en ciento treinta y cinco años"
Ella rió y negó con la cabeza. Alec la miró boquiabierto. Santa mierda, ¿ella era de verdad? Tenía que serlo, estaba sentada justo en frente de él.
-"No es de extrañar que mis viejos huesos duelan en el frío y tengan más chasquidos, rechinidos que un plato de arroz crujiente. Ya pasé mi fecha de caducidad, eso es seguro"- Catarina se levantó lentamente y agarró las dos copas de la mesa.
-"Bueno, sospecho que tienes mucho en qué pensar ahora y ya te he robado bastante tiempo. Ve a casa, Alexander y reflexiona sobre las cosas. Sólo recuerda, ese hombre ha esperado mucho tiempo por ti y se merece la felicidad. Tú también. Se honesto con él. No pienses que estará muy contento con nuestra charla de hoy, pero creo que merecías saberlo. El amor tiende a hacer que quieras azucarar las cosas para las personas de forma que no los lastimes, pero a veces no se puede evitar. Las mentiras duelen mucho más que cualquier verdad, esto lo sé con certeza. Magnus ha estado solo por mucho tiempo, así que sus habilidades de comunicación podrían estar un poco oxidadas. No dejes que se cierre y no hagas lo mismo. No sé cuál es el problema que te trajo hasta aquí en primer lugar, pero sé que no fue nada bueno. Ahora vete a casa, a esa vieja le vendría bien un poco de arreglo, revisa el grifo del lavabo en el baño, tiende a gotear horriblemente en el invierno"
Catarina prácticamente lo empujó por la puerta y Alec entendió muy bien la indirecta. Hizo una pausa por un minuto cuando llegó al primer escalón y se volvió hacia ella.
-"Gracias por compartir todo eso conmigo, Catarina. Sé que revivir todo no pudo haber sido fácil"
-"Mi muchacho, si he aprendido una cosa es que todo este tiempo ha calmado mucho el dolor. No completamente, pero lo suficiente como para poder vivir con ello. Tienes razón, no ha sido fácil, pero el tiempo lo hizo más fácil. Vete ahora. Y no te conviertas en un extraño, no me importa lo que diga ese hombre, ven a visitarme cuando quieras"
***********************************************************************************************
La verdad, Catarina me da un poco de penita...
Espero que les haya gustado, nos leemos en la siguiente actualización. Que tengan una muy linda semana😘🤗
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro