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También a quienes dejan sus votos y continúan leyendo, mil gracias

Por fin, sabremos un poco más de Magnus, y ¿qué relación tiene Catarina en todo esto?

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-"He estado esperando esto desde la primera vez que te vi, ¿sabes? Estaba segura de que aparecerías con el tiempo, me alegra que finalmente lo hayas hecho"- dijo Catarina y soltó una pequeña risilla- "Creo que ese hombre tuyo probablemente piense las mismas cosas. Ha sido un largo camino, para ambos de nosotros"

Alec removió su té pensativamente y miró a Catarina. Realmente deseaba tener el coraje de simplemente ir directo al punto y preguntarle de qué demonios estaba hablando, pero tenía la sensación de que todo se revelaría a su tiempo. ¿En cuánto tiempo era el problema? Cuantos más indicios ella le daba, más intrigado se ponía.

Catarina tomó una galleta y le dio un mordisco, antes de soltar otra risa. Si no lo supiera, diría que estaba disfrutando haciéndolo esperar así. Tal vez Magnus obtuvo consejos de tortura de ella. Agachó la cabeza mientras sus mejillas se calentaban y una sonrisa curvó sus labios al pensar en la noche anterior.

-"Pensando en él, ¿verdad? No puedo decir que te culpo. Nuestro Magnus es bastante inolvidable. Créeme, estoy bastante segura de que tengo los derechos para decir eso"

No podía ver su mirada detrás de esas gafas oscuras, pero apostaría cualquier cosa a que lo estaba mirando. ¿Cuánto podría verle, de todos modos? Si Clary no se lo hubiera contado, jamás se habría dado cuenta que era ciega. Bebió un sorbo de té antes de terminar la galleta y cepillarse las migas de sus manos.

-"Te lo concederé, Alexander, pensé que ya me habrías llenado de preguntas para este momento. Tienes paciencia y buenos modales, buena combinación. Entonces, vamos, sé que quieres preguntarme cosas, así que pregunta. No hay nadie más por aquí ante quien vayas a verte como un tonto. Sólo nosotros. Las únicas dos personas en esta tierra que están conectadas con Magnus Bane. Pregunta"

Ella se recostó en la silla con una pequeña sonrisa en sus labios. Alec respiró profundamente. No estaba seguro de por qué se sentía nervioso de preguntarle algo. ¿Era porque no quería sonar como un bicho raro hablando con un casi completo extraño acerca de tener una relación con un fantasma? ¿O era porque tenía miedo de lo que ella le diría? De cualquier forma, sabía que necesitaba escucharlo, cualquiera que fuera el resultado.

-"Creo que lo primero que quería preguntar era, ¿cómo sabes sobre Magnus? ¿También viviste en la casa una alguna vez? ¿Oíste hablar de él cuando eras más joven o algo así? ¿Él es la leyenda urbana o...?"- Catarina comenzó a reír y levantó sus manos en un gesto de rendición.

-"¡Vaya, vaya! No hay nada que te detenga una vez que empiezas, ¿verdad?"- rió y se acercó dándole una palmadita juguetona en el brazo- "Me imagino que eso es algo que a él también le gusta de ti, ¿no es así?"

Alec se puso rojo brillante y soltó una risa avergonzada. Wow, eso se volvió personal muy rápido y podría haber sido intuitiva sobre algunas cosas, pero obviamente no sabía que todavía no habían tenido relaciones sexuales. Gracias a Dios.

-"Lo he vuelto a hacer, ¿no? Te hice sonrojar. Lo siento, anciana boquifloja. Siempre ha sido mi problema, me temo. Podría decir que esa es la razón por la que Magnus está donde está hoy. Pero me estoy adelantando, bueno ¿quieres saber cómo lo conocí? Bueno, eso fue cuando era niña. Y no hagas cuentas, jovencito, basta decir que no soy una polluela"

-"Magnus era el único hijo de uno de los terratenientes más ricos del distrito. Le dieron todo lo mejor, las mejores escuelas, la mejor educación, todo. Un joven muy elegible. Por supuesto, sus padres esperaban que él encontrara una buena chica, se estableciera, y procreara un heredero o dos para hacerse cargo del negocio familiar; pero Magnus estaba demasiado ocupado pasando un buen rato para eso. Lo enviaron para su educación a una escuela de lujo en la ciudad, pensando que eso lo calmaría, pero creo que sólo lo empeoró"

-"Regresaba para las vacaciones y pasaba su tiempo en los bares, siempre con una multitud a su alrededor. Nunca anunció el hecho de que prefería la compañía de los hombres, por lo que todas las chicas locales prácticamente se le arrojaban encima. Sabes que es una persona muy carismática, muy apuesto, así que no puedes culparlas. Y siento decir que también fui una de esas chicas. No pude evitarlo. Simplemente parecía atraerme, como una polilla a una llama. Magnus nunca había estado con ninguna otra chica de por aquí, así que todos pensamos que probablemente tenía alguien en la ciudad. Sus padres deben haberlo estado presionando un poco para conseguir una esposa, así que cuando me invitó a salir en una de las ocasiones que estaba en casa, no pude creer mi suerte"

-"Oh, pasé horas preparándome para nuestra cita y vino a buscarme en el lujoso carruaje de sus padres. Él me llevó al único restaurante que teníamos aquí y fue un perfecto caballero todo el tiempo. Recuerdo que estaba tan nerviosa por la idea de que él me besara, cuando volvimos a mi casa casi me trepaba por las paredes de los nervios, pero nunca lo hizo y no sabía si debería sentirme aliviada o decepcionada"

-"Entonces, pareció que establecimos una especie de rutina después de eso. Cada vez que él regresaba a casa me invitaba a salir y, por supuesto, le decía que sí. Después de la tercera cita que tuvimos, sin embargo, algo había cambiado. Parecía diferente de alguna manera. No podía entenderlo, pero podía decir que algo estaba pasando. Una noche, escuché a mis padres hablar sobre el hecho de que sus padres realmente estaban presionándolo para encontrar una esposa, ellos querían retirarse del área comercial de la propiedad y dejar que Magnus se hiciera cargo. Oh, mi corazón latió con fuerza, al escucharlo. Estaba segura de que iba a ser la afortunada que ganaría la mano del soltero más codiciado de la ciudad"

-"Justo después de esto, Magnus llegó por mí un día y fuimos a lo que es tu casa. Orgullosamente me dijo que acababa de comprar todo por su cuenta, que ni siquiera sus padres lo sabían. Pensé que la estaba comprándola para nosotros, que no quería vivir en la gran casa de la finca cuando se casara. Estábamos de pie en el jardín mirándola juntos, el sol nos calentaba, se veía tan guapo en su ropa fina y olía tan bien, no sé que se apoderó de mí. Lo siguiente que supe fue que le eché los brazos al cuello y lo besé tan fuerte como pude"- Catarina dejó de hablar y negó con la cabeza, como si no creyera sus propias palabras.

Alec estaba fascinado. Y confundido. Era difícil asociar a Magnus como el hijo de alguien o cómo había sido su vida en una era completamente diferente. Aunque, ¿le habían gustado las chicas alguna vez? No parecía ser así, pero Alec estaba casi temeroso de lo que Catarina pudiera decirle a continuación. Parecía que los padres de Magnus lo estaban presionando para que adoptara un estilo de vida que no quería, debió haber sido tan difícil mentir.

-"Odio tener que contarte lo que sucedió a continuación, pero si no lo hago, no tendrá sentido lo que ocurrió más adelante. Hay algunos detalles que dejé fuera sobre cosas que probablemente deberías saber. En primer lugar, mi familia había sido una de las más pobres de la ciudad. Papá trabajó en la Finca Bane y mamá se dedicaba a la costura, y hacía la limpieza de la casa en lugares más acomodados, pero ninguno de ellos ganaba mucho dinero. Por lo que, cuando Magnus me invitó a salir, mis padres pensaron que estaba todo resuelto y, francamente, yo también"

-"¿Recuerdas que dije que cuando Magnus había regresado a casa la última vez parecía diferente? Resultó que, aparentemente, su padre había ido a la ciudad por negocios y decidió pasar por la escuela y visitar a su hijo. Todo estaba perfectamente bien, excepto que cuando llegó a su dormitorio, Magnus no estaba solo. Lo atrapó con las manos en la masa con un chico y, por supuesto, todo cayó como un globo de plomo. Tiempo después, Magnus me dijo que su padre simplemente se acercó a donde estaban sentados en la cama, cogió a este pobre chico y lo tiró por la puerta, lo suficientemente fuerte como para que se estrellara contra la pared y le botara un diente. Luego agarró a su hijo por la parte delantera de su camisa y lo estrelló contra la pared, procedió a decirle qué repugnante pedazo de basura era y que si alguna vez oía hablar que estuviera haciendo eso otra vez, le quitaría cierta parte del cuerpo. Dejaré que tu imaginación adivine de lo que estoy hablando"

-"Fue entonces cuando le dijo que sólo se le permitiría regresar a su hogar si elegía una esposa y olvidarse de todas esas tonterías, como él las llamaba. Magnus no era estúpido, sabía que su padre había estado hablando en serio. No era extraño que eso le sucediera a alguien que se presumía inclinado a esas maneras. Y creo que también sabía que tampoco podría renunciar a esa parte de él, por eso había comprado la casa en medio de la nada, sin vecinos, lo suficientemente lejos del pueblo para no ser demasiado accesible, perfecta para lo que él quería. El problema era que no había contado con ser atrapado por su padre. Entonces, la casa terminó siendo más una prisión que un refugio. Después de haber sido forzado a un matrimonio que ni quería, ni deseaba tener, se convertiría en el hogar para él y su nueva esposa"- hizo una pausa, más para dejar que Alec asimilara lo que acababa de decirle, que por efecto dramático.

Alec ahí sentado, aturdido, miraba a Catarina en un silencio atónito. ¿Magnus había estado casado? ¿Con una mujer? Estaba demasiado asustado para preguntar y ahora casi completamente seguro de la respuesta que recibiría, sólo necesitaba la confirmación.

-"¿Quién fue la mujer a la que le pidió matrimonio?"

Ella lo miró y dijo- "¿En serio me lo estás preguntando, después de lo que te acabo de decir?"- dijo ella, suspiró y respondió de todos modos, tomando el camino que él había estado pensando.

-"Fui yo, Alexander. Yo me convertí en la esposa de Magnus. No era completamente ingenua, sabía que realmente no me amaba; que sólo me preguntó porque no había sido tan insistente como las otras chicas de la ciudad, y no se había enamorado de él. Pero creo que después de que lo besé, ese día en el patio delantero, en algún lugar de mi mente supe que sucedía algo más, y no era sólo su falta de voluntad para casarse. Yo sólo había besado a uno o dos chicos antes de ese día, así que mi experiencia era muy limitada, pero cuando besé a Magnus, incluso yo supe que no debió sentirse de esa forma. Creo que tú podrías saber una cosa o dos sobre eso"

Una ceja oscura se elevó sobre el borde o las gafas oscuras y la comisura de su boca se curvo cuando Catarina le dirigió una mirada cómplice. Alec casi se estremeció. ¿Cómo demonios sabía ella todo esto sobre él? ¿Era realmente tan transparente como Magnus había dicho? Y si lo era, ¿cómo demonios alguien ciego era capaz de verlo?

-"Sí, algo así, supongo"- dijo Alec, bajando la mirada hacia los restos fríos de su té.

Su mente regresó a esa horrible noche en el bar, después del funeral de sus padres. Incluso borracho y tan perdido por el dolor como lo había estado, aún podía recordar la manera en que se sintió cuando sus labios habían hecho contacto con los de Jace. Había sido lo más indiferente que había sentido. Tan cálido y maravilloso como besar una roca fría. Incluso sin experiencia previa, supo de inmediato que no le habían devuelto el beso. El contraste entre cómo se sintió eso y la forma en que Magnus lo besaba era totalmente opuesto.

-"Sí, sé que sabes lo que quiero decir"- dijo Catarina y continuó su relato- "Pero yo todavía era lo suficientemente joven y estúpida como para quedar atrapada en el romance de todo. Casarme con lo mejor del distrito y convertirme en parte de una familia adinerada era una oportunidad demasiado buena para dejarla pasar. Todo lo que podía pensar era que sería capaz de tener todos esos bonitos vestidos y pertenencias que siempre había querido, sin mencionar a un esposo joven y apuesto, incluso si él no me amaba. También fui lo suficientemente estúpida como para pensar que podríamos aprender a amarnos el uno al otro. No tenía idea de las verdaderas razones por las que Magnus era como era"

-"Así que, por supuesto, el gran día fue planeado y tuvimos la boda más bonita que la ciudad haya visto. Recuerdo mi cara dolía por sonreír tanto durante todo el día. Estaba tan absorta en todo el cuento de hadas que no pude ver cuán miserable era mi nuevo esposo. Mirando hacia atrás, incluso en las fotografías parecía tan frío y triste. En ese entonces confundí esa mirada con ser un joven tan serio, decidido a jugar el papel de rico terrateniente que su padre había creado para él. Fue años más tarde cuando me di cuenta de que esa mirada determinada era más bien una de resignada derrota. Lo que ese pobre hombre debe haber pasado ese día. Debió haber sentido que lo llevaban a su propia ejecución. Ahora que lo pienso me duele el corazón, pero era felizmente ignorante"

-"Para su crédito, Magnus me trató muy bien todo el día. Siguiendo la corriente y actuando como un nuevo esposo respetuoso, aunque sin sentimiento alguno. Una vez más, estaba con los nervios de punta por la noche de bodas, aunque Magnus sí tenía fama de ser un mujeriego, no tengo idea de donde se había originado el rumo. Él nunca fue visto con otra chica además de mí. Creo que comenzó por la forma en que actuaba cuando regresaba a casa. Nuestra primera noche juntos fue más del mismo comportamiento. No creo que haya demasiadas novias en su noche de bodas, cuyos nuevos maridos no paren de decirles perdón cada cinco minutos. Esa fue la única vez que dormimos juntos. Magnus no se atrevió a repetir el acto y todo el asunto me dejó tan indiferente, que tampoco tenía prisa. Si se supone que el sexo sea así, entonces nunca más quise hacerlo"

Alec se removió incómodo en su silla. Realmente no había esperado escuchar tantos detalles sobre esto. Pero podía entender a ambos. Debió haber sido una experiencia horrible para ambos, especialmente para Magnus cuando ya había estado con otros hombres.

-"Entonces, ¿dónde entra Elías en todo esto?"- le preguntó.

¿Se habían dado por vencidos y se habían divorciado? No veía como una posibilidad que la gente viera el divorcio como algo tan malo como ser gay.

-"Sí, estoy llegando a eso. Llevamos vidas muy separadas. Asistíamos a las reuniones juntos de vez en cuando, sólo por las apariencias; sin embargo, la vida matrimonial estaba lejos del cuento de hadas que me había imaginado. Incluso dormimos en habitaciones separadas"

-"Yo hacía mis cosas y Magnus las suyas. Sus frecuentes viales a la ciudad eran vistos como nada más que lo necesario para su trabajo, así que realmente no me importaba. Ambos grupos de padres nos persuadieron de tener hijos, pero inventé una historia sobre no poder tenerlos. No estuvieron contentos con eso, pero creo que sus padres estaban felices de verlo casado y en una 'relación normal'. Pasaron cinco años hasta que descubrí la verdad sobre él"

-"Salí del pueblo por el funeral de mi abuela y le dije que me iría al menos una semana. Aunque terminé llegando a casa antes. Recuerdo haber entrado ese día y no haberlo visto en ningún lado. Dejé caer mi maleta y me quité los guantes cuando escuché una risa venir desde el piso de arriba. Subí los escalones y entré al pasillo. Me detuve porque reconocí la voz de Magnus, pero no la otra. Y también era de hombre. Asomé la cabeza por la esquina de la puerta de la habitación y ahí estaban, en nuestra cama, desnudos y con las manos juntas, hablando y riendo como nunca antes lo había escuchado. Nunca me había sentido tan conmocionado en toda mi vida"

-"No recuerdo haber bajado las escaleras o haber subido al automóvil, ya teníamos uno para entonces, y me fui. De alguna manera, logré pensar en agarrar mi maleta. Conduje hasta la ciudad, encontré una habitación en un motel y me encerré durante los siguientes tres días. No creo que haya llorado tanto en mi vida, tampoco tenía idea de qué iba a hacer al respecto. ¿Les decía a sus padres, a mis padres? Sabía que sería un infierno para él si lo hacía. No creo que haya pegado un ojo todo ese tiempo tratando de decidirme"

-"Creo que en realidad nunca amé a Magnus, pero le tenía cariño y me trataba bien aunque fuera un poco frío e insensible. Es gracioso a lo que te puedes acostumbrar después de un tiempo. Pensaba que todos tenían un matrimonio como el nuestro, que el romance era para esas novelas cursis y el amor se ganaba con el paso del tiempo, si se tenía suerte. Volví después de que pasaron los tres días y decidí que, si él podía vivir una mentira así, yo también. Mientras todo pareciera normal y él me tratara bien y me diera libertad, estaría bien"

Alec miró a Catarina con una expresión de dolor. Sólo podía imaginarse lo que le había costado regresar. ¿Cómo parendes a vivir con ese tipo de conocimiento? Él se estremeció. Le recordó cómo se sintió a raíz de su beso con Jace. Era como caminar sobre brasas todo el tiempo. Horrible.

-"Duró otros doce meses antes de que pudiera conmigo. Creo que Magnus sabía que algo me pasaba y me preguntaba si estaba bien, por supuesto siempre lo negué. Se estaba acercando su cumpleaños y quería invitar a nuestros padres a cenar. No recibíamos muchos visitantes, así que pensé en hacer un esfuerzo. Todavía seguía viajando a la ciudad regularmente y ahora sabía que no era por trabajo. Magnus debía haber estado viéndose con él. Cada vez que se marchaba mis celos crecían. No porque lo amara, o algo así, sino porque me hacía sentir que no era suficiente. No podía hacerlo sonreír, reír y ser feliz como lo había visto ese día"

-"Había organizado todo, y el día anterior me informó que se iría de nuevo. Estaba furiosa. Pasé días cocinando y limpiando para la noche de su cumpleaños y él iba a descartarlo todo para irse a estar con ese otro hombre. Fue nuestra única pelea, pero fue por una tontería. Entonces le dije que conocía su pequeño y sucio secreto. Al principio se sorprendió, pero creo que fue más un alivio que nada. Magnus me suplicó que no les dijera a nuestros padres y que, si seguía con la farsa que era nuestro matrimonio, me daría todo lo que quisiera. El problema era que lo que más quería era un matrimonio de verdad y nunca podría tenerlo sin terminar con el sin amor en el que estaba. Le dije que no diría nada siempre que no lo volviera a traer a la casa. Nunca más. Estuvo feliz de aceptar el acuerdo".

-"Así que me conformé con cosas materiales. Ropa, zapatos, joyas, lo tenía todo. Me fui de vacaciones e incluso a un crucero o dos. Pero después de otros doce meses, ni siquiera eso fue suficiente para llenar el vacío. El final llegó cuando volví de uno de mis viajes y los volví a encontrar juntos. Fue la paja que rompió la espalda del camello. Siete años de vivir una completa mentira finalmente habían pasado factura y desaté el infierno sobre los dos. Me sorprende que no hayan escuchado mis gritos en la ciudad"

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Continua en el siguiente que es cortito...