Capítulo 11- Lobo
La cama estaba llena de sus fluidos, ambos se besaban y tocaban con desesperación, Namjoon amaba tener el cuerpo de Seokjin bajó de él incluso su lobo había querido salir para marcarlo como suyo pero es que como no desearlo si Jin lucía exquisito mientras lo montaba, su intimidad se perdía en aquellos firmes glúteos que pedían por más y él no era quien para negarse.
El sol se reflejaba de una manera erótica en aquel cuerpo pálido y eso lo volvía loco mientras devoraba sus labios de forma ruda - me encantas Namjoon - gemía mientras sentía su orgasmo llegar - Aaahhhhh siiiii- arqueo su espalda dándole un espectáculo al moreno.
- Eres tan sensual Kim - gritó para después llenar aquella entrada.
Seokjin se sentía agotado por lo que sin pensar se recostó en aquel firme pecho mientras Nam le acariciaba su espalda logrando que el alfa rubio se durmiera de inmediato por lo cansado que estaba.
....
Ambos alfas estaban dormidos sus cuerpos estaban relajados fue hasta que aquel fuerte golpe en su puerta empezó a sonar que se despertaron.
Seokjin estaba muy sonrojado pues notó como estaba encima de Nam mientras esté lo tomaba de la cintura a modo posesivo.
Aquel firme pecho moreno fue lo primero que vieron sus ojos y aunque no quería admitirlo la realidad es que le había encantado olfatear a su rey a primera hora de la mañana o quizás medio día pues no sabían siquiera que hora era.
- Kim deja de estar de flojo y levanta ese culo que tienes - escuchó como alguien tocaba su puerta - porqué tienes puesto el seguro - Christopher seguía tocando su puerta con insistencia.— Sabes que al rey le gusta que nos presetemos temprano y ya son casi las dos de la tarde para que sigas durmiendo, tienes suerte pues Choi no ha despertado — decía tras la puerta.
Namjoon veía aquellos ojos verdes inquietos queriendo bajarse de su cuerpo sin embargo lo tomó aún con las fuerza mientras le susurraba cerca de su oído — Haz que se vaya quiero seguir dentro de ti — esa sola frase hizo que su cuerpo se estremeciera.
— Chris no voy a presentarme estoy enfermo — gritó pero escucho una fuerte carcajada de respuesta.
— No mientas Jin, anoche escuché muy bien como cogías con una de tus putas, dime el Omega lo disfruto verdad pues no dejaba de gemir tu nombre como un cualquiera necesitado — Nam gruño al escuchar aquello mientras Seokjin solo se aguantaba las ganas de reír más la burla estaba presente en sus ojos verdes.
— Claro que lo disfrutó soy un excelente amante — los ojos del moreno se pusieron rojos, estaba molesto por la forma en que jin se burlaba.— pero en verdad estoy enfermo, hablé con el rey muy temprano y me dio el día libre, también me dijo que se iría toda la tarde a cabalgar y que no quería ser molestado, así que porfavor avísale a su padre y hermano.— dijo con voz demandante mientras veía al moreno.
— Está bien amigo te creo, por cierto te buscaba la prometida de nuestro rey, dijo que era algo acerca de Min y tú cortejo, también me dijo que necesitaba ver a Choi para algo urgente por eso necesito saber en dónde está — ambos alfas se miraban con nervios pues no querían ser descubiertos.
—No tengo idea de dónde esté, si para el atardecer no ha regresado yo mismo te ayudaré a buscarlo, ahora vete quiero seguir durmiendo — dijo en tono molesto al ver como Namjoon comenzaba a cambiarse, cuando escucharon los pasos alejarse fue que el rubio habló —¿A dónde vas Namjoon?— quiso lucir tranquilo pero era obvio que estaba reclamando algo.
— Qué no escuchaste, Jennie me está buscando — decía mientras abrochaba su pantalón para después recoger aquella fina camisa y comenzar a abotonarla, justo cuando iba hacia la puerta fue que Seokjin habló.
— Quédate — su voz sonaba suave y suplicante.
— Tengo que irme Jin— dijo sin siquiera mirarlo, saliendo a toda prisa tratando de no ser visto, si fuera por él hubiera corrido pero su espalda baja le dolía, el rubio lo había cogido con fuerza y aunque lo disfruto y mucho, justo ahora todo su cuerpo le reclamaba.
Seokjin se había quedado en aquella cama mullida a descansar, no quería admitirlo pero le dolía la forma en que Nam siempre se iba olvidando lo ahí como si no valiera nada.
Justo cuando sus ojos iban a cerrarse su puerta fue tocada y al abrir jamás espero ver a esa persona enfrente.
....
Namjoon se había tomado su tiempo en la bañera, el agua caliente lo relajaba y ayudaba a pensar mejor las cosas como por ejemplo el hecho de haberse acostado nuevamente con su general.
Ninguno de los dos eran raritos pero no negaría lo bien que se sentia estar bajo el cuerpo del rubio, amaba como este dominaba a su lobo haciéndolo tan sumiso que incluso le imploraba por ser empotrado, todo su cuerpo reaccionaba de forma positiva y sexual si se trataba de Seokjin pero eso estaba mal, pronto se casaría y debía olvidarse de aquello, sobre todo porque ambos eran alfas y eso era mal visto por la sociedad.
Cuando estuvo listo salió rumbo al comedor donde sabía lo esperaba Jennie, al entrar se quedó impresionado pues la Omega se veía hermosa luciendo aquel vestido rojo que resaltaba su hermosa piel trigueña bajo aquel rubio cabello.
Jennie era la Omega más bonita que hubiera visto, tan dulce y delicada, así que no debía fallarle, desde ese momento al verla ahí tan tierna y sonrojada se prometió no serle infiel, cuidaría y velaria por el bienestar de su futura esposa y reina.
— Te ves muy linda Omega— dijo mientras se acercaba haciendo que la rubia se pusiera aún más nerviosa.
— Lo mismo digo alfa— ambos se veían con ternura, aquellos ojos verdes brillaban con emoción al ver al ojiazul.
— Me dijeron que tenías preparada una sorpresa — dijo el alfa mientras tomaba a la Omega por el brazo para que está no cayera.
— Así es alfa, vamos— la pareja iba caminando hacia el jardín, los sirvientes que los veían se inclinaban ante ellos con respeto, observando la hermosa pareja que hacían pues eran dos jóvenes que pronto unirían sus corazones y seguramente tendrían cachorros hermosos.
Justo cuando divisaron aquel camino de velas fue que Nam detuvo a la omega.— Jennie antes de avanzar quiero preguntarte algo y espero aceptes— la Omega lo miró con amor mientras esperaba a que continuara— si me permites princesa Jeon, me gustaría obtener tu aprobación para iniciar mi cortejo correctamente — al oírlo la Omega comenzó a saltar emocionada mientras lo abrazaba con ternura.
— Por supuesto que sí alfa — gritó efusiva — es lo mejor pudiste haberme dicho — ambos continuaban abrazados, sus labios estaban a poca distancia por lo que el alfa tomó aquellas delicadas mejillas, estaba seguro de que ella era a quien quería por siempre en su vida por lo que se inclino dispuesto a besarla.
Justo cuando sus labios estaban a pocos centímetros de distancia un ruido extraño los hizo separarse, la Omega se cubrió el rostro avergonzada mientras Namjoon quería despedazar al idiota Omega que estaba devorando los labios de su rubio alfa.
.....
—¿Qué haces aquí Yoongi?— dijo con voz cansada como si le fastidiara ver al Omega.
— Así es cómo le hablas a tu futuro esposo Jinnie, eso jamás lo espere de ti, creí que eras educado— dijo con fingido dolor — hazte a un lado y déjame entrar— mencionó mientras lo avanzaba y entraba a la alcoba del rubio.
— No puedes estar aquí, es mal visto que los omegas estén a solas con alfas.
— Te preocupas por mi— dijo mientras se tocaba el pecho — eso es muy tierno Jinnie, pero no importa ya no soy un virginal Omega así que despreocúpate por mi honra, además si alguien dice algo lo mato o le digo a Jackson que lo haga — dijo son simpleza.
— Debería preocuparme por Jackson, es decir confías mucho en él, acaso entre ustedes hay algo — preguntó mientras veía como el pálido se recostaba en su cama, agradecía haber cambiado las sábanas y darse un baño rápido para no oler a Namjoon.
— Que asco que pienses eso de mi— su voz sonaba indignada lo que hizo sentir mal al alfa— pero no es una mentira, Jackson fue mi "noviecito" por un año, cuando cumplí los 16 y me llegó mi celo él fue quien me atendió y aunque lo disfrutamos ahora solo somos amigos, ya no hay placer de por medio, además no puedo serte infiel Jinnie, no soy como tú pillin que sigues revolcandote con tu rey — su voz sonaba divertida.
— Te dije que entre Nam y yo no hay nada — su seriedad era casi creíble.
— Seokjin no tienes que mentirme, no a mi, tu cuarto apesta a Choi, tienes marcas en el cuello y caminas extraño, le diré a Nam que sea menos bruto al metertela — el gruñido que soltó el rubio lo asusto un poco.
— No vuelvas a repetir eso— dijo furioso mientras lo tomaba del pecho y lo acercaba — entre Nam y yo no hay nada.
— No sabes cómo me excitan los alfas rudos, vamos Jin porque no me demuestras que debo obedecerte — su voz y mirada cambiaron a una llena de lujuria por lo que el rubio se alejó.
— Déjate de juegos Min y dime qué haces aquí.
— Que aburrido eres— dijo con un puchero— la princesa Jeon me envió una carta diciendo que me invitaba a una cena está noche para conocernos mejor en compañía de nuestros alfas, al parecer quiere llevar una buena relación en ambos reinos, eso habla muy bien de ella Jinnie, está juntando puntos a su favor, no puedes dejarte — aquella fastidiosa voz ya tenía arto al alfa.
— Pues no iré— mencionó secamente.
— Tu y yo sabemos que si irás Jin, así que vístete y pon tu mejor cara, quiero que mi prometido se vea radiante y más te vale hacerlo por las buenas, sabes que me altero cuando estoy de mal humor y no queremos eso verdad— al ver como el alfa negaba continúo — bueno comenzaré arreglarme y paso por ti en media hora, ponte muy guapo, está noche opacaremos a la pareja real.— aquella risa lo desquisiaba pero solo alcanzó afirmar en lo que ese loco se iba.
Como lo prometió su puerta fue tocada después de 30 minutos, al abrir se sorprendió, el Omega se veía hermoso, llevaba puesto un traje en color rosa pálido, siendo que por la parte trasera el saco caia en A formando una cola que era adornada con tul blanco y rosado, parecía un ángel, aquel maquillaje discreto resaltaba sus mejillas y lo hacer ver tan delicado.
— Te ves muy bonito Min— dijo con sinceridad.
— Gracias quería verme lindo hoy, aunque no te emociones no lo hice por ti, por cierto te ves muy guapo general, hacemos una pareja perfecta, sabes si fueras mi tipo mataría a Namjoon con tal de quedarme contigo, tendríamos cachorros preciosos te lo aseguro.
— No cabe duda que esa cabecita tuya está averiada — se rió al oír decir eso al pálido.
— Sabes que es verdad, bueno ahora antes de irnos cumple con tu rol de alfa posesivo y márcame — al decir aquello ladeó su cuello, su lobo se alteró ante aquello pues era rara la vez que un Omega permitía eso, obviamente su animal no lo marcaría pero si se sorprendió.
— No quiero enlazarme contigo.— su voz sonaba asustada.
— No seas idiota no nos vamos a enlazar solo quiero que me impregnes tu aroma— el alfa lo miraba con duda— si quieres que Namjoon se muera de celos debes hacerlo.
— No quiero que mi rey haga eso, Nam no me interesa.
— Pues yo sí lo quiero ver molesto, así que apúrate y márcame con tu olor — su cabeza cada vez era más inclinada dándole todo el acceso posible a su cuello, Seokjin no quería hacerlo pero aquel Omega le daba miedo así que sin perder más tiempo lo obedeció.
La nariz del rubio comenzó a recorrer aquel pálido cuello mientras soltaba sus feromonas, sorprendiendose al ver como Yoongi se estremecía, al fin y al cabo era un Omega el cual respondía de forma positiva a las caricias de un alfa.
Buscando molestarlo llevó su lengua hacia la glándula de olor, donde solo dio una pequeña lamida.
— Aaahhh Jin — gimió el pelinegro mientras tomaba con fuerza los brazos del alfa con sus manos, apretando al sentir aquellas feromonas invadir su cuerpo.
Al separarse vio como el Omega tenía sus ojos cerrados, se veía tan frágil y delicado, nada que ver con lo lunático que siempre era.— Si me quieres coger está es tu oportunidad Seokjin — mencionó con simpleza mientras abría sus ojos.
— Tenemos una cena Min y no podemos faltar — el Omega hizo un puchero pero le dio la razón avanzando hasta la salida pues debían ir al jardín donde todo estaba organizado.
Al ir avanzado varios sirvientes se inclinaban con respeto pues sabían el poder que tenía el rey Min pues a pesar de tu imagen tierna era un temible rey para quien lo enfrentaba.
Justo cuando salieron al jardín e iban avanzando vieron a lo lejos aquella pareja por lo que avanzaron más rápido, deteniéndose algunos metros antes pues la Omega comenzó a saltar feliz mientras abrazaba contenta al alfa pelinegro.
Yoongi notó como el semblante de Seokjin cambió, su aura era molesta, triste pero sobre todo había desilusión y desamor en su mirada, obviamente él no iba a permitir que su alfa sufriera no a menos que él causara ese dolor, por lo que simplemente actuó.
— Bésame — y sin que esté lo pudiera detener el pequeño pálido unió sus labios en un beso salvaje — basta alfa alguien puede vernos — gritó para después besarlo de nuevo.
Jin no sabía que hacer solo sabía que estaba molesto con el pelinegro por lo que sus manos fueron a dar hasta aquella pequeña cintura siguiendo el beso, dándole fin en cuanto escucharon el fuerte gruñido que soltó Namjoon, su aroma se hizo más fuerte y sus ojos brillaron en un rojo vivo.
— Estás en problemas Jinnie, el lobo apareció — dijo burlón el pálido mientras se ponía detrás de Jin buscando su refugio, haciendo que el rey se pusiera aún más furioso.
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