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40. Dónde debió quedarse

Shaina POV

Un silencio. Eso es lo que percibo a mi alrededor. El lugar se detiene para mi. Ya se ha detenido desde el momento en el que fijo mi vista en Nick, quien muy ajeno a nuestra presencia, continua hablando con Silvia sin tener ningún amago de remordimiento.

Me mintió, no puedo evitar sentir un dolor en el pecho ante ese hecho.

A mi, su novia, que he pasado el ultimo mes preocupada por él y por esta situacion tan dura que ha tenido que enfrentar, y solo basta la primera oportunidad en la que creo que ha mejorado, para encontrarmelo ya tomando otro camino. Y sin siquiera hacérmelo saber.

El dolor junto con la rabia se apoderan de mi, y se qué se volverá un caos en el momento en el que estos me obligan a ir hacia ellos sin importarme lo que pueda suceder.

—No me lo puedo creer — Mi novio durante años se gira hacia mi, mostrando una gran expresión de sorprendido de mi presencia, mientras que Silvia me detalla casi con una expresión de aburrimiento como si le molestara mi reciente llegada.

—¿Shai?....¿que haces aqui? — Su tono de fingida confusión tratando de distraer del hecho de que está aqui con ella, me hierve la sangre.

— Cierra la boca, mentiroso — Me apresuro a callarlo sintiendo mi sangre en punto de ebullición — No puedo creer que me creyera lo de que saldrias con amigos, y vengo, y te encuentro aqui con ésta — Miro mal en direccion a Silvia a su lado sin importarme ser despectiva con ella — Te aprovechas de que te esté aceptando cada actitud del ultimo mes por el luto de tu padre — Es la primera vez que hablo de su padre con tal ligereza, lo cual nota al desviar la mirada levemente ante mi comentario — Si tanto has cambiado, si ya no deseas seguir a mi lado ¿Por que no eres capaz de decirlo? En vez de seguir como un cobarde evadiendo el tema.

Mi voz intenta quebrarse asi que guardo silencio. No es momento de ser sentimental.

— Shaina, no es eso. Estás pensando mal. No ha pasado nada entre Silvia y yo — Se pone en pie acercandose hacia mi con actitud inquieta.

—¿Por que le mientes, Nicki? — Silvia tambien se pone en pie con una gran sonrisa en su rostro y se acerca moviendo sus caderas de lado a lado en cada paso — Hemos estado toda la noche actuando como una pareja. Recuperando el tiempo perdido.

—¿De que mierda hablas, demente? — Le suelta Nick observandole como una loca.

—No es necesario ocultarlo más — La rubia de botella intenta poner su mano sobre el hombro de Nick, lo cual me hace enojar aún más.

—¡Cierra la boca! — El grito de Nicol la frena a ella y llama la atención de las mesas cercanas que logran captar el ruido por encima de la musica - No vengo a ver como la idiota ésta se toma tales libertades — La mirada de asco que le tira a Silvia la hace revolverse un tanto incómoda — Nick, vinimos a decir lo rata rastrera que descubrimos que es Silvia.

<<Usa a la gente a su antojo — No le da tiempo de responder — se acuesta con quien lo tenga que hacer en el mundo del modelaje con tal de obtener mayores beneficios — Ella habla ante mi silencio - No es una persona en la cual se pueda confiar y no me sorprenderia saber que mucho de lo que les dijo a ustedes para volver, sea mentira. Y creeme, tengo fundamentos y fuentes que me confirman todo esto>>

Nick cambia su expresión a una más seria y por un momento lo veo girar su vista hacia Silvia, sin poder creerse lo que dice Nicol.

—No es cierto, Nicki — Trata de defenderse Silvia bufando — Yo he cambiado, quiero recuperarlos, recuperarte.

—Cambiado de método de mentir querrá decir — El bufido de Nicol interrumpe su monólogo de lastima.

—Debes creerme — Le suplica a Nick, quien en vez de responder, gira su vista hacia mi ésta vez, tal vez, dandose cuenta que soy la unica persona aqui que le puede decir la verdad.

—Es verdad lo que decimos — Digo tratando de empujar el nudo de mi garganta ante el engaño de Nick — No solo por lo que dice Nicol, sino también por lo que hemos observado en ella.

Él asiente, posa su mirada en el piso para luego posarla en Silvia de nuevo, pero es claro que algo ha cambiado en ella. Ya no es serena, ahora tiene tintes sombrios, de rabia y de decepción, recordándome a la mirada que ha poseído desde la muerte de su padre luego de haber dejado atrás la tristeza.

— Que error que cometí creyendote algo de nuevo —La frena cuando quiere decirle algo — Nunca has sido de fiar Silvia, y ésto no me extraña... — Se ríe sin gracia — pero si que me decepciona.

—Nick, yo he cambiado...pero si es cierto que deseaba volver para estar contigo — Confiesa lastimandome aun más.

Tantos meses y Nicol ha tenido razón.

Nick no le responde, más bien se voltea y la ignora, posando su mirada en mí, casi como si acabara de recordar mi presencia. Pero vaya que quiero largarme de aqui, ni tan siquiera puedo mantenerle la mirada ya, no despues de ésto.

Me mintio despues de todo, y no se como volver a confiarle algo despues de eso. Me hace dudar sobre si es la primera vez que lo ha hecho en todos estos años. Al fin y al cabo, no se le da tan mal al parecer.

— Shai... —Toma mi mentón para que lo mire pero lo aparto lo cual es claro que le duele.

—Me mentiste, Nick. No estás aqui con tus amigos — Le escupo las palabras.

—Vendria con ellos, pero me cancelaron — Trata de explicarme con una mirada perdida — Yo me quedé aqui, y fue cuando Silvia llegó, se quedó y la verdad necesitaba hablar con alguien.

Es el colmo.

—¿Y no te es suficiente conmigo en casa? — Mi rabia se hace notar lo cual le toma por sorpresa siendo yo de las personas más pacíficas — Estoy cada dia esperando que me hables, de que te expreses conmigo y lo único que consigo son silencios y comentarios sarcasticos — No me importa estarle recriminando esto ahora, porque ya es suficiente de estar excusandolo con su luto — No me merezco esa clase de trato, Nickkolas — Le lastima que lo llame asi — No con todo lo que hago por ti.

Doy un paso atras apartando la mirada tratando de aclarar el huracán que llevo en la mente y en el corazon ahora, pero no logro dar con una respuesta de que debo hacer. Si seguir o alejarme de todo esto.

—Necesitamos un tiempo, Nick — Suelto finalmente tras unos segundos — Quiero que nos lo demos — Fijo mi mirada en él queriendo dejarle claro mi deseo.

Necesito estar lejos para aclarar mi mente.

—No, Shai... — Me toma por la mano lo cual le dejo hacer — No te alejes, no dejes esto.

—¿¡Cómo eres tan cínico para pedirme eso!? — Aparto mi mano violentamente — ¡Le compraste un anillo! — Le recuerdo sin importarme llamar la atención de las personas cercanas pero solo me gano una mirada confundida de Nick.

— No quieras mentir, tenemos el recibo que encontramos en el bolso de la rastrera — Se apresura a mencionar Nicol detrás de mi que hasta ahora recuerdo que sigue en escena.

—¡Eso es una invasión a mi privacidad! — Se queja ésta.

—Ahora no, rubiecita — La calla con la mano mi amiga que le quita una cerveza a un chico que pasa por su lado antes de darle un sorbo para luego ahuyentar al chico.

—Shaina — Nick me toma de la mano a la fuerza — Eso anillo no lo compré para Silvia. Lo compré para ti — Su confesion me toma como una bofetada por no saber si creerle — Me la encontré ese dia mientras caminaba a la joyeria, lo cual me hace pensar que es claro que me seguía — Le tira una mala mirada a su ex al darse cuenta de las farsas — El punto es que, seguro robó la factura a propósito para crear esta desconfianza.

—Otra razón para odiarla — Menciona Nicol terminandose la cerveza ya y dejándola en la bandeja de un mesero.

—Escúchame — Me pide Nick llamando mi atención de nuevo — Pensaba pedirte matrimonio en el viaje que teníamos planeado para este verano. Claro antes de que retrasamos todo por la muerte de mi padre — ¿No me mintio? — Shai, disculpame por todo éste ultimo mes, tienes razón al decir que no merecias ese trato por más que yo estuviera ahogándome en mi dolor — Lo noto tragar mientras sus ojos se cristalizan - Has sido mi salvavidas, y no se que hubiera sido de mi sin ti en este momento. Te necesito más de lo que necesito el aire, porque tu eres mi oxigeno. Mi vida sin ti seria una agonía por la cual no quiero volver a pasar.

<<Hoy hablaría con los muchachos sobre como pedirtelo — Admite mientras se arrodilla y mi corazón se acelera — No tenia ningún plan después de todo el revuelo, pero...creo que ésta es una gran oportunidad para hacerlo, aunque claro que el anillo sigue en casa — Se pasa la mano por el rostro, nervioso, mientras se arrodilla — Shaina Lian Amell ¿me concederías el honor de convertirte en mi esposa, compañera de vida , confidente y en un futuro, madre de mis hijos? — Con solo ver su mirada no puedo evitar sentir el amor, la ternura y la devoción que siente y por mi — No me imagino pasar el resto de mi vida  molestando a nadie más que no seas tú>>

El último comentario me hace reir a pesar de las lagrimas que hasta ahora noto que han comenzado a bajar por mis mejillas, dificuldandome un poco la visión.

—¡No! — Silvia rompe el momento intentando tomar a Nick pero es detenida por el jalón que Nicol ejerce sobre el cabello de la rubia — ¡Au! — Se queja y mi amiga la toma por la nuca demostrando su fuerza apesar de ser unos centimentros más baja.

—No romperás este momento en mi guardia, imbecil — Le suelta cansada mientras empieza a caminar hacia la puerta de entrada llevandose consigo por el cuello a Silvia.

—¿Qué dices? — Pregunta sonriendo Nick después de regresar mi atención a el y siento que somos las dos únicas personas en este momento a pesar de estar rodeado de muchas más.

—No puedo... — Digo haciendole palidecer un momento —no aceptarte — Le sonrio haciéndole entender de la broma.

—Ya ha aprendido del mejor, futura señora Blake — Me felicita poniéndose en pie justo antes de tomar mis mejillas entre sus fuertes manos para besarme de la manera más dulce que lo ha hecho en mucho tiempo.

Sonrío contra sus labios en medio del beso dándome cuenta que hace unos minutos estábamos casi gritandole, y ahora he aceptado ser su esposa en medio de un bar de la ciudad de Nueva York tantos años después de conocerlo en una cafetería de L.A.

Que locura.

Ni pensar que mi padre aún lo repele.

Olivia POV

—Oliv ¿Estás escuchandome? — La voz de Mad me saca de mis pensamientos, haciendome verla en el asiento del copiloto durante un segundo.

—La verdad es que no, lo siento — Digo apenada arrancando una vez el semaforo se pone en verde.

—A ver ¿que es más importante que te mantiene distraida? —Se cruza de brazos hacia mi — Digo para no molestar con mi amistad.

—No seas dramática —Me burlo — Es que...temprano hablé con Ross... — Me hace un sonido de que continue hablando a la vez que avanzo por las calles de Brooklyn — El hombre del dinero con el que se reunió, trabajaba de algún tipo de matón antes, por necesidad — Relato — El accidente fue el ultimo trabajo que hizo junto a otros — Un nudo en mi garganta me hace callar un minuto — Dijo que si tenian una especie de informe sobre todo lo que hicieron, pero le fue entregado a Bart, y no se sabe si lo sigue teniendo el o se le dió a su contacto.

—¡Mierda! — Exclama mi amiga entendiendo la magnitud de la informacion — Pero su testimonio podria ser de valor en el juicio.

—Podría. Pero no quiere hacerlo — Suspiro —Tiene una hija y participar podria costarle la custodia — Bufo.

Es irónico que me preocupe por una persona asi. Pobre de esa niña, porque puede que nosotros no le hagamos pagar lo que hizo, pero si otra victima de sus trabajos podria hacerlo.

—Entonces no sirve de mucho — Habla Mad regresandome a la realidad.

—Al menos es suficiente para que presentemos la demanda por fin oficialmente.

—¿Ya seria público todo esto? — Hago un sonido de afirmación mientras entro en la calle donde vive Nick — Vaya trabajo que tienen Jack y Nicol entre manos.

—Será su propia prueba — Bromeo un poco una vez logro encontrar un lugar en la calle.

—Ahora vamos a la de nosotras. Contentar a Nick — Dice mi amiga una vez estaciono el auto en la calle de viejos edificios donde viven nuestros amigos.

Mad ha venido a la ciudad unos dias a quedarse, con tal de pasar tiempo juntas e ir a subirle el ánimo aunque un poco a Nick, quien según se no ha mejorado mucho. Aunque claro que vinimos más que todo porque no nos responde desde hace dos días.

Bajamos del auto encaminandonos directo a la puerta de su edificio, que por suerte está abierta al estar su vecina recibiendo unos paquetes, asi que no tardamos mucho en entrar. Una vez llegamos al piso, vamos directamente a tocar su puerta sabiendo que está en casa ya que hace una hora debió terminar su turno.

—¿Cual seria nuestro plan extremo? — Pregunta mi mejor amiga mientras esperamos.

—¿Para hacerlo mejorar? — Ella asiente — No lo sé.

—¿Cosquillas? — Niego — ¡Terapia metiendo su cabeza en un balde de agua!

— Creo que mejor nos quedamos con las cosquillas — Sonrío nerviosa ante su plan tan violento justo antes de que la puerta se abra.

Ambas nos miramos hacia ella, y no se por parte de Maddie, pero no puedo evitar poner una cara de confusión ante lo que mis ojos ven.

—¡Chicas! — Nick nos recibe con una gran sonrisa y abrazo para ambas.

— Creo que no hará falta ninguno — Murmura Mad para mi en medio del abrazo.

— Pasen, mis chicas — Nos sonrie haciendose a un lado para que entremos lo cual hacemos muy extrañadas por su animada actitud el dia de hoy — ¡Las extrañaba mucho! Sientense, tengo unos dulces que compré de camino que seguro les fascinará. Son la de nueva panaderia de la tercera avenida y son para morirse — Nos cuenta mientras va a la mesa por ellos.

Toma una gran bolsa de pasteleria de la mesa y se gira de nuevo hacia nosotras, pero se detiene al vernos aún quietas junto a la puerta de entrada, con una actitud cautelosa y miradas confundidas.

—¿Que? — Nos dice confundido.

—¿Quien mierda eres y qué hiciste con nuestro depresivo Nick? — Pregunta Mad tomando de la mesa de centro un jarrón de cristal vacío que había de decoración.

—¿De que hablan, chicas? Ya estoy bien — Nos sonríe levemente.

—Exacto. Hace tres dias aun seguias muriendo — Intervengo yo caminando cautelosamente hacia el — ¿Por que ahora parece que que tienes más energia que Maddie?

—¿Acaso recurriste a las pastillas? — Pregunta Mad sorprendida - Me han dicho que son fuertes para el ánimo, pero no creí que tanto, a menos que...

—¿¡Te volviste drogadicto!? — Gritamos alarmadas las dos esta vez.

— ¡No, idiotas! — Se apresura a callarnos — Y cierren la boca. Al final del pasillo vive un oficial.

—¿Entonces qué mierda te pasa? — Pregunta Mad cruzandose de brazos.

Vemos como Nick suspira colocando sus manos en sus caderas, antes de mirarnos con una gran sonrisa haciéndonos ver que no está tan preocupado como parecía.

—Le pedí matrimonio a Shaina —Nos dice haciéndome abrir la boca en O —Y me dijo que si.

Mad y yo nos miramos un segundo, notando que ambas estamos igual de sorprendidas. Cuando regresamos nuestra vista a Nick, los gritos que empiezan a salir de emoción de nosotras, lo hacen saltar asustado.

-—Nuestro amigo se va a casar! — Grita Mad mientras ambas corremos a darle una gran abrazo que recibe riendo.

—¡Primera boda del grupo! — Le sigo yo empezando a dar saltos de emoción.

—¡Shh! —Nos intenta callar entre risas — Si no se callan ahora, me correrán del edificio por el ruido.

Despues de unos minutos más en donde no paramos de abrazarlo y decirle lo felices que estamos por él, no podemos evitar curiosear sobre como, cuando y donde se lo pidio.

—¡Imbécil! — Mad le da un zape en la nuca — ¿¡En un bar, Nick!?

—¿Sin anillo! — Repito yo la parte que mas me ha confundido de la historia.

—¡La estaba por perder! — Nos recuerda y yo caigo contra el respaldo del sillon — Debia decirle cuanto la amaba rapido.

—Todo esto es culpa de Silvia — Gruñe Mad a su lado poniendome una muy mala cara ante el recuerdo de la rubia — Nos vio la cara de estúpidos.

— Ya dejenla en el pasado — Nos pide Nick apoyando su frente en su palma — Donde debió quedarse.

— Estoy de acuerdo — Lo secundo recostandome del sillón.

— Bien — Mad de pone en pie dando unos pasos por el salón — Cambiando de tema, deberiamos celebrar este acontecimiento — Nos sonrie — Invitaré a los chicos de aqui y les pediré que traigan alcohol

—La mejor idea que has tenido en mucho tiempo — Se burla Nick haciendo que ésta le saque el dedo — ¿Me ayudan a ordenar antes de que Shai llegue y vea este desastre? — Hago una mueca — Estoy aceptando la celebración.

Bufo poniéndome en pie para ayudarlo a recoger unas cosas de sus estudios para llevarlas a la habitacion de invitados junto a algunas bolsas.

Lo que nos ganamos por querer celebrar, pienso, pero en el fondo, me encuentro muy feliz por mi mejor amigo...




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¡Hola, bombones!

Ha pasado mucho tiempo. Ya tocaba un poco más de nuestros chicos.

¡Se acerca una boda! Ya tengo tanto planeado jajaja

Nos vemos en el próximo capítulo.

Besos❤️

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